Los que me leen en La Galerna o tienen la (mala) suerte de seguirme en Twitter saben que soy muy crítico con el Zidane ‘Post-Cristiano’. Posiblemente me haya equivocado en algunas de mis reflexiones sobre el técnico francés, pero hay otras que todavía mantengo y que, por desgracia, han sido reforzadas en las últimas semanas.
Sea como fuere, lo cierto es que tengo la sensación de estar asistiendo a la primera gran crisis de Zizou como entrenador. Lo vi abatido en la rueda de prensa posterior a la dolorosa derrota contra el Shaktar. Su autocrítica, contundente e intensa, sonó sincera. Sabe que se le está escapando todo aquello que tenía controlado y no encuentra la forma de recuperarlo (al menos de momento). Del Zidane que revolucionó la manera de gestionar un vestuario empiezan a quedar los rescoldos y poco más. Sus propias decisiones (y algún movimiento erróneo por parte de la directiva) le obligan a lidiar con una plantilla que parece a medio camino de todo. La mezcla de pasado glorioso y futuro prometedor no termina de salir rentable.
El jueves, el tuitero @Madridisme escribía algo así como que Zidane es idóneo para una plantilla plagada de estrellas dada su facilidad para manejar egos de gran tamaño, pero que la cosa cambia mucho cuando se enfrenta a una plantilla a medio hacer o inmersa en un proceso de regeneración. Me parece una afirmación excelente con la que, además, estoy cien por cien de acuerdo. Y esto no le resta mérito al técnico francés. De hecho, pocas cosas hay más complicadas que gestionar, con éxito, un grupo de futbolistas de élite acostumbrados a ganarlo todo.
La tormenta ha venido con algunas de sus decisiones. No hay un once tipo, algo que se echa de menos cuando necesitas cerrar filas espantando fantasmas. Solía hacer gracia aquello de que nadie acertase las alineaciones pero, a día de hoy, el Real Madrid necesita recuperar la confianza en sí mismo y cierta regularidad. Con cambios de cromos constantes acabas consiguiendo todo lo contrario. Ni siquiera las rotaciones entrarían como argumento salvable. Más allá de eso están también las suplencias de Vinicius (inexplicable que un futbolista de su talla/personalidad no sea indiscutible), los minutos a Marcelo, la tardanza en apostar por Jovic, el error de hacer que Benzema juegue hasta cuando no tiene el día, la no inclusión de Ceballos en la planificación de una plantilla que, tras las salidas, quedó algo corta de centro del campo hacia delante, y las extravagancias tácticas que ha ido firmando desde que arrancó la temporada.
Solía hacer gracia aquello de que nadie acertase las alineaciones pero, a día de hoy, el Real Madrid necesita recuperar la confianza en sí mismo y cierta regularidad. Con cambios de cromos constantes acabas consiguiendo todo lo contrario. Ni siquiera las rotaciones entrarían como argumento salvable.
Así todo, y tras dos encuentros absolutamente nefastos (el partido ante el Cádiz es el peor que ha hecho el Real Madrid en muchos años), Zidane se encuentra, como decía en el segundo párrafo, ante su primera gran crisis. El precipicio lo tiene bajo los pies y no está sabiendo darse la vuelta para escapar de él. El club le debe mucho, pero no suele esperar por nadie, tampoco por uno de los más grandes de su historia. Nunca lo ha hecho y nunca lo hará. Si Zidane resbala nuevamente en el Clásico y el equipo da la sensación de desgaste total y bloqueo, los cambios se podrían precipitar pese a lo doloroso que suena solamente intuirlo.
El proyecto del Real Madrid no casa del todo con lo que ha venido formulando Zidane. Hay que apostar más por Vinicius, Odegaard, Valverde y compañía que por los Marcelo, Modric o Isco. Apostar de manera firme, continuada, casi indiscutible, no como si las jóvenes perlas fueran el guadiana y supieran que hay sombra cuando vienen mal dadas. Hablaría de Pochettino, pero no son horas y tampoco el momento. Zidane puede todavía girarse y no caer por el precipicio. De él depende.
Fotografias de Getty Images
Si de el depende vamos dados.
Se veía venir. Esto es como una mala enfermedad sino la atajas a tiempo te lleva por delante.
Y están muy equivocados los que piensan que soy uno de los quiere que ocurra lo peor, pero que muy equivocados
Odegaard está lesionado.
Del creador de "el Madrid por culpa de Zidane ha dejado una oportunidad histórica al dejar escapar a Kepa" tampoco espero mucho más. Aún le recuerdo en enero de 2018 pidiendo la destitución de Zidane y terminamos ganando la Champions, o cuando se felicitaba por el fichaje de lopetegui y por su famosa admiración por Ceballos, un jugador intrascendente en un arsenal más intrascendente todavía.
Zidane se equivoca como todos, pero es que hay que aceptar que con lo que tenemos nos llega para lo que nos llega y si se va Zidane, van a quedar los mismos jugadores para el lopetegui de turno que venga a comerse el muerto.
Da igual lo que pase hoy, mañana o en mayo, si no tenemos dinero para fichar mejores jugadores, Zidane es el mejor entrenador para el madrid... Y si lo tenemos también.
Dicen las malas lenguas que, después de dos años, parece que Ceballos está aprendiendo a jugar más vertical, sin tanta floritura extraña, y -como dicen los snobs- a leer el juego. Con un poco de suerte recuperamos un jugador aprovechable.
Ojalá sea así, Juan A. Por cierto, chapeau por el comentario largo que has hecho después de este.
"Zidane es idóneo para una plantilla plagada de estrellas dada su facilidad para manejar egos de gran tamaño, pero que la cosa cambia mucho cuando se enfrenta a una plantilla a medio hacer o inmersa en un proceso de regeneración. Me parece una afirmación excelente con la que, además, estoy cien por cien de acuerdo."
Por supuesto que estás cien por cien de acuerdo. Escribiste aquí mismo un artículo , que argumentaste en profundidad, demostrando que el entrenador ideal, maravilloso, que reunía las características perfectas para liderar ese proceso era... Julen Lopetegui.
Y no digo que no lo fuera por sus características, pero no sé qué pasa cuando llegan al Madrid, que ese mismo entrenador que apostó en el Sevilla por Reguilón aquí, a las primeras de cambio, prefirió poner de titular a un Marcelo que ni siquiera había hecho pretemporada que al chaval recién subido del Castilla y que había brillado durante la misma.
En el Madrid, lamentablemente, se maneja una presión que es mucho más que la puramente deportiva. Aquí somos incapaces de tener una transición como Dios manda, ni tras ganar tres champions seguidas. Aquí se vive del resultado inmediato. Y se exige jugar como si el equipo hubiera sido construido con paciencia, y tragando varios malos resultados, hasta la eclosión del talento de todas sus promesas.
El Dormund nos apasiona, pero es que llegan a Munich, les meten 6 y no pasa nada. Sigue siendo un equipo ilusionante.
Luego ha ocurrido algo, es como los niños a los que les das un privilegio y ya lo toman como un derecho.
Pasamos 32 años sin oler la Copa de Europa. Luego la ganamos 3 veces en 5 años y parece que siempre la hubiéramos ganado cada dos años. Ahora lo que fue excepcional se convirtió en exigencia. Llegó Florentino. Fichó a Figo, Zidane, Ronaldo y Beckham y parece que el Madrid siempre tenía que hacer ese tipo de fichajes. Nadie se para a pensar que Florentino revolucionó el club pasando a explotar todo tipo de derechos antes que muchos otros, pero que con el tiempo los grandes clubes iban a aprender a igualar tu táctica y se te iba a hacer más difícil repetir locuras de mercado como aquellas. La primera frustración vino cuando, a su regreso, salieron Robben y Snejder... recuerdo que se lió. Más tarde aparecieron los clubes-estado y la vista gorda de la UEFA con el Fair-Play financiero.
Aún así se construyó una plantilla que pudo ganar 4 champions de 5 (aunque en aquellos tiempos lo importante era la liga) y que es una vaca a la que Zidane está siendo capaz de sacarle las últimas gotas de leche. Mientras tanto, se está inviertiendo a largo plazo en jóvenes con la esperanza de que, o bien exploten y formen parte de la plantilla del propio Madrid, o bien puedan ser utilizados como activo en operaciones de traspasos.
¿Qué quiero decir con esto? Que el problema que tenemos es una afición enseñada por los medios antimadridistas a estar perpetuamente descontentos con un equipo que gana títulos, pero "de aquella manera", a hacerles olvidar que la normalidad es pasarte al menos 10 o 15 años sin oler la orejona. A despreciar la liga cuando no ganas la champions y a despreciar la champions cuando lo que no ganas es la liga.
Esto no quita que a mí me gustaría que Aschraf hubiera vuelto (que no lo hiciera tiene más que ver con la comida de oreja de su representante, y con un mal manejo del club del "timing" de su situación contractual que con Zidane). Hubiera preferido que Reguilón se quedara y haber rendido un homenaje a Marcelo (aunque, de nuevo, la situación contractual -y la ficha- de Marcelo complica la cosa). Hubiera preferido que el Atleti hubiera fichado a James la temporada pasada y quedarnos nosotros con Llorente. Querría que Jovic hubiera tenido más partidos y se hubiera apostado más fuerte por él. Querría haber vendido a Lucas Vazquez, Isco (otro con situación contractual complicada) y quedarnos quizá con Brahim a que jugara los minutos que les dan a estos dos.
Hay muchas cosas que veo diferente a Zidane, pero el que se juega el puesto cada partido es él, y es él quien toma las decisiones que, reconozcámoslo, no le han salido tan mal.
Qué bien tirado!!
Hala quillo, dile a Juan A. que no tiene razón ...
Sr. Barrios, ya sabemos que le tiene muchas ganas a Zidane. Está en su derecho de no gustarle, faltaría más. Como usted, parece que son legión.
Pero también estamos los que creemos que, en las actuales circunstancias, con estrellas o sin ellas, es el mejor entrenador que podamos tener. El Real Madrid es un club especial, entrenarlo no es fácil, hay que ser también especial, como Zidane. Descuide, que ya se irá cuando él piense que no va a poder ayudar. Mientras tanto ¿no sería mejor apoyarle, máxime cuando acaba de ganar dos títulos con un equipo que un poco antes estaba casi hundido? Recordemos cómo estábamos con Lopetegui y Solari. Que yo sepa, tenían a las mismas estrellas que Zidane.
Hay que tener más paciencia, que llevamos muy poco.
Mire, yo seguiría apostando por Zidane incluso si perdemos hoy. Es demasiado pronto.
Asin es Cibeles! Hay que ver como nos gusta ser estrictamente críticos con el equipo. Somos más puristas que nadie...
Qué gran afición! Es un milagro que el equipo salga hacia adelante. Dentro de la faena que es la pandemia...que no entre nadie en el Bernabeu, a "animar" al equipo, es una bendición.
Otro artículo inmejorable.
Sólo le faltó añadir que Zidane salga por la puerta falsa y hagamos una subscripción para fichar a Monseñor del Prado.
Ya metimos la pata con Casillas , Raúl o Cristiano. Sigamos disparando con fusiles al ritmo de la artillería pesada de los medios.
Si el Barcelona hubiese ganado tres Copas de Europa seguidas y la última liga, el mayor deseo de un madridista sería ver desprestigiado a su entrenador para sacarle del puesto.
Ganar Copas de Europa es un pecado mortal.
Los tres se querían ir, que hizo mal el Madrid?
Imagino que el señor barrios no tendrá sueldo en la galerna, pero debería estar a sueldo del club. Ya lo dije hace un par de años, por el bien del Madrid siempre hay que hacer lo contrario de lo que piense quillo barrios, es infalible.