Estoy como vosotros, con la diferencia de que yo ahora tengo que escribir un artículo y no me salen las palabras.
Qué suerte tenemos de poder amar esta idea de una forma inconsciente, como orates soliviantados por el postrero penalti de Cristiano. Qué inmerecida fortuna poder ser de lo mismo (fútbol, vida, lo que sea) que héroes vigentes como Casemiro, Modric, Ramos, Bale, o titanes que hoy miran atrás con la vista enturbiada por las lágrimas por la mejor despedida posible (hasta siempre, cap17án). Qué incalculable tesoro esta adscripción que es a decir de tantos tan fácil pese a que hemos pasado la temporada más jodida de nuestras vidas, aun con el mejor desenlace posible.
Hemos jugado contra un sensacional rival, que nos ha llevado hasta el límite de nuestras fuerzas. No hay mejor forma de ganar que hacerlo así para después (como ahora mismo está haciendo Sergio Ramos) felicitar al adversario por su inmenso esfuerzo.
En el momento en que escribo esto, el Presidente del Real Madrid está dedicando esta XI Copa de Europa a las víctimas del atentado contra la Peña Madridista de Irak cuyos miembros fueron brutalmente asesinados por el fanatismo. El Real Madrid es un alivio que podría parecer absurdo (pero deja de serlo en tanto en cuanto lo es) para tantas y tantas vidas jodidas en el mundo. Esto es alivio. Esto es vida, por exagerado que parezca decirlo.
La oportunidad es óptima para que todo aquel que quiera reflexionar sobre el trato que da al Real Madrid lo haga a conciencia, pero no es hora de pensar en eso. Es hora de disfrutar con la sonrisa de Zidane. Que el Madrid gane la Copa de Europa supone el encuentro definitivo entre la leyenda y la realidad. Que la gane de la mano de la leyenda que Zidane constituye es leyenda al cubo, o algo así.
En el Portanálisis de hoy os dábamos permiso exclusivo para llorar sólo en el caso de que ganáramos, pero también os dábamos la primicia de que lo haríamos. El permiso no ha prescrito. Disfrutad vuestro llanto.
Hala Madrid.
El primer aniversario de este gran medio merecía celebrarse con una Copa de Europa.
Enhorabuena y gracias por todo.
Hala Madrid.
Acertadisimo este articulo. Y que grande florentino dedicandoselo a la peña de IRAK. Que EMOCION.
Hoy mas que nunca puse a prueba mi corazón, y por lo que veo aguanta aún hasta la duodécima, Hala Madrid y nada más
cansado, bebido casi dormido. Que gran victoria.
Gloria al vencedor, respeto al vencido.. Aunque muchos no lo entiendan ha sido una gran final, y si no hubieramos ganado pensaría lo mismo.
11 de 14 quién da más.
Buenos días y oportuno recuerdo a las victimas del atentado de Balad, sería una idea estupenda
que el Madrid donara esta copa a la ciudad Iraqui y fuera depositada en su ayuntamiento y expuesta
de forma pública, honrando de esta manera a los madridistas asesinados y mandando un mensaje claro
de que nunca cederemos ante el terror. Espero que la idea guste. Hala Madrid y a por la duodécima
Saludos blancos, castellanos y comuneros