“Zidane hizo un mal planteamiento”. “La derrota es culpa suya”. “Hazard es el peor fichaje de la historia del Real Madrid”. “Ramos no tenía que haber jugado”. Estas son algunas lindezas de madridistas tras la eliminación de su equipo en semifinales de la Copa de Europa. Imagínense las lindezas de los antimadridistas. Bueno, no tienen que imaginárselas.
Las habrán podido escuchar y las podrán oír en la calle, en la tele, a sus amigos en Twitter y por todas partes. Que si el 5-3-2 y el 4-3-3. Los analistas sesudos, los hilistas, el exceso de comentaristas que produce que se tenga que hablar de lo que no es interesante hacen del Real Madrid una cosa manoseada.
Toda esta atención exagerada hace del Madrid la teta de la estatua de Julieta en Verona. El aficionado, ese que podría ser el de Orwell: “El fútbol, la cerveza y, sobre todo, los juegos de azar llenaban el horizonte. Mantenerlos bajo control no fue difícil”, se amasa dirigido por las Fifas y las Uefas y las Ligas y los medios. Pero el Madrid no es masa. Lo intentan amasar, pero no lo consiguen a pesar de todo.
Toda esta atención exagerada hace del Madrid la teta de la estatua de Julieta en Verona
El fútbol de hoy es un espanto. Quizá siempre lo fue y quizá por eso al único equipo que vi siempre fue al Real Madrid. La Superliga era (es) un intento honesto y cabal de que el fútbol no siga pudriéndose, masificándose, gasificándose y rociándose de petróleo en manos de mediocres y malvados y medradores y multimillonarios sin escrúpulos y sin historia.
Ya puede venir el investigador futbolístico más afamado o el experto táctico/técnico más prestigioso a explicarme todos los aspectos sobredimensionados del juego del Chelsea, del sistema de Tuchel, ese nuevo hombre del Renacimiento, que todos esos aspectos provendrán inequívocamente de las inyecciones alegales de las que no dispone la mayoría de los equipos.
Una diferencia entre el Real Madrid y el Manchester City, más allá de que el primero es el mejor equipo de la historia y el segundo es un equipo modesto, es que este último está ahora dopado como Ben Johnson. El Madrid ha sido siempre el mejor generando sus propios recursos y todos esos equipos, como el City, nunca han sido los mejores y pretenden serlo ahora mediante recursos ajenos a todo.
Ya saben que a Uefa, Fifa y Bom y otras chicas del montón lo que les interesa es el dinero a espuertas, sin control, ni reglas. Ya pondrán el control y las reglas después, si acaso. Y en esas el Madrid quizá un día habrá dejado de ser lo que siempre ha sido.
Yo no tengo el menor fastidio por la eliminación del Madrid en la Copa de Europa. Ha sido una demostración de valor alcanzar la semifinal en sus condiciones. Y ha sido bello observar cómo ya no podía más. Verle resistir y porfiar en su hermosa debilidad, y eso que una nueva gesta fue posible casi hasta el final.
El Madrid ha sido siempre el mejor generando sus propios recursos y todos esos equipos, como el City, nunca han sido los mejores y pretenden serlo ahora mediante recursos ajenos a todo
Eso es el Madrid. Mientras el analista y el antimadridista casi glosaban con deleite la superioridad del rival durante el encuentro, siempre existió la posibilidad de que los blancos destruyeran ese relato como han hecho tantas veces. Esa película clásica donde el espectador sabe que el disfrute sádico del villano será su dolor en el desenlace.
El Real Madrid se ha vaciado de forma esplendorosa durante todo un año en el que aún lucha por el título de Liga. Es la leyenda del indomable, Cool Hand Luke o Paul Newman en la cárcel manteniéndose de pie a pesar de la paliza. Pero todos estos detalles se pierden igual que lágrimas en la lluvia, como recitaba el pobre replicante con alma.
La lluvia que es todo este ruido insoportable de codicia y de vulgaridad que convierten al fútbol en un espanto, además de en una mentira.
Fotografías: Imago.
Chapeau D. Mario!!!
Completamente de acuerdo, ese es nuestro Madrid hasta el final, hasta arrastrando las botas, hasta el desaliento. Espíritu de Campeón, demostrado y demostrando!!!
Salvo el primer párrafo, un 10 el artículo.
Lo de catalogar de lindeza esas críticas, legítimas, es absurdo.
Le aplaudo, Mario.
Estupendo artículo. A mi equipo, el Madrid, no le exijo que lo gane todo; ni siquiera que gane algún título aunque sea menor. Le exijo que luche por todo hasta el final. Y eso es lo que ha hecho y va a seguir haciendo, pese a sus bajas y limitaciones que pueda tener. Porque, al fin y al cabo en el deporte, nadie puede ganar siempre. Por esto estoy orgulloso de él. Saludos amigos madridistas y HALA MADRID
Bella elegía.
Gran artículo. Luchar hasta el final, eso es lo que se pide. Las victorias llegarán, sin perder de vista que históricamente siempre hay más derrotas que victorias. Por eso lo importante es la lucha y cómo se pierde o se gana y en eso también el Real Madrid es el más grande.
Pues muy de acuerdo en todo. Qué le voy a decir, don Mario.
Y en cuanto a todos nuestros queridos piperos, que pululan por la galerna, y que están pegando fuego a todo, incluso antes de ayer, sólo una cosa. Es importante, venir al RM, con las frustraciones trabajadas, incluso ya superadas.
No hay nada más mediocre que exigir siempre la victoria. Un claro signo, de no tener capacidad para poner en valor, lo mucho que cuesta. Con toda seguridad, porque nunca se ha conseguido una.
Exacto. Y si por casualidad ganamos, siempre será para algunos, porque el equipo que nos tocó era de medio pelo, o porque la liga tiene un nivel paupérrimo. Trabajan perseverantemente en su infelicidad deportiva. Si ganamos mal, si perdemos, peor.
Fantástico artículo.
"...El Madrid ha sido siempre el mejor generando sus propios recursos ..." según llegas a Ayusolandia, perdón digo Madriz, perdón digo Madrid, la vista de cuatro Torres desmiente esa afirmación.
Vamos a ver....Enemigo de la realidad, resulta que eso que acabas de poner, unos amigos tuyos, o enemigos...o vete a saber; bueno, ¡unos!,llevaron el tema de las torres al tribunal Europeo, por las sospechas de gente como tú y tal, y resulta que ya está juzgado, ¡Si! y de cositas ilegales, nasti de plasti, como verás, una expresión muy moderna. Así que nada, te puedes ir a conspirar a otra parte o a poner insignias de oro de tu club a dictadores.
¡cierra al salir majo!
Con las 4 torres el que menos ganó fue el Real Madrid que puso el terreno, ganaron más la Comunidad y el Ayuntamiento
No salgas nunca de Pujolandia, cateto.
Y al final, ese terreno era patrimonio del propio Madrid, en el mejor sitio de probablemente la ciudad más importante de España. No era un capital inyectado desde fuera subrepticiamente.
Cuando vuestro querido y premiado amigo el generalísimo recalificó Les Corts no os quejábais tanto.
Give me one round more, one round more!