Hace unos días, en Twitter, algunos desvelamos que éramos fans de Iker Casillas en el pasado. Era una manera de reconocer que algo cambió, pero no fuimos nosotros. Todo se cayó como un castillo de naipes, aunque lo cierto es que uno no sabe cuándo empezó tal derrumbe ni por qué. Lo único cierto es que Casillas ya no es uno de los nuestros.
Hay quien dice que la culpa fue de José Mourinho por hundir la carrera de una leyenda. Otros, sin embargo, pensamos que la leyenda se hundió sola al no aceptar ser uno más. Debe ser complicado dejar de ser único, pero Iker Casillas no entendió que él pertenece al Real Madrid y no al revés. Pasó de enamorar a traicionar.
Como madridista, duele ver al capitán de tu equipo poniendo a la selección por encima de todo o conservando sus amistades dentro de la prensa a base de puñaladas al club. Llegó un momento en el que a Casillas solo le pedíamos lealtad, y ni siquiera eso fue capaz de darnos. ¿Tanto suponía no fallar a esos que nunca te fallaron?
Iván Ferreiro tiene una canción que dice que "el equilibrio es imposible cuando me hablas de nosotros dos". Casillas se debió quedar con lo crudo del mensaje en lugar de profundizar en él. Se empezó a sentir despechado porque en su entorno le decían que Florentino tenía un amante portugués con el que iría tras dejarle a él. De lo que no se dio cuenta es que el Real Madrid -y nosotros- también está por encima de presidentes y jugadores.
Alguien me dijo una vez que hay que quedarse con lo positivo de las cosas cuando una historia termina. Quizá lo haga el día que Casillas decida irse, pero lo cierto es que, hoy por hoy, navego entre el caos que él mismo ha provocado y no pretende frenar. Le ha hecho tanto daño a algo que quiero que me resulta imposible perdonarle. Y él, siendo realistas, no se arrepiente de nada.
Pero te quisimos, Iker. Te quise, vaya. Por cómo eras, por cómo parabas. Por aquella inolvidable noche de 2002 en Glasgow o aquellas -muchas- tardes en las que salvabas al Real Madrid y tu tímido gesto invitaba a que la cámara no te enfocase. Te quisimos porque nunca buscabas ser protagonista y siempre querías que lo fuera el escudo. Te quisimos porque fuiste el mejor y negarlo ahora sería de necios. Pero ya no te queremos. Porque no eres el mejor y no quieres que el escudo sea lo primero. Algo o alguien te hizo ver que tú eras el más grande. Y caíste. Caíste en un pozo del que solo saldrás para abandonar el Santiago Bernabéu por una falsa puerta que no esperabas ver abierta para ti.
Quizá en el futuro mires hacia atrás y te arrepientas de todo aunque en alguna entrevista bajo un larguero digas que no. Será demasiado tarde y los que te pusimos la cruz no abriremos nuestros brazos como si no hubiera pasado nada. Y a ti te dará igual porque tendrás tus millones, tu familia, tu gente y no necesitarás que cientos de desconocidos estén ahí aplaudiéndote. Te dará igual, sí, pero al menos nosotros tendremos la conciencia tranquila.
Buenas tardes desde que le escuche en una entrevista en Radio Marca, con García Caridad- uno de los talibanes atléticos que han convertido dicha emisora en referencia anti madridista- en 2007, decir que prefería ganar la EUROCOPA con la selección española a ganar la Liga de Campeones con el Madrid, no quiero saber nada de él, le he puesto la cruz ojala le perdamos de vista mas pronto que tarde. Saludos blancos y comuneros
Le quise, le quiero y le querré siempre. Al que no tengo ni tendré ningún aprecio será a Mou.
P.D Cientos y miles de seguidores madridistas anónimos le seguiremos aplaudiendo.
Iker, UNO DO NOI
¿ y CUALES son lo motivos que te llevan a quererle?. Interes no tengo ninguno, pero de curiosidad me muero. Saludos blancos y comuneros
Sólo por curiosidad, madridista, ¿cuántos años tienes?
"Casillas ya no es uno de los nuestros". La pregunta es: ¿cuándo dejó de serlo?. Para mí, desde que se creyó que debía ser titular por decreto; desde que dejó de entrenar y de esforzarse como el que más; desde que se creyó que el talento innato te convierte en intocable. Desde que, como capitán y compañero, dejó con su silencio cómplice que la jauría de periodistas y de casillistas se comieran vivo a Diego López. Desde que puso el ultimátum junto con Ramos. Desde que puso a la mal llamada Roja por encima del Madrid, al Marqués antes que a nuestro entrenador, y a sus amigos culés por delante que sus compañeros de equipo. Se dedicó a decepcionar a la afición, primando el aplauso fácil y las loas de sus amigos periodistas.
Como dice la canción: ojalá que te vaya bonito... ¡pero lejos!
Exquisita entrada de Quillo Barrios (No se puede expresar mejor el sentir de muchos madridistas) y sobresaliente comentario de Diosamaracana donde haces un gran resumen de las graves faltas que cometió este desgraciado personaje.
En mi (larga pero poco aprovechada) vida he sido capaz de, mediante bebidas espirituosas, pasar esa fina linea que separa la cordura de la irracionalidad, pero el día que este tío se vaya voy a coger una mierda como un piano de cola de grande.
Gracias, Antonio. No te había leído. Hubiera escrito más cosas, pero hay momentos en que prefiero morderme la lengua (o pillarme los dedos, en este caso, jajaja). Bss
Fue el mejor en su tiempo,pero su tiempo ya pasó y se niega a admitirlo,como Norma Desmond en El Ocaso de los dioses. Eso como portero. Como capitán siempre fue un desastre,medroso y acomplejado ante los del Barcelona que esos si que cumplen con su papel a la perfección, intrigante e indolente en la caseta. Puede que de esa manera caiga muy bien a los antimadrdidistas,pero si los antimadridistas son sus mayores fans,es sintoma de su fracaso.
Quillo Barrios, has expresado perfectamente el sentimiento de muchos madridistas decepcionados con Casillas. Ni una palabra más que añadir.
Mal que nos pese,Casillas y Ramos,junto al nucleo duro y veterano de esa plantilla,son los lideres de una generación perdedora y acomplejada. Sobre todo frente a nuestro eterno enemigo,el Barceroba y ultimamente también frente al Patético.Han perdido frente a los cules tanto y tantas veces y se sienten tan inferiores que en su trato con ellos,optan por hacer como el cobarde con el matón,pasar pos su amigo con la esperanza de que no te maltrate demasiado.Obviamente,los Pique ,Xavi,Messi etc,huelen esa debilidad y se aprovechan de ella. Salvo a Cristiano, porque ese es indomable y al primer Pepe,pero como han visto que nadie va a la guerra,al final han optado por camuflarse con el entorno. Arbeloa y Xabi Alonso también eran del grupo indomable,pero uno es un jugador menor y el otro se fue ,imagino que harto.Mou los intentó insuflar ardor guerrero pero estos optaron por la rendición. Como solían decir los italianos en el segunda guerra mundial: "La guerra e piu bella,ma incomoda".
Eso de que el topor ha sido en algún momento de su viida el mejor portero del mundo es tan falso para mí como un euro de cartón.
Pero eso no es lo peor, es su toxicidad hacia el club al que le debe todo lo que es lo que, en mi caso, me ha llevarlo a detestarle muy fuerte y sin posibilidad de perdón. Triste pero cierto.