Tal vez soñar

Se celebra el Día del Libro y aquí estamos nosotros para comentar las portadas deportivas. Puede haber otras contradicciones en la vida, pero pocas tan merecedoras de llamarse contradicciones, queridos galernautas. Y no es que nuestras queridas portadas no sean a menudo rica fuente de ficción más o menos literaria; no es que no inventen personajes y hasta tramas casi de género, sino que tales (re)creaciones se nos antojan habitualmente un tanto manidas, poco matizadas y sujetas a la estrechez de un esquema narrativo ciertamente endeble, lleno de tópicos, títulos delirantes y códigos algo gastados. No podemos negar, en cambio, la categoría de best sellers que han alcanzado los medios aquí comentados, cosa que no conviene desdeñar de modo elitista, como si el mundo estuviera desquiciado y hubiera nacido Hamlet para arreglarlo. Así que, parafraseando a Terencio, hombres somos y nada de lo humano nos es ajeno, ni siquiera (ay) el libro que nos ofrece hoy Sport. Válganos Gutenberg.

Marca, el periódico más vendido de España, sabe bien qué día celebramos y asume con responsabilidad social la labor de darle cabida a la efeméride en su portada. Podría pensarse que estamos ante la imposible fusión de agua y aceite, pero reconozcamos que el "ser o no ser" con el que titula no está mal traído. No en vano, hoy toca otra jornada de campeonato, nunca mejor dicho. Hoy vuelven a jugar los tres primeros de la Liga, uno para seguir confirmándose -aun tembloroso- como líder, y otros para intentar asaltar los cielos, ya abiertos de par en par para recibir en breve al campeón.

Así que no se vayan todavía, no abandonen la sala al leer el titular de Marca, no emulen a aquel personaje que se levantaba de su butaca de teatro al escuchar declamar a Hamlet su línea más famosa en la magistral película de Lubitsch. Queda mucho por hacer y por anhelar, mucho por ganar, empezando hoy mismo por el Rayo Vallecano de Paco Jémez, recreado literariamente por nuestra prensa como una especie de Quijote aguardiolado, como un bendito audaz sin mácula. Ya se sabe que si algo vende libros y periódicos en nuestros días -y acaso siempre- es el estereotipo, el todo o nada, los personajes de una pieza y las historias sin demasiados vericuetos ni complejidades.

As no menciona nada que tenga que ver con el Día del Libro, aunque tal vez su titular -"Un partido en tres campos"- esconda una cita implícita a los tres autores cuya muerte sirve de ocasión para que sea justo el 23 de abril el día escogido para celebrar las letras. Cervantes, Shakespeare y el Inca Garcilaso son los escritores que se unen en este día, aunque se sabe que su fallecimiento no coincide en esta fecha, con lo cual la efeméride se apoya tambaleante en un encaje de bolillos que ni pa ti ni pa mí.

No sabemos si el diario As es versado en letras, pero sin duda sí lo es justamente en hacer encaje de bolillos, en tomar un dato más o menos fidedigno para interpretarlo a un antojo que suele coincidir con algún palo en la rueda del Madrid. No nos digan que eso no implica un notable esfuerzo creativo. Por menos otros han alcanzado la gloria de la ficción literaria. Así que desde estas modestas líneas pedimos el Cervantes para Relaño, más o menos como pedimos el Nobel para Bob Dylan, aunque esto segundo lo pedimos de verdad.

En todo caso, más allá de cuitas librescas, si alguien puede hacer bueno el titular de As es Luka Modric, un pequeño gran tipo vivaracho y virtuoso capaz incluso de jugar tres partidos a la vez si la competición lo permitiera. Mientras el reglamento hace estas justas adaptaciones, nos conformamos con volver a ver esta tarde a Luka por todas las partes posibles del campo de Vallecas, sobre todo alegre al final del partido enfilando el túnel de vestuario con la certeza de que todo es aún posible. Es de sobra conocido que la certeza de Luka es nuestra certeza.

Sport nos regala una rosa en su portada -Sant Jordi obliga- y nos invita a la adquisición (14,95 cuesta la broma) del libro inédito del triplete, perdón, del tridente. Eso sí que es fomentar las artes escritas. Ríanse ustedes de la magdalena de Proust (tal vez muffin en traducciones más actuales), olviden las curas de Hans Castorp en La montaña mágica y los temblores de Raskolnikov en Crimen y castigo. Nada, nada. El libro inédito del tridente, amigos. Me lo quitan de las manos. La increíble historia de tres almas cándidas en un mundo de indecibles rigores fiscales y persecuciones arbitrales. Un cuento de supervivencia en una pequeña aldea que resiste los embates del centralismo contumaz ("¿Quién podría tolerar tanta opresión, sudando, gimiendo [...]?", vuelve a decir Hamlet). Tres inseparables amigos unidos por la pasión del toque y totalmente ajenos a esa cosa vulgar de la pegada, arma vil del enemigo.

Todo eso y mucho más nos ofrece hoy Sport por bien poco. Cuando lo lean, no duden en compartir con nosotros sus reseñas. Pero no nos desvelen el final, aunque solo sea porque está aún por escribir y hoy mismo tendrá lugar otro capítulo, deseamos que más estimulante para nuestra sensibilidad, ¿verdad, Luka? Ser y volver a ser.