El sueño de una noche de verano

Buenos días. Alrededor de 1595, William Shakespeare escribía El sueño de una noche de verano, un cuento de hadas que se alza, eterno, como un clásico de la dramaturgia literaria mundial. Desde entonces –y ya ha llovido- más de uno es víctima de oníricas alucinaciones, permanece envuelto en hados, enredado en los brazos de Morfeo y sacudido por sudores estivales, sea verano, otoño, invierno o primavera. En definitiva, en esto de las primeras planas de la prensa deportiva patria muchos parecen dormidos, atrapados en un eterno sueño lisérgico donde tiene cabida toda majadería. Como decimos, sea verano, otoño, invierno o primavera.

Quizás en verano, eso sí, sus fantasías nos ofrezcan mayor pereza. Son como mosquitos hambrientos en la noche, como moscas cojoneras durante la siesta, como el arenoso escozor playero de ingle que resulta al andar demasiado con un bañador mojado por la avenida marítima. Hoy, por ejemplo, en el rinconcito nos saludan con un duelo al sol que ríase usted de OK Corral. Sin embargo, nos venden tan hermoso y didáctico el asunto que dan ganas de ser el tercer portero del Barcelona en tus ratos libres. Pospongamos no obstante nuestro puente aéreo (casi) diario a la Ciudad Condal para portanalizar portadas y detengámonos por un momento en el aburrimiento completo que despachan hoy los quioscos deportivos de la meseta. Ouija Today, haciendo gala de sus ancestrales poderes proféticos, nos informa del partido que nuestro Real disputará esta madrugada ante el Bayern de Carletto y Xabi. “Querido enemigo”, titula As fiel al estilo moñas que desprende el diario desde aquel día que llamo mirlo a un canterano. Claro que luego uno lee el editorial de Alfredo, sazonado de mensajes picantes, y entiende cómo va la cosa. Un emotivo Relaño recuerda a Carletto con lágrimas en los ojos. “Me cuesta verlo como adversario”, añade plañidero, para insistir en “su injusto despido”, la  “pérdida de prestigio” de FloPer y en que Morata “se venga arriba”. Ningún galernauta podrá negar jamás que al bueno de Alfredo se le ve el plumero desde el Yucatán.

Reconocemos los méritos paranormales de la Ouija que, aun en servicios mínimos veraniegos a tenor de sus elaboradas portadas, es capaz de meter el dedo en la yaga y ser grano en el culo del madridismo día tras día. Tiene su mérito.

Como algo épico oculta –aunque sea en pequeñito- la línea furtiva que ha dedicado Marca en su portada a un asunto que se estrenó esta semana con las grandes luces de neón de un motel de carretera, pero cuyo punto final pasará tan desapercibido como una película de culto del cine iraní en La 2 en pleno prime time. Más allá de las promesas de ZZ Top acerca de Asensio, la nueva joya de la corona del Rey de Europa,  en la azotea de la primera plana de The Hernia Chronicle se oculta una línea. Recordarán ustedes que recientemente –a la Ouija le faltó regalar un poster desplegable y un DVD con el partido entre Móstoles y el Juvenil A del Real Madrid- un árbitro conocido en su casa a la hora de comer aseguró ufano en Twitter que Guti-entrenador iba a dirigir muchos partidos desde la grada dada “su chulería”. Tenemos muy hablado en el pueblo cómo el Real Madrid es idóneo a la hora de invertir en tu minuto de gloria. El caso es que el colegiado Sergio Maroto ha formado parte durante 48 horas del Hall of Fame del antimadridismo para alborozo de nuestros enemigos.

Sin embargo, pocos se han molestado en investigar cómo discurrió aquel partido amistoso de pretemporada en el que diversas fuentes explican cómo el Móstoles repartió más leña que un frenético aizkolari ante la complicidad de un árbitro que ya manifestó en el pasado su “asco” al Real Madrid. En su timeline le encontrarán.

Hoy agradecemos a Marca, aunque sea en pequeñito, la información que asegura que el Comité de Árbitros exigirá a este señor que se disculpe ante Guti. Suponemos que pedir que deje de tocarnos el pito es pedir demasiado.

Mientras tanto, el sopor se apodera de un rinconcito que ya ha fichado casi todo lo que tenía que fichar. A falta de repescar un delantero jubilado en el Imserso Club de Fútbol, por allí arriba se entretienen ahora con un culebrón bajo los palos.

Al parecer, tanto Ter Stegen como Claudio Bravo quieren ser titulares siempre, pero allí la historia se vende de otra manera. Mientras el Bernabéu ardía a lo bonzo con la disputa entre Diego López e Iker Casillas, en Barcelona un alemán exige ser titular, un chileno exige explicaciones, un asturiano farfulla, la prensa decora y aquí paz y después gloria.

Como zambullirnos en el asunto nos produce veraniega desgana, desde La Galerna suspiramos por que Ter Stegen protagonice una de sus habituales compras de uvas en un saque de esquina para ver si así tiene los bemoles de agitar ofertas del City. Oops, City, ¿hemos dicho City?

Pep, eso no se hace. La Masía no se toca.

La Fábrica por su parte sigue funcionando. Hoy le toca a Jesé hacer la mili en París.

Esperamos tu regreso.

Otros, ya lo sabemos, nunca volverán de sus sueños locos de una noche de verano.