Simplificar el VAR para salvarlo
El VAR hace el fútbol más perfecto, lo cual no significa que sea mejor. Aceptar el VAR supone realizar concesiones: en teoría, ya no habrá un gol como la mano de Dios, algo que me parece catastrófico. El VAR elimina cierta porción de la picaresca, aleja el fútbol de las estrellas del fútbol de la calle. Ahora que los muchachos ya juegan en todos sitios con porterías de verdad en lugar de con un montón de abrigos o piedras haciendo de base de postes imaginarios, los profesionales se inventan el VAR para diferenciarse de los de abajo: el VAR es elitista.
El VAR es fruto de su tiempo, de la dictadura de lo políticamente correcto. Ya no se puede ni jugar a engañar a la vida durante un rato. El fútbol se va a quedar sin anécdotas, solo permanecerán las flechas. El VAR proclama la pureza del deporte, pero resulta que cada vez hay menos tiempo de juego efectivo. El balón corre menos. La justicia es lenta, ya se sabe. Las celebraciones de los goles se han vuelto como la política: no se debe legislar en caliente; tampoco festejar. Hay que esperar, porque siempre pueden encontrar que te saltaste un semáforo un minuto antes de encontrar al amor de tu vida. Media vuelta, esto no debió pasar.
El VAR es fruto de su tiempo, de la dictadura de lo políticamente correcto. Ya no se puede ni jugar a engañar a la vida durante un rato. El fútbol se va a quedar sin anécdotas, solo permanecerán las flechas
Nuestra existencia no es mucho mejor con el VAR, pero ya no podemos vivir sin él después de cuatro años. En cualquier partido amistoso o de categoría inferior lo echamos de menos cuando hay una jugada polémica; nuestra mente ya ha cambiado y tiene la esperanza de que alguien avise al árbitro y pite ese penalti tan clamoroso. Hay que asumir que el VAR se quedará para todos, no como la regla del gol de oro, que solo permanece para el Madrid: si los blancos se adelantan en la prórroga, el mundo entero sabe que la victoria es madridista.
Puestos a convivir con la herramienta, la mejor manera de salvarla es usarla menos, simplificar su intervención hasta lo flagrante. El VAR ha traído más polémica porque entra en pequeñeces discutibles y porque a los árbitros les muestran las imágenes a cámara lenta (o superlenta) como si fueran tertulianos de El Chiringuito con dos horas para darle vueltas a una misma jugada. Abogo por un VAR de brocha gorda que haga saltar las alarmas ante lo escandaloso. Y, en último término, siempre debe decidir el árbitro de campo viéndolo en el monitor. Porque es el único que ha estado cerca de la acción y puede tener una composición de lugar más certera al combinar lo visto en directo y a través de televisión. Si necesita ayuda, no debe pedirla a su colega de la sala VOR, sino a alguien en quien pueda confiar de verdad. El monitor de campo podría estar recluido en una pequeña cabina donde la pareja del árbitro pueda aconsejarlo: nadie querrá que se equivoque menos.
Puestos a convivir con la herramienta, la mejor manera de salvarla es usarla menos, simplificar su intervención hasta lo flagrante. Abogo por un VAR de brocha gorda que haga saltar las alarmas ante lo escandaloso
Siguiendo esta tendencia minimalista, debe ser el fin de los tiralíneas. Si durante toda la vida hemos estado faltando al respeto a los linieres por sus imprecisiones, el hecho de parar la imagen y tirar líneas con punto de fuga con un programa informático es una disculpa poco clara hacia el gremio del banderín. Resulta que su trabajo era muy difícil y lo hacíamos de menos. Si el juez de línea debía ver en movimiento el balón, la posición del delantero y la del último defensor, me parece que va contra el espíritu de la norma sacar tanta tecnología. Con parar la imagen y echar un vistazo a simple vista debería ser suficiente. Si hay dudas, dejen seguir, porque, en caso de haber obtenido ventaja, será inapreciable. Seguirá la misma polémica, pero se terminará antes.
Getty Images.
Artículos anteriores de la serie:
Discrepo de esta frase:
"El VAR ha traído más polémica porque entra en pequeñeces discutibles y porque a los árbitros les muestran las imágenes a cámara lenta (o superlenta) como si fueran tertulianos de El Chiringuito con dos horas para darle vueltas a una misma jugada."
El VAR ha traído más polémica, en mi opinión, porque aquellos que lo manejan, que son los mismos que arbitran, lo utilizan para sustentar sus prevaricaciones, y no para corregir errores.
Que un árbitro se equivoque es normal, y al final de la temporada se habrá equivocado de forma más o menos aleatoria en lo que a favorecer o perjudicar a un equipo concreto se refiere. Que la mayoría de los árbitros se "equivoquen" preferentemente perjudicando a un determinado equipo y favoreciendo a otro no es normal, y eso, el VAR no lo solucionará mientras siga siendo manipulado por las mismas personas que arbitran.
El problema que veo en el VAR es que habiendo un reglamento definido, los mandamases dejen luego a la interpretación del árbitro de campo y a los de la sala vor las decisiones. Si hay manos en una área el árbitro puede interpretar voluntariedad o no, al margen de lo que le digan en la sala VOR. Si en la sala VOR hay imágenes de una jugada luego ellos tienen la potestad de avisar o no al árbitro de campo. Si hubiera menos flexibilidad y los árbitros tuvieran que ceñirse al reglamento puro y duro, todos tendrían las mismas ventajas e inconvenientes en el partido. Haya o no haya voluntariedad en la jugada, haya intención o no en la jugada, todos estarían en igualdad de condiciones pese a que no fuera igual de justo en una situación u otra. Pero claro, quitas la interpretación de las decisiones de los árbitros y pierdes salseo, pierdes el reconcome de la gente que mira el partido del rival a ver si le arbitran igual, pierdes el interés de saber si en el siguiente partido te arbitrarán igual o si surge una jugada idéntica y se toma la misma decisión.Y eso no interesa, el ejemplo es que cada año se retoca el reglamento, para que no se pierda el interés. Ni el reconcome.
El var lo interpretan mal es una erramienta que te ayuda a jugadas que no bites no para favorecer no ay que aser más profesional dejar que el árbitro de sida por el y no le pongan imágenes súper lentas mal interpretado
¿Y por qué sería catastrófico que no hubiera más goles como la "mano de Dios"? Todo lo contrario. Para evitar esos errores clamorosos es para lo que debería emplearse el VAR. Ya está bien de mitificar jugadas que son un engaño, un fraude y un atentado contra el juego limpio.
Muy brillante a la vez que cachondo.
Espectacular lo de la pareja del árbitro (quien menos querrá que se euivoque).
La clave de todo el pifostio que se arma no es tanto la tecnología sino la condición humana de quien la aplica. Quizás cuando los robots controlen a los robots y ya nos hayan sometido definitivamente , los dominantes creen cyborgs (futbolistas ,árbitros ...público) y manden a tomar el aire al VAR y demás familia prostituída.
buenas tardes