“Hace tiempo que aprendí a no pelear con un cerdo. Acabas todo sucio y, además, al cerdo le gusta”. La frase, de Bernard Shaw, tiene hoy plena vigencia. Lo digo por el lodazal en que se han convertido los pitos a Gerard Piqué en la que puede ser su última convocatoria con la selección española. Por partes.
En su celebración del triplete, Piqué se acordó de Kevin Roldán, el cantante -¿?- al que Cristiano Ronaldo contrató para que amenizara su fiesta de cumpleaños. Dicha fiesta tuvo lugar pocas horas después de que el Madrid fuese vapuleado 4-0 por el Atleti, con lo que eso duele al madridismo. Pero parece que ni a Cristiano ni a sus amiguetes les afectó mucho: estuvieron “rompiendo tarima” con el afamado músico -¿?- colombiano hasta las mil. Casillas, Ramos, Toni Cross -alemán, para más señas- y otros jugadores optaron por quedarse en casa, sabedores de que aquella no era precisamente la noche más indicada para una juerga así.
Las imágenes dieron la vuelta al mundo. ¿Por qué? Fácil: porque hubo una fiesta que grabar. Si Cristiano se hubiese ahorrado el sarao, nadie habría podido filmar nada. Pero cuando los egos mandan, pasan estas cosas. No recuerdo a Messi luciendo abdominales ante la cámara, gritando como un mono tras marcar un gol o llenando de intelectuales su casa para celebrar lo que sea. Tampoco fardando de ser guapo -sinceridad ante todo- y rico. Él a lo suyo, que es marcar goles y defraudar a Hacienda.
Más. En la final de Copa varios miles de energúmenos se dedicaron a insultarse a ellos mismos pitando su propio himno. Sea el que sea, un himno jamás se pita. Por respeto, por educación; jamás. Sin embargo, los impuestos que todos pagamos -menos Messi- sufragaron los 10.000 silbatos repartidos para “romper tarima” contra España. Ahí Piqué también terció, poniéndose del lado de los energúmenos. Hace unos días, en León, el catalán probó de su propia medicina. Fue en un partido de la selección donde, cada vez que tocaba la pelota, el público le abucheaba. La ocasión fue aprovechada por los exegetas del fútbol: que si era por meterse con la fiesta de Cristiano, que si era por lo del himno…
Mientras, Piqué es feliz. Sabe que le pita un puñado de madridistas, sí, pero sabe también que muchos más están molestos por su desprecio a España. Y ahí disfruta del lodazal creado. No nos engañemos, lo que realmente le pone al catalán es que se insulte al país cuya camiseta defiende, pero que escupiría sin vacilar si pudiera. Es cierto, nadie puede decir que Piqué no lo haya dado todo con la selección; ahí, su profesionalidad es incuestionable.
Si no se siente español, ¿qué pinta en la selección? ¿Y por qué juega la Copa de un país que no reconoces como tuyo? Podría haberse ahorrado las referencias a la fiesta de Cristiano, habría sido más elegante. Ahora bien, no equivoquemos el objetivo: la culpa fue del madridista por dar motivos. Señor Piqué, siga usted dedicándose a humillar a la Guardia Urbana de Barcelona o a escupir a personas mayores -ya lo hizo con Pedro Cortés, directivo de la federación, en la celebración del Mundial-. Métase con el Madrid, si tanto lo necesita para reafirmarse. Pero respete al país donde han nacido tanto sus hijos como usted mismo, y recuerde que el mundo le llama español; no porque se lo merezca, sino porque lo es.
Buenas noches simplemente recordarle que el día del 4-0 contra el Atlético, después del partido hubo dos fiestas de cumpleaños una la Cristiano Ronaldo, otra la de la compañera de Casillas, Sara Carbonero, espero que este haya sido sólo un lapsus por su parte, que los perros del CE.CO.M.A. hayan silenciado la segunda fiesta para echarle mas mierda a Cristiano, haber si así se cansa y se va del Madrid. Ojo Antonio que esta el horno para pocos bollos, Por cierto ¿ Qué nos importa a nosotros como madridistas el tema Piqué ? Si se siente español o no, Si juega o no. Esta mierda ni nos va ni nos viene
Exactamente comunero, el problema no es que Antonio haya tenido un lapsus, el tema es que Casillas y señora celebraron una fiesta "privada" (igual que la de CR7), una fiesta celebrada a la misma hora y día (igual que la de CR7), una fiesta en que los invitados eran familiares y amigos que llevaron a sus esposas e hijos (idéntico que en la fiesta de CR7), una fiesta al fin que no se diferenciaban nada una de otra salvo por el hecho concreto de que una la organizó Casillas y la otra CR7, el problema es que la CE.CO.M.A (como usted muy bien la denomina) se ha preocupado muy mucho de, una - la de Casillas - ocultarla y la otra demonizarla. Resumiendo, Cristiano es un desapegado del Real Madrid, un puto portugués que hay que expulsar de España, del otro no digo nada, no hace falta y de Piqué y su desahogo... pa que, pa que.
Buen articulo Antonio, gracias.
Buenos días Bigfoot y gracias, me resulta agradable saber que hay madridistas que comparten en gran parte mis puntos de vista, sobre el gravísimo problema que tiene el Madrid en su relación con los medios de comunicación, tanto escritos, radiados o televisados, medios que a veces creo que me quedo corto cuando digo que el 80% son anti madridistas, ( el espero pronto famoso CE.CO.M.A.), MEDIOS QUE SE DEDICAN , a dividir a la afición, dividir a la plantilla entre españoles y extranjeros, difundir rumores como que los fichajes se hacen por intereses empresariales de la presidencia, en definitiva una desestabilización permanente y brutal del club, incluyendo en este tema, el silenciamiento de los continuos errores arbitrales en contra nuestra, de los cuales en los resúmenes apenas se habla, y si es al revés el fallo arbitral se magnifica y se comenta toda la semana.
EJEMPLO: Ha oído alguien en algún medio del CE.CO.M.A. comentar algo sobre el inaudito hecho de que en 38 partidos de liga, no haya sido expulsado nunca ningún jugador del equipo contrario y hayamos jugados todos los minutos de esta liga siempre contra 11. Saludos blancos y comuneros