El Real Madrid está en pleno bache de juego y sensaciones. El equipo ha encadenado una serie de partidos a un nivel bastante bajo, ganando por los pelos ante el Maccabi en Euroliga o frente a Tenerife y Obradoiro en ACB. El Madrid dejó en todos ellos sensaciones de cierta fragilidad. Las derrotas merecidas ante Zalgiris y Efes no son más que la confirmación de este bajo estado de forma. Esta vez toca hablar de los aspectos negativos del equipo. Para ello utilizaré varios vídeos de una duración algo más extensa que en artículos anteriores. Esperemos que a partir de ahora solo haya que hablar de cuestiones positivas.
¿CUÁLES PUEDEN SER LAS RAZONES DE ESTE BAJÓN?
Destaca el caso de Campazzo, referente exterior del equipo, que llegó pletórico tras el Mundial y en los últimos partidos ha bajado el rendimiento de forma muy notoria. Es sencillo apreciar que el argentino está en un momento flojo de forma porque ya ha pasado por malas rachas similares en temporadas anteriores. ¿Los síntomas? Deja de pasar los bloqueos directos por delante (no me creo que Laso ordene pasar los bloqueos por detrás a una bala como el argentino), le cuesta romper a los defensores y, cuando lo hace, le cuesta finalizar cerca del aro (Facu nunca ha tenido buen toque pero no es normal la cantidad de canastas cerca del aro que ha fallado últimamente; provocando estos errores, además, muchas oportunidades en transición para los rivales).
Sin la intensidad y clarividencia de Campazzo, el Madrid es un equipo mucho más vulnerable. No obstante, lo del argentino no me quita el sueño. No sé si necesitará parar (los preparadores físicos del Madrid seguro que lo saben mucho mejor) pero tarde o temprano recuperará un nivel decente.
El otro jugador referencia, este en defensa, Edy Tavares, ha empezado la temporada a un nivel muy bajo. Su pretemporada fue ya floja, pero era lógico pensar que iría mejorando con el paso de las semanas. No está siendo así. Tavares está lentísimo y muy pesado, lo que le hace parecer excesivamente torpe sobre la cancha. Le cuesta desplazarse una barbaridad, apenas levanta los pies del suelo al saltar, y todo ello repercute negativamente en la defensa y en el rebote del equipo. Y, por si fuera poco, en ataque está siendo transparente. El Madrid necesita que Tavares esté a gran nivel si quiere competir por todo. Su defensa es, en buena medida, el sistema del equipo de Laso.
Los casos de Facu y Edy son los más llamativos e importantes, pero no son los únicos jugadores del equipo que están rindiendo por debajo de lo esperado últimamente. A Laprovittola se le está quedando muy grande la Euroliga. Causeur, como es tradición, ha empezado la temporada de forma deficiente, a pesar de ser de lo mejorcito ante el Zalgiris (¿por qué jugó tan poco?). Mientras que Rudy, aunque parezca mentira, flojeó en defensa ante el Efes; lo mismo que Taylor, y ambos no están tan acertados como acostumbran desde el triple.
Mención especial merece un Randolph que anota sus puntos pero que está cometiendo errores muy gordos en ambos lados de la pista, especialmente en defensa. Cuando Randolph no está concentrado puede llegar a ser perjudicial para su equipo, de ahí que no jugase en los últimos 16 minutos del partido ante el Efes.
Al final, los únicos jugadores que están ofreciendo un rendimiento correcto en los últimos partidos son Llull, que está tirando muy bien de 3 y no está siendo de lo peor del equipo en ataque, ni mucho menos, aunque su defensa sigue siendo crítica para su equipo y cada vez le cuesta más llegar hasta el aro; Carroll, al que no se le puede pedir más; Deck, que está siendo probablemente el jugador más sólido en ambos lados de la pista; y Mickey, que se está reivindicando como un muy buen anotador, pese a su tendencia a ‘sobreayudar’ en defensa, tendencia acentuada por la mala defensa de casi todos los exteriores.
Laso es un fantástico entrenador y una leyenda del Real Madrid, pero es obvio que su dirección desde el banco no está siendo la mejor en el último mes. Siempre he pensado que los entrenadores tienen que estar más a gusto con rotaciones no excesivamente largas, y con Laso me ocurre más de lo mismo. Siempre se dice (yo el primero) lo de “bendito problema” cuando hay una posición muy bien cubierta, pero luego en la práctica el problema no es tan bendito. De hecho, en mi opinión, la mejor temporada de Pablo Laso como entrenador es la 17/18, cuando el Madrid sufrió tropecientas lesiones graves (Llull, Kuzmic, Ayón, Randolph…) y problemas de diversa índole (la enfermedad de la madre de Trey, por ejemplo), que supusieron una reducción del número de efectivos en la rotación del equipo.
Cuando cuenta con plantillas muy largas, Pablo tiende a olvidarse de ciertos jugadores durante largos intervalos de tiempo (Causeur en Kaunas o en la pasada Final Four, entre otros casos), mientras insiste con otros jugadores que no tienen su día (Llull en la pasada Final Four, por ejemplo). Esto último le ha salido bien muchas veces, ya que esos jugadores agradecen la confianza depositada en ellos, pero otras veces no ha funcionado.
La baja de Ayón, clave en los sistemas ofensivos de Laso, también está siendo una cuestión difícil de solventar para el entrenador madridista. Mickey es un muy buen anotador y ofrece cosas que Ayón no daba, especialmente en defensa, pero la capacidad de generar juego y de pase del mexicano se echa de menos, sobre todo ahora que Facu no está bien.
Por apuntillar un poco, no entendí por qué en ciertos tramos de la segunda parte ante el Efes Pablo decidió emparejar a un Krunoslav Simon en racha con Llull y Carroll, posiblemente los dos peores defensores exteriores del equipo. No salió bien el experimento, claro.
El Madrid es un equipo que depende mucho de Campazzo y de su capacidad para generar ventajas en ataque. Su bajo estado de forma, la más que hablada salida de Ayón y el no fichaje de un jugador con capacidad para anotar puntos y sacar tiros libres son aspectos que remarcan las dificultades ofensivas del Real Madrid. Hemos visto ante el Zalgiris, equipo dirigido magistralmente por Jasikevicius y que en ocasiones cambia en los bloqueos, o el Efes, conjunto que aprieta bastante atrás, cómo se reducían las opciones de pase en las continuaciones, disminuyendo el número de tiros cómodos desde las esquinas y cerca del aro y convirtiendo el ataque del Madrid en algo espeso y monótono. Esta era mi principal duda con la actual plantilla y sigue siéndolo.
Está claro que Campazzo mejorará y el Madrid comenzará a atacar mucho mejor, pero… ¿qué va a ocurrir en los partidos decisivos ante defensas potentes que planteen diferentes variantes a la hora de defender los bloqueos directos?
Randolph y Tavares se han mostrado siempre ineficaces a la hora de atacar ‘mismatches’ desde el poste. La esperanza es que Thompkins, si algún día está en forma, y Mickey puedan hacer daño en esas situaciones.
En todo caso, meter balones al poste cuando el rival cambie puede ser una medida correcta siempre y cuando no se abuse de ello. Por tanto, deberían ser Campazzo y Llull, entre otros (Rudy, Causeur…), los encargados de romper a los interiores rivales desde cabecera. Facu, cuando vuelva a su ser, no tendrá problemas en dejar atrás a dichos interiores, aunque su falta de toque y tamaño siempre serán obstáculos para anotar. A Llull cada día le cuesta más sacar faltas y finalizar cerca del aro, aunque aún puede hacerlo. Lapro tiene que dar cinco pasos adelante para siquiera plantearnos si puede ayudar al equipo en los partidos clave de la temporada.
La respuesta del Madrid a los problemas ofensivos siempre ha sido Jaycee Carroll. Este remedio (carretones/bloqueos indirectos para el de Utah) puede funcionar perfectamente en determinados partidos, pero hay entrenadores que se conocen al dedillo los movimientos sin balón del mormón y consiguen desactivarlo (Claver suele defenderlo bien, por ejemplo, y hay equipos que cambian en los bloqueos indirectos, haciéndole la vida más difícil). Sin irnos muy lejos, el Efes defendió muy bien dichas situaciones.
En el siguiente vídeo muestro varias secuencias en las que el equipo acusa la falta de un anotador/generador nivel élite. Se aprecia cómo Llull consigue a veces romper a su defensor pero luego no se atreve a atacar el aro, tomando malas decisiones. También vemos cómo Laprovittola no tiene el perfil para atacar defensas tan potentes de forma consistente, perdiendo balones peligrosos. Finalmente observamos cómo el Madrid se encomienda en cuerpo y alma a Jaycee Carroll sin éxito.
En el vídeo de abajo he agrupado varias defensas del Zalgiris en las que hay cambio en los bloqueos, suponiendo graves problemas para el Madrid.
Pero lo realmente decisivo y lo que va a marcar la temporada del Madrid es su defensa. Si el Real quiere ganar más trofeos este año, tiene que ser gracias a la defensa. Si el Madrid defiende, podrá correr más. Y si el equipo de Laso corre más, ganará más partidos, pues el ‘Lolaso’ siempre ha sido mejor cuanto más ritmo ha metido a los partidos.
Y, ojo, la defensa empieza con los exteriores. Campazzo y Taylor son seguros de vida a la hora de defender los bloqueos directos, a pesar de que lleven unos partidos bastante más flojos. Causeur y Rudy son más que capaces también, siendo inferiores al argentino y el sueco. Llull y Laprovittola son otra historia. Sus dificultades para defender los directos fuerzan en muchas ocasiones ayudas largas de Tavares o Mickey, dejando la zona despoblada. Asimismo, el de Caboverde está llegando casi siempre tarde, mientras que el estadounidense acusa su propensión a hacer ayudas largas.
Además, Sergio y Lapro están cometiendo muchas faltas, haciendo que el Madrid entre en bonus en los últimos cuartos muy pronto, y todo ello por mal posicionamiento (toman muy malos ángulos al colocarse frente al defensor y en la defensa sin balón) y porque son rebasados con facilidad en los bloqueos directos o en los 1vs1, obligando al cambio y sufriendo en el poste y en el rebote ante los interiores rivales.
Por otro lado, Tavares las pasó muy puñeteras para defender los triples de Nigel Hayes ante el Zalgiris, como mostré en el vídeo del principio del artículo. Cada vez más equipos intentarán atacar las debilidades del caboverdiano con cincos capaces de abrir el campo, como lleva tiempo haciendo Jasikevicius. Mickey, por su parte, fue superado en el poste en el último cuarto por un gran Leday.
En el siguiente vídeo puede verse la tendencia a hacer ayudas excesivamente largas del americano (algo en lo que mejoró ya frente al Efes), así como sus problemas en el poste.
Sin embargo, la principal razón del gran partido ofensivo de Dunston (¡él solo metió más canastas de 2 que todo el Madrid!) fue más debido a la mala defensa de los exteriores que a la defensa de Tavares o Mickey.
En el siguiente vídeo intento mostrar los problemas defensivos del Madrid ante Zalgiris y Efes (a los que habría que añadir las posesiones que enseño de Campazzo y Tavares en los primeros vídeos del artículo), derivados la mayoría de ellos de la mala defensa exterior. Ante Zalgiris fueron Lapro y Llull los exteriores que más flaquearon, pero es que ante el Efes no se libró nadie (Rudy estuvo irreconocible, sin ir más lejos). Los turcos se quedaron en 76 puntos porque no estuvieron nada acertados en tiros más o menos cómodos, obviando a Krunoslav Simon.
Con Tavares así, habría venido bien la entrada de Mejri, pero parece que este va a estar unos cuantos meses de baja tras sufrir una fractura por estrés en el pie. También Reyes va a estar un tiempo fuera por una lesión en el lábrum del hombro. ¿Qué haría yo para intentar darle otra vuelta de tuerca a la defensa dados los condicionantes? Meter en dinámica Euroliguera a Usman Garuba. Tiene 17 años, sí, pero no se pierde nada por probarlo. Imaginad que nos da una marcha más en defensa, como ocurrió en Santiago frente al Obra. Sería un auténtico notición para el equipo. El chico puede dar cosas atrás que el equipo no tiene, en cuanto a defensa del 2vs2, posicionamiento, actividad, manos y motor. Mucho que ganar y poco que perder.
¿HAY MOTIVOS PARA PREOCUPARSE?
Sí es cierto que el bajón ha llegado más pronto que de costumbre, pero es algo que tenía que ocurrir tarde o temprano, y más tras un Mundial con tanto protagonismo de jugadores importantes del equipo. Mejor sufrir ahora, con tiempo, para así poder aprender de los errores. Por tanto, el bajón general del equipo no me inquieta en absoluto. Va a haber más rachas así a lo largo de la temporada.
Me preocupa algo más Tavares, que tuvo todo el verano para prepararse y no ofrece síntomas de mejoría. Si bien, también confío en que dé la vuelta a la situación. Es un chico humilde, trabajador y autocrítico, por lo que no cabe duda de que va a dejarse el alma para volver a ser diferencial. Tiene curro por delante, eso sí.
Lo que más me preocupa, sin duda, es la ausencia de ese anotador exterior del que hablaba antes. Hay plantilla para ganarlo todo, sin duda, pero un jugador de esas características le habría venido muy bien a Pablo. Está claro que este Madrid va a intentar ganarlo todo con un juego ofensivo muy coral, con mucho movimiento de balón y lanzamiento de 3 (¿demasiado quizás?) y pocos viajes a la línea de tiros libres. Veremos si la propuesta tiene éxito.
La defensa de los exteriores últimamente también es un pelín inquietante. Campazzo, Rudy (¿acusará el Mundial?), Taylor y Causeur mejorarán, como también lo harán un Mickey más adaptado y un Tavares más enchufado. Es obligatorio que Randolph aporte más en defensa también. Y siempre tienes en la recámara a un proyecto defensivo de élite como Garuba. Creo que el Madrid tiene plantilla para ser un equipo muy potente en defensa en cuanto Tavares comience a parecer un jugador de baloncesto.
Por tanto, no creo que haya motivos para estar excesivamente preocupados. Ahora el calendario se relaja un poco, ya que el Madrid viaja a Munich, recibe al Alba de Berlín y finalmente juega en casa del Estrella Roja. Estaría muy bien llegar al Real Madrid - FC Barcelona del 14 de noviembre habiendo ganado esos tres partidos y cogiendo buenas sensaciones. Tranquilidad, que la temporada es muy larga.
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Como siento que "la Galerna" es , también, un poco nuestra -de los lectores-...pues, siento cierto orgullo del nivel que ofrece la publicación. Tanto en artículos de baloncesto como en fútbol.
Exhaustiva crítica constructiva la del articulista. DEFENSA ASFIXIANTE , es la clave para obtener títulos. Fácil de decir, de hacer...no lo es tanto.
Cuando llegue la Copa del Rey, estarán bien y luego a tope.
Ya lo hemos visto en alguna temporada anterior, despues de un Mundial o una Olimpiada.
Pedazo de artículo. ¡Y algunos creíamos que sabíamos de baloncesto!
No nos pongamos "DRAMÁTICOS", solo hay que ver el currículum de D. Pablo Laso, no siempre van a estar al 100% son humanos y los adversarios también cuenta...!!!
Hala Madrid!!!!!
(Laso es un fantástico entrenador y una leyenda del Real Madrid, pero es obvio que su dirección desde el banco no está siendo la mejor en el último mes. Siempre he pensado que los entrenadores tienen que estar más a gusto con rotaciones no excesivamente largas, y con Laso me ocurre más de lo mismo. Siempre se dice (yo el primero) lo de “bendito problema” cuando hay una posición muy bien cubierta, pero luego en la práctica el problema no es tan bendito. De hecho, en mi opinión, la mejor temporada de Pablo Laso como entrenador es la 17/18, cuando el Madrid sufrió tropecientas lesiones graves (Llull, Kuzmic, Ayón, Randolph…) y problemas de diversa índole (la enfermedad de la madre de Trey, por ejemplo), que supusieron una reducción del número de efectivos en la rotación del equipo.)
Buenas tardes le felicito en primer lugar por este apartado de su comentario, nunca creí que vería, una crítica en La Galerna al vasco, y en segundo lugar porque es un placer y un deleite leerle a usted , fenomenal el artículo, que nos hace aprender y nos divierte, que no es poco
Saludos blancos, castellanos y comuneros
Gran nivel de análisis.
Este es es un artículo del mayor nivel. Y con una crítica de las de verdad, no esa retahíla de descalificaciones sin sentido que algunos entienden por crítica, y que otros llaman exigencia.
No es por casualidad que las palabras crítica y criterio tengan la misma raíz semántica. A mejor criterio, mayor calidad crítica.