En estas horas de desidia propiciada por la ausencia de fútbol (no hay fútbol si no juega el Real Madrid), hemos pergeñado un once histórico de futbolistas que hayan destacado por su antimadridismo, tanto en atención a la fiereza del mismo como a su notoriedad general en el mundo del fútbol.
Así queda el once.
Portería: Oliver Khan.
Enemigo público número uno (y no sólo por ser el uno el número del portero) del madridismo en aquellos duelos épicos de los noventa y principios de siglo contra el Bayern, se ganó el aborrecimiento de la parroquia blanca por sus constantes declaraciones despectivas hacia el Madrid, así como por sus bravuconerías (“No me meten ni en sueños dos goles en el Bernabéu”, dijo tres días antes del gol de Helguera y el gol de Guti que acabarían en la Novena). Ya en su faceta de comentarista, destacó por el vitriolo arrojado sobre Cristiano Ronaldo y su presencia mediática. “Veo con más frecuencia los pectorales de Cristiano que los pechos de mi mujer”, llegó a confesar, lo que hizo que nos preocupara sobremanera su poco frecuente vida conyugal.
Lateral derecho: Alves.
El lateral derecho con la colección de gafas más inenarrables del planeta siempre ha destacado, amén de por sus indumentarias inspiradas en Kid Creole and the Coconuts, por su odio visceral al club de Concha Espina. Entre las infinitas declaraciones que ha formulado en ese sentido destacaremos al azar aquella de “Pude fichar por el Madrid, pero mi sueño era el Barça y hay que cumplir los sueños, no las pesadillas”. Lo tenemos ya arreglado para entrar en los sueños de Alves, al modo Inception, a ver si allí le encontramos por fin un traje decente.
Lateral izquierdo: Luis Enrique.
El asturiano jugó en muy diversas posiciones y, aunque la de lateral izquierdo no fuera la más frecuente, había que hacerle hueco en este once. Tenía que estar. Paradigma del exmadridista que odia al Madrid a pesar de haber jugado y triunfado con nosotros, afirmó sentir algo raro cuando se ve en los cromos de blanco. A nosotros nos pasa exactamente lo mismo.
Defensa central 1: Augenthaler.
Como el caracol al sol, Augenthaler sacó los cuernos al Bernabéu, y el astro rey del fútbol le castigó con su sempiterno desprecio. Años más tarde confesaría haber tratado con ese gesto de transmitir algo relativo a España y la fiesta de los toros, con la que nada tiene que ver el Real Madrid por mucho que Raúl o Ramos, a título personal, hayan sacado el capote en algún post de Final de Champions. No sabemos si cada una de esas veces Augenthaler repetiría el gesto desde su casa, hastiado de ver a su enemigo alzar una orejona tras otra.
Central 2: Piqué.
Marido de folclórica latinoamericana (Pescaílla de Barranquilla), lapeador incontrolado, líder político de lagrimeo grimoso, empresario tenístico-hazmerreír y Tom Clancy de confabulaciones de palco blanco, este genio del prenacimiento (le falta un hervor) ha destacado por encima de todo (y mira que quiere ser cosas) por su asco hacia el Madrid y los guardias de trafico. Se cree alguien.
Centrocampista 1: Movilla.
Se trata de un tipo de futbolista antimadridista que debe su magra fama precisamente a eso, a su antimadridismo, ya que su carrera no da para escribir un cantar de gesta. En el breve lapso de días que separaron el 11M y la Final de Copa que nos ganó su Zaragoza, cuando nadie en España pensaba en otra cosa que en los atentados sucedidos en Madrid, él seguía manifestando públicamente su odio al principal equipo de dicha ciudad. Pobre hombre.
Centrocampista 2: Albelda.
Prototipo de invitado llorón, no faltaba a su cita con la prensa tras cada encuentro de su Valencia en el Bernabéu. Se le atribuye a él la tan manoseada frase “ya sabemos lo que pasa cuando vienes a este campo”, en referencia al arbitraje que invariablemente le había perdonado la expulsión tras infinitas patadas alevosas. En su etapa de comentarista, aún se recuerda su trauma tras el 0-4 de Múnich.
Centrocampista 3: Simeone.
Este once estaba peligrosamente preparado para incluirle, a pesar de nuestra diferencia de presupuesto con el As o el Marca. No podía faltar.
Centrocampista 4: Raúl García
Raúl García. Qué le vamos a hacer si, como ya habéis observado, existe una íntima correlación entre el antimadridismo y el centrocampismo marrullero. No le recordamos muchas declaraciones antimadridistas, pero atesora tal arsenal pretérito de hostias propinadas a jugadores del Real Madrid que merece un hueco en este once.
Mediapunta: Salihamidzic.
Siempre presto a secundar el antimadridismo mediático de su compañero Kahn, se refirió a Raúl y sus compañeros como una panda de cagones. Raúl y sus compañeros le pusieron en su sitio, es decir, bien sentadito en la taza del retrete.
Delantero : Hristo Stoichkov.
Más célebre por sus pisotones a rivales y árbitros que por sus goles, su amor al Madrid es solo comparable al gran recuerdo que ha dejado entre sus compañeros de profesión. Dicho gran recuerdo quedó probado en el partido de homenaje que se auto-organizó en Bulgaria y al que no acudió ni el proverbial Tato. Sigue soltando sus soflamas anti en diversas cadenas. Le encanta referirse al Madrid en términos porcinos, lo que retrata su pulsión por las piaras.
Este es, pues, nuestro once histórico de jugadores anrimadridistas. Os sobra alguno? Echáis de menos a alguien?
En el verano de 2005 cuando se rumoreaba que Raúl García iba a ser el próximo galáctico de Florentino Pérez, tuve la ocasión, por medio de un conocido común, de tomar una copa con él en una terraza de Pamplona y confirmé lo k ya suponía: es más blanco que la nieve y su nuevo antimadridismo creo k sólo a la final de Lisboa y al contagio sufrido por haber sido "entrenado" por el macarra de simeone...
Eso sólo probaría que los madridistas no somos perfectos, porque Raúl García es, sobre todo, mala gente. Una auténtica mala persona.
Gabi (ex capitán del Atlético, estandarte de dicho club): "A medida que vas creciendo en las categorías inferiores, por lo que supone jugar contra el Real Madrid, te vas haciendo antimadridista. No es mejor ni peor, es la realidad del Atlético".
Jajajajajajajaaa.
El de Simone es el mejor.
Y mira que es el más corto, del top, digo. Jajaja.
Yo a este artículo le quitaría la referencia a Shakira. No hay derecho.
De resto, muy muy bueno.
Pizo Gomez y Xavi.
Jajajajaja, muy bueno, cómo me he reído con las descripciones. No cambiaría nada, pero a ese once de lujo le falta un banquillo poblado de antimadridistas:
Portero: Santi Cañizares profesó un notable antimadridismo en su etapa como portero del Valencia y como comentarista de radio, pese a los años pasados en nuestra casa, es lo que tiene haber convivido con Albelda, Marchena y David Navarro. Pero creo que cumple más méritos otro portero del Bayern, el belga Jean Marie Pfaff, habitual de los gestos provocadores a la grada del Bernabéu, odiador profesional de Hugo Sánchez y Juanito y artífice de declaraciones como: "yo no voy a llevar botes de humo ni piedras al Bernabéu".
Defensa: Pablo Alfaro. Formó junto a Javi Navarro el dúo más letal (en el peor sentido de la palabra) del fútbol reciente. Famoso por coser a patadas a cualquier delantero madridista que pasara cerca. Dicen que es doctor, pero si le confiesas que eres madridista, igual sales con menos dientes que cuando entraste a su consulta.
Centrocampistas: Patxi Rípodas, capitán de Osasuna aquel famoso día de los petardos-bomba y las piedras sobre el área de Buyo. Para Rípodas aquello fue una lluvia celestial, no pasó nada reseñable, salvo que los jugadores del Madrid temieron por su integridad y se marcharon del terreno de juego. Cómo serían las declaraciones de Rípodas que hasta el mismísimo Butanito le llamó "terrorista".
Van Bommel: tan aficionado a los cortes de manga como a los pisotones al tobillo. Jugó en el Barça y el Bayern, ¿cabe mayor cuota de antimadridismo? Estuvo en aquella sucísima selección holandesa que se presentó a la final de Sudáfrica para coser a patadas a los nuestros.
Xavi Hernández: el Jardiner que vive más pendiente de los triunfos del Madrid que del estado de su céspet. "Osti, tú, es que estos del Madrid no saben ganar".
Delanteros: creo que el síndrome de Luis Enrique, definido clínicamente como "estrés postraumático tras no digerir la falta de éxito en el club blanco", afecta seriamente a Morata, del mismo modo que en su día lo hizo con Munitis, que alcanzó un éxtasis que le duraría toda su carrera tras marcar un gol con el Racing al Real Madrid.
Entrenador: Pep Guardiola. ¿Imaginabais otro con peor catadura moral y mayor odio irracional hacia el Real Madrid? Un ninguneador profesional, tragador de bilis anti y despreciador de cualquier hazaña madridista, desde el "son atletas" hasta decir que las 3 Champions consecutivas del Madrid no le hacían merecedor de ser uno de los mejores equipos de la década, ¡juas, juas, juas!
Todos ellos hubiesen dado un riñón por jugar con nosotros HALAMADRID
Luis Enrique si jugo ahi pedazo de idiota
Un voto más por Van Bommel. Tampoco me olvido del corte de mangas de Giovanni ni de Rivaldo, aunque este fue más educado.
¿Y qué me decís de Walter 'Rifle' Pandiani?
El denominador común de todos es el complejo de inferioridad. Hacerse notar y ganarse el favor de su afición de un modo populista. No me olvido de la prensa que muchas veces rie estas "gracias".
Te faltó poner a Guardiola el calvito.
MADRIDISTAS HIJOS DE PUTA