Una vez cogido el aire que da el merecido descanso vacacional, afrontamos un año deportivo expectantes ante los nuevos retos que se plantean, y la sección de baloncesto no ha podido empezar de mejor manera a pesar de las dudas que había.
El equipo ha sacado una excelente nota de cara a esta temporada atípica que se nos avecina. Se notan, y mucho, los años que llevan juntos, y se agradece incluso la incorporación de dos valores españoles como son la ya realidad de Alberto Abalde, y la promesa que es Carlos Alocén. Dos jugadores nacionales que han venido para quedarse muchos años, y que desprenden un aura espectacular y nos van a ayudar mucho. Pero lo más importante de todo fue demostrar al Barça que seguimos siendo mejor que ellos a pesar de todo el desembolso y la llegada del nuevo técnico. Jasikevicius fue un jugador extraordinario pero todavía tiene que demostrar que lo va a ser también como entrenador, puesto que su bagaje le sitúa solo dos años al frente del Zalgiris y, por muy bien que lo hiciera, alcanzando la Final Four un año, eso no tiene nada que ver con llevar las riendas de un equipo con muchas mas necesidades y urgencias de las que tenía en Lituania.
El MVP de la supercopa fue por segundo año consecutivo Facundo Campazzo. Ahora mismo es el jugador más determinante en Europa, y encima tiene desquiciado a uno de los flamantes fichajes del Barcelona, el jugador grecoamericano Calathes, que se desespera cada vez que tiene al argentino delante como ya hacía en el Panathinaikos. Entiendo sus dudas respecto a irse a la NBA, pero no creo que sea tan feliz como lo es aquí. Esa en todo caso será su decisión, y si eso es así tendrá que pasar por caja.
Destacable también el papel de Rudy Fernández. El mallorquín está pasando por un momento de juego espectacular. Hubo un tiempo en el que se pensaba que las lesiones de espalda que tuvo podían mermarle en su rendimiento, y es verdad que tuvo una temporada entonces irregular, pero desde entonces hemos visto un Rudy increíble en defensa, capaz de anticiparse en todas las jugadas y ayudar siempre a su equipo. Además, ya en la semifinal, fue capaz de convertirse en el revulsivo en ataque, al más puro estilo Carrol, y anotar cinco triples para cerrar el partido contra el Tenerife en el tercer cuarto.
Y cómo no destacar también el papel en todo esto de nuestro entrenador y su cuerpo técnico. La décima temporada de Pablo Laso, y una cantidad de trofeos apabullante, le convierten en el sucesor natural de Pedro Ferrándiz y Lolo Sáinz, auténticos mitos del banquillo madridista. Pablo hace que todo parezca sencillo, pero sé de primera mano que hay mucho trabajo detrás. Vive por y para el baloncesto, y así se nota cómo lo sufre en cada partido.
Vamos a ver qué pasa con la competición de la Euroliga o el asunto Campazzo, pero lo que queda claro es que -un año mas- hay una base sólida en la que podemos creer y esperar una gran temporada, seguro que refrendada con mas títulos.
¡¡Suerte y a por ellos!!
Palabras de alguien , aún con la sabia modestia de los que realmente saben, perteneciente a la élite del baloncesto,; como jugador, como directivo y como comentarista. Gracias y enhorabuena, Lorenzo.
A seguir trabajando adecuadamente, haciendo énfasis en la cantera, para proseguir haciendo historia. El ritual ,para no tener que pellizcarse, que no falte.
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Ahora mismo el valor más importante que tiene la sección de baloncesto del Madrid en su versión del primer equipo(no incluyo la cantera de Angulo que eso es para cum laude) es su cuerpo técnico. Reitero lo de cuerpo técnico porque Pablo Laso no está sólo, está magníficamente acompañado de un sabio del baloncesto como Chus Mateo, al que siempre se le infravalora un poco porque de entrenador jefe no funcionó tal y como se esperaba, a un auténtico valor de futuro como Paco Redondo, al que se fichó en su momento tras impresionar en categorías inferiores, con las que también triunfó aquí, y a Isidoro Calín, el último en llegar. Con ellos Pablo Laso ha construido un equipo sólido de personas que viven por y para el baloncesto como él, con distintos caracteres que construyen un equipo muy dinámico. Y él se ha convertido en uno de los mejores entrenadores de Europa por su trabajo, su esfuerzo, su experiencia y por aprender de sus errores.
Hacer el ejercicio de echar la vista atrás, a ese Laso que salió mal de Valencia y casi con la afición del GBC satisfecha porque se lo quitáramos de encima, al Pablo Laso de los 20 títulos es un ejercicio de cómo una persona puede evolucionar gracias al trabajo duro, a las ganas de disfrutar de algo que ama como es el baloncesto y por supuesto, por su tremenda capacidad y talento. De ese Laso de rotaciones inflexibles, casi herméticas, de ese Laso que muchas veces no acertaba a cambiar las dinámicas de los planteamientos que salían mal, ese Laso al que le faltaba cintura para la lectura de ciertas situaciones cuando los rivales ajustaban ya no queda nada. Sus puntos fuertes, como un scouting rival con mimo y conocimiento, una mano izquierda y gestión personal muy buenas siguen intactos, pero les ha unido una capacidad enorme de cambiar los partidos desde los planteamientos y los ajustes, buscando tomar la iniciativa, sin caer en desánimos, con una capacidad de motivación única, de crear ambientes favorables para todos... se ha convertido en lo que cuando salió por la puerta el tándem Messina/Maceiras todos esperábamos: un entrenador del más alto nivel pero que supiera qué era esto de estar en el Madrid, que Messina nunca entendió.
Cuando apareció por la puerta no lo era. Pero tenía las capacidades para serlo y el trabajo duro y sobretodo, la fe inquebrantable en lo que hacía le han hecho un entrenador soberbio. Ahora mismo es muy complicado superarle.
De hecho uno de los que había podido hacerlo en el pasado con Zalguiris, Saras, el otro día pinchó en hueso. Bajó el baloncesto al barro y en el barro perdió. Es muy pronto para tomar juicios de valor respecto a su trabajo. Tiene una plantilla all star europea, y el otro día le faltaban dos jugadores que serán claves en su desarrollo, Higgins y Kuric, que no son moco de pavo y les dan ciertas soluciones en ataque que echaron en falta el otro día(especialmente cuando tu creador principal en ataque es incapaz de superar a Campazzo y los puntos te los tiene que ofrecer el ciclotímico Abrines, que es de todo salvo un jugador confiable).
Lo de Campazzo es de otro mundo, el mejor base de Europa. Por lo que aporta en ataque y especialmente por lo que no se ve. Por esa defensa y por esa capacidad de dominar mentalmente a los jugadores, los saca del partido. Saras cometió el error de no sacar demasiado a, quizá, el único jugador que es capaz de evitar ese dominio mental, que es Thomas Heurtel, igual por su forma despreocupada de entender este deporte. Jasikevicius primó la defensa a la fantasía y por éso Calathes jugó tanto, y sin embargo fue incapaz de superar al argentino. Igual con Heurtel las cosas hubieran sido distintas, o quizá con Heurtel la herida en defensa del 2x2 hubiera sido tan honda que ni siquiera llegan con posibilidades al final.
En todo caso hay que esperar acontecimientos. Lamentablemente éste no es el Madrid para la temporada 20/21, porque ahora mismo Campazzo está prácticamente fuera en Diciembre, Enero o cuando quiera que empiece la NBA, lo que para nosotros es, invariablemente, un drama. Un drama porque no hay bases de ese nivel en Europa, principalmente por lo que decía: no es sólo sus números o su ataque o defensa. Es ese trabajo, esa actitud, ese liderazgo, ese carácter ganador e incansable, es todo junto. Encontrar éso es muy complejo. Y si no se ficha, el escalón a bajar es demasiado grande porque Laprovittola no es jugador para el Madrid en ataque ni tampoco defiende, y su entrenador no confía en él como ha demostrado en los últimos 12 meses. Y Alocén progresará adecuadamente(y lo veremos, como casi siempre con Laso, en la segunda temporada) pero todavía el chico está verde. Es un gran físico, tiene las armas y las aptitudes, pero necesita mucha experiencia y más en el puesto más complejo que existe en el baloncesto, el de base. Y esperemos que Deck no tome la misma salida, porque con la no-llegada de Zizic se nos abriría un agujero más justo donde no lo teníamos.
En todo caso el Madrid debe estar a la altura y si hay dos salidas importantes, tenga en cuenta que tiene que haber alguna llegada importante también porque con lo que ahora tenemos estamos entre los favoritos, pero Campazzo es medio equipo y Deck es uno de los jugadores que ahora mismo más aporta a nuestro baloncesto, especialmente porque añade armas difíciles de descifrar. Si juega de 3 puede postear y generar en y desde el poste bajo, si juega de 4 es rápido y puede atacar desde el bote o con esa lectura tan buena de los cortes que tiene ante pares más grandes y pesados. Y es un gran defensor, ya vimos cómo le comió la tostada a Ratovic, al que también saca de quicio siempre.
En fin. Congratularnos por el título, por esta década prodigiosa, y toca estar a la expectativa de acontecimientos. Laso y su cuerpo técnico son magníficos, pero no hacen milagros. Si se confirma la salida de Campazzo bajaremos un gran escalón que se notará en la competitividad. Ahora la pelota está en el tejado de más arriba si quieren que sigamos este ciclo triunfal, porque tanto los jugadores clave como el cuerpo técnico han demostrado estar a la altura.
Comentario de alto nivel. Estoy aprendiendo bastante con usted.
Parece que la temporada va a ser dura. El barsa tiene plantillòn, nosotros equipo, pero como se vaya Campazzo, se baja un escalón. Con todo y como se comenta. Tenemos un equipo técnico sobradamente capacitado y una estructura de club fantástica. Y una política económica más que coherente con los tiempos. Y gladiadores en la cancha.
Disfrutemos y estar orgullosos de este equipo, que el paso del tiempo nos lo arrebatará.
Si era difícil gestionar un equipo de baloncesto antes de todo el gran problema mundial y actual de salud , imagínate ahora, en época de covid. La incertidumbre es la principal de las constantes presentes. Centrándonos en el baloncesto, no sabemos si habrá Euroliga o no. Tampoco cuando empezará la NBA, lo que ya sabemos condicionará la presencia y ausencia de jugadores que vayan a... o vengan de aquella competición. Y no hay que olvidar que , aunque el baloncesto sea uno de -por no decir el que más- los deportes donde la influencia del cuerpo técnico es más evidente, el baloncesto es -sobre todo- de los jugadores. Así que habrá que estar preparados para cuando se vaya el Facu y/o Gabi Deck, 2 magníficos deportistas que aportan al equipo de manera sustancial. Por supuesto que confío en la reorganización que puedan efectuar Laso, Alonso y Redondo en función de las bajas y altas que, ojalá no, puedan producirse. Si un servidor hubiera podido escribir el guión, se habría quedado con todo lo que tenemos más Zizic. Aunque soy consciente de la realidad actual , en función de los presupuestos y los contratos correspondientes. Y, desde luego, coincido con lo que ha explicado Murat#17 sobre el Real Madrid, especialmente con el final de su comentario. Ahí está el quid de la cuestión.
Coincido con lo opinado hasta ahora pero quiero introducir un matiz que me parece importante. El baloncesto de elite en Europa , en general, solo puede sobrevivir gracias a las aportaciones de magnates privados (Grecia, Italia), grandes corporaciones económicas (Rusia, Turquía) y como secciones de Clubs de futbol (España , Alemania , Rusia). El último grupo lo hace asumiendo las pérdidas que se generan por el prestigio y palmarés de estas secciones, pero en una situación como la actual , con un descenso de los ingresos totales en más de un 25 % , es poco realista esperar grandes desembolsos que aumenten el déficit, ya de por sí considerable.
Yo veo este periodo como un tiempo de transición, en el que habrá que sobrevivir a la espera de la vuelta a una normalidad presupuestaria.