Probablemente, uno de los ejemplos más paradigmáticos de entrenador currante sea el de Benítez. Desde su acceso al profesionalismo en la parcela de entrenador, el madrileño nunca ha escatimado horas de trabajo. En una reciente rueda de prensa confesaba que a veces le dan las tres de la mañana en Valdebebas y el único motivo para no pernoctar siempre en la residencia es que, con ello, obligaría a los miembros de seguridad a hacer noche también en el recinto madridista.
Como gran teórico del fútbol, Benítez detesta las sorpresas. No hay nada que le horrorice más que algo que se salga de sus esquemas preconcebidos. Trabaja y trabaja con los jugadores, exigiéndoles hasta el aburrimiento la repetición de automatismos para tratar de minimizar el azar hasta considerarlo indeseable. En su consciencia está que su plan de partida para el partido siempre es ganador (más ahora que disfruta de una plantilla superior a las demás), y cuando debe improvisar lo hace con una de las cartas que previamente ya se había guardado en la manga. Como muy bien dice Mario de las Heras, imagino a Benítez en su despacho con absolutamente todo marcado, como Ryan Hardy con las fotografías de la secta de Joe Carroll en The Following. "La sorpresa y la suerte es para los incautos", pensará Rafa.
Los equipos tienden a mimetizar la esencia de su técnico. El Madrid de Mourinho era un equipo responsable pero apasionado, cuyas ráfagas podían destrozar al rival; el de Ancelotti era más despreocupado y, por tanto, más generoso en la invasión del campo contrario; el de Benítez aún está en formación, pero ayer dio muestras de que se va pareciendo a su técnico: hizo gala de control, pero en la segunda parte estuvo falto de la ambición que la superioridad con respecto al rival demandaba.
Y es que es verdad. Tenemos que diferenciar muy bien ambas partes del partido, porque, pese a que en ninguna el Madrid mostró una actitud ofensiva, la forma de afrontarlas fue muy diferente.
En la primera parte el Madrid controló el partido como un equipo muy maduro. Tras adelantarse gracias a una jugada de un gran (ayer) Carvajal y un certero cabezazo del "hombre sin gol", el Madrid consiguió que el partido discurriera por donde más le interesaba. La ausencia de bandas atacantes en el Atlético facilitaba que el Madrid siempre encontrase superioridad trasladando el balón a esas zonas. Desde la izquierda, posición inédita para él, un genio del fútbol como Modric lograba dominar el partido generando superioridades a su antojo. Es cierto que el Madrid no disponía de grandes oportunidades, pero (a excepción del doble error de Ramos) hacía que pareciera imposible que el Atlético empatase y, obligados a una continua basculación, parecía que los colchoneros acabarían agotados físicamente. Siempre quedaba la sensación de que el Madrid tendría en la mano meter una marcha más, ya que el dominio era suyo.
Esto era meritorio porque desde el principio se vio que el Madrid no estaba disfrutando de la mejor versión de muchos de sus jugadores, aunque también hay que añadir que el planteamiento de Simeone facilitó este dominio al tener muy despoblado el centro del campo.
En la segunda parte, Simeone introdujo a Carrasco, dejando ya fija una banda. Ante este envite, Benítez se empezó a preocupar, porque él siempre se preocupa por todo. Su ajuste fue el de buscar el control, pero ya sin la posesión del balón. Ocurre que el contraataque que hubiese sentenciado el partido pierde muchas posibilidades cuando el que lo conduce se encuentra lejos de la portería y por sus características no es un jugador dotado para ello (Isco). Esto mismo lo debió de ver Benítez, ya que introdujo a un jugador más preparado para el plan como Bale. Si bien la actitud de cada equipo había cambiado notablemente, no se podían considerar como demasiado peligrosas las acometidas del Atlético.
Cuando Simeone agotó sus cambios y empezó a buscar continuas superioridades por la banda, Benítez volvió a ajustar con Kovacic en lugar de Benzema. Este cambio se cifró en un mensaje que recibió cada equipo con consecuencias mucho más negativas para el Madrid. Como bien explicó Simeone, cuando vio salir a Benzema del campo la orden a su equipo fue la de atacar sin mirar a sus espaldas. La amenaza que constituía la BBC al completo perdía mucho fuelle sin su jugador más entonado ayer. El propio Madrid recibió el mensaje de forma inversa: era momento de ajustar y no de buscar un definitivo segundo gol. Para desesperación de Benítez, el fútbol es un juego en el que el error siempre está presente. En este caso fue Arbeloa quien, tras una pérdida absurda, no supo evitar un centro que, tras rechace de Navas a remate de Griezmann, acabó en la puntera de Vietto.
Creo que la sensación de amargor en el madridismo no está en el propio resultado, ya que empatar en el Calderón nunca puede considerarse un desastre, sino en la sensación de que ante una coyuntura tan favorable el Madrid estuvo falto de ambición. A diferencia de otros tropiezos, en este el Madrid no aspiró a merecer más goles y eso sí que no forma parte de la idiosincrasia del club madridista.
Estamos en octubre y cualquier juicio no puede ser más que provisional. Las experiencias felices hacen dichoso a un equipo, pero las amargas son las que le deben dotar de los mecanismos para evitar el mismo error. Seguramente el Madrid se volverá a encontrar esta temporada con la coyuntura de ayer. Será entonces el momento para comprobar si la experiencia fue o no en vano.
No hay que ser alarmistas pero tampoco taparse los ojos: llevamos ya un cierto número de jornadas, y empiezan a aparecer tendencias. Dos empates a cero (uno en casa), lo de ayer, un 1-0 al Granada... Poca ambición desde el banquillo y en el césped. Y, lamentablemente, algo sucede con Arbeloa, que ayer pareció empeñado en dar la razón a sus hipercríticos, y algo le pasa a Kroos.
De momento, que jueguen Navas, Modric, Casemiro, Benzema y siete más, y pongamos un primer y tímido interrogante sobre el trabajo de Benítez.
Para mí ha demostrado un día más q es un cagón. Tanto miedo le da perder que anda con racanería y eso nos ha traído ya tres empates. No esperaba alegría en el juego con Benítez pero tampoco me imaginé que fuera tan cagón. Tanto análisis y tanta leche para sacar empates. Para ese flete no necesitamos a un estudioso de esto.
Saludos
Los empates ante Sporting y Málaga también son por cagón y rácano?
Muchas gracias por vuestras aportaciones.
Y del Sporting no, pero el del Málaga muy valiente no estuvo. Cuando el Málaga se quedó en inferioridad numérica bien podría haber sentado a Carvajal y haber sacado a Lucas V para abrir el campo y poner a alguien que centrara con criterio viendo q no hacíamos más q estrellarnos. Sé que me diréis que tiramos más de 30 veces, pero entre los dos palos fueron 9 y uno tiene q echar el resto para intentarlo todo para ganar un partido en casa. Y contra el Malmo igual, sienta a Benzema con el marcador tan corto que en cualquier momento incluso esos matados estuvieron a punto de empatarnos.
Puedo entender que saque a Lucas para desequilibrar en el 1 contra 1 y generar desequilibrio, pero para centrar con 9 jugadores metidos en el área lo mismo da Carvajal que Lucas.
Yo habría metido a Lucas y Denis pero culpar de que se empató o se es cagón por no hacer esos cambios me parece osado. Que Benítez no coincida con mis planteamientos no significa que no tenga ni idea.
El día del Malmoe la segunda parte coincido contigo que fue un espectáculo malo. Pero no creo q fuese malo por cambiar a Benzema. No se meten más o menos goles por meter más delanteros.
Jamás he dicho q Benítez no tenga ni idea. Sí he dicho que es un cagón y por eso perdimos 2 puntos en el Calderón. Sabrá mucho de fútbol pero se ve que no es infalible.
Salvo que me equivoque creo que no hay ningún entrenador ni persona que sea infalible en nada 😉
Lo de cagón tiene varios niveles de análisis:
1. Mou cuando intentó innovar con Pepe de medio ¿fue cagón?
2. Todo lo que no sea jugar con 3 delanteros y 3 mediaspuntas ¿es ser cagón?
3. ¿Qué alineación debe sacar para no ser calificado como cagón?
4. ¿Jugar con 2 delanteros y 3 mediaspuntas y Marcelo es de cagón?
5. Si Benitez fue cagón ¿no hubiese sido más lógico salir con 3 centrales o 5 medios o jugar con Kovacic en lugar de Isco?
6.¿ En la primera parte Benitez fue cagón? ¿Y si no lo fue Benitez es un cagón interruptus?
7. ¿Que es preferible la honra sin barcos o los barcos sin honra?
A mí no me gustó la segunda parte del Real Madrid contra el ATM, pero calificar de "cagón" a un entrenador de tu club me parece irrespetuoso.
Un saludo.
Buenos días a todos los galernautas. Veo que le estamos dando vueltas y más vueltas al partido contra el Atlético, buscando una explicación a la victoria perdida e intentando encontrar culpables. Realmente es difícil saber a qué se debió la actitud del Real Madrid en la segunda parte, pues el perfil de Benítez hace pensar que ordenó cubrir las espaldas como prioridad absoluta pero los precedentes de este grupo de jugadores y el conformismo que han demostrado tener en varias ocasiones nos pueden hacer concluir que la responsabilidad mayor fue suya. El entrenador afirmaba en su reciente entrevista en COPE, según pude leer en internet (pues me niego a escuchar un programa cuyos contertulios parecen desear el mal del Madrid y uno de ellos es Lama, entre otras razones no menos importanets) que él no encargó a los jugadores encerrarse para mantener el mínimo resultado favorable. No tengo por qué dudar de su palabra, pese a que como ya he indicado, su perfil de entenador y su historial me hagan sospechar. Lo que sí aprecié es que el equipo se encontraba muy cómodo pese a defender demasiado metido en su campo y de hecho el Atlético no creó apenas peligro hasta que Arbeloa cometió un error que incomprensiblemente no subsanó con la inmediata falta que cortase el ataque del Atlético. Es muy extraño que un jugador con su experiencia cayese en esa equivocación, pero el caso es que ocurrió. Volviendo al asunto, creo que el equipo sí intentó salir a la contra pero bien por imprecisión, bien por falta de efectivos o bien por el acierto de la defensa rival, ninguno cuajó y apenas se traspasó la línea del centro del campo en transición defensa-ataque. Esto creo que se ha tenido poco en consideración en todas las crónicas/análisis/criticas del partido y lo veo importante, pues la imprecisión de los jugadores blancos a fin de cuentas es un factor casi crucial.
Por otra parte, a cuenta del artículo de Ramón (como siempre, impecable), he de decir que a mí me satisface por ahora el orden que se aprecia en el equipo. Aún con cosas que pulir, en mi opinión creo que un equipo conjuntado como el Madrid actual, que casi no concede goles y en el cual se aprecia el trabajo de todo el bloque es una garantía de éxito mucho mayor que un equipo anárquico y casi caótico que supuestamente prioriza la libertad creativa de sus mejores jugadores. Siempre se pone en contraposición la etapa de Ancelotti con el actual Real Madrid, y en realidad los jugadores son prácticamente los mismos y su magia y calidad no tiene por qué estar reñida con la disciplina. (sigo en el siguiente comentario)
Mantener la portería a cero y cerrarle las puertas al rival pienso que facilita mucho el camino al éxito, mucho más que apostar por "marcar un gol más que el rival, cualquiera que sea el número de goles anotados por el mismo". Puede que algunas de las decisiones de Benítez, eso está claro. Por ejemplo la acumulación de hombres que juegan por dentro en determinados momentos (Málaga, Malmö) cuando se tienen jugadores desequilibrantes para aportar otras opciones (Lucas Vázquez, Denis Cheryshev) pese a que los laterales suban mucho y bien. Tampoco me gustan según qué cambios, o incluso la que considero hasta ahora escasa utilización de los dos citados jugadores o el mismo Casemiro, que en algunos partidos, dicho sea de paso, creo que hubiera sido importante para tener un mayor control, como por ejemplo en Bilbao. Al final Benítez es el profesional de esto y sabrá mejor que nadie cómo manejar las situaciones y elegir las mejores opciones, pero con todo lo que se pueda estar en desacuerdo, al final como ya he apuntado y quiero concluir, creo que su orden es mayor garantía de éxito que una apuesta alocada por el ataque caótico. Veremos lo que ocurre en los próximos meses, pero no juzguemos tan pronto a un equipo que tiene buena pinta y en el que varios de sus integrantes más importantes están o bien lesionados o bien lejos de su mejor forma.
Fe de erratas: "Puede que algunas de las decisiones de Benítez, eso está claro." quería decir "Puede ser que no se entiendan o compartan algunas de las decisiones de Benítez, eso está claro"
Muchas gracias Carlos por tu aportación. La misma sí que ha sido impecable.