Todo nos parece una mierda

Cuando no quedan apenas huesos que roer, aves de rapiña y carroñeros varios graznan y aúllan en la sabana a la luz de la luna. Se han quedado con hambre. Sobre el claro reposa un cadáver marchito, un ónix majestuoso, blanco, una imponente pieza oronda y saludable, hoy convertida en raspa de pescado merced a los buitres antimadridistas, mondadientes entre los dientes mediante, con el sólido respaldo de la jauría de madridistas disfrazados, que diría el Dr. Mourinho, supongo, buscando a Livingtone en el Congo.

La cacería ha sido tal que hoy están ahítos y las portadas de los Cuatro Jinetes diarios de nuestro apocalipsis deportivo ofrecen claros e inequívocos síntomas de agotamiento del ingenio, elemento, dicho sea de paso, que siempre brilla, pero por su ausencia, en las gacetas deportivas patrias. Fíjense hasta donde cae hoy el nivel que Ouija Today se ve obligada a recurrir a una canción de Leiva para titular su portada.

Efectivamente su portada nos da Pereza y Todo nos parece una mierda, que diría Astrud. También lo de Ramos y su incontinencia verbal a pie de campo, removido en redes sociales, en Estudio Estadio, en El Chiringuito y en el VI Congreso Mundial sobre el Centollo Ibérico. La broma, nos va a salir cara, Sergio, y en este sentido tenemos tantos antecedentes como el Vaquilla. Aunque del mismo modo suponemos (y lamentamos) que los de la alcachofa, los Woodwad y Bernstein de la zona mixta, que tanto insistieron en pescar el gazapo de Ramos estarán hoy brindando como cava. Efectivamente todo nos parece una mierda. Como habitualmente, a nuestro amigo Croqueto todo le parece un mocordo. Hoy Freddy chapotea ufano en la charca manoseando su nueva palabra favorita. Un sincericidio que pudiera asimismo aplicarse a Álvaro Benito cuyas desafortunadas críticas nominales después del morrazo contra el Barça en la Cadena SER le han costado su cargo como entrenador de la cantera del Madrid.

Insistimos: Todo nos parece una mierda. Incluso la portada de Marca. No por la primera plana, con titular tópico y típico, sino por la propia noticia en sí, que anuncia una final de Copa en la que el antimadridismo salpicará de bilis cada vomitorio del Benito Villamarín. Con la gran paradoja añadida de que, cuando vuelva el Barcelona a llevarse a los más destacados futbolistas del Valencia, los ches darán palmas con las orejas mientas claman al cielo por la macha de Mijatovic. Será entonces cuando Superdeporte incendie el kiosco con otra portada antimadridista. Esas se les dan mucho mejor que el mondongo festivo que se les ha ocurrido hoy. Sí, también nos parece una mierda.

Y es que andamos tan de bajón que ya nos parece una mierda hasta que Vini sea convocado por la Canarinha, se nos canse cuzando tanto el charco y acabe seducido por alguna garota o alguna timba salvaje de los Neymar Junior y Ronaldinhos de turno.

La prensa catalana no hace sino moldear nuestro chorongo, como Patrick Swayze a la espalda de Demi Moore en Ghost, exponiendo una serie de datos objetivos que demuestran una dolorosa y lamentable tendencia estadística de resultados en el Bernabéu ante los culés. Una década prodigiosa para ellos que, sin embargo, olvida un quinquenio blanco dorado en Copa de Europa, de la que Messi y sus amics son cuartofinalistas habituales.

Es igual. Van a por el triplete proclama Sport. Y el primer problema de la bicha es mentarla que luego viene un griego y acaba haciéndote una Manolas.

Y es que volvemos a lo mismo: Todo nos parece una mierda. Pero no sólo hoy. Hace unas semanas el Instant Replay de la Copa del Rey de baloncesto también nos pareció un buen chorizo. Pues hoy volvemos a vernos con al Barsalassa en una cancha de baloncesto. En el Palau para más inri y en un presunto homenaje a la Bomba Navarro, jugador de baloncesto a tiempo completo y dramaturgo en sus ratos libres.

Sea. La rueda sigue.

¡Porque hoy todo nos parezca una mierda y en junio alcemos al cielo copas de Europa y Euroligas!

Feliz fin de semana, amigos galernautas.