Neymar: TIC TAC TIC TAC...

Buenos días. Neymar y Hazard son los dos grandes protagonistas del portadismo de hoy. El primero por la decepción que produce en la prensa cataculé su presunto e inminente fichaje (“tic tac tic tac”, ha dicho Pedrerol) por el Real Madrid; el segundo, por el prodigioso gol logrado ante el Salzburgo luciendo además una figura más estilizada que la que nos había preocupado a todos en los primeros compases de la pretemporada.

Neymar lleva todo el verano saltando de un rumor a otro. El carioca arrastra una penosa canícula, perpetuamente a lomos de un rumor de puente aéreo que lo mismo le sitúa de vuelta en Can Barça que (ahora con más fuerza) en nuestro querido Real Madrid. En Sport se nota muchísimo si el rumor es de un tipo o del tipo contrario. Sí el rumor, que ellos por supuesto presentan como noticia contrastada, da con los huesos de Jr. en Barcelona, se sacan de archivo fotos triunfantes de Ney: su Champions, sus veladas felices con sus compañeros de Mercosur, su descomunal actuación en el aytekinazo.

Si por el contrario se intuye que Ney va para Madrid, se llevan a portadas las fotos más lamentables y que denoten más desidia por parte del futbolista. La de hoy sirve de ejemplo irrefutable: la sensación que proyecta es que Neymar se acaba de despertar de una siesta etílica, se ha calzado una gorra sobre la testa sin peinar y se ha encaminado a la nevera para comerse una rodaja de chorizo mañanero mientras se rasca los huevos. Porque al ser un primer plano no se ve, pero nadie puede discutir que fuera de plano, en esa instantánea, la mano derecha de Neymar (con la izquierda se mesa una incipiente papada) ha bajado hasta la altura del propio escroto, que rasca esforzadamente como paradigma de la indolencia que lo anima. Va a fichar por el Madrid (o eso dice Pedrerol. tic tac tic tac) y por tanto hay que presentarlo como un vago, un juerguista y un atorrante que está de vuelta de todo.

El Barça tiene en todo caso, haga lo que haga Neymar, el problema de Coutinho, a quien desea dar pasaporte a una Premier que por desgracia ya echa el cierre al mercado. Observad cómo la foto que ilustra, en un recuadro inferior, el hipotético arribo de Neymar en el Bernabéu es casi idéntica a la de Sport, con la gorra y el racarraca escrotal fuera de plano, y es que a su gemelo de la Ciudad Condal le pasa tres cuartos de lo mismo: vende una imagen triunfante de Neymar cuando cobra fuerza el rumor deseado, y otra que le corona como epítome del indeseable cuando predomina el rumor contrario, tan temido.

Como decíamos, el otro protagonista de la mañana es sin duda Hazard, que ayer jugó buenos minutos en el amistoso ante el Salzburgo. Red Bull le dio alas y el belga las empleó a fondo para plantarse en las inmediaciones del área rival (tras maravilloso contragolpe urdido en un saque muy inteligente de Courtois y continuado por un gran pase en profundidad de Karim) y buscar sitio para el disparo en brillante maniobra con letal estocada final.

Eden tuvo otra, también a pase de Karim, con quien se entiende a las mil maravillas, lo que constituye hasta el momento, tal vez, la mejor noticia de la pretemporada. Esa no la metió. En noviembre, con la forma ya cogida del todo, no fallará en una similar. En todo caso, podéis leer la crónica del partido a cargo de Quillo Barrios.

Ilusión por tanto con Hazard. Y, por lo demás, pues eso: que TIC TAC TIC TAC TIC TAC...

Pasad un gran día.