Buenos días. Como titula hoy en portada el diario francés L'Equipe, la tierra ha dejado de girar con el anuncio de la retirada de Rafa Nadal.
José Luis Llorente Gento, conmovido por una noticia no por esperada menos triste, escribía ayer esto en estas vuestras páginas.
Hay pocos personajes, tampoco deportistas, que conciten la admiración ilimitada y el acuerdo sobre sus virtudes. Cuando alguno de ellos deja de ser lo que fue, una parte de nuestro corazón se congela y el frío de la nostalgia paraliza nuestros deseos. No queremos admitir que lo que tanto fue no volverá a ser.
El que ha dicho adiós hace unas horas sobresalió en seguida por una presencia de contrastes: un huracán en la pista, un chico prudente y educado, casi tímido, en sus apariciones públicas. Con el paso del tiempo su temperamento se fue templando, más certero con la raqueta, más comunicativo con los micrófonos. Fue entrando en nuestros hogares con sus victorias, algunas apabullantes; otras, tras remontadas imprevisibles, tras levantarse de la arena cuando nadie confiaba en él.
Tanto lo repitió, como si quisiera escribir una carrera paralela a la de su querido Real Madrid, que llegamos a creernos que era imbatible. Y quizás lo hubiera sido, de no ser por un físico de privilegio con demasiados talones de Aquiles que lo han atormentado desde el inicio hasta hoy mismo. Con la sobriedad de un monje, creyente firme en la fe del Deporte —así, con mayúsculas—, sobrellevó sus carencias, sus limitaciones, para afinar su tenis: “el dolor me doblegará, pero le haré sufrir hasta que lo haga”.
Prosigue Llorente:
Éste (hacer sufrir al dolor) podría haber sido el lema de un deportista doliente, que ha llegado a ser una leyenda jugando medias temporadas, porque su cuerpo no le permitía más. Un destino cruel para el resto de los mortales, un acicate en una mente privilegiada, a la que habría que analizar a su muerte, como se hizo con la de Einstein, si es que eso nos hubiere llevado a algún lugar.
Con la sobriedad de un monje, creyente firme en la fe del Deporte —así, con mayúsculas—, sobrellevó sus carencias, sus limitaciones, para afinar su tenis: “el dolor me doblegará, pero le haré sufrir hasta que lo haga”
Cincelado por un tío implacable, poseedor de la sabiduría popular más sabia, de un sentidocomún excepcional, los españoles le vemos como un héroe más que como a un tenista , a pesar del infortunio del último par de temporadas. O quizás aún más por esto, al menos en mi opinión humilde, porque no ha dejado de batallar en busca de ser quien fue hasta el último suspiro.
Vayan estas palabras para honrar a un muchacho volcánico, a un hombre recto, con los pies en el suelo, respetuoso con los rivales y su juego. Vayan estas palabras para honrar a un madridista legendario. Vayan estas palabras para honrar a Rafael Nadal.
Por su parte, nuestro editor Jesús Bengoechea decía lo siguiente en El ESpañol:
La Galerna trabaja por la higiene del foro de comentarios, pero no se hace responsable de los mismos
8 comentarios en: Nadal: la carne se hizo verbo
Buenos días, es incomprensible lo de ayer de El Confidencial, porque puedes ser anti madridista, pero lo que no puedes ser un periodista sin nobleza ninguna, es inadmisible publicar una noticia de ese calado y no tenerla contrastada, más miserable no se puede ser
El vídeo de despedida de Rafa está a la altura de su nivel personal. Magnífico.
Espero que siga disfrutando de la vida ahora con más tiempo para dedicar a su familia y amigos.
Su vínculo con el Real Madrid va estar de por vida.
* ...va a estar de por vida.
Recordando, para que no se olvide nunca. El Farçalona, el "mes que un club", ha pagado durante décadas al vicepresidente del CTA, Enriquez Negreira, para "conseguir neutralidad".
Ni un día sin pan en casa, ni delito o fraude del FARÇA. (R. Ramos Neira, dixit
En un vuelo de Iberia allá por octubre del 2011, era viernes, creo recordar ( puente aéreo Madrid - Varzelona ). Embarcando apresuradamente, me encontré a Don Rafael Nadal ya sentado en las primeras filas, ( iba a disputar una exhibición en el palahu vlahugrana y recaudar fondos para Andrés Gimeno ) y juro que le dije: " Ustez y el Real Madrid, son los mejores embajadores de España ante el mundo ". Sonrió y me dijo " muchas gracias ". Para mí, fue un día inolvidable y así lo cuento.
Un deportista y persona, a la altura del Real Madrid.
No me explico por qué no me han publicado mi anterior comentario. No era ofensivo y sí una vivencia/anécdota. Una lástima.
Ojalá vean mis ojos a don Rafael Nadal Parera ocupar el sillón delante presidencia del Real Madrid sustituyendo a don Florentino Pérez. Amén y así sea.
Lo sueño desde hace unos años.
el sillón de la presidencia... Fíate de la IA y no corras, quicir, no revises.