En todos los deportes se establecen continuamente listas de los más destacados de la historia, y el fútbol, obviamente, no constituye una excepción. Desde que tengo uso de razón se estableció como dogma de fe que el póker de ases comenzaba por Alfredo Di Stefano, y seguía por Pelé y Johan Cruyff hasta terminar en el más reciente, Diego Maradona. Desde la retirada de “El Pelusa” los expertos han estado rastreando los terrenos de juego en busca del quinto grande, y ahora ya nadie parece dudar que lo han encontrado. Efectivamente, Leo Messi, el pequeño delantero de Rosario, pertenece por derecho propio a la super élite del balompié mundial histórico y se encuentra a la par, si no ha superado ya, a sus colegas de otras épocas. Debido a mi edad no puedo comparar a Messi con los tres primeros de la lista, pero sí con Maradona, y no me duelen prendas: creo que el actual líder del Barcelona es mejor jugador a pesar de toda la grandeza que acompañó a Diego. No obstante, existe una diferencia abismal entre Messi y los demás; el entorno que lo acompaña, una cohorte universal de palmeros irredentos que no dudan en tildar de ignorante y obtuso contumaz a todo aquel que ose discutir, siquiera mínimamente, su reinado en los campos de fútbol. La mejor muestra un botón: aquellas declaraciones de Xavi Hernández, cuando afirmó que Messi no es que fuera el mejor, sino que aquel que no lo pensara o bien era un madridista cegado o simplemente no le gustaba el fútbol.
Y en estas estamos. Los adalides de los valors han convertido a un jugador genial en un arma arrojadiza contra los herejes. Y me refiero, por supuesto, a la mayoría de los medios de comunicación, creadores de opinión, portadores del Santo Grial balompédico, los cuales no dudan en cantar las alabanzas del argentino en cualquier circunstancia imaginable, no importa que haya sido condenado por defraudar a la Hacienda Pública o que no sea ningún modelo de comportamiento en el campo en situaciones no muy habituales, pero sí muy significativas, la última de ellas acontecida en el último derbi y su celebración del gol decisivo. Por supuesto que los periodistas, maestros en la aplicación del doble rasero, habrían crujido sin miramientos a la gran némesis del argentino, Cristiano Ronaldo, si se hubiera atrevido a hacer eso en el Camp Nou Camp, mientras que al culé le amonestaron con una palmadita en la espalda. En mi opinión ninguna persona ajena al entorno familiar de un niño debería convertirse en un modelo a seguir, pero en este país y en el proceso de creación de su icono perfecto se ha establecido una linea imaginaria entre el bien encarnado por Messi y el mal encarnado por el diablo portugués.
Los adalides de los valors han convertido a un jugador genial en un arma arrojadiza contra los herejes.
Leo Messi es seguramente la principal causa de que el Real Madrid haya ganado relativamente pocos trofeos desde que su figura surgió allá por la mitad de la década anterior, y este parece un hecho incuestionable, más allá del modelo, los valors, la Masía, la cantera, el director deportivo y toda la colección de mantras que conocemos de memoria. Lo ha ganado todo en Barcelona y ha convivido con una generación de enormes jugadores que le han hecho mejor, o a la que ha hecho mejor, vaya usted a saber. El Real Madrid ha sabido capear el temporal y salir adelante con bastante solvencia a pesar del huracán Messi, por otra parte echando mano de sus señas de identidad: una competitividad extrema y el no rendirse nunca a pesar de las adversidades.
Mi opinión personal es que Messi es un excepcional jugador. Cuando se retire se habrá convertido en el mejor de la historia, y sin embargo me transmite en el campo lo mismo que un frigorífico de segunda mano en un mercadillo. Claro, pero quién soy yo para discutir el veredicto de la prensa patria cuando lo eleva a los altares, tapa sus defectos y enaltece sus virtudes. Pues simplemente, como diría el señor del céspet, un ignorante. Lamentablemente, como cité con anterioridad, el mensaje de los medios cala incluso en los madridistas. Pobre de mí, que un día me atreví a decir que prefería a CR7 para el Real Madrid delante de unos compañeros de filiación futbolera a pesar de que Messi me parecía mejor jugador. Justo después del clásico recibí un mensaje de uno de ellos casi restregándome que el argentino era el mejor y yo seguía siendo un radical mourinhista. Me dolió por el momento más que por otra cosa. Y es que, queramos o no, la quinta columna del piperismo se ha establecido en la masa blanca y no tiene visos de que vaya a emigrar pronto a otros lares. A pesar de todo, señor Messi, me descubro ante su fútbol, pero única y exclusivamente ante eso. Ayer se conoció la incalificable condonación de su sanción por parte de la FIFA, que no hace sino abundar en el caldo de cultivo de veneración incondicional e impunidad en que se mueve.
De todas las comparaciones que se hacen con el argentino (grandísimo jugador, sin duda), la que me más me molesta es la de considerarle como Dios. Esas ridículas camisetas con el D10S a la espalda, sobre todo porque en los 10 Mandamientos que nos enseñaron en el cole estaban entre otros: no tomarás el nombre de Dios en vano, no dirás falsos testimonios ni mentirás, no codiciarás los bienes ajenos y por supuesto, NO ROBARÁS.
Estoy de acuerdo en que Messi es un magnífico jugador de fútbol pero, en lo de que haya superado a Diego Armando Maradona, discrepo absolutamente. Maradona fue capaz de hacer campeón a un equipito como el Nápoles y a otro como la selección nacional argentina. Messi, ha sido campeón con un barça plagado de estrellas y ha sido incapaz de ganar nada con una selección gaucha con mejores jugadores que aquélla que fue campeona del mundo.
¿La diferencia? Probablemente, la protección arbitral que ha tenido y tiene en España y Europa y de la que no disfruta en Sudamérica y en los campeonatos del mundo. Si no fuera así, con Argentina, habría ganado algún título. Esa protección arbitral que impide que se le marque con la "intensidad" que le marcan cuando juega con la selección y le permite disputar los partidos contra conjuntos disminuidos en número -muy frecuentemente- castigados con penas máximas -más frecuentemente, aún- y limitados emocionalmente al saber el riesgo que corren si le pasan muy cerca en las entradas y en las disputas del balón. Lo que, vulgarmente, conocemos como "jugar con red".
En otro artículo he dado mi opinión sobre estas listas , me parecen pueriles y sin ningún sentido porque no se tiene en cuenta que el fútbol, como casi todo en la vida, evoluciona continuamente y en cada época la preparación, la táctica, los arbitrajes, los terrenos, el reglamento etc,.no son iguales con lo que se compara peras con manzanas. En el caso concreto que cita Messi vs Maradona me gustaría ver al primero con los arbitrajes que sufrió Diego en su época , como ejemplo el Mundial 82.
Estoy de acuerdo con Barnaby, aparte de eso ahí entra el gusto de cada uno, esto no se puede medir de un modo infalible. También que en que en mi opinión Maradona fue mejor, sobre todo en la cuestión de liderazgo y cómo se movía por el campo. Y por supuesto en el fondo del artículo, el fanatismo y falta de tolerancia en quienes osan tener una opinión distinta sobre Messi.
Sobre gustos no hay nada escrito y como no es una ciencia a cada cual se nos debe permitir tener el nuestro, aunque ya sabemos que en este país si no eres de Dios (así llaman a Messi) eres un hereje.
No le voy a comparar con Cristiano pero sí con Maradona. Jugador que transmitía mucho más que Messi. Me gustaría haber visto a Messi fuera del Barça y de la protección el entorno en el que se ha movido, dominado, mandado, en España.
Sobre la genialidad de Messi nunca tendré sospechas pero sí sobre su rendimiento. Sospechas de todo de tipo, desde la protección arbitral, la mediática y la científica.
He oído cosas sobre el argentino, de gente que me ofrece toda la confianza, y como persona no sale nada bien parado. Quizá tengan la culpa los medios patrios (chupa medias de Messi como los llaman muchos argentinos) y su club, el Barça, que le han hecho creerse que es el pequeño dictador con plenos poderes en el Barça y en la liga española. Pero ese entorno no sólo le sirve para creerse dios sino para que el resto de la sociedad española también lo crea y se le justifique todo sin que él tenga que molestarse en demostrar con sus actos que merece ese trato personal y profesional de la sociedad española.
Hasta dónde llega su soberbia, sí, al que nos venden como humilde, que no sólo muestra su camiseta al madridismo para que veamos quién es el humilde Dios, sino que ni se ha molestado en declarar ante la FIFA para que le quiten la sanción con Argentina por supuestamente acordarse de la madre del árbitro, y digo supuestamente porque la FIFA ahora no tiene constancia cierta de que se dirigiera al del silbato, de ahí que de un plumazo le quitaran toda la sanción.
Aquí os cuelgo este vídeo, por si alguno no lo ha visto, de un periodista argentino al que está claro que no le pueden los colores de la albiceleste para excusarle todo a Messi:
"Liberman liquida a la FIFA luego de levantar la sanción a Messi "Hoy Argentina estafó al mundo"
https://twitter.com/Rayhunter_bg/status/860643098552143872
Saludos
Estoy muy de acuerdo con la opinión de muchos de vosotros.Desde luego en Argentina lo tienen claro,Maradona superior a Messi.Con los arbitrajes y marcajes de los 80,Messi habría ganado ,cómo mucho,la mitad de trofeos de los que tiene ahora.A Messi nunca le ha lesionado nadie,a Maradona varias veces,os acordáis de Goico?.A Messi está prohibido entrarle fuerte,es tarjeta automática, està sobre protegido, como en su día ordenó PlatinI, está en las hemerotecas.Y de la selección ni hablamos.
¡¡¿¿El mejor de la historia del fútbol??!! Vamos, no jodas. Ni en sueños.
Si no fuera por el dietista y sus pociones mágicas no sería nada ni hubiera llegado a la élite.
Messi no está en el grupo de los Grandes porque le falta Grandeza, y eso es algo que ellos tenian además del talento de supermontruos.
Messi es muy talentoso, pero no mas, no hay fuego sagrado en el, y eso es algo que distinguia a esos 4 Grandes, su fortaleza animica, su caracter y personalidad indesmayable e ireprimible dentro del campo, su liderazgo para echarse un equipo al hombro y sacar lo mejor de su futbol cuando las cosas se ponnian dificiles; identifica alguien todas esas caracteristicas de Grande en Messi? NO, entonces como puede haber alguien que vió a Maradona y a Messi y poner a Messi por delante? que criterio esta usando para llegar a esa conclusión?
Ni en la Argentina consideran a Messi superior a Maradona; que cosa grande ha hecho Messi como para decir semejante cosa? que, ganar ligas en el Barcelona con 0 penaltis en contra en años es mérito a la par de lo que hizo Maradona?
No pasa nada con Messi; muy talentoso pero le falta Grandeza.
Maradona era talento pero tenia sangre en el cuerpo, mientras Messi es un chasco si lo marcas a presión y sin la sobreprotección arbitral.
No se con que criterio se le podria poner a Messi por delante de Maradona? ni en la Argentina consideran a Messi superior a Maradona.
Liderazgo, caracter, personalidad, casta, son aspectos indispensables en un Grande del futbol; porque si todo fuera talento cualquier talentoso podria ser el mejor de la historia si le pones todo servido y facil como lo ha tenido todo Messi en Europa sobre todo.
No, Messi no está entre los Grandes, no da la talla; eso si, en un ranking de los mas talentosos hasta lo pondria en 1er lugar.
Nunca he visto que se marcará al hombre a Messi. Nadie se a atrevido no sé por qué. Recuerdo los marcajes a Maradona de Gentile, a Cruyff de Camacho incluso a Guti por parte de aleti de forma rotativa según se Ivan sacando tarjeta al marcador le ponían otro. A Messi nunca.
Recuerdo sólo una entrada semi dura a Messi, la del atletico Ufalusi (no sé cómo se escribe) y se fue a la calle inmediatamente.
Recuerdo la cadencia de pedaleo de Armstrong en el tour, mucho más alta que la del resto de ciclistas, nunca vista hasta ese momento, nunca dio positivo por doparse. Veo la cadencia de la carrera de Messi, veo sus vómitos inexplicables, veo sus extrañas consultas a médicos extraños fuera de las concentraciones y pienso....
Por cierto Maradona dio positivo por cocaína y sigue siendo Dios para muchos.
Un ídolo del fútbol o de lo que sea no sólo ha de ser honrado si no parecerlo.
Yo nunca he querido a Messi en el Madrid, nunca.
Hay de Messi ¡¡ si no hubiera jugado en el farsalona ¡¡ no sería ni la mitad de lo que es ¡ además habría sentido en sus piernas lo que es una patada ( unas veces más fuerte , otras menos ) cosa que no siente nunca jugando en el equipo que organiza campeonatos
Don Amalio Campa, en realidad lo tiene usted muy fácil con el "amigo" ese suyo tan "madridista" que tuvo a bien recordarle sus dudas sobre Messi después del clásico. Recuérdele las prestaciones de Messi en los dos partidos contra el PSG y en los dos partidos contra la Juventus. ¿No era el dios (con minúsculas) que resolvía todos los entuertos?. Recuérdele también el rendimiento de Cristiano Ronaldo contra Bayern y Atlético en similares circunstancias.
Seguro que da igual ¡ un Pipero no ve más allá del as , el marca ,o los Manolos ¡
Un saludo
Interesante artículo en este medio madridista. Yo también soy de los que piensan que las listas ordenadas de mejores futbolistas de la historia son algo absurdo, más hecho para quien necesita etiquetarlo todo y razones para entrar en discusiones sin fin, que algo que realmente tenga valor. No vi jugar a Di Stefano, ni a Pelé, Cruyff ni tampoco a Maradona, pues era demasiado pequeño en sus últimos años. En lo que yo he podido vivir, sin duda Messi está por encima de todo lo demás, de igual manera que Cristiano Ronaldo también es una figura única y que sería injusto dejar fuera de esa superélite. Messi es probablemente el jugador que tiene más armas y más precisas para sacar petróleo de la nada y así ganar partidos. Eso no quiere decir que siempre merezca ser considerado el mejor de la temporada, como sus paladines siempre pregonan. Pero sobre Messi siempre quedará la duda de qué hubiese hecho en otro equipo, en otras condiciones, con otros rivales y con otros compañeros. Probablemente se retire en el Barcelona y también probablemente no gane ningún título con su selección, con lo cual, de ser así, tendremos una duda de hasta dónde realmente era capaz de llegar. Pero sin duda Messi es un talento sin igual y hay que alegrarse de que el Madrid haya salido tan bien parado de esta época de fortuna inmensa culé en la que han podido disfrutar de él (porque el Madrid lo está haciendo bien, por mucho que ladren).