Arbitró Juan Martínez Munuera del Comité valenciano. En el VAR estuvo González González.
Bastante buen arbitraje del colegiado de Benidorm, que controló la situación en todo momento. Y fue un choque intenso y con situaciones de tensión típicas de un clásico.
Si acaso alguna falta que no pitó sobre Vinicius y el añadido que debió ser más amplio en lugar de tres minutos.
El duelo comenzó con el Barcelona protestando un penalti de Alaba por mano, pero el austriaco la tenía apoyada en el suelo. En el capítulo de amarillas, en el primer acto la vieron Sergi Roberto en el 9', Xavi por protestar en el 15' y Gavi y Vinicius por un pique en el 25'. El jugador del Barça debió verla antes en alguna de sus tres faltas previas. Además, se chequeó el 0-1 madridista pero no había fuera de juego.
La segunda mitad fue un festival de tarjetas, la mayoría justas, lo que señala el papel destacado de Munuera. La única que se quedó en el tintero fue a Kessie por su claro penalti sobre Vinicius en el 56'. La lista de amonestados la iniciaron Eric en el 66' y Carvajal en el 70', la continuaron Ferran en el 75' y Araujo en el 84' por acciones ante Vinicius, y la cerraron Alaba y Balde en el 85' por empujón mutuo, Militao por una dura entrada a Ansu por detrás en el 87' y el propio Ansu por agarrar a Asensio en el 91'.
Martínez Munuera, NOTABLE.
Getty Images.
Buenas tardes no puedo estar de acuerdo con su consideración de buen arbitraje de Martínez Munuera, si bien en la áreas estuvo bien, por no decir muy bien, en el aspecto disciplinario siguió la tónica general de la temporada, nuestros chicos reciben las patadas y las tarjetas, hubo un momento en la primera parte que la estadística decía Madrid 2 faltas- La Orga 11 faltas, vamos que nos estaban parando a base de leña, pero en las cartulinas ibamos empatados, que con lo que repartieron Gavi y Araujo que no fueran expulsados no se entiende, o desgraciadamente se entiende demasiado bien
Minuto 25, la tarjeta habitual a Vinicius.
Pero no pudieron esta vez.
Nos conformamos con muy poco. Al menos no nos robó. Pero tampoco podemos decir más.
Abrazos madridistas