Ayer tarde nos invitó Jesús Bengoechea a acompañarlo en la presentación de Madridismo y sintaxis (editorial Córner), el libro que recoge una selección de sus mejores artículos en La Galerna. El acto tuvo lugar en la Casa del Libro de Gran Vía, un emplazamiento venerable en la calle por excelencia de los estrenos en Madrid y, en este caso, del Madrid. Además de la familia del autor, la sanguínea y la galernauta, dieron brillo al evento personas como Luis Alberto de Cuenca, Paco Gento, José Luis Llorente Gento, Athos Dumas, Ramón Álvarez de Mon, Jorge Escohotado y Pepe, Gonzalo e Íñigo de Carlos, entre otros.
Bengoechea sabe rodearse de las personas adecuadas y ayer no fue una excepción. Decidió acompañarse en la presentación de su libro —además de por sí mismo— de Andrés Amorós, un sabio, Noelia González, una excelente periodista, y Borja Sémper, un político, decisión esta última que muchos calificarán de kamikaze. Sabiduría y riesgo, valdanismo y mourinhismo, madridismo y sintaxis. No se sabe muy bien cómo lo hace, pero sería capaz de mezclar agua y aceite de manera homogénea. Jesús es así. No lo digo yo, sino Jorge Valdano, autor del prólogo:
Jesús Bengoechea es un caso único: entre tanta gente que se siente dueña del sentimiento madridista, él aglutina, concilia lo diverso, acerca los extremos, lucha por hacer del Madrid un lugar de encuentro. Lejos de los odiadores que, de tan puros que son defendiendo al Real Madrid, lo pervierten.
Noelia comenzó la gala recordando las vicisitudes que pasó en la previa de Real Madrid Televisión de la final de Cardiff junto a Jesús, quien delante de su mujer e hijos confesó que aquel 3 de junio de 2017 fue el día más feliz de su vida. De nuevo un kamikaze.
Andrés Amorós reconoció que le gusta La Galerna —afirmación en sí misma suficiente para amortizar el acto— porque está bastante lejos de los medios deportivos convencionales y porque otorga al fútbol la trascendencia que debe tener y lo une con otras cosas buenas de la vida como la música y el cine. El tercer motivo aducido por Andrés es que su amistad con La Galerna evita el desprecio de sus nietos. El humor, otra seña de identidad de esta publicación.
El propio Amorós recordó una anécdota de Somerset Maugham, a quien le encargaron una conferencia sobre las ventajas de la vejez. El británico comenzó la misma y se calló. Cuando se preocuparon por si le sucedía algo respondió que no le pasaba nada, simplemente que no se le ocurría ninguna ventaja. Sin embargo a Andrés se le ocurrió una: haber visto debutar a don Alfredo di Stéfano.
La ventaja de su longevidad y bagaje la disfrutamos todos cuando fue desmontando con datos los múltiples falsos mitos que estigmatizan al madridismo, como su filiación con el régimen de Franco, cuando precisamente fue el Barça quien condecoró de manera reiterada al dictador. En el pasado reciente (¿y en el presente?) a falta de dictador se han dedicado a comprar el estamento arbitral vía Enríquez Negreira.
Otra creencia absurda característica de los necios es aquella que sitúa al fútbol y a la cultura en polos opuestos. El foro de ayer aportó su granito de arena para echarla por tierra.
Borja Sémper comenzó haciendo gala de humor y deportividad, reconociendo que no sería difícil superar su reciente intervención en el Congreso.
El testimonio de Borja Sémper desmintió otro mito, el de que lo fácil es ser madridista. El irundarra recordó cómo fue apedreado en su colegio del País Vasco por vestir una camiseta del Real Madrid. Otro que provocaba, como Vinícius. Cuando su madre fue a hablar con la directora de la escuela, como toda solución, le pidió que no la llevara más para evitar problemas. La madre de Borja le obligó a acudir al día siguiente con la camiseta.
A pesar de que objetivo principal de todos los presentes era tomarse el vino posterior a la presentación, y a una duración del acto similar a un partido de fútbol con prolongación cuando va perdiendo el Barcelona, disfrutamos de una charla deliciosa que no se hizo larga y nos regaló datos, anécdotas y chascarrillos maravillosos que mi horrenda memoria es incapaz de recordar. No todos hemos nacido con la capacidad del maestro Amorós.
También se habló del libro, por supuesto, desde el mismo umbral de la presentación. La selección de artículos que lo componen la ha efectuado el propio autor, a quien deberán pedir responsabilidades. Están divididos en cuatro partes: Héroes, El Gran Fraude (ya imaginan cuál), In Memoriam y Madridismo geográfico.
Todos los artículos, publicados en La Galerna, esta criatura madridista que para nosotros es la regla y sin embargo no pocos ven como la excepción (buena) de los medios que escriben sobre el Real Madrid, que no deja de ser como hacerlo sobre la vida, ya que, a pesar de no ser más que un club, ni pretenderlo, esta bendita entidad atraviesa nuestra existencia y deposita algunos de los mejores recuerdos que albergamos entroncándolos con las personas, lugares y momentos que amamos. Para muchos, el Real Madrid es nuestro reducto de irracionalidad.
Fotografías: Sr. Paquito
Siempre es placer la lectura de la Galerna
Reacción tan acertada como admirable la de la madre de Borja Sémper, motivando a su hijo a regresar al colegio con la zamarra blanca. Anda que la directora de la escuela... se "lució".
Si me hubieran preguntado , hace años, cómo hubiera querido que fuera un medio de comunicación madridista , me imagino que hubiera podido decir que como es la Galerna. Un oasis en medio del desierto.
Otra virtud, a la par que mérito, de esta publicación digital es haber mantenido la llama de la pasión en muchos madridistas pese a toda la corrupción que asola el fútbol patrio.
“Si me hubieran preguntado , hace años, cómo hubiera querido que fuera un medio de comunicación madridista , me imagino que hubiera podido decir que como es la Galerna.”
Supera con creces mis sueños. Sólo les falta hacer el minuto a minuto de los partidos de nuestro Real para no tener que entrar en otros sitios.