Hay un madridismo que sigue el camino que indica el antimadridismo
No estamos en disposición de exigirnos gran cosa. Estamos mayormente a merced de la pandemia que ha cambiado nuestro mundo. Nuestros actos y nuestras decisiones están supeditadas a lo que acontezca, a la dirección que coja el viento cambiante e incesante de un virus matador. No podemos exigirnos nada. Y no podemos exigírselo a los demás más allá de los gobiernos (y ya ven cómo nos va) en la gestión del mal.
El Real Madrid no gestiona ningún mal. El Madrid es uno de los nuestros, como usted y yo, al que no cabe exigirle nada. No aquí y ahora. No al menos como antes. Pero para el madridista omaíta el objeto de su afición está libre de contagio. Todo parece estar igual que antes del desastre. El Madrid es inmune para el madridista omaíta, y por lo tanto cabe exigirle como siempre, mal y pronto. Pero ahora es mucho peor y mucho más temprano.
La imposibilidad de los fichajes o la decisión coherente, admirable, de no realizarlos ha traído consecuencias, como tenía que traerlas, en una encrucijada cíclica reventada por la crisis. El Real Madrid está cruzando con dificultades (relativas: acaba de ganar ¡el título de Liga!) su puente colgante, un puente en mal estado por las inclemencias, por la carestía, por la escasez; y el madridista omaíta lo que hace es movérselo empujado, jaleado, influido por el antimadridismo mediático que lo único que quiere es que caiga al vacío.
Quién no cerró los ojos después de ver a Marcelo, al gran Marcelo, dejar libre de marca al jugador del Shakhtar en ese contraataque.
El madridista omaíta sigue el mismo camino que el antimadridista. Dijo Leonard Cohen que “A veces uno sabe de qué lado estar simplemente viendo quienes están del otro lado”. Este Madrid pandémico soliviantado por el intento revolucionario de siempre. "Muerta la belleza, retorna el negro caos", escribió Shakespeare. Alguien grita, por ejemplo As (cuyo afán esencial es quitarnos la belleza), que ya se empieza a hablar del sustituto de Zidane, y el madridista omaíta le sigue la corriente. El madridista omaíta es el instrumento del que se sirve el antimadridista. El palo, el cuchillo, la antorcha.
El madridista omaíta se hace eco del golpe, de la herida, del incendio y lo propaga. Acaban de empezar las competiciones y el madridista omaíta ni siquiera muestra piedad (la última de las cosas que quizá se le debería pedir a un aficionado) por este Madrid pandémico. La empatía del madridista omaíta (y también pandémico) es nula. Al madridista omaíta le dirige As, el caos (por mucho que luego le vilipendie en público), y es probable que no lo sepa.
Lleva tantos años, ¡toda la vida!, escuchando la misma tabarra que su naturaleza la ha asimilado. El Madrid no puede cambiar nada en este momento. No solo por imposibilidad real. Todo está cambiando tanto que no queda más remedio que aguantar con lo que se tiene. Casi es sólo la sensatez, no sólo la belleza, que pretenden arrebatarnos. ¡Una gestión modélica y previsora a largo plazo! Quién no cerró los ojos después de ver a Marcelo, al gran Marcelo, dejar libre de marca al jugador del Shakhtar en ese contraataque. Quién no sintió la vida pasar como un rayo en esa carrera de cigarra y de tortuga.
Para el madridista omaíta aquello no fue dolor sino primero escándalo. Y el escándalo hace olvidar el dolor, que es como un madridismo roto, pero al fin y al cabo un madridismo. El omaíta se pone a gritar, histérico, incapaz de controlarse, mientras el antimadridista ríe. El pueblo romano soliviantado por el taimado Marco Antonio, que hace Brutos a los Césares engordando, por ejemplo (¡mientras le dice al madridista que llore!), una buena jugada de Reguilón. Yo no voy a decir aquí que Marcelo no debe jugar por mucho que me pueda parecer que no debe jugar. Eso lo debe decir Zidane, la pieza verdaderamente codiciada (y por tanto la más valiosa para el Real Madrid) por los malvados entre todo este tumulto. Yo sufro a Marcelo en silencio porque no puedo contribuir a ese alboroto desatado de jauría humana.
Yo estoy con este Madrid de Zidane bajo la tormenta que un día (¿por qué no mañana?) pasará. ¿Pochettino (y no tengo nada en contra del entrenador argentino) va a salvar ahora a este Madrid? ¿De verdad? ¿Ahora? ¿Justo ahora? Ese milagro ya sucedió una vez con el Madrid postBenítez. Y el milagro lo hizo Zidane, precisamente, en otros tiempos mejores. Yo escucho las propuestas enloquecidas de los antimadridistas recalcitrantes secundadas por los omaítas y veo arreciar la tormenta. Todos los Meanas y los Palomares de la vida riendo bajo la lluvia como la bruja de Willow a punto de acabar con la niña.
Eso es lo que veo mientras el madridista omaíta se tira de los pelos y su escandalera se extiende por todos los confines de la Tierra en este ocaso de octubre que es como un septiembre antiguo al que se le ha perdido el respeto como si ni siquiera el tiempo, como el Madrid, se sucediese.
Fotografías Getty Images.
Pues nada Mario, como al Madrid este año no se le puede exigir nada para qué vamos a seguir leyendo. Espero que los jugadores que vayan a defender nuestra camiseta este sábado no piensen igual.
De no exigirle nada a pasarse todos los días viniendo por aquí (parece que no tenga nada mejor que hacer) criticando que no se hagan fichajes mientras que se escamotea el dato de que los dos equipos del meacolonias más el PSG solo pueden exhibir como palmares ser finalistas un solo año (uno de ellos. Curiosamente, el que no ha fichado al meacolonias), tras haberse gastado entre los tres más de 2.000 millones de euros, pues creo que existe un término medio
O como decía aquel, "ni calvo, ni tres pelucas"
Por cierto, no es necesario que salte usted como un resorte, pero viendo las ansias por contestar creo que se le podría aplicar eso de "el que se pica, ajos come"
Como no has entendido nada, tampoco voy a explicártelo. Suerte.
Culetufo detected and confirmed.
Yo creo que eres tú el que no ha entendido. Decir que criticar al madridismo "omaíta" (siempre histérico, siempre cabreado) es lo mismo que no tener exigencia con el equipo es una falacia de primer orden. Es como pensar que allí donde no hay pena de muerte se está a favor de que se comentan delitos.
El madridismo oficialista salchichonero también hace trampas, no nos engañemos. Se defiende que los fichajes no son necesarios porque la plantilla es poco menos que el Santos de Pelé reloaded, negando la evidencia de que no hay equipo para competir en Europa, pero luego al mínimo revés se nos dice que como se nos ocurre exigirle algo a dicha plantilla. Habrase visto, ganarle al Cádiz y al Shakhtar, nada menos! Qué atrevidos y soñadores somos.
Dicho esto, yo aplaudo los no-fichajes, las cosas no están para dispendios ya que son tiempos pandémicos, y más vale un par de años sin títulos que una bancarrota. Pero no nos tomen por idiotas. No hay plantilla porque las cosas se hicieron mal antes del Covid, mezcla de mala suerte y mala praxis, y ahora sólo queda ver el resultado del mismo.
Un madridismo "oficialista salchichonero" que piensa que la plantilla actual es el Santos de Pelé sólo existe en tu imaginación. Al estilo del periodismo deportivo español, me invento las declaraciones del "enemigo" y luego las critico. Se llama falacia del hombre de paja.
Me parecen muy desacertados los 3 primeros párrafos.
La pandemia afecta a todos los clubes, no solo al Madrid.
Creo que la historia de este equipo no se forjó a base de quejas y excusas.
Pareciese que no se puede exigir a Isco o Marcelo estar en forma.
Que no se pueda exigir a Militao seguir a su marca en vez de mirar como mete gol.
Que no se pueda exigir a Asensio o Rodrygo que encaren, que intenten ser verticales.
Y podría seguir y seguir, creo que con esto basta.
"El madridista omaíta se hace eco del golpe, de la herida, del incendio y lo propaga..... Para el madridista omaíta aquello no fue dolor sino primero escándalo. Y el escándalo hace olvidar el dolor, que es como un madridismo roto, pero al fin y al cabo un madridismo. El omaíta se pone a gritar, histérico, incapaz de controlarse, mientras el antimadridista ríe. "
Me tatuaría esto, expresa con claridad lo que siento leyendo a mis amigos.
Pero hombre, me pones a Marcelo de ejemplo, a Marcelo!
Si quiera está en forma Mario, le cuesta horrores llegar a los balones.....
No puede ser, eso es lo mínimo, lo mínimo que hay que pedirle a un profesional.
No voy a poner los datos de victorias y derrotas con y sin Marcelo, pero.....
El acoso injustificado a Mou, Bale, Cr7 o quien fuese.
No era tanto por la cantidad de artículos y tertulias que giraban en torno a ellos.
Era por el contenido personal, mentiroso, manipulador y burlesco que había.
A mi no me parece que Marcelo haya sufrido ataques de este calibre.
Y al contrario que estos 3 , el brasileño lleva varias temporadas en clara decadencia.
No creo que los madridistas "omaitas" merezcan este artículo por ser duros con el lateral.
Si creo que con Zidane hay muchos más excesos y rencor.
Pero en cualquier caso el artículo no me ha gustado.
Leyéndote, llego a dos conclusiones. La primera, que tú no eres madridista "omaíta", la segunda, que no has entendido muy bien el artículo, especialmente en lo que toca a Marcelo.
Explícame entonces.
Bueno, explícatelo tú mismo. Lee tres o cuatro veces a ver dónde encuentras que no se puede exigir a Marcelo o a Isco estar en forma.
Bueno Juan.
Yo escribí eso por esta frase:
"Yo sufro a Marcelo en silencio porque no puedo contribuir a ese alboroto desatado de jauría humana."
Si Mario prefiere callar en vez de criticar a Marcelo, lo entiendo.
Pero yo entiendo exactamente lo que escribí.
La jauría periodística critica a Marcelo.
Ergo, el madridista "omaita" sigue el mensaje y ataca al brasileño.
Yo no lo veo así.
Hay razones muy reales en criticar al lateral y me parece mal llevarlo al terreno que quiere Mario.
Pero bueno, si tu lo entendiste de otra forma me parece bien.
Qué gran hallazgo lo del madridismo omaíta, señor de las Heras. Qué bien reflejado. Pero tampoco cabe lamentarse mucho más porque haya madridismo omaíta: el madridismo es tan extenso y colosal que es capaz también de abarcar e incluso incluir incluso a los omaítas, de igual manera que el mar cobija todo tipo de fondos y criaturas.
Algunos madridistas omaítas suelen admirar al meacolonias, algo tan extraño como desagradable teniendo en cuenta la falsedad y mezquindad del sujeto en cuestión y su fijación enfermiza con nuestro club, "virtudes" a las que hay que añadir ultimamente su fracaso como entrenador.
Lo único brillante que hay actualmente en el ayatolá de la esquinita, el mulá de los lazis, el lamejeques más famoso del fútbol mundial, es su calva.
Últimamente parece que Don Mario se refiere a algunos compañeros de publicación digital.
Por cierto, acordándome yo de Omaita, me acuerdo de la Jeny, y me viene a la mente el Jonathan y el David y el resto de primos hermanos.
A mí me viene a la mente tu madre. Eso va en gustos.
No te pongas nervioso , que tú no llegas ni a madridista omaíta. Directamente, culé.
Bueno, como madridista oficialista que soy (o eso me dicen).
Me gustaría que desde el club se informase al aficionado mejor. Ejemplo.
Se ha vendido a Achraf/Reguilón por esta cantidad y por estas razones.
Como no lo hacen, por lo que sea, entiendo yo que se reciban críticas por tales ventas.
Porque ambos laterales tendrían cabida en este equipo.
Yo por ejemplo he visto todos los partidos de Hakimi en el Dortmund.
Pensaba que le íbamos a repescar viendo el nivel de Carvajal y Odriozola.
Pues resulta que no, y yo personalmente no lo entiendo.
No sé en que punto marcáis la línea entre la crítica y el "alboroto" que dice Mario.
Hay mucho forero que escribe exactamente el mismo comentario en cada artículo.
Y efectivamente, siguen la línea editorial del Marca y As de machacar al Madrid.
Dicho esto, y antes de dormir.
Insisto en que este artículo carece de suficientes argumentos para ser tan faltón.
Al menos debería esgrimir un razonamiento que no se soporte solo en la nostalgia.
Claro que si, hombre. Según usted, el club debería salir y decir, por ejemplo (y me lo invento) "Hemos vendido a Reguilón porque Marcelo no nos vale. Le hemos intentado colocar en algún sitio y no ha habido forma." (y aquí puede usted poner los nombres que quiera)
Eso sería una gestión espectacular porque dejaría al jugador que se queda con la moral por las nubes y motivado a tope para competir la temporada.
Si usted se inventa y encima me atribuye una gilipollez para llevarme la contraria no hay espacio para el debate. Espero que suba el nivel si me responde otra vez.