El miércoles pasado, durante un momento de la locura en la que se vio inmerso Bartzokas y que acabó con el griego expulsado del Madrid-Barcelona, leí de pasada que, si el numerito montado por el técnico culé era para hacérselo mirar, tampoco se quedaba atrás el protagonizado por Pablo Laso en 2014, silla de ruedas mediante, abandonando el Palau Blaugrana con la Final de la ACB casi perdida.
Aquella actuación del vitoriano, que culminaba una temporada donde se ganó la Copa, donde se batió un récord de partidos sin perder y donde todo se torció a partir de la Euroliga perdida en Milán, representó una nefasta forma de concluir un año que pintaba glorioso y ya fue fuertemente criticada por quien esto escribe. Hasta ahí, todo de acuerdo. Pero es curioso que, incluso en el peor momento de siempre del Barcelona de baloncesto, con el entrenador rozando el esperpento y una plantilla perdida, sin alma y con retazos violentos (como el codazo de Tomic a Carroll), algunos que se dicen madridistas busquen cualquier punto en el pasado para atacar a Laso. Porque ayer, hoy y siempre, va a tocar meterse con el vitoriano. Sin cuartel. Ya le echarán de menos.
Ayer, hoy y siempre va a tocar meterse con Pablo Laso
La crítica, bien construida, focalizada en los problemas y siempre emitida con respeto, es algo de lo más saludable que puede haber en cualquier contexto de la vida. Sin embargo, con Pablo Laso no se dan apenas ninguno de estos ingredientes. Día tras día, y no son pocas veces ni pocos casos, leo, escucho e incluso veo críticas desaforadas al mejor entrenador de la historia del Real Madrid; al menos de su historia contemporánea.
Sí, Laso se ha equivocado en ocasiones. Desde que llegó al equipo en 2011, lo ha hecho. ¿Acaso no es normal fallar en un periodo tan largo de trabajo? Sí, es lógico. Ha habido veces que ha orientado mal los cambios, que ha tenido al equipo como una moto en noviembre (2013) para perderlo casi todo en primavera, ha podido ser injusto con algunos jugadores, desde el prisma exterior desde el que solemos ver las cosas y, seguramente, haya podido sacar más provecho de algún que otro perfil.
Pero también, no descubro nada, son datos, ha ganado al menos un gran título desde que llegó a la capital. Esto es, Copa en 2012, Liga en 2013, Copa en 2014, Liga, Copa y Euroliga en 2015, Copa y Liga en 2016 y Copa (de momento) en 2017. A eso, añadir 3 Supercopas de España y 1 Intercontinental. Total, 13 títulos oficiales en 17 finales desde 2011.
Desde que cambiamos el prefijo y entramos en el año 2000 y hasta que Laso cogió las riendas, el Madrid había ganado 3 Ligas (2000, 2005 y 2007) y 1 Copa ULEB (2007). Pero con todo esto, existe una buena pléyade de aficionados blancos (por no hablar de la gente de equipos rivales) que denostan la labor del entrenador de forma desatada, sin filtros, como si las diversas plantillas que ha tenido Laso en este lustro largo se hubieran dirigido solas y él, simplemente, fuera la figura motivadora que en determinados momentos daba un par de arengas y a jugar.
La cultura de Twitter y sofá reduce mucho el análisis. Obviamente la red social no es el único foco de críticas desaforadas a Laso, pero sí el más visible y permanente. No promulgo que a Laso se le reciba cada día como a Jesucristo en el Domingo de Ramos. Pero no estaría de más que todos esos haters, todos esos que odian a Laso, que le dan toda la culpa en la derrota y ningún mérito en la victoria, miren hacia atrás, piensen en la década que fue desde la Liga de Scariolo hasta julio de 2011, o desde la Recopa del 96 hasta el año 2000 y digan de verdad si, con todos los errores que pueda llegar a cometer Laso, el preparador merece tanta acidez en contra. La respuesta, al menos para quien esto firma, es no. No lo merece.
La cultura de Twitter y sofá reduce mucho el análisis
No obstante, esto es algo común de la vida, del deporte. A Simeone, que ha revivido al Atlético de Madrid hasta el punto de decirle a su gente que nada de Pupas, que durante mucho tiempo fueron el segundo equipo de España, le llevan saliendo críticos desde la primera temporada. En algún momento, si no ha sucedido ya, lo pitarán, como pitarán a Messi, como lanzan frases envenenadas a Laso. A veces, con el partido torcido, todavía se puede escuchar en la grada del Palacio alguna voz por encima del resto: “Laso dimisión”. Ese tipo no bromea.
El deporte no tiene memoria, pero hay veces que sí respeta a los suyos. Cuando el Madrid cayó en cuartos de final de la Euroliga el pasado año, por un claro 3-0 global, mucha parte de la afición que estaba en el Palacio de los Deportes se quedó a agradecer al equipo, a Laso, los servicios prestados. No pocas veces ha dicho el entrenador merengue que ese momento es uno de los que más dentro lleva de su estancia en Madrid.
Laso es querido, como no podía ser de otra manera. Pero, sucede permanentemente cuando alguien triunfa, se le tiene ganas. Lo triste es que parte de ese grupo sean aficionados del Real Madrid, completamente desmemoriados, no sólo con lo que les ha dado Laso, sino con el pasado reciente de la sección. Está sucediendo en Barcelona con Pascual. De Laso, ya se acordarán, ya le echarán de menos. Pero no lo dirán. No va con su perfil, no es compatible con su bilis.
Laso es de la estirpe de Ferrándíz y Lolo Sainz,su digno sucesor...incluso el propio Sainz dijo que el Madrid del poker es el mejor Real Madrid de la historia.
"... MADRIDISTAS?, no es compatible con su bilis" los números y trofeos están ahí ... ¿Quién puede competir con esa realidad? Nadie ... que esos anti madridistas que pululan por el palacio, que se lo hagan mirar ... las úlceras son muy malas y tardan en curar. GORA LASO y GORA TODAS LAS SECCIONES DEL REAL MADRD.
Pues imagínate cómo serían de desaforadas esas críticas si el Madrid llevase la temporadita que lleva el Barcelona....
Lo insólito es que muchos de los que le niegan el pan y la sal luego babean de admiración con algunos entrenadores ( Messina, Katsikaris, Sito Alonso, Repesa, etc ) la mayoría de los cuales tienen un palmarés a años luz del de Pablo y sus equipos un estilo que ver un partido suyo es lo más parecido a ir al dentista. Algo bastante similar ha pasado en Barcelona con Xavi Pascual y ya vemos por donde andan y la imagen que dan.
totalmente de acuerdo y es que en su cabezonería seguirán lanzando sus mantras de que esos técnicos son los que saben pero Laso, no. Esto es España aquí cuando se odia es para siempre. Esos "puristas", alguno se ha autodenominado así y en alguna radio, no solo en las redes sociales, con tal de defender su postura dicen auténticas imbecilidades como volver a ese baloncesto control aburrido y antiespectáculo. Desde que llegó Laso disfruto mucho más del RM de baloncesto, no sólo por la pléyade de títulos sino por el juego que desplega el RM. Una defensa por momentos axfisiantes que roba, corta, atosiga y que lanza un contraataque fulgurante... y la grada en pie. Yo quiero eso. El purista que se meta su puro y su cháchara que solo sirve para compensar y reafirmar su ego.
No estoy para nada de acuerdo en la premisa, para mí totalmente falaz y muy desacertada, que afirma el artículo en el símil de Simeone. "A Simeone le le llevan saliendo críticos desde la primera temporada" ¿Cómoooorrrrr?. Está claro que debe haber otra realidad paralela y alternativa que justifica esa afirmación, seguramente en la mente del autor o en los universos de Narnia.
A Simeone no se le critica nada, no le han salido críticos, se ha tapado absolutamente todo, le han dado carrete y los medios de comunicación han jugado a favor de obra ¿qué críticos? ¿dónde?. Lo peor es que motivos para ello había. El principal por su planteamiento futbolístico, su ideario de "ser un equipo incómodo para el rival", esa esencia ya dbería tener detractores pero no surgió ninguno.
Poner a la misma altura la ácida, odiadora, contumaz y rancia crítica a Laso desde el minuto 1, con la supuesta crítica a Simeone desde que llegó que no existió ni ha ido en aumento, todo lo contrario, me parece... por no ser cruel, voy a tildarlo de error.
Quiero hacerle recordar al autor que aquí, los medios de comunicación se alzaron en armas contra esos planteamientos que defiende el Cholo por atizar a Mouriño y cuando llegó Simeone y empezó a rajar d elo que espera y debe hacer el equipo, parecía un calco de Mou, la prensa atónita pero no le dijeron nada, ni mú. El contraataque era una vergüenza si lo hacía Mouriño, si lo hacía el Cholo era un arma muy buena. En ese caldo de cultivo se eliminó cualquier atisbo de critica al Cholo. Y los seguidores atléticos han confiado en el Cholo porque subió su nivel competitivo, no hubo críticos desde el principio sino todo lo contrario, una suma de adeptos continua por los resultados (algo muy distinto con Laso, porque sus críticos y odiadores se mantienen en sus trece "estoy encantado que gane títulos pero no sabe"). Daba igual que en la política de fichajes fallara el cholo estrepitosamente (Jackson, Cerci...), que despreciara a una de las perlas de la cantera tildada de "jugón" y fijo con la sub21 (ni siquiera le salieron los típicos críticos que se quejan de que se carga el futuro d ela selección), no se le discute ni se le cuestiona. Y cuando pierde su segunda final de Champions no salen esos "haters", como tiene Laso, a pedir que se vaya, todo lo contrario.
Entiendo que se busquen ejemplos, símiles que den más empaque al argumento pero por favor, que no sea falaz. Y mucho menos de este calibre. Una trampa o un error. ¿Adrede o ignorancia? A mí me suena a lo mismo que se critica aquí desde el inicio que hace la prensa deportiva.
Una comparación muy desatinada, la del autor.
A mí me parece un estupendo artículo el de Mariano, por discutible que el símil resulte.
Un saludo.
El símil con el cholo no me parece discutible sino erróneo, pero sí que me parece discutible tu adjetivación del artículo. Y eso que estoy en el fondo de acuerdo con el artículo, pero por el error debería bajar la apreciación de "estupendo" a "bueno", por lo menos. 😉
Claro que Laso se ha equivocado varias veces, pero desde luego el balance global es espectacular. Viniendo además del pasado que veníamos, donde el Barça nos humillaba una y otra vez, tiene más mérito aún haberle dado la vuelta de esa manera. Siempre digo a mis amigos que el equipo de fútbol tiene que aprender del de baloncesto, con un entrenador de aquí, nada de Messinas, ni Scariolos, que conozca la casa, que haya mamado el club y que se apoye en un núcleo fuerte de jugadores españoles, con refuerzos extranjeros en algunos puestos y trabajo de equipo, sobre todo, trabajo de equipo. Zidane puede ser nuestro Laso. Claro que se ha confundido varias veces, pero hay que dejarle varios años. De momento no se le pueden negar resultados. Apuesto por Laso y Zizou por muchos años.
Repites en dos ocasiones que Laso se ha equivocado varias veces pero no concretas en que y a mi me resulta muy difícil ver esos errores en un técnico que de 23 títulos posibles ha disputado la final en 17 ( 74 % ) , que es a lo que está obligado un equipo como el Madrid ganarlas es otra historia por la cantidad de factores que intervienen, y de ellas ha ganado 13 (57 %) y todo ello durante el periodo de reconstrucción de un área, que era un erial después de los peores veinte años de su historia. Evidentemente que se habrá equivocado alguna vez pero ya quisiéramos haber tenido en fútbol , no solo unos resultados similares sino el grandísimo nivel de juego y la sensación de superioridad que transmite el equipo de basket