Los chicos se enamoran

Los domingos por la mañana tal vez estén los sentidos algo abotargados, pero -tras meter la cabeza en abundante agua fría y después de la dosis necesaria de cafeína- hemos llegado a la conclusión de que no es esa la razón de no encontrar apenas referencias al Real Madrid en nuestras queridas portadas deportivas. Sabemos bien que Mundo Deportivo y Sport -o mejor, Sport Deportivo- sigue otras sendas editoriales, pero lo de la Central Lechera sí que, de verdad verdadera, nos extraña mucho, pero tanto, que nos reímos por no llorar.

Entendemos que hoy juega España (con perdón para La Roja) y que, además, no son fechas propicias para que surjan noticias relacionadas con los clubes, así que aceptamos con resignación que Marca no recoja en su portada ninguna información relacionada directamente con el Madrid. Sin embargo, la vía indirecta nos trae algunas referencias madridistas. La más obvia es la que Marca nos presenta en la parte superior de su portada, donde puede leerse que Cristiano marcó ayer tres goles en su partido de selección contra Armenia. Pero ya saben que a nosotros nos suele gustar más lo menos obvio, aquello implícito que deja mayor margen para la interpretación. En esa línea valoramos especialmente la aparición de Morata como elemento central de la portada de Marca, y nos atrevemos a decir que le resta gol y medio al canterano para que se convierta en la enésima herramienta de crítica al Madrid. Dirán que somos muy malpensados en La Galerna, y dirán que la crítica no es mala, sino acicate y estímulo, y dirán con razón. Pero tal vez no sea lo mismo criticar que afilar cuchillos, tal vez no sea igual estar en desacuerdo que crear el desacuerdo, y tal vez sea más lícito valorar negativamente el juego de Bale que inventarse una hernia. Tal vez.

Mientras, como decimos, el Madrid brilla por su ausencia en el Marca de hoy, el Atleti hace una "escalada fulgurante" en el ranking FIFA. Su mérito es indudable, y más cuando todo el mundo sabe que lucha en desigualdad constante, que rema con brío en aguas turbias, que competirá la próxima liga pese a que ya esté "peligrosamente preparada" para que la gane el Madrid. Qué mayor muestra de honor puede haber, ¿verdad, Cholo?

Si Marca entrevista a Morata, en As eligen a Del Bosque, al parecer el primer seleccionador nacional que llega a cien partidos con España. "Soy más de Julio Iglesias y Serrat que de Kevin Roldán", dice el marqués, sin ser nosotros nadie para afearle el gusto musical. Es evidente la pretensión de morbo del titular ante las pitadas que está recibiendo Piqué en su estancia con la selección, pero resulta aún más obvio que Del Bosque hizo uso de diplomacia y recato al no gritar "Waka Waka" cuando fue preguntado. Sabemos que le pedía el cuerpo ensalzar las virtudes musicales de Shakira frente al tal Roldán, pero optó el seleccionador por obedecer a un patrón musical más típico y propio de su edad, siempre en aras de la buena convivencia. Como bien sabe Arbeloa, el entrenador salmantino es experto en apagar conatos de incendio, y no podemos menos que agradecértelo, Vicentón. Así te llamaban en el periódico que ahora celebra tus cien partidos con España. Pero, bueno, eso era cuando entrenabas al Madrid y ganabas la novena Copa de Europa, "una victoria un poquito vergonzante" (Relaño dixit).

No podemos evitar ver hoy en Mundo Deportivo -siempre bajo nuestra estimada cubitera- cierta autojustificación culé, cierta intención reivindicativa: "Messi no basta", titulan, en directa referencia al empate que obtuvo Argentina en su debut en la Copa América, y en velada mención a quienes piensan -todos ellos mesetarios irredentos, que nada saben de fútbol, sino solo de goles- que el Barcelona sin Messi no hubiera tenido tantos éxitos estos últimos años. Que sepan los de Madrit -pudieron pensar en Mundo Deportivo- que nuestro equipo es mucho más que Messi, que él puede ser tal vez la guinda del pastel o el lazo del regalo, pero que sin él somos mejores que Argentina, donde no han sabido mimarle como nosotros. Tal vez la aspiración máxima de Mundo Deportivo sea que, algún día, Messi pueda ser catalán de derecho y pueda defender los colores del terruño que todo le consiente. ¿Qué es eso de criticar a Leo en su país de nacimiento? ¿Cómo osan los argentinos? Será que también son de Madrit, aunque no lo sean; porque ser de Madrit es un estilo de vida, una postura existencial, una cosa muy mala, malísima.

"Cuando llega el calor los chicos se enamoran", decía una notable canción de las muy estimables Sonia y Selena, todo corazón y buen hacer. Sport no podía ser menos, así que nos da la bienvenida oficial al verano con ciertos toques picantes en su portada. "Gerson, fichate caliente", titula. Dejando al margen que el Barcelona no para de fichar en las portadas, cuando de hecho parece que no podrá fichar este verano, y dejando al margen quién demonios sea Gerson, en La Galerna agradecemos sobre todo el tono picarón de Sport, corroborado por el "Pep tienta a Bartra" que aparece justo encima de la calentura de Gerson. Ambos, entrenador del Bayern y jugador del Barcelona, parecen querer rozar sus cuerpos en la portada, haciendo del titular casi una incitación al pecado. No podemos negar que la mirada de Pep en la foto escogida es seductora, no podemos negar su porte fino y elegante, pero nos vemos obligados a parar ya aquí este comentario, aunque solo sea por respeto al padre Suances. Ay, qué calor. Que nos traigan la cubitera de Mundo Deportivo.