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Los antepenúltimos días de Escohotado

Los antepenúltimos días de Escohotado

Escrito por: Jesús Bengoechea18 octubre, 2021
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Antonio Escohotado, el pensador vivo más importante de España, escribe en La Galerna desde hace algo más de cuatro años. Nos enorgullece contar con sus crónicas del Real Madrid. Dada la magnitud de su talla como intelectual, no estará de más que trascendamos el Madrid y el fútbol —aunque en realidad tampoco tanto — para ocuparnos de una obra centrada en su figura. “Los penúltimos días de Escohotado” es el resultado de las entrevistas sostenidas con el sabio por el periodista Ricardo F. Colmenero. El título del libro es consecuencia directa de la explícita declaración de Antonio, en el sentido de que se ha mudado a Ibiza, donde también reside Colmenero, para morir allí. Con las postrimerías de la vida puede hacerse como con las copas nocturnas, que nunca son las últimas sino las penúltimas, y en ese afán suavizador entiendo que ha titulado el autor su libro. Llevado de una pulsión aún más pudorosa, por mi parte, he titulado yo este texto.

Los penúltimos días de Escohotado

“Todo procede de la idea de entrevistarle para una pieza en El Mundo”, explica Colmenero, “pero tras la primera entrevista me di cuenta de que teníamos demasiado material como para contentarnos con publicar eso, de ahí que la cosa acabara en un libro. Era una tempestad de palabras y yo corría con mi cubo tratando de hacer acopio de todo el agua. Me daba mucha pena que se perdieran tantas ideas valiosas. En la editorial me convencieron de que tenía que continuar mis charlas con él en vistas a lo que podía ser un libro. Al principio yo no estaba tan convencido del proyecto, pero cuando tuve transcritas varias de las charlas, y le mostré el contenido a Antonio, su subidón provocó el mío”.

"Escohotado Era una tempestad de palabras y yo corría con mi cubo tratando de hacer acopio de todo el agua. Me daba mucha pena que se perdieran tantas ideas valiosas"

“En ese punto”, prosigue el autor,” tuve conciencia de que Antonio pasaba a considerarme un escribiente útil o alguien menos tonto de lo que le parecí en los primeros encuentros”, añade con una sonrisa llena de sorna gallega. Lo cierto es que, a lo largo de todo el libro, la voz de Colmenero se constituye en el perfecto contrapunto a la de Escohotado, llegando a producirse un efecto que tal vez remita al cinéfilo a las charlas entre Truffaut y Hitchcock. O no tanto, ahora que lo pienso, en tanto en cuanto el libro de Truffaut nace desde la más absoluta devoción inicial por Hitch.

Escohotado y Colmenero

No así sucede con lo que de entrada pensaba Colmenero del objeto de su estudio. “Yo no era un gran seguidor de Antonio. Más bien al contrario”, reconoce, admitiendo que los estragos causados por las drogas en su círculo cercano, en su Galicia natal, generaron ciertas reticencias hacia el protagonista. ¿Es posible que eso haga el libro especialmente atractivo para aquellos que, no duchos en la obra escohotadiana, sean presa de ese u otros prejuicios? “Puede ser. Aquel que ya era seguidor de Antonio leerá el libro, ya sea por la faceta filosófica, la económica, la de las drogas o hasta el fútbol. Pero habrá otros que lleguen, como yo, desde la discrepancia. Al propio Antonio le seducía hablar con alguien con un perfil hasta cierto punto contradictorio con el suyo (antidrogas y del Barça, por ejemplo), porque es un hombre que gusta de ese desafío intelectual, gusta de verse retado”.

"Al propio Antonio le seducía hablar con alguien con un perfil hasta cierto punto contradictorio con el suyo (antidrogas y del Barça, por ejemplo), porque es un hombre que gusta de ese desafío intelectual, gusta de verse retado"

Es la sana discrepancia, hay una pregunta obligada: ¿tratar al sabio le ha hecho cambiar su perspectiva antidrogas? “No”, responde Colmenero taxativamente. “Partimos de experiencias y decisiones radicalmente distintas. En mi Galicia natal se me moría gente cercana por el consumo de heroína, amigos de mi hermana mayor o mi profesor de lengua del colegio, que falleció de SIDA por compartir jeringuillas. El que viniera gente defendiendo todo eso, desde la presunta superioridad intelectual de haber leído la Historia General de las Drogas de Antonio, no ayudaba nada. Y esa discrepancia no hemos logrado subsanarla. Pero intentar resumir a Escohotado en el tema de las drogas es tremendamente injusto, porque es una mínima parte de su pensamiento”. Hay un eco de esto mismo en el propio libro, cuando de la boca del filósofo se envía “a tomar por culo” a quienes se empeñan en acotarle con el sintagma “el de las drogas”.

Escohotado

En el proceso de elaboración del producto final, surge algo que ambos protagonistas reconocen en la obra como una relación de especial complicidad. (“Al final nos hemos hecho amigos, ¿eh?”, le espeta el sabio, en un párrafo que me conmueve especialmente, por cuanto reconozco muy bien lo que conozco de Antonio). “Escohotado, según confesión propia, se ha ido a Ibiza a morirse. Me encuentro con un tipo que se va abriendo y me va contando que si se quiere comprar una pistola en el mercado negro, o que si está buscando fórmulas para acabar con su vida. Y de pronto resulta que le he embarcado en un proyecto que le ilusiona, que es el libro, con lo cual es inevitable sentir la esperanza de que, mientras el libro esté en marcha, Antonio estará aquí también”.

Sobre la amistad entre ambos, Ricardo puntualiza: “Éramos profesor y maestro en nuestras charlas. Antonio es un profesor duro y uno que, como tal, no lo pone fácil para la amistad. Por otro lado, yo buscaba mantener cierta distancia porque aquello era trabajo, yo estaba ahí para escribir un libro. Ahora, sin embargo, cuando voy a verle, soy capaz de relajarme y pasarlo bien”.

"Escohotado, según confesión propia, se ha ido a Ibiza a morirse. Y de pronto resulta que le he embarcado en un proyecto que le ilusiona, que es el libro, con lo cual es inevitable sentir la esperanza de que, mientras el libro esté en marcha, Antonio estará aquí también

¿También hablando de fútbol? “Sí porque Antonio no es un fanático. En una de las entrevistas, eso sí, se cabreó cuando hablamos de la vinculación entre Franco y el Madrid. También es verdad que, mientras grabábamos nuestros encuentros, ni Madrid ni Barça estaban como para tirar cohetes, de manera que ni él ni yo teníamos demasiadas razones para sacar pecho. La pandemia, además, mantenía la temporada futbolera en el ámbito de lo raro”.

¿Algún tema futbolero que, a pesar de todo, sacara de sus casillas (no pun intended, Iker), al sabio? “Estaba muy enfadado con Ramos. Veía que no aceptaba la oferta de renovación que le tendía Florentino, y eso le irritaba. Habría deseado también que Zidane siguiera en el Madrid. Lo de Hazard también le tenía muy quemado, un tipo que debería no sé si tomar el testigo de Cristiano pero al menos acercarse a hacer algo parecido a echarse el equipo a la espalda, y que a día de hoy está lejos de asumir esa responsabilidad, por la razón que sea. De todo esto hablamos en nuestros encuentros”.

Colmenero

La condición culé de Ricardo nos da para otro buen rato de conversación. “En Galicia la cosa siempre ha estado definida geográficamente, hasta cierto punto. Coruña bastante madridista; Pontevedra bastante culé. Mi padre me introdujo en lo azulgrana, como yo intento hacer con mi hijo a base de comerle la oreja. Su entorno materno en muy valencianista, pero mucho tendría que mejorar el equipo del Turia para que pudieran distraer al chico. Además va a clase con la hija del sobrino de Gary Lineker, así que esto es prometedor, porque mi primer ídolo en el Barça fue precisamente el inglés. Pero bueno, mi hijo que sea de quien quiera”.

Y de ingleses a galeses. “En el libro, Escohotado habla bien de Bale, pero por comparación a lo que de momento ha dado Hazard, que es nada. Yo le alertaba de que a lo mejor os salía otro Bale con Hazard, y él me advertía: cuidado que Bale nos ha dado unas cuantas Champions. Y tiene razón. El problema de Bale yo creo que es de imagen personal. ¡Es un tío que ha logrado que la gente se cabree con él por lesionarse, cuando lo normal sería solidarizarse con él! ¿Quién se cabrea con Canales, ese pedazo de futbolista, por haberse lesionado tanto? Pero es que el galés no ha logrado ganarse la simpatía de la gente”.

" Yo le alertaba de que a lo mejor os salía otro Bale con Hazard, y él me advertía: cuidado que Bale nos ha dado unas cuantas Champions. Y tiene razón"

Como culé, ¿qué jugadores del Madrid querría Ricardo haber visto con la camiseta del club de sus amores? “Uno de ellos es Benzema, habría encajado muy bien por su forma de abrir huecos, de ver jugadas donde nadie lo hace. Es un gran jugador. El otro sería Modric. Qué jugador. Imagina qué centro del campo de bajitos jugones habríamos tenido los culés con Xavi-Iniesta-Modric. ¡Parece hasta lógico!”

Uno de los temas futboleros más interesantes que Ricardo debate con el intelectual en otro punto del libro constituye casi un género en sí mismo: Vinícius. Cuenta Ricardo en el libro: “Es septiembre de 2020 y juega el Madrid. Antonio tiene que escribir su crónica para La Galerna. En el hotel tienen fútbol de pago y a veces quedamos para verlo. Le he traído el periódico y en las páginas de deporte sale una foto de Vinícius Jr.” La visión de la foto precipita las teorías freudianas de Antonio sobre el brasileño (Escohotado se considera muy freudiano). “Así fue”, rememora Colmenero. “Está convencido de que Vinicius se ha puesto lo de Jr. en el nombre futbolístico por un exceso de respeto al padre, que también fue futbolista y al que Vini en realidad no quiere superar. Falla goles, según Antonio, porque su subconsciente se niega a aceptar que él pueda ser mejor jugador que su propio padre. Yo creo que ahí a lo mejor va demasiado lejos y esto es pura cuestión de personalidad. Como persona que ha padecido ansiedad, sé de lo que hablo. Se regatea a seis y ya está solo delante del portero, y entonces siente de golpe toda la presión. Dice, Dios mío, después de lo que he hecho sería terrible si la cagase ahora, y es ese pensamiento el que hace que, de hecho, falle. Con toda esa presión, cuando estás a solas contra el portero casi ni llegas a rematar porque te desmayas. En caso de que sea verdad lo que apunta Antonio, y haya una cuestión freudiana, estoy seguro de que el Madrid puede recurrir a los mejores profesionales para que ayuden a su delantero”. Lo curioso es que Escohotado, más allá de esta teoría psicoanalítica, es un enorme defensor de Vini, cuyo regate defiende en el libro como “mejor que el de Pelé. Sí, es muy fan de Vinícius. Hay un momento en que le digo que me gusta Vini pero no se lo cambio por Ansu Fati. Él me responde: yo tampoco. En ese momento lo interpreté como que él refrendaba mis palabras, es decir, que Ansu Fati también le parece mejor que Vinicius. Pensándolo bien, es ambiguo y puede significar lo contrario, es decir, yo tampoco te lo cambio porque a mí en cambio me gusta más Vini que Ansu. Y ahí quedó la duda en el libro. A ver si me acuerdo y le pido que lo aclare la próxima vez que le vea”.

Escohotado fumando

Mientras se resuelve el arcano, podemos disfrutar del libro. Lean “Los penúltimos días de Escohotado” mientras gozan los antepenúltimos leyendo al propio Escohotado en La Galerna. Y permanezcan atentos a próximas novedades...

 

Fotografías Imago.

Fundador y editor de La Galerna (@lagalerna_). Autor de Alada y Riente (Ed. Armaenia), La Forja de la Gloria (con Antonio Escohotado, Ed. Espasa) y Madridismo y Sintaxis (Ed. Roca). @jesusbengoechea

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6 comentarios en: Los antepenúltimos días de Escohotado

  1. Una entrevista al autor que cumple su función: me han entrado ganas de leer el libro. Pero quiero aprovechar unas declaraciones suyas para que veáis el poder del relato cuando lo escriben quienes deberían desmontarlo, sí, la prensa deportiva, esos potentes altavoces que señalo y que a fuerza de repetir sus falaces letanías calan en el imaginario colectivo... en esta caso, Bale:

    "El problema de Bale yo creo que es de imagen personal. ¡Es un tío que ha logrado que la gente se cabree con él por lesionarse, cuando lo normal sería solidarizarse con él! ¿Quién se cabrea con Canales, ese pedazo de futbolista, por haberse lesionado tanto? Pero es que el galés no ha logrado ganarse la simpatía de la gente”."

    ¿Bale lo ha logrado o ha sido la prensa quien lo ha logrado realmente? Porque en contraposición a Dembelé, la prensa siempre se ha referido a él con lástima por las bajas por lesión. Cargar tintas y quitar hierro. Si la inmensa mayoría d la prensa, de forma machacona, carga tintas contra la camiseta del RM y quita hierro a los demás, queda impreso en la memoria colectiva todas esas insidias que de forma vehemente se han volcado.

    ¡Cómo será el poder de los altavoces mediáticos que hasta alguien muy preparado, con nivel, periodista y a priori (no le conozco) sensato y cabal como Ricardo Colmenero diga eso de Bale! Recuerdo "Es un tío que ha logrado que la gente se cabree con él por lesionarse". Pues no. El mérito es de la prensa. Es algo clarísimo pero se obvia. ¿Lo hace adrede el periodista? No lo creo, más bien le ocurre como a todo aficionado, tiene esa idea fijada como realidad gracias a los potentes altavoces mediáticos que en su afán de cargar tintas contra el RM, han machacado a Bale.

    Puede que haya ayudado que no sea español, es decir que no va a ser convocado con España para poder abordarle en las concentraciones de la selección y preguntarle por el Real Madrid (Carvajal se ha perdido un sin fin de partidos por lesiones y ningún periodista ha dicho ni mú), que no conceda entrevistas a los medios deportivos patrios (alguna ha dado y tras ella, en el mismo medio han masacrado su imagen con las consiguientes burlas) y que pase olímpicamente de sus opiniones. Pero a pesar de esto, he aquí una prueba de cómo influyen los medios, no es nada del otro mundo pero sirve para comprobar su poder. Y así, de forma tan espontánea como apreciamos en esta entrevista, se manifiesta ese poder. Y del mismo modo, pasarán los años y se dirá que Zidane no sabía y que se ganaron 3 Champions seguidas de suerte... ¡Suerte! Tela.

    Nos han tomado el pelo, estafado, a los consumidores para dejar impreso en la ciudadanía sus insidias como verdades. Así se forma el relato. Hacen pasar su inquina por verdad revelada. Y lo consiguen... como hemos podido apreciar en este artículo en una inocente frase (en apariencia).

  2. Comente hace ya muchos, pero muchos meses,que era tan fanático de vagawain , que me leía todo, absolutamente todo lo que publicaba en el foro. Hoy y además con alegría me veo en la ineludible necesidad de finiquitar el quehacer que les he comentado antes. Es cierto que cada uno en su casa hace lo que quiere, pero hay hechos y causas que tienen un límite y no tengo estómago para tanto.

  3. Hace 2-3 días que vi el video de Colmenero publicitando el libro. Me sorprendió , relativamente, al mismo tiempo que me molestó un poco, constatar cierta gracia e ingenio del periodista/escritor en esa acción promocional. Los prejuicios son muy perjudiciales, sobre todo para el que los tiene. Me suena que Colmenero, porque aquí (comentarios-artículos LG) ha salido escrito, ha tenido desprecios considerables hacia el Real Madrid.
    Iré al grano , si decido comprarme el libro...será porque el maestro me parece uno de los prodigios intelectuales que ha dado España en los últimos tiempos. Y poder tener, en la medida de lo posible, recopilado el pensamiento de Escohotado me parece una oportunidad nada desdeñable.

    Desde un punto de vista comercial, en clave futbolera, esa especie de sinergia merengo-culer puede ser positiva. Aunque , personalmente, si la colaboración hubiese sido entre Javier Marías y el maestro -desconozco si se llevan bien o mal- , seguro que ahora el libro ya ocuparía espacio en mi biblioteca.

    (*) Agradecido por las facilidades que ofrecen para poder leerlo. Eso sí.

    1. Y quiero hacer un matiz. Reducir la experiencia y aportación de don Antonio al ámbito de las drogas es tener una perspectiva muy limitada.

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🎂Cumple 33 años el hombre que le enseñó a Bellingham lo que significaba «chilena», el hombre tranquilo que no flaqueará jamás ante un penalti decisivo, el gran @Lucasvazquez91

¡Felicidades!

Lamine Yamal es muy joven.

Enormemente joven.

¿Y?

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👉👉👉 https://www.lagalerna.com/lamine-yamal-es-muy-joven-y/

En el hecho de que @AthosDumasE llame a la que muchos llaman "Selección Nacional" la "selección de la @rfef" encontraréis pistas de por qué no la apoya.

La explicación completa, aquí

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Tal día como hoy, pero de 1962, Amancio rubricaba su contrato como jugador del Real Madrid.

@albertocosin no estaba allí, pero te va a hacer sentir que tú sí estabas.

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