Se ganó en el Reale Arena, se consumó la victoria oficial nº 300 contra equipos vascos, el Real Madrid jugó su partido de liga imbatido como visitante nº 400, Rodrygo alcanzó su victoria nº 100 en liga, Courtois disputó su partido oficial nº 100 imbatido, Rüdiger legó a las 50 victorias en liga, Militao entró en el top 100 de la historia del Real Madrid en número de partidos oficiales jugados y Vinícius se encaramó al top 50 de los jugadores de la historia del Real Madrid con más victorias oficiales siendo un chaval de 24 años.
Pero el Madrid no jugó bien. Como viene siendo la tónica habitual este curso, el Real Madrid jugó con un ejército de bajas por lesión como viene siendo la tónica habitual de los últimos meses, lista a la que se une Brahim por una buena temporada. Pero el Real Madrid ganó, sigue con la mayor racha de partidos sin perder en liga de su historia y se acerca inexorablemente, esperemos, a la cota máxima de partidos oficiales sin conocer la derrota. Y Mbappé, sin jugar a nada, ya es el máximo goleador de la plantilla en este curso.
Pero nada de eso vale. Lo importante es que Vinícius, después de aguantar todo el partido insulto tras insulto de la grada Txuri Urdin, se llevara el dedo a la boca después de marcar el primero de la tarde. Es que provoca, dicen todos los medios y muchos madridistas de esos que yo llamo vinagres, pero que voy a empezar a llamar no madridistas. Y digo esto porque la historia del fútbol está plagada de jugadores que se llevan la mano a la boca o a la oreja al marcar un gol fuera o dentro de casa.
Recuerdo la vez en que Raúl González Blanco hizo lo propio en el Camp Nou. Ese gesto fue, y sigue siendo, icono del madridismo sin fisuras, sin ambages, sin discusión. ¿Por qué el gesto de Vinícius no causa la misma sensación? Quizás porque el estadio no es el mismo, quizás porque el rival no tiene la misma enjundia o, quizás, porque este madridismo no madridista está atrapado en un relato que han forjado los medios de comunicación y apropiado los rivales desde que el bueno del brasileño pisó tierra patria.
Cuando llegó, era muy malo, no daba una patada a un bote y no metía un gol ni al arco iris. Ahora que ha despejado todas las dudas con sus goles, sus gambeteos, sus incursiones en el área y sus asistencias, cuando ha ganado dos Copas de Europa con un gran protagonismo en las eliminatorias y marcando en las dos finales, cuando parece ser que va a ganar el Balón de Oro, ese premio devaluado tantos años por la cabezonería (y quizás por los patrocinios) de algunos, pero que oficialmente galardona al mejor jugador de la temporada pasada, ahora que la clase de nuestro menino no está en duda porque él y sólo él se ha bastado y sobrado para demostrar al mundo el pedazo de futbolista que es, ahora, repito, el mundo entero se mete con él porque dicen que provoca, cuando realmente lo que pasa es que es víctima de la más cruel y maldita caza de brujas que se ha visto en este país en las últimas décadas en forma de patadas irreverentes y no sancionadas, insultos por doquier en los campos y muestras del racismo más rancio en los campos españoles y en las tertulias y artículos de los medios de comunicación.
Dicen que Vinícius provoca, cuando realmente lo que pasa es que es víctima de la más cruel y maldita caza de brujas que se ha visto en este país en las últimas décadas
Vinícius, efectivamente, no pasa por su mejor momento futbolístico, de acuerdo, pero eso no es excusa para que sea vapuleado continuamente por cada acción u omisión que haga dentro o fuera de una cancha de fútbol. Y me voy a posicionar con él, efectivamente, si España no pone los medios suficientes y con el resultado esperado para acabar de una santa vez con el racismo en los estadios, no será digna de organizar el mundial de 2030, igual que muchos pensamos que Catar no era digno de organizar un mundial con tantas vidas segadas en la construcción de los estadios y por la falta de derechos humanos en el país. Igual que Arabia Saudí tampoco será digno de organizar el mundial 2034 por la misma razón. Por eso, si España no erradica el racismo de los campos de juego sin excusas, si no se cierran ipso facto los estadios donde haya una sola manifestación racista por parte de la afición local, no será digna de organizar el mundial.
Estoy con Vinícius y, creo que todos deberíamos estar igualmente con él, en vez de lanzar a los cuatro vientos la tan manida frase de que “España no es racista”. Les voy a contar, amigos galernautas, una anécdota que se produjo en mi niñez. El famoso semanario Interviú tenía en nómina a un monstruo del humorismo gráfico, el granadino Francisco Martín Morales, “Martínmorales” para el gran público. Este humorista, fallecido en 2022, publicó en torno a 1977 una viñeta en dicho semanario en el que aparecía un padre de la mano de su hijo. El niño le preguntó: “Papá, ¿En España somos racistas?” A lo que el padre respondió: “No, hijo, aquí no hay negros”. Pues casi cincuenta años después, esta viñeta rebela mucho de lo que pasa en nuestro país. Los actos, relatos y situaciones de índole racista han ido apareciendo a medida que se iba poblando nuestra querida piel de toro de personas de distinto color, religión o cultura, sin más. Si tuviera delante al gran humorista, le diría: “Francisco, ya hay negros en España”.
Me voy a posicionar con Vinícius, efectivamente, si España no pone los medios suficientes y con el resultado esperado para acabar de una santa vez con el racismo en los estadios, no será digna de organizar el mundial de 2030
Analicemos el partido del Real Madrid. No se jugó como se esperaba, los tres de arriba no terminan de conectar, da la sensación de que Rodrygo no se la pasa a Mbappé, que Mbappé no se la pasa a Vinícius y que Vinícius hace lo propio con el francés. Parece como si cada uno de ellos quisiera hacer la guerra por su lado y ganar su minuto de gloria en forma de gol. No bajan a defender en este fútbol en el que es tan importante que defiendan todos. Verlos bajar andando es muy descorazonador. Hasta el gran Cristiano Ronaldo terminó bregándose en defensa como el que más. Esa actitud debe desparecer. En el fútbol, como dijo Don Alfredo Di Stéfano, ningún jugador es tan bueno como todos juntos.
Esto que digo no es óbice para recordar al madridismo no madridista que el Real Madrid es el vigente campeón de Europa y de liga, que esto acaba de empezar, que se deben acoplar las piezas, que el cuerpo técnico es el mejor del mundo por sus resultados y palmarés y que el presidente es el que ha forjado el gran club que amamos y que está en la mejor época de su historia. Así que, por favor, calma y dejen que los profesionales trabajen.
Dicho esto, también digo que entrar en una nueva etapa asador sería lo peor que nos podría pasar. Evitar que pase lo que en el periodo 2003-07 es la tarea que se debe imponer en la T-4 de Valdebebas y en el vestuario blanco. No tengan prisa con Arda Güler y con Endrick, deben pasar los cursos bien y con la calma necesaria, no demonicen al club por no sé qué central que no se ha fichado, no echen pestes por la boca y por las teclas con una supuesta negligencia por no fichar al cromo que me gusta. Las lesiones no son predecibles, no se puede planificar una temporada pensando que se van a lesionar cinco jugadores de golpe, no sería serio y no se podría aguantar económicamente, así que, por favor, crédito a este grupo y a por la Copa de Europa, que empieza esta semana con el formato caprichoso que Ceferin se ha inventado para hacer sombra a la Superliga que, espero, comience cuanto antes para acabar con los chanchullos del fútbol mundial.
Ahora y, como siempre, unos datos del partidor referidos todos al Real Madrid y, ya saben, ser del Real Madrid es lo mejor que una persona puede ser en esta vida… ¡Hala Madrid!
Pd: Faltan 21.
Madrid y R. Sociedad han jugado 155 partidos de liga, con un balance de 88 partidos ganados, 40 empatados y 27 perdidos, con 330 goles a favor y 185 en contra.
En total, R. Madrid y R. Sociedad han jugado 178 partidos oficiales, con un balance de 99 partidos ganados, 42 empatados y 37 perdidos, con 363 goles a favor y 216 en contra.
En San Sebastián se han jugado 78 partidos de liga, en los que el R. Madrid ha ganado 33, ha empatado 22 y ha perdido 23, con 130 goles a favor y 117 en contra.
Los mayores goleadores ante la R. Sociedad en liga son CRISTIANO RONALDO (16) seguido de SANTILLANA (12), Pahíño, Pirri, Benzema (8), Di Stéfano, Raúl (7), Amancio, Butragueño y Bale (6), Luis Regueiro, Rial, Puskas, Velázquez, Hugo Sánchez, Hierro y Ronaldo Nazario (5).
El Real Madrid lleva 32 partidos oficiales sin conocer la derrota.
El Real Madrid lleva 37 partidos de liga sin perder, lo que constituye la mayor racha de su historia.
GOLES OFICIALES:
CARVAJAL: 13
MODRIC: 39
LUCAS VÁZQUEZ: 37
VINÍCIUS: 86
RODRYGO: 54
FEDE VALVERDE: 22
MILITAO: 11
MENDY: 6
CAMAVINGA: 2
ALABA: 5
RÜDIGER: 4
DANI CEBALLOS: 7
BELLINGHAM: 23
BRAHIM: 15
TCHOUAMENI: 2
ARDA GULLER: 6
FRAN GARCÍA: 1
MBAPPÉ: 4
ENDRICK: 1
GOLES OFICIALES 2024/25
RODRYGO: 1
FEDE VALVERDE: 2
BRAHIM: 1
MBAPPÉ: 4
ENDRICK: 1
VINÍCIUS: 2
Getty Images.
Vamos, no critiquen en nada al Madrid porque el buen madridista es el madridista que está de acuerdo con todo lo que hacen su presidente, entrenador y jugadores y si no eres un pipero, vinagre, no madridista etc y solo se puede decir si ha jugado bien o mal, es la única crítica que se puede hacer.
Lo normal del género humano es disentir, si no ésto sería una secta o Corea del norte por poner dos ejemplos.
Vamos a ver vinagres no madridistas o como os llaméis aquí a nadie se lo obliga a opinar que yo sepa, ..sucede que yo estoy hasta las narices de la mafia anti en lo referente al mejor jugador del mundo y futuro balón de oro "VINI" es asquerosa la campaña a la q está siendo sometido nuestro jugador ASQUEROSA simplemente ASQUEROSA y que aquellos que se autodenominan MADRIDISTAS no defiendan sin tapujos no justificaciones a este hombre que desde que llegó con 18 años, le mordieron la cabeza, le pegaron patadas de toda índole fue sometido a una presión que ningún ser humano deberia sufrír NINGÚN, ya está bien de tibieza, no pero si, provoca, baila, se pone el dedo en los labios, que si patatin que si patatan...que asco de sociedad y que asco de los que justifican esta tortura, si yo fuese VINI me hubiese marchado de más de un campo y denunciado a los PERRODISTAS miserables con nombre y apellido como los de marca as al mijatovic a chuster y toda esta calaña de resentidos o envidiosos, cuando callan como remeras del mayor caso ee corrupción del deporte mundial como el barcelona pagó una millonada a los arbritos durante décadas ahí se callan ...cobardes, actúan contra un profesional que sólo ofrece espectáculo y nada más..."DEJEN EN PAZ VINICIUS" y a los madridistas sólo decirles que no compren el relato de segundones y fulleros tramposos personificado en los patéticos y negreilonas e incluyo a los perrodistas
Vinicius (que, el sábado, pese a jugar horriblemente, marcó un penalty y provocó otro) se queda muy corto. ¿Qué es éso de exigir silencio a una grada que no hace más que insultarte desde el minuto uno? ¡No, hombre; no! Unos buenos cortes de manga como hizo aquél del sobornalona en el Bernabéu o subirte a las vallas y mostrar la camiseta como hizo el hormoneitor, también en el Bernabéu, por cierto. ¡Basta ya de medias tintas y de corrección política. A tope contra todos!
Muchas gracias Javi por mostrar tanto los datos como tus opiniones con claridad y honestidad.
No existiendo nadie en España que apoye la discriminación por motivo de raza, discursos de "raza superior", ni por supuesto hay legislación segregacionista ni nada que se le parezca, el sentido común y las actuaciones contundentes pero puntuales, y que todos apoyamos, es lo que toca aplicar.
Por esto mismo, las afirmaciones irresponsables y genéricas donde se tache de racista a la sociedad y a todos nosotros merecen siempre un buen rapapolvo, lo diga quien lo diga.
Entiendo que las cosas volverán a su cauce.
Volviendo al chiste de Martínmorales, el que piensa que España es racista probablemente sea él mismo un racista, y piensa que todos los demás simplemente son iguales que él.
Me vas a perdonar, amigo. Tu y yo nos conocemos desde la infancia. Cada vez pienso con más fuerza que las sociedades en general tienen un punto importante de racismo, de xenofobia, de miedo a "que me quiten lo mío" que se refleja en una conversación de bar, en el campo de fútbol, en los toros, etc. Nadie lo va a reconocer, evidentemente, pero veo un poso que me gusta muy poco. Un abrazo enorme