Llora la diosa Victoria

Ay. Quién pudiera evitar comentar hoy las portadas. Quién pudiera acaso simplemente no mirarlas ni de soslayo, taparse los ojos con las sábanas, darse la vuelta y pedir, por clemencia, que le dejen dormir hasta que, ojalá, Morata nos devuelva la afrenta. Pero no. La Galerna no hace dejación de funciones y asume -incluso sacando pecho- que vino al mundo en un momento aciago para el madridismo, al final de una temporada que, por obra y (des)gracia culé, parece no terminar nunca. Así que miremos al monstruo a la cara, sin congoja y bien pertrechados con nuestro particular modo de decir que volveremos.

Hay que reconocer que Marca nos sostiene, nos sube la autoestima y nos facilita el trabajo gracias a su enésima prueba de madridismo forofo. Esta vez es Zidane el medio utilizado para mostrar su descarada pasión blanca. "Espero que Morata haga hoy algo grande", dice el dios francés. Nosotros, querido Zizou, también lo esperamos, y hasta no nos importaría que no fuera el canterano el hacedor de la buena acción del día. No podemos menos que aplaudir a Marca. Muchas gracias por hacer de tripas corazón y no ocultar tu madridismo en estos difíciles momentos. En tu ambición generalista, sabemos que te habrá sido difícil, y de ahí tal vez que la citada frase de Zidane aparezca -casi imperceptible- a los pies de Messi, a quien ya por adelantado, como queriendo hacer la portada de mañana, catalogas como "el señor de la final". Sabíamos que no nos fallarías. Siempre podemos contar con el Diario de la Hernia para echar una mano, tal vez al cuello, pero mano al fin.

En este asunto de hacer gala de madridismo, el caso de As es hoy más sutil, y eso nos obliga a ser más comedidos en el análisis. "Triplete o moratazo", titula Relaño, logrando, en apariencia, una asepsia informativa propia de una facultad de periodismo. Pero -oh, qué extraño- ya decimos que solo en apariencia. Es sabido que la prensa maneja no solo el texto como material informativo, sino también otras claves menos obvias, pero tanto o más efectivas. Así, por ejemplo, no es lo mismo colocar una noticia en una página par que en una impar, como no es igual el efecto de aparecer en una sección que en otra. En el caso que nos ocupa, es el noble arte de la tipografía quien viene al rescate de As y quien le salva -una vez más y las que quedan- de ser englobado bajo el nombre de Central Lechera. En consecuencia, el Diario de la Ouija nos presenta la palabra "triplete" con caracteres de mayor tamaño (y en color más vivo) que los utilizados para escribir "moratazo", pareciendo así que lo esperado y -aun más- lo deseado por el peculiar madridismo de As es que Morata se quede en Morata y no llegue a "-azo". Si esto es así, nos atrevemos a pedir a Relaño que, en futuras ocasiones, opte por colocar "moratazo" entre paréntesis, en minúscula, en color gris marengo y, por qué no, en los bajos de la portada y a los pies de Messi. Esta mayor honestidad nos facilitaría el trabajo.

Estamos seguros de que nuestros lectores sufren con y por nosotros ante el desafío que supone confeccionar esta sección en días como este, así que nos permitimos la licencia de -sin mayor comentario- colocar a continuación la portada de Mundo Deportivo. No lo hacemos, sin embargo, por hastío, sino porque ambas tienen el decisivo acento común de optar por una elaboración más pictórica que textual. Vayan de antemano nuestras más sinceras disculpas para lo pictórico.

Por debajo de las palomitas, el bañador, el DVD y la bufanda, Sport opta por una especie de collage de escudos blaugranas, donde, de paso, el titular casi admite que el nombre de Messi podría sustituir al del equipo. Més que un club ma non troppo, parece. Nos alegramos de ese valiente paso de Sport, gracias al cual los mesetarios de Madrit tal vez se sientan menos solos, o incluso escuchados y hasta reforzados cuando se preguntan qué sería del Barcelona sin Messi. Parece que poco, o menos, según admite veladamente Sport.

Reconociéndole méritos al diseño de Sport, es hoy Mundo Deportivo quien nos gana para la causa estética. La cubitera que siguen vendiendo parece continuar haciendo de las suyas en la redacción y, en consecuencia, le ha salido a Mundo Deportivo una portada muy fea, sí, pero y qué. Es sabido que lo feo por lo feo no es cosa baladí, sino una vertiente artística de postín, que pretende no hacer concesiones a los gustos reinantes, tan asépticos como conservadores y aburridos. Así, frente al diseño pulcro y estandarizado que imponen McDonalds e Ikea, Mundo Deportivo alza su grito para ofender la vista con una mezcolanza de elementos que -porque no sabemos de arte- quisiéramos no haber tenido que ver nunca. Algunas crónicas cuentan que se ha visto correr una lágrima por la mejilla de la diosa Victoria que corona la Puerta de Brandenburgo.