Laurence, decime qué se siente

Si los independentistas sueñan con proclamar la Segunda República catalana en el seno de la Primera República catalana – que ya celebraron en octubre – Mundo Deportivo se abonaba ayer al “realismo” mágico de su entorno político y vislumbraba la renovación – vitalicia - de la, a su vez, renovación hasta 2021 – y aún por oficializar- de Lionel Messi. Y en estas, cuando ya nos temíamos, para hoy, una portada en torno a una huida del argentino a algún nutricionista de Bruselas, los de Godó nos sorprenden con una escapada aún más disparatada: la de Cristiano Ronaldo a los Ángeles FC.

No cabe deducir, por insustancial y hasta ridícula, que la portada de Mundo Deportivo carece de eficacia. Veámoslo con perspectiva. En el centro y ocupando casi todo el espacio se nos habla del posible fichaje de Özil por el Barcelona. Si el sábado el mismo medio anunciaba el acuerdo por el holandés De Light, el martes por el brasileño Coutinho y el miércoles por el francés Griezmann, este viernes le toca el turno al alemán del Arsenal. Cuatro fichajes en siete días y objetivo cumplido.

Porque, en realidad, lo que consigue Santi Nolla, con este aparente ataque de jeque quatarí, es dinamitar, si cabe aún más, la credibilidad de este tipo de noticias ante sus propios lectores que, irremediablemente hastiados, desplazan su atención hacia los contornos de su diario donde les espera una emboscada. Y es que es ahí, en la cabecera, donde nos asalta, primero, el presunto enfado de Cristiano Ronaldo con sus compañeros para rematarnos a continuación, a pie de página, con la tentación del portugués por marcharse a la Major League Soccer de los Estados Unidos.

Pero lo peor de dicho titular es que si uno decide abrir el diario en busca de la noticia descubre que la información no es una mención de algún tabloide que corresponda a una intoxicación de hackers rusos, ni es una mala pasada de los nervios de algún becario que escuchase al astro portugués afirmando que va a jugar como los ángeles (y no en los Ángeles), sino que, por el contrario, viene firmada por el mismísimo Francesc Aguilar - redactor jefe de Mundo Deportivo y espectro de selfies - quien asegura que Cristiano Ronaldo sopesará su marcha a la liga americana cinco meses después de ganar su quinto balón de oro.

Sport opta esta vez por la estrategia del desconcierto. Si ayer pregonaban en su primera página que las altas instancias del club azulgrana se debatían en la decisión de elegir entre Coutinho y Griezmann, veinticuatro horas después nos obsequian con que el veredicto de la dirección deportiva del Barça ha sido… Nabil Fekir, jugador del Olympique de Lyon.

No hay que ser un gran experto en fenomenología culé para percatarse de que el hilo del que han tirado en la redacción de Sport no es otro que el que confiesan en la misma portada: el jugador ha sucumbido al encanto de Messi. Ustedes ya saben, los futbolistas del Barça no firman por dinero – sus padres si acaso – sino fundamentalmente porque quieren jugar con el astro argentino. Si antaño a los recién llegados a la entidad barcelonista se les aconsejaba en su presentación que pronunciasen alguna palabra en catalán - como “visca el Barça” o “ja sóc aquí” o “la culpa es de Franco” - desde hace años la consigna es asegurar que el fundamento de su fichaje radicaba en su deseo irrefrenable de jugar con el diez de Rosario.

“Fekir le hizo un guiño a Messi”, se puede leer junto a una foto del jugador del Lyon levantando su camiseta, tal cual hiciera el argentino en el último clásico de Liga en el Bernabéu. Una imagen que avala, a ojos de cualquier aficionado del Barça, el titular de Sport: “Contacto Fekir” sentencia, en grandes caracteres, porque efectivamente no es el club el que ha contactado sino el propio jugador francés con ese gesto, casi de súplica, para poder cumplir el sueño de cualquier futbolista. Espíritus críticos, sin duda.

El Ouija Today se presta esta vez a sembrar la duda en el madridismo cruzando unas declaraciones sesgadas de Cristiano Ronaldo en clave paranoica: “Zidane es como yo, no está preocupado”, se cita al  portugués. Y justamente debajo añaden: “Quiero tener siete hijos” que, como todo padre de familia sabe, es la mejor forma de no estar preocupado y llevar una vida sosegada. El que está claro que no puede tener una vida tranquila es Luis de Guindos,  reconocido colchonero y empeñado, pese a su responsabilidad, en no dormir. “Cuando perdemos no me duermo hasta las 3”, asegura. Que no se queje el Ministro de Economía que aún hay quien no se durmió hasta el 93.

The Hernia Chronicle tira la casa por la ventana y nos sorprende con unas declaraciones de la madre de Theo y Lucas. “Reportaje exclusivo”, enfatiza en la parte superior como si hubieran conseguido las fotos de la boda de una tonadillera. Cabría preguntarse: ¿estuvo en riesgo en algún momento la exclusividad de la entrevista?

En cualquier caso el testimonio peca de insustancial y de poco acorde a los protagonistas. Quizás hubiera resultado mucho más atractivo y en sintonía con los dos hermanos, un reportaje con los enanos de sus fiestas de cumpleaños. Pero aun así es de agradecer que se haya puesto énfasis en la figura de la madre porque el Real Madrid es un club cuyas esencias son profundamente maternales. Todo el mundo conoce a María Dolores dos Santos Aveiro, madre de Cristiano, a Paqui la madre de Sergio Ramos y ahora asistimos a la presentación de Laurence, la mamá de Theo.

No se muestra la madre del lateral izquierdo, de todos modos, muy puesta en asuntos de fútbol: “Les diré que no se den patadas” afirma, lo cual dicho a un soldado del Cholo es como decirle a Kroos que no tire pases. “No puedo decantarme por ninguno, voy con mis hijos”, prosigue. Una afirmación que solo se puede circunscribir al contexto de un partido de Liga. De haberse tratado de una final de Champions, Laurence, a buen seguro, hubiera arropado a Lucas, porque una  buena madre debe, ante todo, proveer de  consuelo a sus hijos. Una ocasión única, de haberse dado, para que Gallardo hubiera titulado “Laurence, decime qué se siente”.