El Bayern de Múnich es una máquina perfecta, volvió a demostrarlo frente al Barcelona en una noche inolvidable para todos los madridistas. De las pocas que lo serán sin que el protagonista vista de blanco y resida en la capital de España. El Manchester City, regado en millones de euros y con la incorporación de Grealish en el ataque, sigue y seguirá siendo aspirante y candidato a la ‘Orejona’. Y el PSG, qué decir de los parisinos. Quizá el menos equipo de todos, pero, claro, cómo descartar a un conjunto con dos grandes porteros, Neymar, Mbappé en estado de gracia que -supongo- querrá despedirse (así sea) con un gran sabor de boca y que, además, han contratado a dos imposibles: Sergio Ramos y Leo Messi. Con semejante elenco, cualquiera menosprecia sus opciones.
A priori, estos son los tres favoritos que a todos se nos vienen a la cabeza para ser los próximos campeones de Europa. Cierto es que las sombras de Chelsea (equipazo) y de Liverpool -con Van Dijk, Salah, Mané y Firmino- siempre sobrevuelan y son alargadas. Visto todo esto, parece difícil que la escuadra que levante el trofeo el próximo 28 de mayo en San Petersburgo se encuentre fuera de esa quiniela. ¿Y el Real Madrid? Se preguntarán, con buen criterio, ustedes. Pues es sabido mundialmente que los blancos, al tratarse de la Champions, siempre tienen un plus. Llámenlo amor, idilio, respeto o como quieran. Suele decirse que el escudo solo no gana los partidos, y así es, pero sí impone recelo en el contrincante.
psg, bayern y manchester city son los tres favoritos para ganar la champions league
Si hoy bajara un extraterrestre, de algún planeta perdido y desconocido, y preguntara cuáles son los argumentos de los de Ancelotti para confiar en tener opciones de colocar la Decimocuarta en la vitrina del nuevo Santiago Bernabéu, podríamos decirles poco más de lo ya manido. Que en un área tiene a Courtois, que ya el año pasado opositaba a mejor portero del mundo (aunque los premios se lo nieguen), y que en la opuesta se encuentra Karim Benzema, que no sabemos si es el mejor delantero del mundo, el mejor jugador del mundo o el mejor ‘10’ del mundo. Quizá sea todo a la vez, aunque los premios tampoco lo reconozcan.
Salvo eso, el resto no parecía muy prolífico ni optimista al término de la temporada pasada cuando ya todo el mundo soñaba con Mbappé a un año de la finalización de su contrato. La no renovación de Sergio Ramos y Varane, pareja inquebrantable y ganadora desde hacía cinco cursos, Casemiro, Modric y Kroos con un año más, y la esperanza de Vinicius y de su posible explosión tras toneladas de burlas y chistes. Nada más había cambiado en la plantilla blanca más allá del que tuviera fe en la vuelta de UN Bale que, ojo, nada le incapacita para volver a decidir una final, o en que Hazard alcanzara al fin regularidad, estado físico y, sobre todo, su nivel futbolístico.
Sacrilegio. Hasta el cuarto párrafo no he mencionado a David Alaba, que, lo primero que ha hecho al llegar al Madrid, ha sido decidir un Clásico en el Camp Nou. Quizá la irrupción de Kroos en su día se asemeje a la del austriaco, pero la jerarquía mostrada no era esperada ni por el más optimista de los seguidores madridistas. Y por aquí quiero comenzar los argumentos blancos. Es diciembre y Militao, que ya dio muestras de hasta dónde podía llegar en el tramo final de la temporada pasada, y el exjugador del Bayern de Múnich, forman una de las parejas más seguras de Europa. Sin exagerar. Su compenetración, tras solo cuatro meses, es absoluta. Su confianza mutua es admirable y su crecimiento como dúo, incalculable. El techo del brasileño es desconocido, es un portento físico que cada vez comete menos errores, en buena parte, por culpa de la experiencia acumulada por Alaba, del que está aprendiendo a una velocidad envidiable.
MILITAO Y DAVID ALABA FORMAN UNA DE LAS PAREJAS MÁS SEGURAS DE EUROPA
Casemiro no está a su mejor nivel, pero lo alcanzará. Modric y Kroos, por contra, están excelsos. Y eso no me gusta. Entiéndase. No me gusta porque solo es diciembre y, al ver a Carletto en el banquillo, es imposible no rememorar aquella, su segunda temporada de su primera etapa. Pocas veces desplegó el Real Madrid un fútbol más vistoso, pero solo duró hasta el Mundial de Clubes. En enero el equipo se cayó y eso es lo que hay que evitar esta temporada, aunque al italiano no se le ve excesivamente preocupado habida cuenta de las escasas rotaciones que introduce en sus alineaciones. Quizá tenga un ‘as’ en la manga y se llame Antonio Pintus.
La banda derecha debe ser un solar por explorar. Un día Rodrygo, otro día Asensio… ambos cumplen, de momento. Pero ninguno sobresale. Quizá sea el punto débil para que el Madrid termine por ser una máquina infalible en ataque. El otro flanco, el siniestro, tiene dueño y es un ídolo para la afición. La explosión de la que hablábamos antes se ha producido y solo esperamos que sea duradera en el tiempo. Vinicius es el hombre que, junto a Mbappé, llevará al equipo a los títulos durante la próxima década.
Ahora llega el turno de los que nunca fallan, los que siempre están y estarán preparados para cuando hay que asir galones. Fede Valverde, Camavinga, Nacho y Lucas Vázquez. Menuda guardia pretoriana. Con ellos a cualquier guerra. Tan necesarios como el más rutilante de los titulares. Y luego hay tres ‘expedientes X’ dentro de la plantilla: Bale, Hazard y Jovic, que, para mí, pueden tener la llave que abra las puertas de la Copa de Europa. Por calidad, son diferenciales, y la calidad nunca se pierde; ni en Copa frente al Cornellá ni en la semifinal de Champions frente a Neuer. Quién sabe.
Por eso pienso firmemente que el Madrid puede optar a la Decimocuarta. ¿Es favorito? Creo que no. ¿Le da con lo que tiene para poder ganarla? Sin duda. La temporada pasada, con bastante menos, se quedó a un paso de la final. Motivos para creer y soñar hay de sobra.
Si bien para mí era muy difícil que el Chelsea ganara la Champions el pasado año o, un ejemplo más cercano: las ediciones del 2016 y 2018, el Madrid aspira a todo. Todos creemos que City, Bayern y Liverpool quizás están mejor que el Madrid, pero lo que está claro es que es un equipo que no se lo va a poner fácil a nadie y que, en Champions, el rival a batir SIEMPRE será el rey, el Real Madrid.
Yo soy pesimista cada vez que veo un partido de la Premier,juegan a otra velocidad,mucho más rápido,son muy físicos y emplean,por eso mismo,a más jugadores.Y el Bayern,algo parecido.La esperanza para nosotros es que,a lo mejor,no mantengan ese ritmo en Abril y,por el contrario,el Madrid lo aumente,que es lo que parece estar haciendo el Chelsea y,en menor medida,el Psg.Si me dan a elegir preferiría al equipo parisino antes que a los tres buenos ingleses(el United no está en quiniela alguna).Ahora bien,si se sigue sin rotar,el de la pócima mágica sería Pintus.
Estoy contigo, los equipos ingleses están por delante. No quiere decir que no se les pueda ganar pero son favoritos. Después Bayern y PSG casi al mismo nivel. Para mi el Madrid no está ahí. La liga es lo más importante. El año que viene con Mbappe puede ser diferente.
De momento las cosas van bien. El autor ha sido hábil y publica el texto antes del partido contra el Malakito de Memphis, no vaya a ser que los colchoneros salgan sonrientes del estadio . Yo, incluso con un buen resultado ante los rivales madriles, seguiré siendo comedido y no me ilusionaré en demasía con la posibilidad de alcanzar la Champions esta temporada. Aunque no seré yo quien niegue la calidad de la plantilla. Pero una cosa es la Liga, cada vez más floja, y otra bien distinta, es Europa (Chelsea, Bayern y PSG son los grandes favoritos). Y ojo con el resto de los que se han clasificado. El físico es importantísimo. Cualquiera te puede dar más que un susto. Apoyar y seguir a los blancos, claro, por supuesto. Sin embargo no me dejo llevar por la euforia, mala consejera.
PS Ojo con el Cerdilla y el Farsalona, que han tirado la liga para concentrarse en la Champions.
El Real Madrid no puede ganar la shempion. No le da con lo que tiene. Lo dicen los manolos de las ondas y los envoltorios de pescado.
“En enero el equipo se cayó”
Falso, falso, falso.
Nos seguimos creyendo la propaganda.
2014/2015:
primera vuelta: 15 victorias, 3 derrotas.
segunda vuelta: 13 victorias, 3 derrotas, 2 empates.
Semifinales de Champions.
Últimas diez jornadas de liga: 9 victorias, 1 empate.
El equipo llegó muy bien al final de temporada. La propaganda antimadrid termina calando.
Estos días de gloria deportiva me debato en una especie de percepción de sentimientos un tanto esquizofrénica. Como madridista de a pie me llena de orgullo y satisfacción la evolución del Real Madrid. Quien, no lo olvidemos, acaba de hacer pleno al clasificar para la próxima ronda de la máxima competición continental a los primeros equipos de futbol (femenino y masculino) y al juvenil; por cierto ¡vaya golazo de Aranda - el hermano bueno lo tiene el Real Madrid- al Inter ! , jugador que en el último minuto estuvo a puntito de añadir otro formidable. Imaginaos esa sensación jubilosa combinada con la hilaridad que me provoca la catastrófica coyuntura culé en lo deportivo, en lo económico y en los institucional.Al mismo tiempo, me embarga un sentimiento de pena o, mejor explicado, de compasión cristiana por el culé. Está muy jodido ...