Keylor en la portería equivocada. Esa fue la primera, abrumadora y desoladora impresión, el nubarrón de color panzaburro que convertía en noche el día y anunciaba la tormenta inminente. Sacudí la cabeza de un lado a otro, como si los malos presagios no fueran sino gotas de agua adheridas al cabello. Pero cuando levanté de nuevo la mirada, Keylor seguía en la portería equivocada. De rodillas, la cabeza baja y los brazos extendidos al cielo, en una imagen familiar mil veces vista pero ahora tocada de una luz extraña, onírica, inquietante, como si en el álbum familiar de repente hubiera aparecido una foto en la que mi padre abrazase sonriente a una extraña y estuviera rodeado de otros hijos también sonrientes, disfrutando de un hogar desconocido para mí pero a todas luces familiar para él. Keylor estaba en la portería equivocada y el mundo seguía girando como si todo fuera igual, como si el orden universal no hubiera sido fatalmente invertido.
Desde hace ya demasiados meses, todo en el Real Madrid parece ser Keylor en la portería equivocada. Una desazón tan indefinida como ineludible, un desajuste vago e inaprehensible que lo trastoca todo y lo envuelve en un halo irreal, delirante, desfigurado, como si el Real Madrid hubiera confundido su ser verdadero con la imagen que le devolviera un espejo cóncavo. El Real Madrid, convertido en una caricatura a veces grotesca y a veces turbadora, pero siempre desconcertante. Keylor en la portería equivocada ha sido este verano lúgubre y oscuro, eternamente encapotado, huérfano de chispa y de júbilo y de ilusión; un verano sin las risas blancas y preñadas de alegría de los niños corriendo por la playa, que es tanto como decir un verano sin madridismo. Yo miraba a Keylor en la portería equivocada, y se me venía encima el invierno de este verano maldito para oprimirme el pecho con su peso asfixiante.
Keylor empezó a estar en la portería equivocada cuando a Zidane, nuestro Zidane, se le trasconejó el abrigo y apareció embutido en aquellos famosos pantalones que sospecho pidió prestados a Sergio Ramos. Entonces no quise darme cuenta, pero en ese momento comenzaron a llegar a mis oídos las notas del vals de la Sinfonía Fantástica de Berlioz, cuyo ritmo hipnótico, febril y mórbido acabó por enseñorearse de todo cuanto yo veía alrededor del Madrid. Y bajo el influjo de esa música opresiva, el Real Madrid fue perdiendo lo que le es más querido: el optimismo, la esperanza, el orgullo, la ilusión... hasta perder a Keylor, nuestro Keylor, el hombre que tenía las mismas ganas de morir que de abandonar el Real Madrid tan sólo un año antes, cuando fichamos a Courtois.
Por eso apareció Keylor en la portería equivocada. Y fue en ese preciso momento cuando caí en la cuenta de la dimensión del desastre. Hoy todos lamentamos el bochornoso juego de nuestro equipo en París. ¿Pero cómo podríamos haber jugado de otra manera, cómo podríamos haber disparado a puerta una sola vez, si Keylor estaba en la portería equivocada?
La marcha de Navas , porterazo y buena persona que dignificaba al Real Madrid, no es nada que otro signo - síntoma del cáncer que carcome al club desde hace mucho tiempo .Y tiene nombre...FLORENTINO PEREZ
Y lo dije cada vez que ganábamos una Champion...y tirábamos una liga .
HALAMADRID Y NADA MAS, abandonen el barco quién quiera yo no desde luego, yo no, ah.... y HALAMADRID
Agustin francisco y quién fichó a Keylor Navas?
Tiramos a puerta 2veces y marcamos 2 goles aunque fueran anulados luego,2 goles que se comió Navas ,tal y como hacía siendo portero del Madrid. Así que no veo diferencia alguna.
Sí, un detalle que está pasando inadvertido. La debacle final de la pasada temporada comenzó en la vuelta de la Copa, donde encajó tres goles en dos disparos.
Opino igual. Ha hecho Navas cada pifia...otra cosa es que nos caiga bien, porque el tico es imposible que no te caiga bien. Le deseo todo lo mejor, mientras no estemos enfrente nosotros.
Courtois está regular tirando a mal, pero ya que es nuestro portero habrá que apoyarle. Miedo me da que le empiecen a pitar y esté todavía peor.
Asumamos la situación, Keylor se ha ido y ya está en la portería correcta: en la que él quiso estar. Fue él quien tomó la decisión de irse (haciéndole una faena al club, todo hay que decirlo).
Perdieron maes aguanteselan pendejos o supieron defender a Keylor maricas.
parecería que Navas salvó al PSG y que hizo un partidazo, cuando la verdad es que los 2 únicos tiros que fueron a puerta se los comió con patatas, como el año pasado en copa cuando le estábamos dando un baño al VARsa y le cascaron 3 goles de 2 tiros o en la supercopa de Europa contra el Pateti que le cascaron los 4 tiros que tiraron los Cholitos. Si de verdad alguien piensa que el problema del Madrid contra el PSG fue la portería, es que no tiene ni idea de fútbol o simplemente no vió el partido y sólo ha leído lo que dice esa prensa tan afín al madridismo como ASco y MARCA
Señor Falstaff, espero que e Zidane recupere su abrigo y traiga con él lo que representó en su primera temporada. De vez en cuando leo el articulo "el abrigo de Zidane", uno de los mejores de La Galerna, según mi opinión.
Lo que escribes, justamente eso sentí. #HalaMadrid.
Hay que recuperar la moral como sea, Falstaff. Los harúspices tenéis que encontrar nuevos signos venturosos, como aquel mítico abrigo
Así es, sir John, hemos traspasado a Keylor y nos hemos quedado sin un pedazo de alma. Hemos perdido la fe, sin la que no podemos mover no ya montañas, sino ni siquiera pedruscos que obstruyan nuestra senda.
Es doloroso ver a Keylor en la portería equivocada, pero lo es más ver a Zidane en el banquillo equivocado. Si es que es realmente Zidane, y no un señor que se le parece y a quien visten en la sastrería del capitán.
Parte el alma ver al Real Madrid en la vía equivocada, la de la derrota y la apatía, el desorden y la falta de tensión.
Que nos devuelvan a nuestro Madrid, y nos lo devuelvan ya.
Con respecto a la situación de Keylor, no se nos puede olvidar que Zizu se opuso a su transferencia todo lo que pudo. Y dio sobradas muestras de que el cambio de titularidad de Navas por Courtois fue casi una imposición del señor Florentino y no una designación personal suya.
Si el 50% de la marcha de Cristiano fue por obra o omisión de Florentino. En el caso de Keylor fue de 100% , porque el tico luchó todo lo que pudo por quedarse en el club de sus amores, hasta que fue casi obligado a irse. Lo dramático de todo esto es que hasta el momento Hassar y Courtois, los fichajes estrellas de Florentino, no han mostrado su nivel, ni a medias y ambos tienen desempeños muy inferiores a los dos grandes que vinieron a sustituir.
Es que Keylor no es solo un arquero, es dignidad, y fuerza, orgullo, trabajo y honestidad. Yo pienso que es un gran arquero, pienso que ha pifiado, y pienso que hay algunos, no muchos mejores, pero también pienso que él le daba al Madrid algo que muchos no valoran: orgullo, fuerza moral, lucha, honestidad y mucha dignidad. Y en eso es el número uno, no me cabe dudas. Para quienes no valoraron esos grandes y escasos atributos, Keylor era sustituible, para quienes pensamos que esos valores valen oro y del más puro y en enormes cantidades, Keylor es insustituible. Entonces coincido con John Falstaff, la sensación del miércoles era que Keylor estaba en la portería equivocada. El deporte y cualquier actividad humana va más allá de lo que se mide con cifras y lo que aportaba Keylor, es algo que muchos no valoran pero es inmensamente necesario también y es: corazón y sensibilidad. Y justo eso le faltó en cantidades industriales al poderoso Real Madrid del miércoles, corazón y sensibilidad, control y fortaleza.