Hristo Stoichkov se ha organizado un partido-homenaje por su cincuenta cumpleaños y no ha asistido ni el proverbial Tato. No sé cuál de las dos cosas me extraña más: si esto de la organización de partidos amistosos a mayor gloria de uno mismo o el hecho de que a un tipo tan afable, famoso precisamente por no tener más que palabras y acciones cariñosas para todo el mundo, le haya sido tan ingrato el mundo del fútbol al que tanto ha dado (pisotones).
Me ha roto el corazón verle de corto, con esa barriga acaso calimochera y llorando la ausencia de gente como Baggio, Maradona, Messi y Ronaldinho, que habían prometido su presencia para, a última hora, dar plantón al búlgaro. Hristo no merece algo así, y no me extraña que al término del fallido intento de autobombo haya declarado que ha borrado de su móvil los contactos de tan insolidarios e informales compañeros de profesión.
Digo "compañeros de profesión" y hablo en términos pretéritos. Hristo (claro) ya no juega al fútbol, desempeñándose desde hace doce años en labores de entrenador con tan refulgente éxito, y dejando por doquier tan imborrable huella humana, que se acrecienta mi perplejidad ante el escaso éxito cosechado por este partido de amigos (?) de Hristo vs. amigos de Hristo. Quizá debería haber tirado de la agenda de los de Meijide, cuyo nombre de pila se escribe distinto pero se pronuncia igual, y cuyo talante no menos conciliador sin duda le habrá granjeado también un millón de amigos en esta vida.
-Necesitamos saber si va usted con los de Hristo o con los de Risto.
-Pero si soy el único que ha venido.
-Por eso mismo.
Digo que Hristo ejerce ahora de entrenador y digo bien. Y de los buenos. Se estrenó en 2004 con el cargo de seleccionador de su país. Estuvo un par de años allí, con el siguiente resultado global: Capitanes que dimitieron por no aguantarle, 2 - Jugadores que no eran capitanes pero también dimitieron por no soportarle, 1. No ganó precisamente la Copa del Mundo pero siguió teniendo contento a Roberto Carlos (el de la canción, no nuestro exjugador).
En abril de 2007, fichó como técnico del Celta de Vigo con el objetivo de lograr la permanencia. Consumó el descenso del equipo celeste el mismo día en que Capello ganaba para el Real Madrid la Liga de las remontadas. En octubre dimitió por motivos personales. Es una cosa personalísima entrenar en Segunda.
No estuvo mucho tiempo en el paro, porque ya en mayo de 2009, apenas diecinueve meses después de su estampida del Celta, rubricó su contrato con el prestigioso Aboomoslem de Irán. Rubricó su contrato pero no llegó a empezar. Cuentan que unas molestias estomacales le impidieron tomar el avión rumbo a Teherán. Un rato antes se había informado, por fin, de cómo se las gastaba Ahmadineyad. Hristo primero firma y luego pregunta.
Poco después firmó por el no menos legendario Mamelodi Sundowns de Sudáfrica. Un 29 de junio llegaba y al siguiente 17 de marzo se marchaba, un tiempo impresionantemente prolongado si se tiene en cuenta las semanas que aguantó como técnico del CSKA de Sofía, club por el que fichó en junio de 2013 y del que se despidió de manera fulminante sin antes haber podido morrearse con ningún jugador a cuenta de la conquista de alguna liga o algo.
Uno lee todo estos datos y se extraña de que, a falta de baggios y messis y ronaldinhos, al menos no hayan asistido a su auto-homenaje nutridas representaciones del Celta, el Aboomoslem, el Malemodi Sundowns o el CSKA. Cría cuervos, de verdad.
Sus lágrimas son mis lágrimas. Esos pucheros en el centro del campo, rodeado de la sonora ausencia de los mencionados cracks, despellejan mi alma a tiras. Di que sí, Hristo. Borra sus números de tu móvil. De hecho, si puedes, tira el móvil al Danubio, respira hondo y yergue el mentón con toda dignidad. No necesitas a nadie más para ser lo que eres.
Buenos días. Todavía no he terminado de leer el artículo, pero al ser vosotros algo así como el MI5 de la "Caverna" que dirían nuestros adversarios, ¿no tendréis el mail de Hristo para mandarle el artículo?
Gracias, voy a seguir leyendo.
¿
Estoy a punto de llorar...de la risa. Recoge lo que sembró.
Para rematar el perfil de este sujeto les recomiendo que escuchen unos de los Radios de R.Dees de la semana pasada en la que salía este energúmeno con el Risitas, también conocido como Héctor Fernández, hablando de la ingeniosa "BROMA" de los cerdos con el escudo del RM. Aquél es un famoso periodista de raza muy conocido por sus desavenencias y trifulcas en directo con Kalikatres Sapientísimo (también conocido como SSegurola) y por defender sus argumentos contra viento y marea frente a los que son más poderosos que él.
No ofende quien quiere sino quien puede. Seguimos para bingo.
El dragón de Komodo caza mordiendo a sus víctimas y deja que su saliva llena de bacterias hagan enfermar a estas. Este elemento me recuerda a este animal, pero hay una gran diferencia. El dragón lo hace para sobrevivir, el ex futbolista lo hace por simple estupidez o por ser simple y llanamente mala persona.
Los medios le dan pábulo, lo cual hace que él crea que es alguien y a los medios seguir con su linea editorial. Sus insultos fortalecen mi ánimo.
Pues con ser este artículo suficientemente esclarecedor más bochornosa me parece la actitud de como dice Dees, el risitas de Onda Cero que ante los descalificantes comentarios del impresentable este, no hacia mas que eso, hacer unas risitas en una entrevista incalificable.
¿Y luego señor Bengoechea se extraña usted que algunos aplaudamos con las orejas cuando estos ....son expulsados de sus puestos de trabajo? Unas veces a otro medio y otras , las mejores para mí, a la puñetera calle.
Pues con ser este artículo suficientemente esclarecedor más bochornosa me parece la actitud de como dice Dees, el risitas de Onda Cero que ante los descalificantes comentarios del impresentable este, no hacia mas que eso, hacer unas risitas en una entrevista incalificable.
¿Y luego señor Bengoechea se extraña usted que algunos aplaudamos con las orejas cuando estos ....son expulsados de sus puestos de trabajo? Unas veces a otro medio y otras , las mejores para mí, a la puñetera calle.
De Stoichkov, como persona, se han dicho muchas cosas (malsa, por supuesto), y si no se han dicho más es por haber jugado en el Barcelona, equipo protegido mediáticamente hasta la naúsea.
Chulo, leñero, bocazas, faltón, maleducado, cobardón (cómo se acojonaba cuando Hierro le cogía y no estaban sus amiguitos para protegerle), y algunas más que omitiré por educación.
Pero a mí, todo su antimadridismo me ha parecido una pose para caer en gracia a su afición, tan propensa a disfrutar más con el insulto al Madrid que con los éxitos de su equipo.
Stoichkov siempre se ha puesto del sol que más calentaba en Barcelona. Ya fuese como antimadridista furibundo (siempre), como cuando tras palmar contra el PSG rajó de sus compañeros en un medio de Bulgaria. Más tarde, cuando Cruyff le dio puerta, puso de vuelta y media al holandés, pero lo más gracioso fue cuando un año más tarde, al ser despedido Johan, se unió a las críticas de la afición contra Nuñez.
En fin, uno de esos tios en los que puedes confiar, leal y noble. Una joya.
Lo que hubiesen dicho del tipejo este si hubiese jugado en el Madrid.
Buenas noches, excelente artículo tanto por su dureza,( totalmente justa) como por los aportes históricos,
no me imaginaba que había hecho el ridículo en tantos sitios, si alguien tenia alguna duda de lo
vomitivo que es este individuo, sólo tiene que releer este escrito que no deja títere( nunca mejor dicho)
con cabeza. Enhorabuena por poner en valor lo que el fascineroso búlgaro es y representa.
Saludos blancos, castellanos y comuneros
Pues el risitas que se prepare porque con la llegada de De la Morena el porvenir en su emisora se presenta bastante oscuro y ya se le está entreabriendo la puerta de salida.Obviamente me alegro.