No de todos los mejores se sabe si sirven hasta que es demasiado tarde
Yo soy tan hazardista como madridista. Y esto tiene que ver todo con el Madrid y menos con Hazard. Yo como madridista soy de Hazard y ya está, pero yo antes de que Hazard llegara al Madrid no era hazardista. Sólo empecé a serlo desde el momento en que supe que venía. Yo tengo una confianza plena en los gestores y directores del Real Madrid. Creo que eso es algo que me viene de la niñez, de cuando Mendoza y Lorenzo Sanz.
Yo miraba a Mendoza y Lorenzo y me parecía que no podía estar el Madrid en mejores manos. Y así ha sido siempre y sigue siendo. Casi no me importan los fichajes fallidos o incomprensibles. En el fondo hay un niño en mí que confía siempre en todo y en todos los que pertenecen al Real Madrid. Los cambios, siempre inevitables y necesarios, me cuestan al principio, incluso me resisto a ellos, pero enseguida los asimilo. Soy de asimilación madridista sencilla.
Hazard, al que antes de que lo ficharan ya lo queríamos todos de la sed que teníamos, fue un fichaje coyuntural. Quiero decir con esto que en otro momento puede que no se le hubiera fichado
Yo quiero que continúen todos, salvo casos excepcionales. Una vez dentro ya los quiero a todos porque los siento míos, como a Hazard. Dicen que cuando le dijeron el alcance de su última lesión se puso a llorar. Y yo con él, entendámonos. Yo siempre he confiado en Hazard desde que llegó y mis palabras escritas en La Galerna así lo demuestran. Recuerdo que hubo muchas dudas sobre su fichaje. Parecía que sí y luego que no y al final, después de todo, fue que sí.
Pero Hazard, al que antes de que lo ficharan ya lo queríamos todos de la sed que teníamos, fue un fichaje coyuntural. Quiero decir con esto que en otro momento puede que no se le hubiera fichado. Puede que incluso ni siquiera se hubiesen planteado ficharlo. Hazard podía dar tan buen resultado como Zidane, pero Hazard no es Zidane. Hazard podía no haberse lesionado y hubiéramos podido disfrutar del Hazard del Chelsea que todos queríamos. Apenas lo empezábamos a vislumbrar nos lo desgraciaron. Pero el asunto ya empezó regular con las gorduras.
A eso un madridista asimilador como yo no le presta más atención que la positiva, en este caso todo lo divertido y personal que podría tener presentarse, aunque sólo fuera para escribirlo, hecho un tonelete a la presentación del Real Madrid. Siempre queda la presunción de inocencia y de descargo con futuras actuaciones estelares que acallarán todas las críticas. Ese es mi madridismo confiado, se puede decir. O confiante.
Pero al supersticioso, al madridista supersticioso y suspicaz, esa gordura de la nueva estrella del Madrid es como para un druida ver posarse un cuervo en su ventana. Incluso tampoco haría falta recurrir a los augurios. Y es a posteriori, en la siempre ventajosa a posteriori, donde retrocedemos hasta las dudas. Aquellas dudas reales de fichar a Eden Hazard. Corren por ahí rumores, incluso noticiados, de que se sabía que la ética de trabajo del belga no era la idónea. ¿Era este el origen de las dudas? ¿Es la ética o la mentalidad? ¿Son las dos cosas? ¿No le pasa lo mismo a Jovic?
¿Estoy buscando yo un responsable ahora mismo de un error? No. Yo creo que Hazard fue un buen fichaje del Real Madrid y además era el único “gran” fichaje que se podía hacer en aquel momento. El interés del jugador provocó en buena medida también el interés del madridista. Y se hizo. Lo demás es historia. Hazard no ha salido bien por un cúmulo de circunstancias principiantes y negativas. Porque no todos los grandes jugadores sirven para el Real Madrid o, por hilar más fino, no todos los grandes jugadores sirven para el Real Madrid y no de todos se sabe que sirven hasta que es demasiado tarde.
El momento no favoreció al Madrid ni a Hazard, que estaba muy bien en Inglaterra. Ha sido una aventura imprevista que no ha cuajado, como si en busca del amor que no aparece nos atreviéramos a probar
Yo creo que la coyuntura, el momento, no favoreció al Madrid ni a Hazard, que estaba muy bien en Inglaterra. Ha sido una aventura imprevista que no ha cuajado, como si en busca del amor que no aparece nos atreviéramos a probar sin sentirlo del todo, buscando enamorarnos con el tiempo, como los matrimonios antiguos, con lo más cercano, con lo que tenemos al alcance, como Bovarys, y no esperar al amor verdadero, esa cosa tan difícil y tan cara.
Yo empezaba diciendo en este texto que soy tan hazardista como madridista y lo mantengo. Yo siempre seré hazardista a pesar de que ya he perdido la ilusión, con dolor, con el dolor de la ruptura de un pedacito de mi madridismo original, que sin embargo voy a conservar por si aún surgiera la magia de recomponer a Eden porque no hay nada perdido hasta el final de los finales. Y si éste acaba llegando, pues lo guardaré en la cajita de mis recuerdos.
Fotografías Getty Images.
Yo seguía a dos jugadores belgas que deseaba que estuvieran en el Madrid: Hazard y De Bruyne. Dos cracks. Esto puede pasar. Pero es que nos está pasando de todo. Una rachita de buena suerte no nos vendría mal.
Este tío es el peor fichaje de nuestra historia sin duda, ya ha habido suficiente tiempo para comprobarlo. Mil veces pero que Bale (a quien solo le sobraron los dos últimos años), que Kaká, que Robinho, Robben, etc.
Y por cierto, esta lesión -como la mayoría de las que ha tenido- es muscular, aquí ya no vale la excusa de Meunier eh.
Ahí, ahí con Prosinecki aunque tú a lo mejor no conoces la truculenta trayectoria de Prosinecki por el Real Madrid.
Y porque nadie se acuerda de aquel defensa, Woodgate.
Pues no, Prosinecki jugaba en el Madrid justo cuando yo acababa de nacer. De Woodgate sí me acuerdo, además se le fichó la misma temporada que a Samuel (otro que también pecó bastante de lo mismo en el único año que estuvo, a pesar de ser bastante mejor jugador que el inglés).
Pero yo hablaba de los que venían con el cartel de cracks, no creo que nadie se ilusionara tanto con el fichaje de esos centrales, aunque que fuera la posición en la que más carencias teníamos en aquella época.
Pues yo si me acuerdo perfectamente de la llegada de Prosinecki. Venía como auténtico crack joven recién de ganar la Copa de Europa con el Estrella Roja. Su fichaje fue muy complicado porque se tenía que lidiar con un país comunista como Yugoslavia (y con Miljan Miljanic, mandamás en su federación y antiguo entrenador del Madrid). Recuerdo perfectamente el primer partido que le vi de blanco, en el Teresa Herrera contra el Oporto. El Madrid perdió pero la sensación que me dejó Prosinecki fue fantástica: ¡¡¡menudo jugador, un verdadero crack!!! Empezó la liga. En uno de sus primeros partidos metió un gol de falta al Barcelona. Poco después otra falta jugando contra el Utrecht en Holanda, copa de la UEFA. Y adiós Prosinecki. Encadenó varias lesiones y ya no jugó más en su primera temporada. En las dos siguientes, y últimas con el Madrid, ya no era un crack sino una castaña.
Otro fiasco pero Jonathan Woodgate no venía como crack, por lo que yo no le compararía con el belga.
No se a que tipo de madridista le pudo hacer gracia ver al fichaje estrella de su equipo, por el que el club se dejó una buena cantidad de dinero, llegar el día de su presentación como un tonel de vino.
Yo de verdad es que este tipo de neomadridismo al que todo le parece bien no veo por donde cogerlo, lo de hay que perdonarlos por todo lo que nos han dado y esas cosas que no las haces ni con un hijo, o acaso si vuestro hijo saca este año sobresaliente en todo, el año que viene le permitís que suspenda todas? Pues eso es lo que lleváis justificando 3 años neomadridistas
Yo al neomadridismo que no comprendo es al que todo le parece mal ¿como a ti? Seguro que cuando ficharon a Cristiano tú decías que al que había que fichar era a Wayne Rooney.
No lo dudes. Además, Hazard vino con algo de sobrepeso. El as, el marca, y todos los que beben de esas fuentes y comen pipas, lo conviertieron en un tonel.
Entonces, de su comentario se deduce que no le pareció mal que un señor por el que se acababan de pagar 120 millones euros, viniera con entre 8 y 10 kilos de más a su nuevo club, y no contento con ello, este verano en su segunda temporada, lo vuelve a repetir, y según usted lo nomal es que estemos contentos con esa actitud no?
Me parece mal que en tu afán de criticar todo dés como cierta información que no es más que la opinión de periodistas que van de madridistas pero solo buscan hacerle daño al club. Yo prefiero creer a Hazard que dijo que para cuando había comenzado aquella primera pretemporada ya estaba en su peso (en la misma entrevista en la que reconoció que llegó a la presentación pasado de peso, que es la única parte de su frase que salió en las portadas).
Y sí, ha tenido un par de decisiones (especialmente con respecto a su selección) que no me han gustado en absoluto, pero conviene afinar con los hechos, y no dejarse llevar por las exageraciones hasta el punto de la caricatura. Y menos aún, después de sostener la caricatura grotesca, presumir de ser de los que piensan "con cabeza".
Ya, tu sabes que llegó con 10 kilos de peso porque estabas delante de la báscula justo en el momento en que se pesó.
Tu serás neoloquesea. Pero ni siquiera pareces madridista. Yo puedo escribir que soy Pablo Iglesias, por poner un "ejemplo". JO JO JO.
Le quedan 4 meses para demostrar que sigue teniendo nivel.
Y ya va a estar fuera 4-6 semanas.
Dudo que haga algo importante en lo que queda de temporada.
Fue una buena apuesta, pero un mal profesional y un fracaso.
Es de los peores fichajes de la historia, esperemos sacar algo de dinero.
Cuándo acaba contrato?
He oído que en 2024 pero no sé si este dato será cierto porque se lo he oído decir a un periodista.
A mí no me gustó el fichaje desde el principio. Por que? Manías mías, no me gustan fichajes de jugadores de 28 o más años, a menos que sean baratos, oportunidades de jugadores contrastados.
Luego Hazard ha tenido una carrera muy irregular, capaz de partidos excelsos seguidos de 4 partidos insulsos. Hasta hace dos temporadas que empezó a jugar bien con cierta regularidad.
Y luego cuando llegó, y lo vi, pensé, buah, menudo cretino, que viene al equipo de su vida con este aspecto de zampabollos. Me temí lo peor en cuanto a su actitud. Luego, vino la lesión que le provocó Menier, ahí hubo mala suerte, y ya no ha levantado cabeza.
Ya no espero nada de Hazard (desde hace ya meses) y bueno, asumir que es un fichaje fallido, y a seguir adelante. Lo mejor sería que se fuera este verano y recuperar lo que se pueda de su fichaje y no seguir alimentando la esperanza y aumentando los gastos del club.