He de confesar que, cada vez que Osasuna rinde visita al Bernabéu, un escalofrío recorre mi espina dorsal. Uno recuerda a Patxi Puñal y tiembla temeroso bajo la lluvia en el Baztán. Este sí que dejaba un Legado en los Huesos en la medular.
Sin embargo, hay un término medio entre aquel Osasuna ochentero que nos bailó cuatro polkas en casa y aquella añeja portada de Don Balón en la que de nuevo un par de polacos, Staniek y Ziober, prometían armarla dicha temporada. De hecho, la armaron. Aquel año Osasuna bajó a Segunda.
Hoy los rojillos son un equipo rocoso, de los que se les suele atragantar al Madrid. Su buena posición en la tabla así lo acredita. Enfrente, Ancelotti disponía de nuevo de Carvajal en el lateral, Asensio tomaba el lugar de Rodrygo en el Camp Nou y Modric, exhausto, dejaba su sitio al siempre juvenil, jovial y dinámico Camavinga, fresco como el Príncipe de Zamunda.
Hubo algunos ratos infrecuentes en que Osasuna no estaba sacando de puerta
El encuentro nos ofreció un primer cuarto de hora anodino, lo que no significa que después mejorara sustancialmente. Hubo algunos ratos infrecuentes en que Osasuna no estaba sacando de puerta. Parte de esos ratos los invirtió Osasuna en sacar de banda y en botar sus escasas faltas y córneres. Hicieron bien si el árbitro les dejaba. El problema no son ellos, claro, sino el trencilla, que solo descontó cuatro minutos al final cuando por sí solo Herrera, el guardameta rojillo, había perdido en sus saques más de cuatro minutos —lo denunció Carvajal tras el encuentro, lo refrendó Ancelotti en rueda de prensa con su elegancia habitual: “Pregunté al colegiado por qué descontó tan poco tiempo. Su explicación no fue muy satisfactoria”—. Aquí hemos visto al Atleti meter el gol del triunfo rozando un minuto de tres dígitos, pero tanta suerte no es políticamente correcto que le suceda al Madrid. Soto Grado ni siquiera amonestó verbalmente a Herrera por tomarse todo el tiempo del mundo en sacar de puerta, o por fingir inopinados calambres. No se registró ni el más tímido amago de advertencia. Es más, Soto Grado daba la espalda a Herrera cada vez que el cancerbero silbaba la melodía entera de El Puente sobre el Río Kwai antes de patear el balón. Si quisiéramos plasmar en una actitud humana la expresión “Haz lo que quieras”, nada mejor que escoger la fugaz relación a distancia entre Soto y Herrera. Hay parejas abiertas que todavía ni sueñan con alcanzar las cumbres de autonomía y mutuo respeto por la voluntad de cada cual que esta pareja evidenció anoche sobre el césped de Concha Espina.
Se rumorea que a esta hora Herrera sigue pensándose si patea el balón o no, a la par que ejecuta por enésima vez el gesto de “todos pa’arriba”, que nunca está de más, mientras parsimoniosamente se mesa el gemelo del mismo calambre de hace un rato, que empieza a ser el mismo calambre de antes de ayer.
Soto Grado daba la espalda a Herrera cada vez que el cancerbero silbaba la melodía entera de El Puente sobre el Río Kwai antes de patear el balón
El Madrid por lo demás jugó incómodo, incapaz de descifrar el problema táctico de la defensa posicional pamplonica. Sólo cuando era capaz de correr, siempre a lomos de purasangre Vinícius, hacía sufrir a Osasuna. En una de estas primeras ocasiones, a los 21 minutos, Camavinga pudo abrir el marcador tras recibir en el área un balón de una contra magistralmente conducida por Asensio. Controló mal.
Casi todo sucedía por la izquierda, la banda de Vini Junior. Nadie querría estar emparejado con Nacho Vidal y menos con orden de penetrar. Por su banda. Pero Vini sigue tan confiante como últimamente. Resulta conmovedor el que la mayor amenaza del 13 veces campeón de Europa descanse en las botas de un veinteañero brasileiro.
Casi todo sucedía por la izquierda, la banda de Vini Junior. Nadie querría estar emparejado con Nacho Vidal y menos con orden de penetrar. Por su banda
Un quiebro de samba y un pase mágico que no entendieron ni sus compañeros, así como un latigazo parabólico que salió a milímetros del poste, fueron en el primer tiempo demostración improductiva pero sin embargo inmediata. Otro que rebosa ardor juvenil es Camavinga, que se ganó una tarjeta por una impetuosa entrada sobre el osasunista Torro que poco después, justiciero pendenciero, cargó contra el cuello del joven Eduardo. Aquí no hubo tarjeta, pero sí amago de patatazo de Carletto cuando, a escasos metros del banquillo, vio una nueva entrada impetuosa de su pupilo. Como para no atragantarse con su nonagésimo chicle.
Fue el mayor susto de Ancelotti hasta el momento. Al menos hasta los 35 minutos, cuando un córner de Osasuna acabó por rebotar en el muslamen de Kike García —permanece aún en la memoria el gol (de su vida) que nos marcó el año pasado en las filas del Eibar— dentro, muy dentro, del área chica.
Un rebote que al filo del descanso nos recordaba que así se puede perder una Liga.
El Madrid, sin Camavinga pero con Rodrygo, regresaba al verde a tomar conciencia de la situación. Tuvo que hacerlo, sin duda, cuando nada más reanudarse el partido, Osasuna tuvo la mejor ocasión. El prometedor Moncayola remató a la base del palo una asistencia del Chimmy en un fenomenal contraataque de los navarros.
Ancelotti en rueda de prensa con su elegancia habitual: “Pregunté al colegiado por qué descontó tan poco tiempo. Su explicación no fue muy satisfactoria”
La ocasión rojilla resultó ser un ligero toque de corneta para Osasuna. Los de Arrasate intentaron estirarse tímidamente y abandonar así el cobijo de la seta táctica diseñada por Jagoba, el buen técnico vasco con nombre de iratxo. No lo permitió el Madrid. Karim, poco presente hasta entonces, comenzó a reclamar sus galones y liderar el ataque.
Lucas Vázquez en lugar de un cansado e impreciso Carvajal, Marcelo (sí, Marcelo) por Mendy, y Eden Hazard en sustitución de Asensio entraban en el 67, en lo que ya parecía un rescate desesperado. La roca rojilla seguía sin ofrecer fisuras.
Parecía por momentos tal proeza abordar la tarea que Casemiro pensó en una hazaña a falta de diez minutos; un disparo desde el centro del que salió muy cerca del arco. Sergio Herrera, el arquero navarro, casi se lesiona del susto. Esta vez de verdad. O no.
Poco más pudo rascar el Madrid en un arreón final que por existir ni siquiera existió, salvo por dos fugaces espejismos protagonizados por Marcelo (sí, por Marcelo), que incomprensiblemente decidió pasar en lugar de disparar en ambas ocasiones.
Un Real Madrid obtuso, incapaz de resolver el enigma rojillo, y de jugar dinámicamente al fútbol en los ratos que dejaron los saques de puerta de Herrera, se deja dos puntos en la carrera por la Liga.
Tenía yo mal fario.
Fotografías Imago.
Es escandaloso el papel de la prensa deportiva y su descarado doble rasero ante estas actuaciones arbitrales que perjudican al Real Madrid. Miran a otro lado, tapan, ocultan, quitan hierro a acciones como la del penalti a Vinicius. Ya sabéis, de lo que no se habla, no existe. Intentaron algo parecido en la cadena que tiene los derechos televisivos de La Liga con los insultos racistas a Vinicius y hemos visto como Marca, tal y como se recuerda en el portanálisis de hoy, https://www.lagalerna.com/todos-contra-el-racismo-a-veces/, no le da ningún bombo.
En el partido anterior, contra el Barça, una supuesta mano de Kroos tras una falta previa, sí que centra el escándalo, la polémica y lo resaltan, como si fuera una controversia real, las distintas tertulias postpartido.
Los árbitros toman nota y comprueban, una vez más, que si sus decisiones favorecen al RM, aunque sean acertadas, los medios montan un lío tremebundo, mientras que al revés, se van de rositas, no hay apenas rastro en los resúmenes, análisis y debates postpartido.
Entiendo perfectamente que se señale a los árbitros, los estamentos y la Liga como perpetradores de esta farsa, pero quiero recordar que "The Tinglao" no podía existir sin la connivencia, la complicidad, el amparo de la prensa deportiva que debería ser ante todo prensa, es decir, los encargados de denunciar, señalar y por tanto, desmontar esta farsa, dedicarse a la ciudadanía y traernos la verdad, pero no. Y siguen calando en la gente.
Por eso se sienten impunes ante tanta tropelía, por eso me parece más grave la corrupción del medio de comunicación q el estamento de turno. El encargado de denunciar al corrupto se une a él. Tela.
Mientras en el campo solo está el rival a batir y el trencilla a sortear, el enemigo, ése que te quiere mal, anida en los medios.
Me gusta la actualización de su/tu lema.
Tutéame siempre, por favor. 😉
Mi lema debería grabarse a fuego no solo en el vestuario y la dirección del Real Madrid sino en todo madridista para estar alerta y preparado para discernir... así que, es mío tanto como tuyo. 😉
De acuerdo, la batalla mediática la tenemos perdida. Con Villar te hacían internacional o te descendían, ahora se obvia o se inventan la presidencia de una peña...
En Psicología social existen 2 términos para referirse a qué percepciones, siempre son subjetivas, nos influyen más en la obtención de las impresiones. De las sensaciones más o menos desagradables. Efecto de primacía y efecto de recencia. Son tan obvios los términos que no requieren de mayor explicación.
Para mí, el partido fue algo decepcionante durante los primeros 20 minutos; como en no pocas ocasiones. Respeto, elocuente, miedo a perder la posición , arriesgar en demasía y a cometer errores. Los casi 80 minutos restantes, contando el tiempo extra, fueron de buen juego del Real Madrid.Ahora que lo pienso bien, si el árbitro hubiera dado mayor descuento igual hubiéramos marcado, o quizás no. La cuestión es que la psicología social es clara,si no es así es asá, si no ocurre nada es porque no tenía que pasar, y si ocurre es porque se ha provocado una situación para modificar el estado inicial. Acción-reacción. En todo caso si el resultado no se hubiese modificado, como ha sido el caso, en la tabla de clasificación apenas hubiera cambiado, hay muchos partidos por disputar y muchas opiniones que escribir y leer. En cualquier caso, soy águila calva original, sin conservantes ni colorantes, y a pesar de los trolls que proyectan una imagen distorsionada, sigo siendo águila calva con todo lo que conlleva ser un personaje público coherente, reflexivo y comedido. Espero vuestras opiniones para compartir un rato con vosotros, que falta me hace ¡HALA MADRID!
El Osasuna fue un auténtico frontón y recojo las palabras del cronista para definir el partido:
¨Un Real Madrid obtuso, incapaz de resolver el enigma rojillo, y de jugar dinámicamente al fútbol en los ratos que dejaron los saques de puerta de Herrera, se deja dos puntos en la carrera por la Liga¨. Totalmente de acuerdo. Hala Madrid.
El árbitro descontó 4 minutos sólo. En el partido Rayo- Farsa, descontó 8,a los que luego añadió otro. No digo con esto que el Madrid hubiera marcado gol, pero a más tiempo, más probabilidad.
Como no se puede comentar en el portanalisis lo digo por aquí.
Conviene recordar que Álvaro Benito le despiden por llamar a gritos tractor a Kroos y a Casemiro más de lo mismo, quizá algo excesivo en su momento porque fue un calentón pero es curioso como nunca tiene calentones de esos con los arbitrajes que sufre el Madrid, más bien lo contrario.
Y su absurda explicación sobre el error de edición es irrelevante, en las imágenes que ellos comentaron se ve como decenas de culés están gritando e insultando a Vini, no sé porqué es criticable que el brasileño se gire medio segundo, son ganas de meter mierda al chaval porque sí.
De este tipo de tontadas si hablan, de porqué ayer no se dan las suficientes repeticiones del penalti a Vinicius, porqué el árbitro no lo revisa, porqué no va al monitor y qué base reglamentaria tiene esa decisión, de todo esto no hablan, hablan de los chicles que come Ancelotti. Me fastidia comprobar que los que empezamos a criticar a Álvaro Benito como comentarista tengamos más razón con cada partido que narra, que esperpento.
Y De Burgos Bengoeche designado oficialmente para el próximo partido en Elche.
La estafa, corrupción y burla para con el madridismo es permanente. Partido a partido.
El racismo, como los arbitrajes que sufrimos, están bien vistos por que son a jugadores del Madrid. La liga, la presa, y la federación no es que estén podridas, es que están muertas y no lo saben.
Por qué Osasuna y no el Osasuna? O dicho de otra forma, hay miedo? Y si hay miedo, a qué? (Sé perfectamente que la -a final en vascuence hace las funciones de artículo, pero por qué en castellano se dice el Sporting, el Bayern, el Inter o el Besiktas? Por que la prensa vasca en euskera y la ETB escriben R. Madril y nosotros en español decimos la cursilada de Osasuna ( como de hecho se dice en Pamplona), pero en Madrid decimos Madril?
Basta ya de corrección política, o sea, de censura!!!
Desgraciadamente ,y no es nuevo, está claro que no es deporte. La gente que quiera pagar por verlo, allá ella.Iba a escribir “es libre”; pero no es lo más apropiado para lo que se cuece.
Me parece que Movistar es uno de los patrocinadores del Real. ¡ Menos mal , qué si no !
Excelente crónica.
Abundando en la actitud del árbitro, desconozco por qué en lugar de mirar al balón, casi siempre en posesión del portero de el Osasuna, miraba insistentemente a Courtois, aburrido en su portería, sin balón y sin intervención en el juego.
Y así fue durante toda la segunda parte para desesperación del público, del equipo y del espectáculo, que en definitiva es lo que genera dinero a la liga de Tebas.
Como dice Ancelotti, se debería jugar con tiempo efectivo aunque, no creo que eso guste a la liga.