P.G. Wodehouse afirmó que la mejor forma de conocer realmente a un hombre es jugar al golf con él. Es así que mi hoy compañero de destacados galernautas Charly Rogenhofer no conoce realmente a Gareth Bale, puesto que admite no haber jugado nunca al golf con el galés. Algunos periodistas, en cambio, y a pesar de no haberlo hecho tampoco, se arrogan el derecho a opinar de Bale como si lo conocieran. Parece que Bale es un imprudente y un mal profesional por haber hecho unos cuantos hoyos (36, afirman), lo que podría haberle acarreado la lesión que le impidió jugar ayer contra el Villarreal. Yo digo que la única imprudencia es afirmar semejante cosa, y que es muy poco profesional para un periodista el emitir tamaña descalificación. Yo digo que Bale se ha vuelto a lesionar porque es un jugador tan extraordinario como frágil (lo que ya es en sí un problema considerable), pero bajo ningún concepto por no cuidarse como debe.
Mi amigo Charly no llega hoy en La Galerna tan lejos como periodistas como Manolo Lama o el director del As, pero se deja acariciar por dudas. Dudas muy bien argumentadas, por cierto, aunque yo, modestamente, creo hallarme en posesión de algunas certezas que les hacen perder fuelle. Charly empieza por admitir que la peligrosidad del golf es muy limitada en comparación con otros muchos deportes (con casi todos, diría yo, con la posible excepción del ajedrez), pero para razonar que dicha peligrosidad existe alude a unas estadísticas de la Comisión de Seguridad en Productos de Consumo de los Estados Unidos, según las cuales en 2009 se registraron más de 115.000 lesiones en Estados Unidos producidas por una incorrecta técnica de golpeo. “En esas 115.000 lesiones, destacan lumbalgias, codos, rodillas y sóleos”, detalla nuestro colaborador mexicano.
Hay infinidad de preguntas que surgen tomando estas cifras como punto de partida. La primera de ellas es: ¿115.000 lesiones son muchas o pocas? La pregunta no es ninguna tontería. ¿Cuánta gente jugó al golf en Estados Unidos en el año 2009? Y de entre aquellos (¿millones?) que jugaron al golf en Estados Unidos en 2009, ¿cuántas veces jugó cada uno como media? En otras palabras, ¿cuántos millones y millones (ahora seguro que sí) de hoyos se disputaron en Estados Unidos en el año 2009? Habría que conocer este dato para conocer el porcentaje de lesiones en relación a número de partidas globalmente disputadas, que sería la variable relevante para intentar calibrar, si la hubiere, la peligrosidad intrínseca al golf como deporte. No son las cifras absolutas, sino las proporciones, las que podrían arrojar alguna luz sobre este particular.
Por lo demás, el informe parece concluir que la inmensa mayoría de dichas lesiones se produjeron por “una incorrecta técnica de golpeo”, y la pregunta vuelve a ser inmediata: ¿por qué hay que asumir que Gareth Bale, quien por lo visto juega al golf hace mucho tiempo, atesora una incorrecta técnica de golpeo? ¿Es censurable el que un golfista experto atesore la suficiente confianza en su propia técnica como para practicar un deporte de objetivamente muy poco riesgo, abrazando a cambio los beneficios sobre su salud mental y sus hábitos de vida? Si el hacerlo pudiera considerarse falta de cautela, ¿cómo cabría catalogar casos como los encuentros informales con toros o becerros, o la conducción a altas velocidades, de los que hemos tenido noticia por parte de jugadores del Real Madrid o de otros clubes?
Ya que las cifras no nos aportan lo que deseamos, recurramos a la intuición. ¿Cuántas personas conocéis que juegan al golf? Y de ellas, ¿cuántas se han lesionado jugando? Y de las que se han lesionado –otra vez: si las hubiere-, ¿cuántas sufrieron dolencias indeseables a cuenta de unos hoyos puntuales, y cuántas por causa de una mala praxis continuada en la práctica de dicho deporte?
Aunque es fácil verme todavía por Madrid, vivo en Cardiff, donde he tenido ya ocasión de tratar con varias personas cercanas al entorno de los Bale. De alguien perfectamente informado me llegó ayer la siguiente revelación. Creo que es significativa.
Hace pocos años, Bale quiso apuntarse a un exclusivo club de golf de Cardiff. A ambas partes les interesaba llegar a un acuerdo. Para Bale era el mejor marco para practicar su segundo deporte favorito; para el club en cuestión, representaba una inmejorable forma de publicidad. Bale puso una única condición. Necesitaba que le garantizaran un buggy a su permanente disposición para evitar caminar durante sus recorridos, que haría a bordo de este carrito eléctrico. De no desplazarse permanentemente en buggy, la compañía de seguros no cubriría una eventual lesión.
Éste no es aún el final de la historia, pero sí vale la pena parar un segundo para afianzar un consenso: si hay alguien en este mundo que no da puntada sin hilo, ese alguien son las compañías de seguro. Un completo profano en el golf como yo escucha esta historia y tiene que concluir que si la principal fuente de preocupación de una compañía de seguros en lo que al golf respecta son los paseos entre hoyo y hoyo, será porque es ahí, y no en dar unas cuantas bolas, donde reside el mayor peligro (decimos “mayor” aun a sabiendas de que aun así debe de ser limitadísimo).
Quizá ya imaginéis lo que sucedió. Por la razón que sea (probablemente, conociendo a los británicos, por no crear agravios comparativos con otros socios), el club de golf no accedió a la petición de Gareth. Y Gareth no se unió al club, que es lo que nos impulsa a la última pregunta de este artículo: ¿de verdad cabe en cabeza humana que alguien que pone (o a quien le exigen) tan puntilloso cuidado con su integridad física va a dejarla en manos del azar?
Gareth Frank tiene un handicap 6. Vamos, que no le pega incorrectamente. Otra cosa es la conveniencia de pirarse a Cádiz en un día libre y marcarse un recorrido completo. Y ahí, yo, que le quiero como a un hijo, sí que estoy mosqueado con él. Esperemos que no sea nada, cosa que, por el momento, desconocemos.
Dirá usted lo que quiera, pero jugar 36 hoyos al golf, no sabemos si fue con buggy ó sin él, pegando pelotazos a una pelotita en la que empleas espalda, hombro, brazos, piernas, con lo que nos estamos jugando no es un ejemplo de profesionalidad, diga usted lo que diga, no puede ser, tengo entendido que desde que está en el Madrid se ha perdido un tercio de los partidos oficiales, después de esto, no hay más preguntas señoría, ya puede ser buen jugador, que lo es, pero si se pierde un tercio cada temporada no me vale, lo siento.
Si alguien entiende algo de golf, sabe que, un individuo con un hándicap 6, jugando en buggy, es imposible que se provoque una sobrecarga muscular.
En los Juegos Olímpicos de España del 92, Michael Jordan (hándicap 0) jugaba, andando, 36 hoyos por la mañana y con el verdadero dream team por la tarde, sin ningún problema.
Se están sacando las cosas de quicio y esto no es más que un invento de la prensa antimadridista (más bien antiFloPer) de Relaño y compañía. Ya se sabe que FloPer fue el que trajo a Bale y que costó un pastón. Por ahí el Marca ya intentó decir que Bale era un mal negocio por lo de la famosa "hernia" y el As lo que intenta siempre es minusvalorar a este jugador (no participa, autista, malo, no aprende a hablar español, que se lesiona, bla, bla y bla).
A poco que pueden, vuelven a usar la mentira para desprestigiar el fichaje, esto es así.
Bale no jugó y Lucas Vázquez fue un digno sustituto (con gol incluido). El galés descansa, se recupera y todos los jugadores siguen enchufados (a la espera de que lo de Cristiano sea poca cosa). A quienes les salió mal la jugada (la marrullera y falaz) fue a los antis.
A mí lo del golf me parece una excusa más de la prensa para atizar al Madrid, porque no es que tengan algo en contra del jugador, este es sólo un instrumento más para arrearnos. Dicho esto, la verdad es q es preocupante la fragilidad de este jugador. No sé si se habrá pasado media temporada lesionado o cerca.
Saludos
La historia de la lesión de Bale no es más que otro episodio del insulto continuo a la inteligencia del lector en que se ha convertido la prensa deportiva.
No es que sea verdad o mentira, no. Es que es tal disparate que cualquier persona con un mínimo de raciocinio escucha semejante memez y se parte el pecho de risa. Lesionarse por jugar al golf. Tela, ni hacer puenting.
Por desgracia, la culpa no es de la prensa, si no del cliente que se traga estas trolas sin rechistar, incluido mucho madridista.
El hombre es el único animal que tropieza 2 veces en la misma piedra, y se lee el Marca, va de leñazo en leñazo.
Voy corriendo a hacerme un seguro de vida, pues me acabo de enterar que mi vida está en juego.
Ni fumo, ni bebo, ni me atiborro a grasas, pero me gusta pasear con frecuencia.
Mañana mismo voy a hacerme el testamento. Pero iré en coche, que no hay que tentar la suerte.
Estimado Jesús, he leído con detenimiento el artículo de Rogenhofer en @lagalerna_ y quisiera externar lo siguiente:
1. Nací y he vivido los últimos 28 años en la ciudad de México de forma ininterrumpida y puedo asegurar que la temperatura no llega a los 35º C en el mes de Mayo, aún el año pasado siendo el más caluroso el promedio oficial de temperatura fue de 25ºC, se puede consultar aquí http://smn.cna.gob.mx/climatologia/TempsyPrecip/Mensuales/2014Tmax.pdf .
2. Rogenhofer se pregunta si Bale no se cuida por tener una lesión, no jugar y ponerse a jugar golf en un torneo, pero a su vez se responde el mismo que no cree que se haya lesionado por jugar golf. Entonces especula y cita a el US Consumer Product Safety Commission, que se dedica a regular la venta y manufactura de una miríada de productos de consumo. No es una entidad médica.
3. Como sabes soy médico me dedico a la neurología clínica y a la neurofisiología clínica. En las 2 especialidades sobretodo en la segunda veo pacientes con lesiones de nervios periférico, raíces nerviosas, musculares, lesiones de columna y de medula espinal, etc. Mis socios neurocirujanos ven a una cantidad considerable de pacientes con lesiones de la columna vertebral por diferentes causas. Ninguno de nosotros algunos con 35 o más años de experiencia hemos visto una lesión por jugar golf que únicamente afecte al músculo en cuestión que es el sóleo. Las lesiones de este músculo son frecuentes en tenistas, futbolistas, atletismo, basquetbol etc. Como se puede leer en este artículo http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4622332/ . En algunas revistas de golf http://golftodaynw.com/ouch-i-pulled-my-calf-muscle/ más no médicas refieren que por caminar mucho en terreno desigual o entrar y salir frecuentemente de bunkers se “puede” lesionar la pantorrilla.
4. Bengoechea aquí refiere el uso del buggy o carro eléctrico para transportarse de hoyo en hoyo que emplea Gareth.
5. En lo que estamos de acuerdo es en que Bale se lesiona de manera muy frecuente, tengo entendido que en el Tottenham le sucedía lo mismo. No se la (s) razón (es).
Saludos y ¡Hala Madrid!
Hola, Enrique. Muchas gracias por tus comentarios.
Tengo que hacer una precisión respecto al punto 1.
En el texto original de Charly, él hablaba de la visita de Pavarotti a Yucatán y México DF, pero yo, al editarla, quité lo de Yucatán porque me pareció que, tal y como estaba redactado el texto, inducía a innecesaria confusión. La pega meteorológica que le pones al artículo es enteramente atribuible a mí y no a Charly. Asumo la culpa y maldigo mi torpeza que es máxima, sobre todo porque yo mismo he pasado muchos meses de mi vida en el DF, hace ya tiempo, y sé perfectamente que jamás se alcanzan allá temperaturas tan extremas.No sé cómo me pudo pasar.
El resto de tus puntos son debatibles, no así el primero, atribuible como digo única y exclusivamente a mi torpeza como editor.
Un abrazo.
Jesús