Durante la II Guerra Mundial, la aviación y la artillería alemanas castigaban una y otra vez los aviones del ejército aliado. Tras una exhaustiva investigación estadística en todas las bases y hangares del Reino Unido, se confirmó que las alas, los timones de cola y la parte central del fuselaje eran las zonas más dañadas por el fuego enemigo. El comité de experto reunido al efecto de mejorar los aviones y aumentar la seguridad de los tripulantes, siguiendo el proceso de pensamiento más lógico, dedujo que había que reforzar la estructura de los diferentes cazas, avionetas y bombarderos en las zonas más castigadas por los balazos y los impactos de metralla, en las partes más expuestas al daño en combate. Sin embargo, Abraham Wald, nacido en 1902, en la mítica Transilvania, en Cluj, antes Hungría, ahora Rumania, matemático de vocación y profesión, fundador del análisis secuencial, y madridista —un miembro más de ese grupo histórico de egregios madridistas por hechos, por actitudes y por pensamiento—, optó por la solución menos obvia. Wald infirió que esas partes eran lo suficientemente fuertes como para posibilitar que los aviones pudieran resistir y volar de vuelta a la base, y que eran las zonas que no aparecían en los estudios y en la muestra estadística las que provocaban que los aviones no regresaran, las que implicaban que las máquinas cayeran y que los pilotos no sobrevivieran. Por consiguiente, optó por reforzar el morro, los motores y la parte trasera.
El Real Madrid piensa más allá de un mero estadio de fútbol: imagina un espacio de encuentro, cultura, negocios, diversión, conciertos y espectáculos de toda índole donde no solo acudir los fines de semana, sino a diario
Cuando se decide la remodelación del Santiago Bernabéu, la primera corriente de pensamiento —muy en consonancia con la línea de los mall norteamericanos que desplaza el ocio a grandes centros comerciales alejados de los centros urbanos- y conforme a la actuación de otros clubes que han sacado sus estadios del centro y lo han llevado a las afueras o al extrarradio, piensa que lo mejor sería la construcción de un nuevo recinto deportivo desde cero, así como de toda la infraestructura necesaria a tal efecto, cuestión que favorecen los mismos terrenos sitos en Valdebebas. De ese modo, el estadio sería más moderno, y una vez privado ya del nombre emblemático de Santiago Bernabéu, se podría percibir una buena cantidad en derechos por naming. En el Real Madrid, por el contrario, se piensa más allá de los términos de un mero estadio de fútbol: se imagina un espacio de encuentro, cultura, negocios, diversión, conciertos y espectáculos de toda índole, y se colige que hay mayor valor añadido en que la gente, todo tipo de aficionados, pueda disfrutar de toda esa serie de actividades en pleno corazón financiero de la ciudad, en el mismo centro, y por ende, no solo acudir los fines de semana, sino a diario, y generar más ingresos y de mayor importe por ello.
Cuando se piensa en la remodelación del estadio, el pensamiento común se fija en primera instancia en la ampliación del aforo, mientras que en la directiva del Real Madrid se piensa en términos de calidad para cada espectador, y en la dotación de nuevos espacios comerciales que generen nuevos flujos de ingresos. Se pretende una experiencia mejor por parte del espectador y se piensa en un público dispuesto a pagar más dinero por un mayor espacio, un mayor confort, una mayor sofisticación, y una mayor oferta de ocio.
Cuando se piensa en la remodelación del estadio, el pensamiento es la ampliación del aforo, mientras que en la directiva del Real Madrid se piensa en términos de calidad para cada espectador
Asimismo, cuando se habla de cubrir el Santiago Bernabéu, el pensamiento dominante lo ve como un gasto superfluo, cuando no innecesario, casi un adorno floral, puesto que en Madrid apenas llueve, y no hace falta un techo. En el Real Madrid, por el contrario, no se contempla un césped embarrado un par de días al año o una hierba sin barro cada 2 semanas, sino que se imagina un recinto cerrado, un hito arquitectónico que acoja toda la serie de actividades susodichas, realizadas día a día, en cualquier momento y estación del año, truene, llueva, hiele o se derrita el asfalto.
Al cubrir el Bernabéu, el Real Madrid imagina un hito arquitectónico que acoja toda clase actividades, realizadas día a día, en cualquier momento y estación del año, truene, llueva, hiele o se derrita el asfalto
En verano de 2017 el PSG paga 222 millones por Neymar y 180 millones por Kylian Mbappé, mientras que el FCB paga 145 millones por Dembélé y 160 millones por Coutinho. Poco antes se habían pagado 105 millones por Pogba, y casi 100 por Van Dijk; lo mismo por Lukaku. La corriente de opinión habla de cantidades desorbitadas, pero al mismo tiempo demanda fichajes de jugadores que se mueven en niveles de transferencia absurdos. Florentino Pérez asume, por el contrario, que no resulta viable dilapidar esa cantidad desproporcionada de millones; razona que solo se podrían invertir fuertes sumas, de ser posible, en la adquisición de un par de jugadores de esos que cambian el rumbo de un equipo y el devenir de un club, de esos que se dice que se acaban pagando solos y, sobre todo, de esos que marcan la Historia. En el Real Madrid se opta, pues, por proteger las cuentas, por tener un estado financiero saneado, y por mirar al futuro con solvencia. Por consiguiente, se realizan inversiones de medio largo plazo en promesas muy jóvenes, que permitan al club o bien recuperar buena parte del monto inicial, o bien alimentar la competitividad de la plantilla, o bien concretar un proyecto de estrella.
Cuando todos gastaban porque la economía parecía boyante, Florentino Pérez tuvo en consideración la siguiente crisis que acechaba a la vuelta de la esquina
Cuando todos gastan porque la economía parece boyante, Florentino Pérez tiene en consideración la siguiente crisis que acecha a la vuelta de la esquina, el probable cambio de ciclo que se avecina. Gran empresario, especialista en un negocio perteneciente a un sector muy cíclico, tiene presentes las crisis del petróleo de los años 70, de los bancos de ahorro y entidades de préstamos de los 80, de divisas de los años 90, de la burbuja de las puntocom en el año 2000, de la burbuja inmobiliaria y de la caída de los bancos de inversión en 2008, crisis que se repiten periódicamente, sin compasión, una y otra vez desde los años bíblicos de las vacas gordas y las vacas flacas. Lamentablemente, la crisis ha llegado no solo como crisis económica, sino también, por desgracia para todos, en forma de crisis sanitaria.
En verano de 2019, tras una temporada pésima por parte del equipo, el pensamiento más obvio y menos racional aboga por dar 17 bajas en la plantilla, por una revolución de cabezas cortadas. Se dice que Modric ya ha jugado sus mejores partidos, se dice que Kroos es un jugador aburguesado que solo da pases seguros, y así una retahíla de reproches con una larga lista de jugadores de la plantilla. Se pide reforzar el centro del campo con fichajes como Pjanic, Rabiot y Eriksen (aquí el amable lector puede esbozar, si gusta, una leve sonrisa). Zinedine Zidane —cuyo regreso tampoco fue nada obvio, previsible ni evidente—, por el contrario, ve la gran calidad intrínseca y el enorme talento presente en muchos de los miembros del equipo, percibe el compromiso, y decide confiar en ellos y darles la oportunidad de resarcirse y de volver a ganar. Esos jugadores que muchos creían acabados vuelven a escribir páginas y títulos en la historia de la entidad.
Esos jugadores que muchos creían acabados vuelven a escribir páginas y títulos en la historia de la entidad
Lo anterior son ejemplos de una manera alternativa de plantear las cosas, y de un modo de proceder diferente al de la corriente mayoritaria, —Santiago Bernabéu fue un magnífico ejemplo de todo ello—; pero, no obstante, no siempre funciona. Cuando en el verano de 2018 Cristiano Ronaldo pide su venta, el pensamiento común apuesta de manera evidente por la compra de un goleador contrastado que pueda suplir los goles, al menos una buena porción, del fenómeno que se marcha. Sin embargo, la directiva del Real Madrid piensa en la capacidad goleadora de Bale, en la calidad sin parangón de Benzema, en la proyección de Asensio, que apunta un Balón de oro en sus botas, y en la llegada próxima de Hazard, cuyo contrato se acerca a su vencimiento. La realidad posterior ha demostrado que, por unas razones o por otras, tan solo Benzema ha cumplido con un buen número de goles. No obstante, siempre reconforta saber que hay quien observa las situaciones con diversas ópticas, analiza desde una perspectiva y unos parámetros diferentes, y busca pensar de una manera más creativa de la que suele ser norma.
Fotografías: Getty Images.
Un gran artículo, explicando perfectamente la actual situación deportiva -economica de nuestro Madrid.... HALA MADRID Y NADA MÁS.
Lo he dicho muchas veces. Florentino es el único imprescindible en el Real Madrid. Que Dios nos coja confesados cuando se vaya.
El 8 de septiembre 1973, la Asamblea de socios compromisarios aclamó la propuesta de Santiago Bernabéu de construir un nuevo estadio en Fuencarral. Cubierto, con capacidad de albergar 120.000 espectadores, de ellos 60.000 sentados. Un proyecto a la vanguardia de la arquitectura deportiva mundial, obra del arquitecto español Félix Candela —exiliado en Méjico, lo que quizá influyó en la hostilidad contra el proyecto de los sectores más ultramontanos del Régimen—. Pensado para convertir al Madrid en el club más moderno del mundo, todavía cuarenta años después conmueve su elegante racionalidad, sencillez, funcionalidad y equilibrio. Y estremece que no se convirtiera en realidad.
Los recursos financieros para su ejecución se obtendrían de la utilización de los terrenos del estadio Santiago Bernabéu. Sobre ellos, una operación urbanística singular, diseñada por el urbanista y promotor canadiense William Zeckendorf, autor del complejo de Naciones Unidas en Nueva York, daría lugar a la construcción de la edificación más alta de Madrid —la Torre de Plata— junto con un parque que ocuparía casi el noventa por ciento de la superficie y otras utilizaciones subterráneas del suelo, posiblemente inspiradas en la ciudad de Montreal, cuya ordenación urbanística había dirigido.
No me extenderé más en la descripción de un proyecto que frustró la cerrada oposición del Régimen, y particularmente de Arias Navarro —el director general de seguridad que ordenó la detención del gerente del Madrid por oponerse a la entrada de los equipos de TVE en el Bernabéu—, en aquel entonces alcalde de Madrid. Arias comparó la operación, literalmente, con un asesinato, al declarar, como si los planes urbanísticos no se pudieran modificar, que «no puede admitirse la construcción en zona deportiva, no por ningún criterio, sino porque está prohibido en la Ley, como está prohibido el asesinato». Aún descontando la tosquedad de su carácter, hacer pública semejante comparación daba idea de hasta qué punto la negativa estaba decidida.
En la oposición al proyecto, la propaganda del régimen franquista jugó duro para neutralizar la influencia social del Madrid. «Arriba», el periódico del Movimiento, comenzó la ofensiva mintiendo sobre el origen de la propiedad del suelo del estadio para indisponer a la opinión pública. Según el órgano falangista, los terrenos del Bernabéu fueron expropiados tras la Guerra Civil. La realidad era que el viejo Chamartín fue incautado para convertirlo en un campo de prisioneros, y que el Madrid, además de esos terrenos adquiridos en 1923, había comprado en junio de 1944 el restante suelo necesario para edificar el estadio.
La campaña se reforzó desde Barcelona usando, sin embargo, las páginas de ABC, puesto que el partido se jugaba en Madrid. Un sujeto que ascendería hasta el Consejo del Poder Judicial a propuesta de Jordi Pujol, y cuya ejecutoria delictiva como juez le llevaría a ser condenado y expulsado de la carrera años después, Luis Pascual Estevill, escribió un panfleto, usando un lenguaje sardónico, para respaldar las exageraciones de Arias Navarro y las mentiras de Arriba: «El Real Madrid es un gran club (…). Todos los españoles sabemos eso. Bien que nos lo repiten insistentemente en todos los tonos y con todas las fanfarrias posibles de acompañamiento. Aún más, el Real Madrid es el club de la imaginación, de la inventiva, de la prospectiva y de la anticipación del futuro. Debe de ser verdad. Porque acaba de sorprender a España con una innovación en el terreno del Derecho que debe traer de cabeza a todos los penalistas (…) El Real Madrid pretende (…) obtener beneficios propios a costa de perjudicar a los demás (…) El Real Madrid tenía un campo viejo, el campo de Chamartín (…) le añadieron veintisiete mil metros cuadrados que les expropiaron (…) ¿Cuánto va a costar este estadio fabuloso? Mil millones de pesetas o algo así. Como si dijéramos la renta total de la provincia de Soria durante dos meses».
Santiago Bernabéu, cuya gestión, por encima de todas sus notas, se caracterizó por una verdadera obsesión por la honestidad, tuvo que soportar que este delincuente en ciernes sugiriera que la auténtica motivación de la operación era la apropiación por los directivos del Madrid de una parte de las plusvalías urbanísticas de la venta de los terrenos del estadio. No quiso querellarse, convencido de que lo mejor para el Madrid era no encanallar la situación con los medios. Particularmente con los no oficiales, como el ABC, que eran el único territorio en el que el Madrid podría defender ante la opinión pública la racionalidad urbanística del proyecto. La densificación posterior del entorno Cuzco-Lima, sin ninguna de las soluciones para la distribución del tráfico viario que atraviesa la Castellana que contemplaba el proyecto de Zackendoorf, vendría a darle la razón en este aspecto. Claro que después de muerto.
Las gestiones de Raimundo Saporta en El Pardo, que se cierran con un: «Dígale a Saporta que no presente el proyecto, porque le van a llamar especulador»; y en La Zarzuela, que concluyen con un: «Qué puedo hacer yo, si no tengo ningún poder»; sólo consiguieron demostrar que la suerte estaba echada. Santiago Bernabéu se vio forzado a admitir la derrota frente al mismo régimen que había recalificado Les Corts ocho años antes para limpiar de deudas al declinante FC Barcelona.
Convencido de que «tenemos un proyecto respetable» y de que la mediocridad, que él representaba en «la envidia», le obligaba a abandonarlo, Bernabéu enterró con el proyecto del nuevo estadio sus expectativas de recobrar la hegemonía europea. Su compromiso personal con la idea era tal que la indignación le llevó a declarar, en contra de sus profundas convicciones: «La otra vez hice la guerra en un bando, pero si hubiera otra veríamos en qué bando estaba». A la desesperada, buscaba titulares en los periódicos. Sus declaraciones, es obvio, no fueron publicadas. A Julián García Candau, que relata dicho episodio, le confesó: «Ayer le dije al alcalde, que estuvo muy cariñoso conmigo: a ver si le ponéis a este estadio una bomba y que no queden ni rastros de él».
A pesar de todo, ya dije que no se podía aventurar cuál sería la posición de Santiago Bernabéu en relación con la cuestión del estadio ahora que muchos de los problemas que trató de resolver con la desaparición del actual han sido resueltos: Regularmente, el de su calidad, con las sucesivas ampliaciones; satisfactoriamente, el del excesivo endeudamiento del club, con la enajenación de la Ciudad Deportiva que llevó a cabo la junta de Florentino Pérez. Sin embargo, la necesidad de expansión sigue estando ahí.
Paradójicamente, si hoy seguimos jugando en el Bernabéu es a pesar de Santiago Bernabéu. Al impedir sus planes de transformación, el régimen de Franco nos castigó a seguir allí. Si Florentino Pérez es capaz de explotar esta situación como ventaja, a través de su proyecto de remodelación, aún estaríamos ante una última paradoja: el castigo sería un premio. Pero sea o no sea así, esta historia nos aporta la certeza moral de que el nombre de un estadio, del que Santiago Bernabéu deseó «que no queden ni rastros de él», nunca habría sido el dique contra el que se rompieran los sueños del mejor presidente del Madrid
Me ha gustado mucho su comentario.
Si la cerrazón del régimen que cuenta (y que yo no conocía) termina siendo aprovechada 50 años después por un gestor lo suficientemente hábil como para adaptarse a las circunstancias, no dude que habrá quien cuente esa misma historia como ejemplo de trato de favor.
Buenas tardes, por un despiste imperdonable, me he olvidado de reseñar que el excelente artículo que a usted le ha gustado y encontrado interesante es de D. Manuel Matamoros que más quisiera yo que poder escribirlos con esa calidad y claridad
Magnífico artículo y espectacular comentario de Manuel Matamoros, rescatado por Zaratustra. Toca reinventarse, pero nos pilla en una situación económica saneada, tanto como para poder mitigar la terrible bajada de ingresos.
Interesantísima tu aportación, que por supuesto no conocía
Saludos
Excelente artículo, pero vivimos una sociedad cortoplacista y donde los mismos periodistas viven el día a día sin mirar más allá , se agradece en el medio y largo plazo que haya empresarios o personas como el sr. Perez que apliquen esa coherencia financiera y deportiva ñ.
Los periogolfos vive al día porque no son capaces de mirar más allá.
Es la maldición de los mediocres.
Excelente artículo y formidable post del Sr. Zaratustra. Por circunstancias que no hacen al caso, conocí la trayectoria delictiva de Pascual Estevill. Lo que desconocía era que también hubiera tenido vela en el entierro del proyecto del estadio de Fuencarral. Termómetro de la indignidad de la trama que tan bien ha sintetizado. Ciertamente sería una bonita paradoja del destino que tuviéramos que agradecer al régimen que nos retuviera en la Castellana. Al final tendremos que ponerle a alguna esquina del campo "córner Arias Navarro". Manda aquéllo que diría el Sr Trillo.
Buenas tardes D. José Manuel, el artículo es de D. Manuel Matamoros, forma parte de una trilogía publicada en La Galerna, por descuido imperdonable me olvide de dar reseña de tal cosa.
Pues yo era de los que pedía y pido un goleador, después de la marcha de Ronaldo.
El paso adelante de Benzema, era esperable, pero en aquel momento confiar en Bale (que solo jugaba media temporada) o en Asensio para meter goles era una quimera.
Sin embargo, confiemos en los jóvenes y en Hazard (que se pagó por él como si le quedara 4 temporadas), porque el costo del belga, Vinicius, Rodrygo, Militao y Jovic ha sido la friolera de 310 millones.
Recuerdo que por Mbappe y Haaland (incluida comisiones) se pagó 220 millones.
Del estadio y de la gestión económica, nada que objetar, pero para competir en Europa y ahora mismo contra el Atlético (a pesar de nuestra victoria directa), se necesita algo más de lo que tenemos ahora.
Muy interesante el comentario de Zaratustra. Me sonaban algunas cosas, pero no lo del prevaricador juez. Es muy clarificador. Y me apena y enfada a partes iguales que el club haya dejado que el discurso contrario ganase. Porque de esto nadie habla ni a nadie interesa.
Buenas tardes Cibeles, el artículo que con razón tanto te ha gustado, es parte de una trilogía de D. Manuel Matamoros publicada en La Galerna hace varios años, por despiste me olvide de dar reseña de tal hecho
Gran artículo, concebido además de manera muy original; aunque más que una sonrisa me ha despertado un escalofrío imaginar un centro del campo con Pjanic, Rabiot y Eriksen en vez de con Casemiro, Kroos y Modric, que es el mejor centro del campo de la historia.
En cuanto a Zidane, está claro que ve las cosas de una manera distinta; y desde luego mucho mejor que la de todos aquellos que tan alegremente le critican. Y si no mejor, pues mucho más ganadora y exitosa.
Muy de acuerdo con todo lo que dices respecto a la política de remodelación del Bernabéu. Yo la aplaudí en todo momento y aplaudí los términos que conocía...me parece que será un gran acierto en lo económico y desde el punto de vista del paisaje urbano creo que pronto será un icono de la arquitectura de la villa y corte...
Sobre los fichajes creo que nos engañamos un poco. El Madrid se ha gastado mucha pasta en jóvenes, así es que sí hemos gastado mucho dinero en fichajes, la diferencia es que por el precio de uno nos hemos traído a 3 o 4 jóvenes que no sabemos si luego darán el nivel para el Madrid, eso sí, sus fichas son asumibles no como los de los cracks que seguramente nos estarían creando muchos problemas económicos en este momento........no he metido a Hazard que ya él solo ha supuesto un desembolso de 100 millones por traspaso y sin contar los salarios que los de este sí son de crack....
Saludos
Claro, es que lo venden como si por colocar un sistema de cesped retráctil ya por eso fuéramos a tener el estadio alquilado cada semana. Cuando la realidad es que eventos en la capital que requieran el uso de un estadio se celebrarán a lo sumo uno o dos al año.
Si la idea es ingresar más por cada día de partido, el margen de crecimiento ahí es escasísimo. Todo lo que venden dentro del estadio ya de por sí es muy caro, un bote de Coca Cola en un vaso de plástico sin hielo son 3,50 euros, un bocadillo pequeño 5 euros, las camisetas o gorras que se llevan algunos turistas tienen un precio ya de por sí disparatado, las entradas son de las más altas de Europa, el 80% de las localidades son de abonados, la UEFA ha impuesto un límite de precio para la afición visitante.
Y tampoco el estadio va a quedar como estos de la NFL o la NBA, que uno va con la familia a echar allí el día porque tienes de todo. El espacio interior es el que es, bastante estrecho y poco práctico, la obra no lo amplía un palmo, sólo un voladizo exterior para rodearlo andando, al final no va un hotel, nada del centro comercial, no hay un solo asiento extra, no se amplía el parking, y nadie patrocina el nombre. Esto no es el estadio de los Dallas Cowboys, que ocupa 21 hectáreas. El nuestro ocupa 4.
Esperar que por sí sola la reforma genere 150 millones extras es iluso. Ya firmaba yo que diera los 30 kilos de más que cuesta la letra, y no lo tengo nada claro.
No sé de donde saca cicatriz que conciertos que llenen un estadio hay 1 ó 2 al año (en tiempos de no pandemia entiendo) y que sin hotel ni centro comercial no se vayan a generar ingresos mas allá de la letra del préstamo. En la web "nuevo Bernabéu" dan estos datos :
Los ingresos extra que vendrán aparejados a la reforma serán superiores a los 150 millones de euros, quedando fuera de la previsión tanto los ingresos por los patrocinios que pudieran generarse del propio estadio (naming) en caso de ser necesarios y de sus zonas de explotación (museo, tour…), y los ingresos extra por aforo VIP, quedando desglosadas de la siguiente manera:
Museo y Tour del Bernabéu: Con la aplicación del museo y del Tour se estima una previsión de ingresos extra de 25 millones de euros al año.
Nuevo Museo Interactivo: En el lateral este se ubicará un nuevo museo interactivo del Real Madrid que generará unos ingresos extra de 15 millones de euros al año.
Eventos: 15 millones de euros al año.
E-sports: 5 millones de euros al año.
E-commerce: 25 millones de euros al año.
Doble pantalla: 25 millones de euros al año.
Restauración: 20 millones de euros al año.
Flagship store Real Madrid: 22 millones de euros al año.
Los ingresos vendrán a través del nuevo Tour panorámico, nuevo museo ampliado, flagships Real Madrid, nuevas experiencias en el Museo y Tour interactivo, galería de restauración, food hall, zona de restauración abierta y todos aquellos nuevos espacios que se van a ubicar en el nuevo Bernabéu.
¿Porqué no debemos creer estas previsiones hechas por empresas que se dedican a ese trabajo reconocidas mundialmente y si tomar en serio el comentario de cicatriz como algo medianamente estudiado?
¿Donde están sus cifras, cicatriz?
¿Porqué no debemos creer estas previsiones hechas por empresas que se dedican a ese trabajo reconocidas mundialmente y si tomar en serio el comentario de cicatriz como algo medianamente estudiado?
Ya le ha contestado comunero el porqué: porque los seguidores de Florentino bla bla bla. Y de ahí no le va a sacar usted debata con él lo que debata.
No voy a entrar en polémicas, porque los seguidores de D. Florentino se dividen en1) lo que por un oído les entra por el otro les sale y 2) dan por buena las cifras que les dan desde los periodistas de cámara, vamos que se creen que los muertos por la pandemia están todavía en los 30000
a) los ingresos por museos y recorridos por el Bernabeu ya están optimizados, nuestro museo era el más visitado de Madrid, después de los 3 clásicos, El Prado, Thyssen y Museo de Arte Moderno
por ahí hay poco que rascar en el apartado de ingresos, recuperar si el equipo va bien los ingresos previos a la pandemia
b) Eventos, cuantos artistas hay capaz de llenar y pagar lo que vale el alquiler del Bernabeu,
Los Rolling? vienen a España una vez cada 10 años, Alejandro Sanz? hace una ronda mundial cada x años. Ponga l0s nombres que quiera que actividades y eventos como usted dice salen contados con los dedos de una mano y sobran
c) sobre los demás temas ni me merece la pena comentarlos, los pone en inglés para darse " pote" flagships store de risa.
d) EL futuro sin duda chavales haciendo novillos pasando el rato jugando a matar zombies y marcianos en unos locales de video- juegos. En fin que le vamos a hacer
Recemos para que cuando este acabada la obra, la pandemia este finiquitada
Si me dan a elegir entre la opinión de un nick de internet y de un constructor que ha superado todas las crisis de este país muchas de ellas de su sector y que no solo las a superado si no que ha salido más fortalecido y que ha hecho Del Real Madrid uno de los clubs más fuertes y más exitosos a nivel de títulos y más rentables a nivel económico, la verdad no se que hago perdiendo el tiempo en contestarte.
Los éxitos de Florentino producen cicatrices en más de uno.
Tiene narices, que los manporreros de D. Florentino, ahora van de sobrados, lo gracioso es que yo no soy anti Florentinista, pero que nos vaya a endeudar en 1000 millones de euros para disminuir el aforo en 3-4 mil asientos, me parece a largo plazo un error estratégico de primer orden, y como lo pienso lo digo, para lamerle el cvlo al poder, para eso siempre hay gente.
Salud
Has cambiado de Nick pero no de hábitos.
No vas a ganar para cicatrices.
4000 mil asientos menos nos llevarán a la ruina, alejandro Sanz no venderá todas las entradas de su concierto, bruce viene con una gira íntima y no le interesa los grandes estadios, las Coca Colas a 8 € producirán un problema de inflación a nivel comunitario, los 4 jinetes del apocalipsys del estadio bernabeu arrasan con las ilusiones de los aficionados y convierten una de más grandes ilusiones en un paramo de hierro y desconsolacion. Predicción de nostracicatrizdamus