Arbitró el alemán Felix Zwayer. En el VAR estuvo su compatriota Marco Fritz.
Poco tajante y rotundo en lo disciplinario el alemán que parecía que no quería sacar tarjetas.
Hubo varias entradas merecedoras de amarilla que se fueron al limbo. En el 16' Konaté realizó una dura entrada a Benzema, Jota dos muy fuertes en apenas un minuto ante Camavinga y Nacho o la de Elliot llegando tarde contra Militao en el 74'. Al final, la única amarilla en el césped fue a Tsimikas por un golpe en el rostro de Ceballos en el 94'. También vio tarjeta Klopp por protestar.
Por lo demás, se señaló un offside de Vinicius que no pareció pero que de haber acabado en gol se habría revisado, y en el 92' se produjo la jugada más polémica del encuentro. Rodrygo remató y Tsimikas rechazó tras golpearle el balón en el muslo y luego en el brazo. Se revisó la acción durante dos minutos y mandaron al VAR al colegiado que decidió que no era punible. Acertó, la mano procedía de un rebote de cuerpo propio.
Zwayer, DISCRETO.
Aquí esa mano cometida por un jugador del Madrid hubiese sido penalti. Y pruebas hay de ello
Aquí sí, pero yo hoy no tengo la sensación de haber sido atracado porque estoy convencido que si hubiera sido en nuestra área el criterio habría sido el mismo.