“En tanto en cuanto nos dean lo que es nuestro, discutiremos ese concepto con el fin de discutirlo”.
Y a eso vamos, al concepto. En mi colegio, posiblemente en un tiempo mucho más pueril y cándido que el que nos ocupa, se decía mucho aquello de “todos contra uno, mierda para cada uno”, que era un pareado algo simplón pero muy efectivo para afear la conducta de aquellos matones que se metían en grupo con algún pobre pardillo.
En Vitoria-Gasteiz, este fin de semana, todas esas aficiones que cantaron a coro lo de “era campo atrás, era campo atrás”, y el ridículo speaker que ninguneó al Real Madrid no incluyéndolo dentro del saludo al resto de las hinchada, deberían haber tenido en cuenta que el pobre pardillo con el que se estaban metiendo desayuna alambre de espino, mea napalm y tiene a sus espaldas un enorme museo lleno de Copas tan duras como la piedra y capaces de absorber cualquier cántico o afrenta, por muy imbéciles que estos sean.
Sorprende un poco (muy poco, la verdad) que este grupo de jugadores que han hecho historia ganando todos los títulos en un año, que nos han devuelto un baloncesto fresco y divertido como hacía tiempo que no se veía, y que están dignificando este deporte semana tras semana, sean tan mal recibidos, más teniendo en cuenta que al frente de este grupo hay un entrenador cabal, educado y lleno de ese señorío que tanto nos demanda el resto de las aficiones. Igual es que alguno entorna los ojos y detrás de Pablo Laso, de Doncic, o de los niños con la camiseta del Real Madrid a los que abuchearon en la Minicopa, siguen viendo al innombrable o a sus fantasmas más íntimos y dolorosos.
Pero volvamos al concepto. Al Madrid, nunca le puedes cantar lo de “era campo atrás” sin exponerte a que el concepto te sepulte. El Madrid y lo del “campo atrás” son incompatibles. Es un cántico ruinoso. Si fuese “campo adelante” aún tendría un pase pero esta chapuza no hay por dónde cogerla. “Así, así, así gana el Madrid” es contundente, habla de victoria y ya es tan Madridista como si hubiese nacido en nuestro propio estadio.
Al Madrid nunca le puedes cantar "Era campo atrás" sin exponerte a que el cántico te sepulte
Hacer lo mismo con el ya famoso “era campo atrás” nos va a costar pero estoy seguro de qué lo conseguiremos. Al Madrid no hay reto que se le resista. Será tan nuestro como el escudo, será nuestro orgullo. Lo adoptaremos como se merece a pesar de su infantilismo. De momento, y como aperitivo, espero que si se ofrece la Copa del Rey a la afición del Santiago Bernabéu todo el estadio puesto en pie coree “era campo atrás, era campo atrás” una y otra vez, dejándose la voz y devolviendo a todas las aficiones un cántico que era suyo y al entrar en el Museo ya es nuestro.
“Era campo atrás” son “ondonadas de hostias”, “nadar en la ambulancia” de títulos y levantar una nueva Copa. Nunca lo entenderán. Ni siquiera el gran Manquiña podría hacerlo. El “era campo atrás” ya es nuestro. El concepto es el concepto.
Asquerosos pseudoaficionados que no respetan ni a unos niños por el único delito de llevar una camiseta blanca. Insisto asquerosos enfermos de envidia que no tiene cura.
Era campo atras las 26 copas del Rey que tiene el equipo de baloncesto del Madrid, mas las copas de Europa, mas las ligas ACB esa es la embidia de los nacionalistas.
Nacionalistas y no nacionalistas
Era fampo afrás y afí fe me ha quefado la foca fel follazo en los fientes que me han fado los fel Real Fadrid.
Nada más quicir. LOL
Ayer contra el Lega era campo atrás
El penalti a Neymar era campo atrás.
Un jugador del Madrid pisa donde quiere y si es LLull mucho más. Punto.
Jaja ja ....buenisimo articulo.el innombrable quien es ? voldemort?
Hala Madrid!!
Este "campo atrás" está destinado a pasar a la Historia, junto con el penalti a Pepe en Elche y el de Guruceta...
Tres escándalos, tres, que "demuestran" que efectivamente, así, así así gana el Madrid....
Hasta que se produzca el próximo (probablemente dentro de las siguientes dos décadas), ya tienen los antis tres pruebas irrefutables que corear a gusto durante años, de lo tramposos y ladrones que somos...
Tres atracos, tres... Bueno... a lo mejor no son tantos, si tenemos en cuenta que en un mismo partido se pueden producir hasta cuatro o cinco... (Stamford Bridge..?)
Y lo bueno del caso es que en ese partido, que no fue la final aunque Albelda se confunda, el RM fue claramente perjudicado por los arbitros. El problema es que los que mås vociferan (y se ve en los partidos de la liga Endesa) no tienen ni la mas minima idea de las reglas de este bendito deporte.
Hala Madrid