Escribo nada más volver del estreno de La Leyenda Blanca (bueno, y de algún vino posterior a dicho estreno) en plena Gran Vía Madrileña. La eterna ovación registrada en la sala al término de la proyección no es más que el preludio del éxito que a buen seguro acompañará a esta docuserie cuando a partir de hoy mismo pueda empezar a ser vista en su integridad por los suscriptores de la plataforma. Hay talento para llenar varios nuevos bernabéus entre todos los que han sacado adelante este proyecto extraordinario (desde el ideólogo y promotor Íñigo de Carlos hasta el director Hugo Stuven, pasando por el guionista Álvaro de Paz y el resto del equipo), pero hay aquí algo todavía más importante que el talento y que el trabajo duro cuando se trata de hablar del Real Madrid, algo paradójicamente escaso en este tipo de proyectos: madridismo. Es un proyecto hecho desacomplejadamente desde el amor al Madrid para ser consumido por gente que ama al Madrid. Intolerable.
Es un proyecto hecho desacomplejadamente desde el amor al Madrid para ser consumido por gente que ama al Madrid. Intolerable
Yo no imagino lo que tiene que ser el ser Íñigo de Carlos ahora mismo. Ponerte de pie al final para darte la vuelta y recabar los vítores del patio de butacas tiene que ser emocionante, pero si dicho patio de butacas está ocupado por jugadores actuales como Marcelo o exjugadores como Butragueño, Hugo Sánchez, Fernando Sanz, Arbeloa, Gallego, Casillas o Martín Vázquez, la sensación debe flotar entre el éxtasis y el surrealismo. Yo vi a Mijatovic —que en este primer episodio confiesa que la Décima de Ramos le hizo más feliz que SU Séptima— elevar los dos pulgares hacia arriba, mirando a Íñigo. Marcelo me dijo cuánto le había gustado. Y (acaso lo más impactante de todo) Martín Vázquez lloraba a lágrima viva, traicionado por las luces ya encendidas. Este señor, Rafa, es más madridista que todos nosotros juntos, y el espíritu malintencionado que quiera sorprenderse que se sorprenda. Espero que no le importe que lo cuente. Viva la madre que lo parió.
La sensación al término de la proyección es de éxito rotundo. Muchos de los lectores de esta crónica apresurada, mientras le lean, ya habrán visto varios o todos los episodios de esta primera temporada, ya disponible en Amazon Prime, y me aventajarán en horas de metraje leyendablanquista. No por mucho tiempo, no se hagan ilusiones. A mi diestra estaba sentado Jorge Bustos, que emitía risas ahogadas al escuchar a Camacho o al contemplar en pantalla grande una vista panorámica del Estádio da Luz. Yo lo comprendo, son cosas tan icónicas e inconfundibles que te ríes con su simple puesta en común. Son demasiado tuyas para ser de tantos y sin embargo. En el vestíbulo, al final, departía Marcelo con Andrés Amorós, y esa imagen sí que me la llevo puesta y sí que es mía y sí que no es de casi nadie más, como mucho de la fantástica Noelia que los presentó. La felicidad es esto. La felicidad es Noelia presentando a Marcelo a Andrés Amorós, que iba con su simpatiquísimo nieto Luis.
Y yo qué sé qué más. Que dejes de leer esto, que abras Amazon Prime y que la maratón agarre al resto del mundo confesado, en el supuesto de que esperara algo de ti.
Soy madrileño y madridista.Desde el primer día que entré al S.Bernabéu(nunca se olvida)sentí dentro tal ilusión y tal paz.....
El templo de los madridistas ha visto pasar a los mejores y si pudiera contaría miles de historias, que placer poder ver esta serie.
En cuanto termine la jornada laboral corriendo a casa para deleitarme. ¡¡El Real Madrid es infinito!!El Real Madrid es mi universo.
Gracias, en general, a todos los que han hecho posible que esta maravilla haya visto la luz, lo necesitábamos.
Gracias, en particular, a Jesús por su imprescindible aportación.
Gracias, universales, al Real Madrid por existir.
Y yo me pregunto dónde los madridistas de corazón podemos ver esta joya de nuestro grandísimo club si no tenemos Amazon Prime
Creo que puedes suscribirte de manera gratuita durante 1 mes y luego al acabar cancelar
Lo he disfrutado muchísimo. Hay que verlo y no sólo una vez.
Lo vi en Twitch.
Me encantó! Bravísimo.!!! Creo que es una de las pocas veces que no me duele el estómago al escuchar a valdano....
Ya he visto tres capítulos. Sr. Bengoechea, luce usted muy bien en cámara.
Mi abuelo Antonio González Vázquez me llevo por primera vez en 1.970 y conocí a Don Miguel Muñoz, cuando paso por el Bernabéu solo tengo recuerdos de mi niñez. Cuando juega el Real Madrid es especial para mi, forma parte de mi familia, de mi vida es parte de mi y ya se que también lo es de mis hijos
Soy socio desde hace 54 años.
Ayer, viendo los dos primeros capítulos, se me humedecieron los ojos muchas veces y creo que hubo ocasiones en las que levité.
Pero lo mejor de todo es que lo vi junto a mi hijo de 18 años, que sin haber vivido tantos episodios de gloria, se emocionaba aún más.
Impresionantes, por ejemplo, las imágenes del partido en Belgrado.
Gracias Don Santiago Bernabéu, el gran creador.
El Real Madrid es tan grande que hace daño a la vista de los detractores. No les cabe en los ojos el tamaño de su mítica trayectoria.
Las leyendas quedan en duda con el paso del tiempo, en el caso del Real Madrid no ocurrre esto. La leyenda se agranda y los nuevos sucesos revalidan los pasados.
La historia del Real Madrid es la historia del humilde que ,aunque se haga rico, no olvida su origen.
La envidia nunca podrá inculcar más inteligencia que la creatividad y el talento puesto al servicio del esfuerzo.
Sabías palabras
Ayer vi los tres primeros capítulos. Disfrute por enésima vez con el gol de Ramos y con los comentarios e historias de todos los jugadores y aficionados que participan en ellos.
Gran producción y extraordinario trabajo de todos los participantes. Mil gracias por volver a traer tantos recuerdos.