Ayer por la mañana se confirmaba el mal presagio: Facundo Campazzo tiene decidido abandonar el Real Madrid.
El primer pensamiento que me sobreviene tras el sobresalto es la disparidad tan enorme que se da entre la percepción del aficionado sobre los periodistas de la canasta y los del ámbito del fútbol. Como en todas las profesiones hay excepciones, por supuesto. Pero la tónica general es que los especializados en baloncesto gozan de una credibilidad casi opuesta, al alza, a la de sus compañeros del balón. Tal es así, que una información como la de ayer, que no obedece a un anuncio oficial ni a ninguna declaración, es tomada como si la firmase un fedatario público. Si lo dicen es porque es, no porque podría ser. Ya es mala suerte que en este caso sea así.
La información precisa que el Facu ya ha tomado una decisión con respecto a su futuro lejos del club blanco. A priori, no lo tiene fácil. Esta maniobra le implica al argentino un coste económico muy elevado, pues al pago de la cláusula (de 6 millones de euros) se añade que el margen salarial en la NBA la próxima temporada estará muy restringido por la pérdida de ingresos con motivo del covid. Puesto que la temporada 2020/2021 de la Liga profesional americana no comenzará hasta octubre, es de suponer que Campazzo si ya ha decidido irse es porque ya ha cerrado un acuerdo con algún equipo, según parece Minnesota, atraído probablemente por la presencia de su compatriota Pablo Prigioni, asistente en los Wolves.
Lo primero que cabe dejar claro es que no cabe reproche hacia el Facu. Jugar en la NBA es la máxima aspiración de cualquier baloncestista. De hecho, este movimiento ya era esperado por todos. La única duda radicaba en el cuándo. Si un jugador domina el baloncesto europeo al nivel que lo está haciendo Campazzo, lo lógico es que, más temprano que tarde, termine allí. ¿Por qué no tenía el club preparado un relevo? No será porque no previera este movimiento ni porque no lo haya intentado. Desde hace un año, al Real Madrid se le conocen negociaciones por fichar a cuatro de los mejores exteriores de Europa: De Colo, Micic, Larkin y Wilbekin. Tentativas infructuosas. El Madrid, simplemente, no llegó a las cantidades que ofertaban sus rivales.
No obstante, hay quien sugiere que el Real Madrid renuncia a fichar un sustituto del Facu – manteniendo a Laprovittola, Llull y Alocén como trio de bases – para compensar con la cláusula las pérdidas de ingresos relacionadas con la pandemia. Aducen, quienes sostienen esta tesis, que no son pocas las opciones de que esta temporada no se dispute la Euroliga (principal atractivo para los patrocinadores). Y aunque todos los grandes clubs de baloncesto europeo son enormemente deficitarios (sostenidos por grandes magnates, corporaciones o clubs de fútbol) no es lo mismo perder 27 millones que 21.
Es una teoría razonable, pero si el club lleva un año intentando fichar un recambio para su base titular, no sería descabellado tampoco pensar que la cuestión es que, ahora mismo, no hay nadie en el mercado por el que merezca la pena invertir una gran cantidad y que se prefiere no despilfarrar, pero no para rebajar el déficit con lo recibido íntegramente por el argentino, sino para posponer la inversión a un mejor momento, probablemente cuando la NBA haya resuelto sus descartes y, sobre todo, cuando el Madrid haya ganado una plaza de extracomunitario con la nacionalización de Gabriel Deck que se espera antes de finales de año.
Lo que seguro no se quiere es fichar a cualquiera. Chacho Rodríguez, Sergio Llull, Luka Doncic y Facundo Campazzo, han sido, uno tras otro, el mejor base del continente. El Madrid mantiene una hegemonía casi tiránica en esa posición. El futuro parece garantizado con talentos como Alocén (19 años), Spagnolo (17 años) y el portentoso Juan Nuñez (16 años). Pero hasta que no se consoliden es necesaria la pieza que sirva de transición entre esos y aquellos, máxime con el adelanto de la marcha del Facu.
Hay quien sugiere, incluso, que Alberto Abalde, sin ser base, ha ejercido como generador de juego en el Valencia y que el baloncesto hoy no es tanto una cuestión de posiciones como de roles. De cualquier forma, parece que habrá que esperar un poco más para dilucidar como se define esta cuestión. Mientras, no cabe otra que confiar en unos jugadores y gestores que se han ganado un crédito sobradamente.
Fotografías Getty Images.
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Ningún reproche hacia el Facu, por supuesto, que ayer leí comentarios muy despectivos hacia él. Se merece la oportunidad y ojalá el Madrid mantenga sus derechos para cuando vuelva, algo parecido a lo de Navarro: "ya he ido, ya lo he probado y vuelvo a donde más feliz he sido". Mientras se consolidan los jóvenes (incluyo a Alocén en este grupo), confío enormemente en la gestión de los directivos de la sección, capaces de recomponer un equipo ultracompetitivo pese a las salidas de Mirotic, Chacho, Chapu, Luka, ahora el Facu. Seguro que mantendremos un gran equipo otro año más.
A misa.
Lo primero es comentar que, en lo que se refiere a los periodistas que dieron la noticia, y su diferencia de "credibilidad" con respecto a los del fútbol, en realidad es natural que así sea. Carlos Blas es un periodista con mayúsculas, especializado en baloncesto y deporte madrileño. No es el típico que busca seguidores o clickbait con noticias sacadas de chistera, no va de insider, ni nada por el estilo. El prestigio se lo ha ganado con su honestidad, y su credibilidad porque tiene un % de aciertos importante y comenta lo que parece que hay, sin estridencias. Aunque también se equivoca y de hecho fue de los que decía que Facu se quedaría, y lo reconoció, que en su caso la información que manejaba desde Junio no era, parece ser, la correcta. Hay algunos periodistas o páginas en baloncesto, que tienen una credibilidad bien ganada, al revés que en fútbol que ya sabemos que cualquiera habla de dinero, fichajes, y si fuera por muchos medios (además de tweetstars), el Madrid haría 50 fichajes al año. Para mí la diferencia es obvia, por prudencia y por periodismo real. Aunque en baloncesto también hay de los otros, claro.
Es obvio que Facundo tiene todo el derecho de tratar de hacer las Américas, y el problema ha surgido en realidad sólo por una cuestión de timming por la situación de la pandemia. SI no, sería una situación normal, ahora mismo de hecho estaríamos en plena agencia libre y no reiniciando la competición americana. Lamentablemente las cosas han cambiado y hasta mediados de Octubre la NBA no podrá iniciar su mercado, y esa diferencia con respecto al mercado europeo es la mayor pega que se puede poner a la salida del argentino. No es culpa del club, ni del jugador. Tampoco de la NBA, sino de una situación externa. Campazzo según las informaciones ha tratado de avisar con el mayor tiempo posible en una situación compleja, porque él a nivel contractual no puede tener una oferta firme(en la NBA se persiguen estas circunstancias con vigor) y además la situación de límite salarial de la temporada que viene está muy condicionada en la NBA al fin de la pandemia y por los ingresos, donde no puedes gastarte lo que te parezca como en Europa. Es una situación de extraña incertidumbre. Pero la NBA es la competición más importante del baloncesto, y es normal que Campazzo vea que es su oportunidad tras 2 años dominando en Europa. Y además dejará una cláusula muy importante, récord de un jugador. Sólo queda agradecerle su tremenda profesionalidad, su dedicación en estos años donde ha demostrado estar a la altura del reto, y que tenga suerte en las Américas, que conociendo su espíritu de trabajo y su calidad estoy seguro que conseguirá un buen contrato allí, además del reconocimiento y márketing que sólo puedes lograr cuando juegas en la NBA.
Además que los tiempos ahora mismo favorecen a la NBA, que no empezaría hasta Diciembre o Enero, unas fechas donde la vacuna del Covid puede estar empezando a ser una verdadera realidad(la vacuna USA de la compañía Moderna habla de producción a partir de Noviembre). Mientras en Europa cuando se supone que empiece todo no hay más que incertidumbre, y depende de legislaciones y situaciones de una docena de países diferentes, la NBA empezará con seguro, más seguridad. Personalmente considero que la Euroliga, tal y como está planteada, es imposible. Habrá que recortarla en su momento, o directamente aplazarla o no disputarla, como tristemente ocurrió esta temporada, dejando claro además la poca capacidad y cintura de la competición europea, de las pocas que al final se eliminaron y no plantearon una salida a su resolución aunque fuera a meses vista, lo que profundiza en su total y absoluta fragilidad como institución, un ejemplo de lo que es el baloncesto europeo en conjunto.
En cuanto al Madrid, ya pudimos comentarlo en el texto de Lorenzo Sanz. Llevamos dos temporadas con problemas en la generación en estático desde las posiciones exteriores, con una sonora diferencia entre el equipo titular con Campazzo y Tavares, y sus sustitutos, que eran capaces de complicarnos los partidos en parciales monstruosos en contra, tirando con ello ventajas anteriores. Si con Campazzo sano y a pleno rendimiento ya echábamos en falta alguien que le echara una mano o al menos le diera descanso sin bajar tanto el nivel, sin él necesitamos como agua de Mayo algún jugador que pueda hacer lo que además siempre ha sido clave en el Madrid de Laso: generar desde el pase, leer los ataques y aprovechar los 2v2 con alguien como Tavares. Llull es un jugador que ya no puede volver a ser el que fue, aunque pueda ser un jugador que aporte, pero ya más en una forma distinta, esperando a que le llegue el partido más que atacándolo a la carrera como solía. Alocén es un niño de 19 que tiene que adaptarse a lo que le pedirá su entrenador y crecer, que seguro que con Pablo puede aprender mucho y sorprendernos, pero para un futuro a algún año vista(aunque ya puede aportar cosas, sin duda).
Y Laprovittola como comentamos ayer es un fichaje fallido, un jugador que además no está en consonancia con lo que demanda el entrenador de su rol. No es un jugador de equipo, sino de 1v1 individual, tiene un problema con las pérdidas y en ocasiones con el mismo bote de balón cuando le presionan, y su defensa es deficiente tanto en esfuerzo como en fundamentos(por ejemplo Carroll no tiene fundamentos pero siempre se ha esforzado al máximo en ese aspecto defensivo). No pasa nada en reconocerlo, hay fichajes que no salen. Y Laso ha dejado durante la temporada bastante claro que no es un jugador de su gusto, como era de esperar. Por lo tanto, si hay una salida positiva de Laprovittola al PAO para el jugador y nosotros, tendríamos que ejecutarla. Porque un año extra cuando las cosas no salen de primeras, tiene todas las papeletas de consumar fracaso, y más en una posición tan importante en nuestro organigrama deportivo.
El Madrid debe fichar, con calma, y con cabeza. Porque no es fácil venir de nuevas y ser capitán general en un equipo tan especial en una posición tan especial. Tavares y Ayón llegaron y vencieron porque eran jugadores que se adaptaban muy bien al estilo(especialmente el mexicano, uno de los mejores fichajes de la historia de la sección encima pagando una cantidad irrisoria al Barcelona por sus derechos) y eran jugadores interiores. Pero el base en el Lasystem es una cosa distinta. Es el corazón del equipo, donde se bombea la energía para todo lo demás. Y ese peso lógicamente no lo puede llevar cualquiera, esencialmente si pensamos que sea un jugador que ayude de verdad, y no un especialista como trataron de hacer con Draper en su segunda venida o Randle.
Para mí la clave es que ese base que pueda venir venga con total y absoluto conocimiento y aceptación de Pablo Laso. Si alguien sabe lo que es ser un gran base en Europa es él, que lo fue y que ha modelado varios de los mejores en los últimos años. Laprovittola no era precisamente de su mayor gusto y se ha podido ver el fracaso. Necesitamos que lo que venga sea lo que Laso, dentro de las posibilidades claro, pida, que sea alguien que él considere una ayuda. Con éso ya tendríamos mucho ganado, seguro.
Tu comentario me parece muy certero, perfectamente razonado ( lo que no es tan recuente) y lleno de sentido común.
El único matiz que quiero introducir es en el tema del base. Muchos comentarios consideran la edad de Alocen , Spagnolo o Nuñez un hándicap y es posible que sea así, pero en el baloncesto se han dado no pocos casos de precocidad en esta posición. Corbalan (17), Ricky (15) y Luca (16) fueron talentos jovencisimos que tiraron abajo la puerta del primer equipo y que ya en las categorías inferiores apuntaban a llegar muy arriba.
Yo personalmente tengo muchas esperanzas en Juan Nuñez,en los partidos que le he visto me ha parecido un fuera de serie llamado al primer equipo a muy corto plazo.
¿Por qué descartar que pueda ser el momento de alguno de ellos? No me cabe duda de que si hay un entrenador que se puede atrever a dar el paso es Pablo Laso.
Excelente análisis.
Lo primero es lo que diga Laso, Herreros y JCS. Sin duda, en sus manos estamos y confiamos ciegamente. Mi opinión, mantener lo que hay, incluido Lapro más todos los jóvenes que puedan subir bajar según las circunstancias de la temporada.
Si leemos la información de Carlos Sánchez Blas es tan sencilla cómo fácil de entender. Campazzo está dispuesto a irse a la NBA y pagar la clausula. La única opción de que se quede es que algo no se cumpla; bien que Campazzo no encuentre un contrato que le permita abonar la clausula de salida o que, sea por el motivo que sea, finalmente se retracte, cosa que veo muy complicada.
Y viendo las cantidades que se firmaban antes de la pandemia es fácil que encuentre un contrato que le permita marcharse. Si se queda en el Real Madrid es un milagro.
Con respecto al recambio yo no veo nada claro, ni siquiera Calathes, el que se habló en abril, me convence, sólo me convence Milic, y tenemos el mismo caso que con Campazzo, es un jugador que dará el salto a la NBA. El resto de jugadores de la lista tiene unas carencias, la mayoría en dirección de juego, otros en defensa y algunos en anotación exterior. Viendo las dudas yo lo tengo muy claro, le doy la oportunidad a Laprovittola y Alocén, si el argentino falla tenemos a Llull que puede volver a jugar de base, y no dejo de mirar a la cantera con Spagnolo y Nuñez, especialmente el segundo, que este año ya deberían tener oportunidades, sobre todo en la ACB.
La situación económica es bastante mala, jugársela con un experimento es un riesgo que quizás no nos debemos permitir. Ya se sabe que otros equipos gastan y gastan y luego se ponen a rezar para que les salve el gobierno autonómico o un banco. Pero nosotros no disponemos de eso.
Buenas tardes