El Madrid que quiero es un Madrid donde el bien del colectivo esté siempre, siempre, siempre por encima de los sueños individuales de éxito, gloria y poder de cada jugador.
Un Madrid que gane por el escudo sin creerse nunca que se gana con el escudo.
Un Madrid donde a los futbolistas les importe poco lo que digamos de ellos desde la prensa pero que les quite el sueño lo que opinen su entrenador y su afición.
Un Madrid donde la plantilla se someta a la autoridad del entrenador, cuestionando sus consignas siempre pero sin desobedecerlas jamás.
Un Madrid que tras hacer el mejor año de su historia, por ejemplo en 2014, no se ahogue en la autocomplacencia al año siguiente.
Un Madrid que jamás se crea más que el rival hasta que el partido haya finalizado con victoria.
Un Madrid donde los jugadores estén deseando meterse en un ataúd y no dejarse ver en una semana cuando el Atlético de Madrid les meta cuatro goles en el Calderón.
Un Madrid donde todos sus futbolistas comiencen desde cero en pretemporada, sin importar una higa lo que hayan rendido hasta el momento.
Un Madrid donde los contratos publicitarios y las distinciones individuales están siempre por debajo de la nómina (que ya está más que bien en todos los casos) y de las ganas de hacer más grande la sala de trofeos más colmada del mundo.
Un Madrid donde los jugadores estén a muerte con su entrenador, cuente chistes o no, haya sido futbolista o no, tenga a la prensa de cara o no, asuma todas las culpas de una derrota en sala de prensa o las reparta.
Un Madrid donde todos y cada uno de los jugadores se acuesten todas y cada una de las noches pensando en lo afortunados que son por poder defender la camiseta del Madrid.
Un Madrid donde un jugador ceda penaltis y faltas a sus compañeros porque les considera hermanos. O porque le duele no verles marcar en tres partidos seguidos. O porque reconozca su talento para ejecutar estas acciones al menos tan bien como él.
Un Madrid donde el futbolista que no se sienta al 100%, física o mentalmente, le exija al entrenador que ponga para tal o cual partido a un compañero que esté más preparado.
Un Madrid donde los jugadores estén toda la semana pensando en el jugador que van a tener en frente, sea del Barça o del Cádiz. En cómo pararle, en cómo superarle, en cómo ser mejor que él. Sin dar nunca nada por hecho.
Un Madrid donde los futbolistas entiendan que su vida más allá del fútbol no existe hasta que cuelguen las botas. Y que no se lamenten por ello, sino que se sientan felices del afortunado don con el que nacieron.
Un Madrid donde los futbolistas transmitan felicidad, ilusión y agradecimiento por tener el privilegio de jugar profesionalmente al fútbol, y más por hacerlo en el mejor club de la historia.
Un Madrid donde a los jugadores les duela perder lo mismo o más que a los aficionados.
Un Madrid donde los jugadores, tras el pitido final, se dirijan a una esquinita del campo rival a saludar a la afición que se ha dejado medio sueldo para animarles, aunque sean seis. Ya ganen, empaten o pierdan el partido.
Un Madrid donde un futbolista sonría de oreja a oreja en zona mixta cuando el equipo ha ganado, aunque él haya firmado el peor partido de su vida.
Un Madrid donde no sólo jugar, sino ir a entrenar cada día a Valdebebas les parezca a los jugadores lo más emocionante que les va a pasar en sus vidas.
Un Madrid donde el futbolista que se queda dos contra el portero con el marcador apretado no dude en cederle el balón a su acompañante en la galopada para asegurar el gol del equipo.
Un Madrid donde el futbolista admita con naturalidad la crítica de su entrenador, privada y pública, si se ha equivocado durante un partido, sin ver por ello herido su ego porque en deporte todo el mundo falla.
Un Madrid donde los jugadores lleguen tarde a la cena que tienen programada en el mejor restaurante de la ciudad porque se quedaron firmando autógrafos, camisetas y haciéndose fotos con sus fans.
Un Madrid donde todos los jugadores mantengan contacto con la afición a través de redes sociales y zona mixta cuando ganan, cuando empatan y, sobre todo, cuando pierden.
Un Madrid donde en una jornada de entrenamiento voluntario en Valdebebas haya atasco en la rotonda de acceso a las 9 de la mañana.
Un Madrid donde los jugadores se apoyen siempre en el terreno de juego y en sus manifestaciones públicas, dejando sus diferencias, que tiene que haberlas siempre, para el vestuario.
Un Madrid donde los jugadores no tienen por qué ser amigos, pero se partan la cara por el compañero que tienen al lado como lo hace un soldado por su camarada en la trinchera.
Un Madrid donde los jugadores confíen y den plenos poderes negociadores a sus representantes, pero poniéndoles también una mordaza en la boca.
Un Madrid donde los jugadores se crean por debajo del entrenador. Y el entrenador por debajo de los jugadores. El vestuario por debajo del presidente. El presidente por debajo del vestuario. Y todos ellos, todos, por debajo del escudo.
Un Madrid donde haya un hilo conductor entre los distintos proyectos deportivos, siempre con unas mismas bases que sean del agrado de la mayoría del madridismo.
Un Madrid donde los entrenadores duren cinco años. Ya sean Mourinho, Ancelotti, Capello, Benítez o Zidane. Elegidos a conciencia y con plenos poderes para hacer y deshacer en el vestuario. Aunque hagan un año en blanco, o dos, pero con el equipo compitiendo hasta el final.
Un Madrid donde la afición vaya al Bernabéu consciente de que sólo 80.000 de 300 millones puede hacerlo. Y que anime sin parar mientras ruede el balón pero que tras el encuentro se exprese libremente en el mismo estadio o en los muchos canales de comunicación que tiene con el club.
Un madridismo unido, sin clanes, egos ni luchas de poder. Ni en la grada ni en el campo.
Un Madrid donde la prensa nociva y beligerante (que no crítica) vea los partidos por televisión.
Un Madrid donde las selecciones nacionales sean algo importante para la plantilla, pero también secundario.
En definitiva, un Madrid a la altura de la historia, la tradición y la esencia de lo que ha sido siempre el Madrid y le ha hecho grande.
Ese es el Madrid que quiero. Y creo que no pido tanto.
"Ese es el Madrid que quiero. Y creo que no pido tanto."
Ufff... yo creo que sí es pedir mucho. ¿Acaso en el Barcelona cumplen todos esos "requisitos"? ¿O en otros equipos? Me parece a mí que tanta "dedicación" a la profesión escasea (y no sólo en el fútbol o en otros deportes)...
Donde pones las cosas, un jugador que sí me parece que cumple lo de ser "madridista" actualmente es Arbeloa.. pero claro, ya está en el último tramo de su carrera, no es de los primeros de la lista... De estos la verdad no veo esa implicación que dices, en ninguno. Al menos no nos lo hacen saber a los aficionados. Cuando fallan en el campo, no vemos que estén contrariados ni molestos una vez se han duchado y marchado a sus casas... ahora que hay redes sociales, no hacen falta los intermediarios amarillistas, basta con que ellos comuniquen directamente sus intenciones o ideas o griten el mea culpa con intención de resarcirse más pronto que tarde.
Son prestos a poner fotos de la marca de botas que los patrocina o de lucir un nuevo peinado. Pero eso nos importa poco a los que sólo nos interesa ver jugar bien al Madrid.
Volviendo al artículo, como anteriormente mencioné, tampoco los del Barcelona cumplen todas esas 'bondades' como jugadores ideales. Que todos sabemos que Neymar juega ahí porque se llevó mucho dinero (investigado por Hacienda aún) o que cada dos por tres Messi "renueva" su contrato con mejora. O Dani Alves, que le da igual ocho que ochenta...
PERO el quid de la cuestión es que en el campo sí se empeñan, tienen ganas de salir victoriosos, de "humillar" al rival (sobre todo si es el Madrid). Y usan tretas y trampas teatreras incluso (tras el primer gol del sábado aciago, sólo hacían tirarse y revolcarse tras cualquier roce -o no roce- y lo protestaban todo). Y luego no olvidemos que tienen a toda la prensa a su favor, la del Barcelona y la del Madrid (en su gran mayoría). Y eso también quita bastante presión.
Enhorabuena por el artículo. Es el sueño de todo madridista. Ahora bien, es tarea de todos empezar a señalar a todos los que no cumplan con lo anterior. Nada de poner paños calientes.
Y me permito añadir:
Un Madrid donde sus aficionados mueran por ver un partido como el del sábado. Donde no revenden su entrada y hacen del estadio un fortín para los equipos rivales.
Seguro que a todos se nos irán ocurriendo más ideas de lo que debe ser un Madrid ideal. Esto debería estar el frontispicio de LaGalerna.
Ese es también el Madrid que yo quiero y porque ese Madrid está tan lejos del actual es por lo que estoy encabronado, desilusionado, harto, mosqueado, asqueado...............................................................
Felicidades por el artículo que suscribo de pe a pa
Saludos
Buenas tardes D. Paul he leído su interesante artículo y por supuesto estoy de acuerdo. ¿Qué madridista en su sano juicio no lo estaría?. Pero ya van unos cuantos artículos desde la mamarrachada del sábado, lo más selecto de La Galerna y todavía esperando una idea nueva, una metodología nueva, en definitiva ¿ Como cojones se hace eso que usted ha descrito con tanta pulcritud? Mucho hablar y pocas soluciones. Muchos paños calientes y poca mala leche. Mucho divagar sobre el sexo de los ángeles y poco entrar a cuchillo en los problemas estructurales del club. Mucho andar de puntillas sobre ciertas personas y mucho desviar la atención sobre aspectos colaterales. ES desesperante leer y leer y venga leer, todo muy bien escrito eso sí, mucho estilo faltaría más, pero de sustancia nada de nada. Basta ya de marear la perdiz, que los malos están en la tierra
Saludos blancos y comuneros
Buenas tardes Sr Tenorio. Yo no quiero ser el aguafiestas, pero su artículo es mediocre y demagógico hasta decir basta. Un compendio de topicazos. Claro que todo estamos de acuerdo!. Y con la Paz en el Mundo y la Erradicación del Hambre. Es un ejercicio estéril e irreal. Ser jugador del Madrid no te convierte en la Madre Teresa, en DareDevil (el Hombre Sin Miedo) y Supermán. Son personas, con defectos y virtudes. Lo que yo pido es que sean GRANDES PROFESIONALES. Lo demás, lo místico, se lo dejo a otros clubes. Yo quiero REALIDAD
Me parece un gran articulo y creo tambien, que es el adecuado para esta situacion. Me parece bastante más mediocre, el querer destruir todo y no solucionar nada. Y digo todo esto tan convencido como cuando leí a Martín Luther King "He tenido un sueño...".
Estoy de acuerdo con "comunero", en este club hace falta mas mala leche, desde los jugadores hasta la presidencia, tanto buenismo me tiene asqueado, Mou nos señaló el camino, hicimos poner pies en polvorosa al meacolonias y comenzábamos a enterrar al mejorfarsadetodoslostiemposmundialesyextradimensionalreydelosvalors, pero claro, había que ser buenitos y comediditos ergo, echamos a Mou.
"Es que la décima la ganamos porque ya no estaba él" dirán los tragapipas, no se dan cuenta de que el equipo lo había dejado armado y listo el senhor de Setúbal.
Florentino me parece un buen presidente, pero tiene que poner mas mala hostia en sus defensas ante los medios, a mi lo de la cabeza del caballo o lo del pescado clavado en la puerta no me parece mala idea, pero claro, yo soy un abducido y no trago pipas.
Me parece que vetar públicamente a varios medios y anunciarlo con bombos y platillos seguido o precedido por querellas consuetudinarias haría efecto entre la asquerosa manada de enemigos del club...total si hay dinero para comprar un jugador de 70, 80 o 100 millones, bien se podría invertir alguito en demandas judiciales, no sé, digo yo.
Hay que dar palo sin miedo, total, mas enemigos no tendremos, ya lo son.
Y ahora señor censor, puede usted eliminar mi mensaje, pero antes lo habrá leido y ello me basta.
Conste que no soy ultrasur, soy yo uno mas entre millones que pensamos que el buenismo y el falso e hipócrita comedimiento están de sobra en un club basado en dos tipos que no destacaban por ser practicantes de ello: Bernabeu y la saeta, y no te cuento si hablo de Hugo o Juanito.
Nuestra piel no es tan fina, así que su comentario queda, pese a algunos términos.
Yo llevó pensando muchos años que el principal problema del Madrid es que ha perdido absolutamente la batalla de la comunicación. Y no tiene fácil solución, está rodeado de un ambiente permanentemente negativo y hostil, se minimizan sus méritos y se inflan sus miserias. El 80% de la información relativa al club es en negativo. Quizá la primera medida sería hacerse con profesionales de la comunicación y la imagen para tratar de revertir eso.
Por otro lado va lo deportivo, pero es muy difícil tener una estabilidad en este ambiente tóxico que rodea al club.
Yo sólo quiero un Madrid que gane algo casi siempre, como siempre fue. Eso ahora es tarea hercúlea. Somos muy ricos en el banco, lo que está muy bien, pero muy pobres en el campo.
Pues sí la séptima tardó poco en llegar.
Pues sí la copa del rey desde la de Benito Floro a la de Mou tardó poco en llegar.
Pues sí en los 90 las ligas caían unas detrás de otras sin solución de continuidad.
El problema no es Florentino, ni mucho menos, el problema esta en la masa de borregos que puebla el sector de socios de la aficion, lo del Bernabeu es un espanto, hace falta pasarse por peñas y diria que de fuera de Madrid para ver a gente que no este piperizada del todo.
Buenos días. Estoy de acuerdo con los compañeros que han opinado del texto de Paul que por supuesto es lo que cualquier madridista desearía que fuese el Real Madrid, pero a la vez que es algo utópico, como -igualmente mencionado en otros comentarios- la paz mundial y demás temas casi de interés universal. A día de hoy siento una gran desilusión con un grupo de jugadores que en su grueso considero que ha decepcionado a los aficionados en demasiadas ocasiones este último lustro, que se ha visto obligado a pedir perdón demasiadas veces y que está apoyado por un Florentino al que da la sensación que le está volviendo a traicionar su exceso de mano izquierda. No sé en qué va a acabar esto, ojalá se reconduzca la situación para llegar a la idílica que describe Paul Tenorio, pero ahora mismo el panorama que veo es de desconfianza total hacia esta plantilla.
Yo quisiera hablar del Madrid que no quiero pero que se nos viene encima. Aún sigo consternado desde el sábado. Hoy me doy cuenta de que este partido podría haber sido el de la final de la Champions pasada. Menos mal que nos eliminó la Juve por la mínima. Al menos así se pudo prorrogar esa sensación de mala suerte que ha acompañado al grueso de esta plantilla durante varias semifinales, la cual viene haciendo partidos cada vez más malos desde la consecución del Mundialito. Cambiar de entrenador fue lo fácil. Cierto es que podría haber resultado, pero no ha sido así. Se ha demostrado que no es el entrenador, cuya cuota de responsabilidad la dejo en que no se haya hecho respetar lo suficiente.
El Real Madrid Club de Fútbol es cosa del pasado. En la actualidad se trata del Real Madrid Club de Marketing y Moda, donde los aficionados se pegan por hacerse un "selfie" con cualquiera de las estrellas que componen la plantilla y lo flipan con su último Ferrari. Una vez asumida esta nueva concepción del equipo, ya no es necesario dejarse la piel en el campo; ahora lo prioritario es salir guapos al césped y lucir los nuevos peinados de la semana. La imagen es lo que vende y es ahora mismo una gran fuente de ingresos para el club y de prestigio personal para los jugadores. Sí, amigos. Ahora el prestigio viene por imagen y no por juego. Hay tener en cuenta que el exceso de sudor puede dañar la imagen de los jugadores e incluso abrirles demasiado los poros dérmicos, anulando la acción de los cosméticos que se han untado antes de salir.
Hemos podido ver en televisión cómo el lunes han ido aficionados a Valdebebas y se han hecho fotos con Cristiano de la misma forma que lo hubieran hecho si se hubiera ganado el partido. Nadie le ha recriminado nada. Lo importante es poder fotografiarse. Claro que sí. Y yo sin saberlo, ahí fastidiado, sufriendo día tras día. Pero bueno, ya me he dado cuenta.
El Real Madrid Club de Fútbol era un equipo con gen competitivo, era un equipo ganador y ahí están los éxitos cosechados. El Real Madrid Club de Marketing y Moda es, sin embargo, un equipo segundón, que vive de la historia del anterior y que no tiene ni tiene por qué tener coraje ni ambición porque la mayoría de los partidos los puede ganar casi sin bajarse del autobús y el resto, con un poco de suerte, no se pierden todos. Al final quedan segundos y ya está conseguido el objetivo. Pues eso, segundones. Pero no pasa nada, amigos. Recordad: paz y amor. El próximo paso será contratar a un entrenador más mediático, guapo, musculoso y que haga anuncios en la tele. Para culminar la obra de arte, el sucesor de Florentino debería ser una mujer (atractiva y de mirada seductora) para estar en la onda de la igualdad. Seguro que a ella sí que la dejarían hacer la mejora prevista del estadio y el As la sacaría en portada a diario rindiéndose a sus pies. Puede que en el transcurso de un par de generaciones el Real Madrid se convierta en una red de centros de estética y se transmitan en directo los cortes de pelo.
Todo son ventajas en este nuevo club. Ya no hace falta apasionarse. Todo es paz y armonía. No existe el estrés. Lo hacen por nuestro bien y protegernos de las subidas de tensión. Ya me pasó algo así con la selección española hace unos años y ahora veo sus partidos sin pasión, dándome igual si pierden o si ganan, si juegan bien o juegan mal. Veo fútbol para entretenerme 90 minutos y punto. Creo que este Real Madrid basado en la imagen va a conseguir eso mismo, que vea los partidos sin ilusión. Y es que no es lo mismo acabar el partido con la camiseta llena de suciedad y la cara sudorosa que hacerlo con la camiseta impecable y el peinado intacto (con el tiempo no hará falta ni la laca), aunque les hayan metido 4 goles. ¡Espejos al poder!.
Me parece que su comentario es bastante exagerado, aunque está admirablemente escrito.
Eso sí: cada vez que leo a alguien "amenazar" con que a partir de ahora verá los partidos del Madrid relajadamente y dándole igual lo que pase, considero que es la expresión de un deseo o (peor) una mera pose. Si usted es un auténtico madridista, y no tengo ninguna razón para dudar que lo sea, está condenado a amar y sufrir por ese escudo hasta al fin de sus días.
Resígnese.
Un saludo.
Efectivamente, en esas cualidades del Madrid estaríamos de acuerdo la gran mayoría de los madridistas.
Sirven también para detectar antimadridistas. Por ejemplo:
- El Madrid que quiere un antimadridista es un Madrid que no es más que un grupo de estrellas individuales egoístas, pero que nunca son un verdadero equipo, y por tanto, nunca "juegan a nada”. Luchan para transmitir esa imagen de los jugadores
- Quieren un Madrid que gane siempre por la pegada, por los árbitros, porque el contrario no ha plantado batalla, y porque controla todas las estructuras del fútbol mundial, pero nunca porque juegue bien, en equipo, y legítimamente.
- Un Madrid donde la prensa defiende siempre y en toda circunstancia a los futbolistas, españoles porque son con los que los periodistas pueden hablar, para, de esa manera, tener opción de manipular, y obtener información.
- Un Madrid donde determinados jugadores sean tan protegidos mediáticamente que se crean, y realmente tengan la posibilidad de cuestionar a su entrenador, presidente, club e incluso afición.
- Un Madrid donde dichos jugadores protegidos, cuando pierden, puedan echar la culpa al entrenador, presidente y compañeros y en el que como mucho, haya que salir a zona mixta a pedir perdón por un mal partido.
- Un Madrid sin hambre de gloria.
- Un Madrid en el que impere el “con lo que nos ha dado”, en el que no haya meritocracia, en el que los españoles y canteranos valen más que los de fuera por el mero hecho de serlo.
- Un Madrid en el que los jugadores piensen que la gloria la alcanzaron al ser contratados, y no al ganar títulos en el Madrid.
- Un Madrid con un once muy definido e invariable, donde los reservas se tengan que sentir mal porque crean que ya no jugarán ni un solo minuto en el resto del año, y donde los que juegan, siempre lo hacen por decreto de la superioridad, y donde los que no juegan, sean los que merezcan realmente jugar.
- Un Madrid con jugadores distraídos por problemas inventados.
- Un Madrid donde los futbolistas crean que pueden ganar siempre mucho más salario, que siempre están mal pagados, y que en cualquier otro equipillo estarían más valorados.
- Un Madrid donde los futbolistas, sea o no cierto, transmitan egoísmo, falta de compromiso y malestar por no jugar todos los minutos que por supuesto siempre merecen.
- Un Madrid en el que la afición sea reconocida como una "gran afición" por ser muy exigente, por no animar nunca, por comportarse como en un teatro de Ópera, y por pitar a sus jugadores aunque se estén jugando una importante clasificación en Champions, pero que, contradictoriamente, la verdaderamente reconocida como mejor afición de España sea en realidad una que anima aunque su equipo pierda, y aunque su equipo no haya ganado nunca grandes títulos.
- Un Madrid donde a los futbolistas, cuando ganan el partido, y peor aún cuando pierden, siempre se les pregunte por cualquier problema real o inventado, por si ha jugado con un estilo impropio de un club tan grande o con otro peor, por si se ha quedado fuera algún compañero que debería jugar, por si el árbitro se ha equivocado a su favor, pero nunca se les pregunta cuando el árbitro se ha equivocado en su contra, etc, y de esta manera nunca tengan los jugadores ni la afición la sensación de haber ganado bien, jugando bien, como equipo, y legítimamente.
- Un Madrid en que se haga desagradable jugar y entrenar porque las preguntas que se les hace en rueda de prensa son siempre tratando de sacar alguna que otra basura.
- Un Madrid en el que cuando un jugador se equivoca no dando un pase a un compañero aparentemente mejor situado, se convierta en el error más grave de la Historia de la Humanidad, incluso aunque termine en gol y dé un título
- Un Madrid en el que los periodistas actúen de correveidiles para tratar de remarcar las diferencias, inventándolas si hace falta, y de esa manera que un compañero pueda hablar mal de otro o del entrenador
- Un Madrid donde los jugadores, además de dar entrevistas a todos los medios, cuenten las cosas que pasan dentro del vestuario.
- Un Madrid en el que los periodistas viajen en el avión, y que como "agradecimiento" por ello, cuenten todos los roces entre componentes de la plantilla y del cuerpo técnico que hayan detectado (o no)
- Un Madrid donde las negociaciones salariales se conviertan en auténticas batallas entre club y jugador, retransmitidas en directo por todas las radios y televisiones, y donde los medios defiendan siempre la postura que más daño haga al club
- Un Madrid donde todos sean el símbolo o el escudo del Madrid, y no un componente más, importante, pero uno más.
- Un Madrid donde no pueda haber tranquilidad ni cinco minutos, y donde un proyecto de tres años parezca absolutamente utópico.
- Un Madrid donde los aficionados se crean los más sabios, los garantes del auténtico y genuino fútbol, los más exigentes con los suyos, los más generosos con los contrarios y con los árbitros, que nunca se quejen de un atraco arbitral porque" a los clubs grandes siempre se les ayuda", y por un mal entendido señorío, y que no tengan ni puñetera idea de la Historia de su querido equipo, para que sean plenamente manipulables en contra de su club.
- Un madridismo de clanes beligerantes, los que eligen la cantera como única posibilidad por encima de todo, los que prefieren un fútbol rápido, los que prefieren un fútbol lento, los que sólo les gusta un gran entrenador del pasado, etc.
- Un Madrid controlado totalmente por la prensa.
- Un Madrid subordinado a la selección española. Que jueguen en el Madrid los jugadores que quiera el seleccionador que tengan minutos, que el Madrid juegue con el estilo que quiera el seleccionador, y que los jugadores se salten por encima a su entrenador en detrimento del seleccionador
- En definitiva, un Madrid que olvide su historia, tradición y esencia de lo que siempre fue y le hizo grande.
Ese es el Madrid que quieren Manolo Lama, Santiago Segurola, Paco González, José Ramón de la Morena, Alfredo Relaño, Javier Ares, Paco Gacía Caridad, Roberto Gómez, Josep Pedrerol, y tantos y tantos otros antimadridistas.
Si queréis, les dejamos que se salgan con la suya.
Llevo varios días pensando escribir algún comentario a cualquiera de los artículos que han aparecido desde el sábado, y creo que ya se ha reposado suficientemente la "debacle" para reducir el peligro de poner el grito en el cielo en lugar de razonar. Así que me pongo a ello, aunque debo decir que da igual sobre qué artículo opinar porque, en el fondo, todos tienen el mismo contenido. Todos tienen algo de desesperación melancólica y cierto conformismo esperanzado, lo que digo sin ánimo de ofensa y para defender las posiciones que expondré. Hago dos reflexiones previas más. La primera es que quiero hablar desde la firmeza, no desde la melancolía ni la esperanza, y la segunda es que espero que quién tenga a bien leer mi comentario lo entienda en clave positiva. porque la realidad, como cada cuál la ve, nunca puede ser ofensiva, y siempre es dura y simple, así no podrán ver un diagnóstico experto, porque no está a mi alcance. Lo mio es mero sentido común (espero). Enumero mi diagnóstico:
1.- Los madridistas de buena fe, deben entender que el Real Madrid, no es el mejor club del mundo a día de hoy (siempre hablando de lo deportivo), como mucho es el mejor club histórico del mundo. Esta diferencia es fundamental porque funciona menos el deseo y más la triste realidad. Es más el Real Madrid, en muchos tramos de las competiciones en que participa es un equipo vulgar y segundón. (Insisto nuevamente, todo ello dicho con todo respeto y en ánimo de defensa).
Entendamos ésto, porque si no lo entendemos, y se sigue viviendo en los mundos de "yupi", nunca será acertado el diagnóstico y no se podrá acertar con las soluciones. Y ojo esta idealización del Real Madrid, tiene muchos peligros. Ni económicamente ni deportivamente supo acertar el Milan y miren como está hoy.
Sr. Tenorio, le tengo gran respeto, pero su artículo vale para esos mundos de "yupi". Ninguna realidad social de las que se dan en la vida misma están impregnadas de los deseos que enumera, ni siquiera mínimamente. Es algo así como los diez mandamientos. Algunos creyentes intentan aplicarlos, para los demás están ahí y ya está.
2.- El Real Madrid, tiene la mejor plantilla de mundo en términos generales. Se podrá discutir si Messi o Cristiano, si Suárez o Benzema, etc.., pero en general nadie discutirá que la plantilla, jugador por jugador, es envidiable para cualquier equipo, incluido el Barça. Es más me resulta claro, siempre desde el sentido común, que este Barcelona, fuera de los tres de arriba y alguno más, tiene un montón de jugadores mediocres. Incluso diría que para equipos de mitad de la tabla. Y, al César lo que es del César, ésto hay que agradecérselo al Sr Florentino.
3.- El Real Madrid, más allá de su poderío económico, es un club de "chichimosca", con esta palabra se refería mi abuela a alguien que "ni pinchaba ni cortaba". Y es verdad el Madrid ni pincha ni corta. Dos ejemplos como botón de muestra. ¿De qué otra manera se puede entender que, sin recato alguno, la cadena pública de televisión haya convertido el otrora respetable estudio estadio, en el órgano de expresión televisivo del Barça de lunes a jueves? ¿Cómo se puede entender que un tipo como Simeone diga que "la liga está peligrosamente preparada para el Real Madrid este año"?. Bueno en realidad ambas cosas sí son entendibles, lo que no se entiende es que no se haya juntado Roma con Santiago, no se haya montado escándalo alguno que durara al día de la fecha. Qué envidia me daba ver a los diputados de CiU, interpelando en el Parlamento sobre los análisis de sangre a Messi. En el Parlamento!!!!!.
Y es que como algún otro ha dicho más arriba el Real Madrid hace tiempo (10 años más o menos) que perdió no la batalla de la prensa y comunicación, sino lo que es peor, la batalla por la opinión pública. El Barcelona hace esas cosas porque puede, porque está a la ofensiva, porque es moderno y guay, porque tiene valors, en resumen porque son los buenos, el buen fútbol es sinónimo del estilo Barça. El Madrid son carcas y retrógrados, tiene un "presidente manipulador", es vulgar y de mal gusto. En resumen, El Madrid es el malo y su estilo, sea este cuál sea, representa el mal fútbol. Cristiano es un chulo y Messi el humilde por excelencia. Y esto creo, debe figurar en el debe del Sr. Florentino. Un debe inexplicable, porque el R.Madrid es el club más rico del mundo. Elemento éste más que suficiente para tener una adecuada política de imagen y comunicación que sirva para desenmascarar al Barcelona... No me equivoco, que hubiera servido para que los valores, el equipo, y los criterios madridistas sean los dominantes, porque como en el fútbol estar a la ofensiva es la única forma de no estar a la defensiva.
4.- Esta concepción buenista, concepción que además domina hoy por hoy en la sociedad en que vivimos en casi todos los terrenos, se ha trasladado hace tiempo a lo deportivo. Este equipo, como decía más arriba no es el mejor del mundo porque no se lo cree, porque está a la defensiva, porque ve al Barça en la cresta de la ola, y a ellos mismos en el valle. Si se añaden los contínuos desaciertos en lo que a política deportiva se refiere ya tenemos otro elemento en el menú. No se trata de un entrenador u otro, con estos jugadores los entrenadores lo tienen más fácil. Sencillamente es que si quiero un entrenador más rigido, lo pongo, y si lo quiero más amable pues lo pongo. Vale correcto. Pero lo dos deben jugar en la misma dirección, básicamente su idea del fútbol debe ser similar. Esto figura también en el debe del Sr. Florentino. Yo vengo notando al equipo temblar por momentos desde hace diez años. Antes se perdía, pero no lo había visto temblar nunca.
Bueno, perdon, me he extendido demasido, no era mi intención. Así que me guardo las conclusiones para no enrollarme más. Aún sin éstas creo que se entiende lo que quiero decir, y si alguien las considera necesarias pues las plantearé.
Perdón también a la Garlerna porque entiendo que no pretende ser un mero evaluador de fútbol, sino también un portal de fútbol y poesía, el principio de un nuevo estilo, la unión de una buena prosa con sentimientos y fútbol. Enhorabuena.
Por favor, no nos pida perdón por su sin duda meditado comentario. Le agradecemos mucho que se haya tomado la molestia de compartirlo precisamente en este foro para su sana discusión pública. Nada de lo que dice es desdeñable en absoluto.
Pues tienes toda la razón. Hoy por hoy, solo somos un Club rico incapaz de competir y no digamos implantar una hegemonía.
Hemos dejado claro que nuestro querido Real Madrid tiene en la actualidad algunas grietas y deben hacerse reparaciones. Sin embargo, tenemos La Galerna, un espacio envidiable que he de reconocer que me produce ilusión hojear todos los días como una de mis ineludibles tareas. Es de agradecer que, además de poder leer elegantes artículos que rezuman gran calidad y sentimiento, se puedan leer también magníficos comentarios que, al margen de si se está de acuerdo o no, son de buen gusto, no utilizan expresiones soeces y utilizan las reglas de la RAE para escribir. Todo un logro a la vista de los comentarios que se pueden leer al pie de los artículos de los medios objeto del portanálisis. Todos los días goleada de La Galerna.
Muy agradecidos, Javier. Ha captado muy bien nuestros intentos.
El Madrid que quieres ya existe: se llama F.C. Barcelona.
A la espera de que Paul se pronuncie, ya te digo yo que no.
Ni ganas.
Un saludo.
Es innegable que Florentino y su equipo han hecho un trabajo envidiable desde el punto de vista economico y organization. El RM es hoy en dia una institucion modelica y entre las mas poderosas que se conocen. Y lo mejor, con un gran margen de crecimiento a pco que el rndimiento deportivo crezca.
Por otra, como ya ha sido apuntados por La Galerna y contertulios, la carencia de un servicio de comunicacion moderno y poderoso en todos los aspectos es un mal que lastra al equipo. Es ahi donde Florentino y su equipo han, y siguen, fallando estrepitosdamente. La tactica de hacer buenas acciones asumiendo que ellas se publicitan por si solas mientras se ignora el ataque diario de una prensa hostil y seguida por una parte significativa del madridismo ( carezco del dato pero no me sorprenderia que fuera en mayoria) simplemente no funciona.
Funciona para esa prensa amarilla en detrimento de la solidez de la institucion. Laa evidencia no puede ser mas clara. El Madrid (Florentino) con su silencio y consentimiento esta dando entidad a personajiollos como el Meana y muchos otros que llenan periodicos y noches de radio. SAi dicen mentiras, se denuncia, se desmienten a diario o cada media hora las que sean falta. O es que la situacion actual es la deseable. La entidad esta siendo abusada desdde todos los angulos y que hacemos? Amagar cada cierto tiempo para luego nada de nada. Ya tiene un canal de TV pues monte usted una radio y un periodico con los mejores profesionales que pueda contratar (aqui en La Galerna hay una buena muestra).
Y plante cara de una vez, de una via madridista al madridismo para que se informe sobre su club desde su club. Lo de ahora es insostenible para cualquier institucion pues el madridismo se nutre en gran medida de esos medio hostiles.
Pero me temo que Florentino caera antes de renunciar a sus principios de que el mundo del futbol es rosa y el Madrid la institucion mas querida del mundo. Seguira apoyando a causas muy loables, equipos del tercer mundo, equipos en bancarrota, etc. y todos nos enteraremos despues de enterarnos de lo malo que son Benitez, Cristiano, Florentino o quien toque. Ojala me equivoque.