Una cosa es el brazalete y otra el carisma; una cosa es el corazón y otra la cabeza; una cosa son los goles y otra los amores; una cosa es el genio y otra la figura… Podría estar haciendo comparativas como estas durante todo el artículo, dejando a la imaginación del lector sus propias conclusiones. Pero mi intención es otra: comprender y tratar de explicar que, en el fútbol, una cosa son las cualidades individuales y otras las del equipo en su conjunto. En el Bernabéu volvimos a ver, frente al PSG, otro de esos momentos mágicos que van sedimentando, como puntos de inflexión, la línea de una trayectoria histórica del fútbol mundial. A estas alturas parece innecesario apelar al mantra de que ningún otro equipo como el Real ha sido (y es) capaz de hacer algo así, pero —la verdad— me apetece recordárselo a quienes parecen duros de memoria (los antimadridistas, ante todo).
El héroe de la noche fue, sin duda, Benzema. No solo por su ‘triplete’ histórico, sino porque el cariño de la afición le va devolviendo poco a poco todo lo que algunos jugadores —y en especial, Cristiano Ronaldo— le habían ‘robado’ injustamente. Siempre pensé que Karim había sido una víctima propiciatoria (no fue la única) de un Cristiano que, desde su innegable instinto depredador, siempre exigía a los demás que jugaran para él. Algo parecido a lo que le sucedió a Messi en el Barça (y ya vimos el miércoles lo que sucedió con él). Aunque aún siguen por ahí sus ‘agiografos’ considerándolos los mejores jugadores de toda la historia…
El héroe de la noche fue, sin duda, Benzema. No solo por su ‘triplete’ histórico, sino porque el cariño de la afición le va devolviendo poco a poco todo lo que algunos jugadores —y en especial, Cristiano Ronaldo— le habían ‘robado’ injustamente
Frente a ese artificial y manipulado estado de opinión, Karim Benzema está sabiendo encontrar su lugar en el ‘Olimpo de los Dioses’ a base de goles determinantes y de actuaciones memorables como la de la noche del miércoles. Nuestro ‘9’ subió muchos enteros en el corazón colectivo del madridismo, no cabe duda, y fue el gran ‘héroe’ de la gesta. Al término del partido, atendió a las cámaras de TV para transmitir su inmensa alegría, hacer partícipe de ella a los aficionados de todo el mundo y para decirles —desde su ‘inmisirecorde’ humildad— que “el Real Madrid sigue vivo”.
Benzema era quien portaba el brazalete de capitán esa noche histórica y bien cierto me pareció que el suyo fue un ejercicio de comunicación a la altura de las circunstancias: una única idea clara (una, mejor que dos) y con pocas palabras, porque él no es precisamente un dechado de elocuencia. Pero a Karim le queremos por lo que es, por lo que demuestra cada vez que salta al campo y por su reputación bien ganada de ‘puto genio’ como le bautiza un buen amigo. Se le valora por todo eso, que es mucho, y así nos gusta.
¿Es Benzema el capitán carismático que siempre necesita un equipo?
Y a este punto quería yo llegar. ¿Es Benzema el capitán carismático que siempre necesita un equipo? Creo que no y vuelvo a mi planteamiento inicial: ¿es lo mismo ser un buen profesional que un buen líder? Por supuesto que no. Karim llevaba el brazalete por antigüedad, que es el criterio que aplica el club con su capitanía, y no por su capacidad de liderazgo, que es el que a mi modo debería regir. Pero el Club —consciente de que su vestuario siempre está nutrido de ‘estrellas’ con grandes egos—, no adopta este criterio para ahorrarse, precisamente, los choques de egos que tan malas consecuencias suelen traer. Explica Eckhart Tolle en su libro ‘El poder del Ahora’ que “Cuando los egos se juntan, en relaciones personales o en organizaciones e instituciones, antes o después acaban ocurriendo cosas malas. Aquí se incluyen también los males colectivos, como la guerra, el genocidio y la explotación, todos ellos debidos a la inconsciencia acumulada [valga esta alusión para entender lo que está pasando ahora en Europa]. Cuando dos o más egos se juntan, se escenifican dramas de uno y otro tipo. Cuando no honras el momento presente permitiéndolo ser, estás creando drama. La mayoría de la gente está enamorada de su drama personal. Su historia personal es su identidad. El ego dirige su vida. Todo su sentido de identidad está invertido en él”. No puede ser más clarividente esta cita, a mi modo de ver, con lo sucedido en el Bernabéu. Y no hay más que mirarse en el espejo de nuestro último rival de Champions, para comprender a lo que me refiero.
Sin desmerecer en absoluto a Karim Benzema (¡Dios me libre!), me gustaría poner en valor y sacar al escenario a quien creo que hoy, tras la marcha de Sergio Ramos, está asumiendo el liderazgo del equipo, y no solo en el campo (ese ya viene de lejos) sino dentro del vestuario. Luka es, a día de hoy, el auténtico líder de ese vestuario. El más capaz de todos sus integrantes para inspirar noches mágicas con remontadas imposibles. Como dice Valdano, el fútbol es un estado de ánimo, y Modric es bien capaz de catapultar ese ánimo colectivo hasta convertirlo en una fe inquebrantable en la victoria; en un arma —parafraseando a Neruda— cargada de futuro deportivo”. Es muy difícil vencer a un equipo inspirado por semejante instinto depredador, que te transporta a tu dimensión humana y te empequeñece hasta dejarte inválido.
Modric fue, contra el PSG, un jugador formidable, el motor del barco, algo a lo que ya nos tiene acostumbrados. Cada día es mejor jugador, aunque muchos presagien su cercano final. Pero está haciendo algo, intangible, que es divulgar su ‘magisterio en valores’ a todos esos jóvenes que frente al PSG vivieron su primera ‘gran noche europea’. Me refiero a los Vinícius, Rodrygo, Valverde o Camavinga y, sí, ¿por qué no? también al propio Mbappé, que vivió la experiencia desde la otra orilla; o a Haaland, por si le quedan aún dudas sobre dónde se pueden vivir y disfrutar momentos tan mágicos.
Sin desmerecer en absoluto a Karim Benzema, Luka es, a día de hoy, el auténtico líder de ese vestuario
Tras culminar el partido, las cámaras siguieron a Modric por el césped, donde disfrutaba como un auténtico choto en un prado verde (nunca mejor dicho), pero también le siguieron durante su camino hacia el vestuario y, lo mejor, una vez allí, registraron cómo fue abrazando y felicitando por la victoria —uno por uno— a todos sus compañeros, especialmente a los más jóvenes. Recomiendo al lector que vea el video, si no lo ha hecho ya. Y como dice el diario AS, “hay muy poco más que añadir a este video”.
Modric encarna ahora, en mi opinión, el liderazgo fáctico del equipo; él y Benzema son hoy, a mi juicio, demostración palpable de que cada cual tiene un rol definido y que lo ejercen con naturalidad y radical humildad; que jugadores como Alaba o Militao (recién llegados y a quienes veo con madera de líderes), saben ocupar su puesto; que jugadores de la cantera, como Carvajal, Casemiro, Nacho y Lucas Vázquez, saben cuál es su rol y cómo deben representarlo; y que los jóvenes llegados de fuera y ahora en fase de crecimiento están aprendiendo sobre la marcha y a gran velocidad qué es el Real Madrid y todas sus simbologías.
Florentino Pérez está en fase de renovación generacional del equipo y esperamos la llegada de grandes figuras para la nueva etapa. Ojalá suceda… Y, si sucede, el club tendrá que cerciorarse de que los más veteranos (Benzema, Modric, Kroos, Carvajal o Nacho) sepan transmitir adecuadamente a los jóvenes esos valores y conocimientos y se eviten así los choques de egos. Por muy figuras que sean quienes puedan llegar, y por muy metido entre ceja y ceja que tengan ganar el balón de oro (pongo por caso), por encima de todos ellos siempre estará el liderazgo colectivo, el del equipo. En eso se basa precisamente la historia victoriosa del Real Madrid.
Getty Images.
¿"poner en valor"?
¿Por qué no decimos "destacar"?
Muy buen artículo, y muy real, pero creo que lo principal es, que el equipo es una piña, que los jugadores se llevan fenomenal, y que todos están dispuestos a remar (alguna excepción habrá, pero eso no influirá en el resto), hala MADRID.
"La poesía es un arma cargada de futuro" es un poema de Gabriel Celaya.
Por lo demás, estoy de acuerdo con el artículo.
Cierto. Gracias por la precisión. Pido disculpas por el 'lapsus'.
https://www.elconfidencial.com/deportes/futbol/champions/2022-03-10/luka-modric-robo-balon-leo-messi-jugada-levanto-bernabeu_3389412/
Me permito compartir este artículo de El Confidencial sobre Modric.
Esta acción me recuerda a la del año pasado en Anfield. El Liverpool rascando e intimidando, Milner dando palos, y cuando coge el balón, Casemiro le saca del campo. Tarjeta amarilla, y se les bajaron los humos.
Sería importante que ese liderazgo de Modric se proyectase algún tiempo más sobre Camavinga y Valverde, dos proyectos (especialmente el primero) de formidables centrocampistas. A ver lo que aguanta el físico del croata mágico.
Creo que su intención no es esa, pero este artículo desmece la figura de Benzema, un futbolista mayúsculo que durante años ha sacrificado su figura en beneficio del equipo. La marcha de Cristiano fue un socavón que podría haber sido una travesía en el desierto de no ser porque Karim cogió la bandera. Cuanfo peor estaba la cosa ahí emergió Benzema, y es ahí donde se demuestran las cachabas que llevas.
Benzema es el auténtico capitán de este equipo. En un momento del partido, antes de ese increíble disparo de Benzema en la primera parte, Modric se fue al suelo tras una falta. Benzema lo recoge rápidamente y les pide que sigan atacando. La presión de Benzema en el primer gol es algo que pocos jugadores en el mundo harían ante Donnarumma, un portero de 2 metros. Modric es un magnífico ser humano, un líder, le quieren en el vestuario, es más comunicativo. Varios periodistas brasileños y franceses que estuvieron en el estadio informan que durante todo el partido Karim siempre estuvo conduciendo al equipo hacia adelante... ¡siempre! De principio a fin. Varias veces, Verratti, Kimpembe o Danilo fueron a pelear con Vinicius, quien defendió el brasileño fue Karim. Cada vez iba a hablar personalmente con los que querían pelear con Vinicius para exigir que lo dejaran en paz. Amo a Modric, pero como Karim es poco comunicativo, recibe poco crédito. Dirigió y marcó 3 goles al PSG de Mbappé, Neymar y Messi y no tiene un artículo en La Galerna sobre él. Increíble!
Yo siempre estarei con Karim. Siempre!
Exactamente así. Capitán Karim!
Es 'hagiógrafos' en lugar de 'agiografos'.
Por supuesto que valoro a Sergio Ramos por todo lo que ha hecho en el campo por y para el Real Madrid. Y lo tengo en un trocito de mi corazón tan blanco. Igual me ocurre con CR 7. Eso sí, nada comparable con mis sentimientos por Modric y Benzema. No solo se trata del rendimiento deportivo.