El día más largo

Vivimos sin vivir en nosotros desde hace ya demasiado tiempo. No nos quedan uñas que morder, pelotita de papel que encestar en la papelera, ni postura de yoga que practicar. Es el día más largo. Se está demorando tanto la cosa, que no descartamos que el síndrome de Estocolmo pueda comenzar a hacer estragos entre el madridismo y, de repente, como esos súbitos virus rápidamente extendidos de las películas, empiecen a alzarse llorosas voces histéricas pidiendo que se quede, por Dios, que se quede; que juegue todos los partidos, que no entrene si quiere, que cobre más que Cristiano, que le entreguen la insignia que rechazó Del Bosque... que salga el sol por Antequera, que Tócame Roque y la Bernarda se vayan a vivir juntos, pero que se quede y ya está, de perdidos al río.

Pero no. Pese a que a la hora de redacción de este Portanálisis seguimos esperando EL COMUNICADO, aún nos quedan fuerzas para resistir el tedio, la ansiedad y el síndrome. Un buen asidero para ello es la aparente resignación de As, quien hoy parece asumir la noticia por venir con la calma que denotan las líneas meramente informativas que ocupan su portada. Se diría que casi se nota apenada dejadez en el laconismo facilón de su titular: "De Casillas a Casilla". Así, sin mayor floritura, y sin ofrecer ya resistencia a la inminente marcha que no termina de "inminentar". Por nuestra parte, es justo reconocer que alguien tenía que hacer el (no llega ni a) juego de palabras y, por ello, nos nace ser indulgentes con As en estos duros momentos que están confirmándose en breve casi desde que Relaño "supo ver" que Mourinho era la madre de todos los problemas. Estamos seguros de que el Diario de la Ouija se recuperará del golpe y pronto veremos cómo su actual pena se transformará en acicate, gracias al cual podrá seguir haciendo gala de su impecable madridismo a prueba de... no se rían que nos da la risa.

Colocando la noticia que aún no lo es del todo en la franja superior de su portada, Marca parece reconocer que casi hablamos de un pasado, de algo redundante que se ha dado ya desde hace tiempo, de la crónica de una muerte anunciada, pese a que el periodismo, por lo general, no quiso nunca escuchar tal anuncio. La tendencia retro del Diario de la Hernia se confirma con la celebración hoy del quinto aniversario de la victoria española en el Mundial. Marca recuerda con todos los honores el salvífico gol de Iniesta, anota la hora de la noche en que este cayó del cielo y grita ¡GOOOOL! Ya puestos a conmemorar pasados, podría haber recordado también Marca aquella parada de Casillas a Robben, y así darle un tinte aún más nostálgico a su portada, aunque solo fuera por el "cómo hemos cambiado" que cantaban los Presuntos Implicados (es el nombre del grupo y no mentamos aquí a los agentes de Iker, ni a los Duro, Lama y demás, que ellos sí que no han cambiado). Sin ser premeditada, hay cierta dureza en la portada de Marca: la misma página que celebra una histórica victoria, despide a uno de sus artífices sin mencionar que lo fue; y ello porque cinco años han bastado (aunque realmente muchos menos) para constatar justamente que la forma verbal "fue" se ha acabado imponiendo al "ha sido".

Uno de estos días las portadas de Sport y Mundo Deportivo van a ser diferentes, nos van a obligar a elegir y no tendremos más remedio que salir corriendo. Pero, mientras tanto, glosemos las doctas frases de Arda Turan en su presentación como jugador del Barcelona (culé ya lo era en su versión atlética): siempre quise jugar aquí, Xavi es la monda lironda, Messi es la caña de España... mi mamá me mima y my tailor is rich. Sabemos bien que el gremio de futbolistas ha elevado el tópico a la categoría de bostezo y por eso, hoy, en homenaje a Arda, nos volvemos a la cama a soñar con EL COMUNICADO.