Uno de los mayores placeres que te puede ocurrir en una cama durante la madrugada es despertarte y ver que todavía faltan tres o cuatro horas para que suene la alarma. En un estado de semiinconsciencia, miras el reloj cuando crees que ya no te dará tiempo a dormirte más y te llevas una alegría comparable a empatar en el último minuto: se viene prórroga. Como todo lo bueno en esta vida, esta maravilla colchonera (primera acepción del DRAE) tiene su reverso en el momento en que abres los ojos, sientes que no has repuesto absolutamente nada y compruebas que en quince minutos será la hora de levantarte. Durante esos minutos que te han robado de sueño te lamentas como no lo harías un cuarto de hora después, porque cuando suena la alarma comienza la yincana, pero si te dan quince minutos extra por delante los dedicas a pensar que no tienes fuerzas, que no estás preparado para lo que viene. El Madrid de Ancelotti está aquí, en esos quince minutos extra de lamentos previos.
El Madrid de Ancelotti e ha despertado antes de tiempo y se ha dado cuenta de que no está para afrontar grandes batallas
Se ha despertado antes de tiempo y se ha dado cuenta de que no está para afrontar grandes batallas. Al principio parecía que sí, nos engañó a todos, incluso se engañó a sí mismo, y nos regaló unas primeras semanas en las que rescató la esencia madridista: ataque continuo, muchos goles y cantadas atrás. Esa efervescencia sirvió para adueñarse de una cómoda ventaja en la Liga, una competición que elegirá a su campeón como si fuera una jornada electoral: votando al menos malo. Eso no significa que no haya que celebrar la Liga si finalmente se consigue. No olvidemos que era el título que más feliz hacía a Zidane (ay, Zizou). En mis casi 35 años he visto 9 Ligas ganadas por el Madrid. Una cada (casi) cuatro años. Si el Mundial es tan especial por jugarse cada cuatro años, cómo no vamos a celebrar por todo lo alto un título que se gana con la misma periodicidad.
El Madrid es tan superior al resto de equipos españoles que le puede dar para ganar la Liga jugando 45 minutos por encuentro. En esta era de la ansiedad generalizada y de las prisas por llegar a todos sitios, el Madrid, una entidad solidaria como pocas (algunos ejemplos: quiso ceder a Di Stéfano al Manchester United después de la tragedia de los Busby Babes, fue a jugar un partido a Murcia a beneficio de las víctimas del terremoto de Lorca, permitió a Eto’o fichar por el Barça cuando era propietario del 50% de sus derechos federativos…), ha decidido regalarnos una hora de tiempo los días de partido. Nos emplaza directamente al comienzo de la segunda mitad para que podamos acabar los quehaceres pendientes durante la primera.
El Madrid es tan superior al resto de equipos españoles que le puede dar para ganar la Liga jugando 45 minutos por encuentro
Por lo visto y leído en la última semana, el Madrid no está eliminado de la Champions pero ya lo tiene asumido (se escuchan los primeros ruidos de sables que dudan si Ancelotti es el técnico idóneo para la próxima temporada), como si solo quedara pensar en un tórrido día de verano en el que Mbappé, ya de blanco, imite a Valdano: “Espero devolverle al Madrid todo lo que le he quitado”. O quizás esta columna se autodestruya el próximo 9 de marzo, cuando, tras caer eliminado en el Bernabéu, el francés declare: “Espero que el Madrid gane la Champions porque quiero jugar la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes el próximo año”. Y entonces despertar, y que todavía queden cuatro horas para seguir soñando.
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Queremos realidades y dejarnos de sueños.
Y entiendo la realidad no como el hecho de pasar eliminatoria , sino competir con decencia. Si el contrario es mejor felicitarle y punto.
Por el respeto que me merecen los jugadores del Real Madrid , su entrenador y su presidente, no creo que den la Champions por perdida.Quedan 90 minutos o más y uno compite con las armas de que dispone y aplica la táctica que cree adecuada para cada partido.Si llega la victoria , “ miel sobre hojuelas”, si no es así, tengo el pleno convencimiento de que se trabajará para conseguir la próxima.
En este equipo hay un mayor porcentaje de sueños cumplidos que de pesadillas o malas noches y eso no es fruto del azar.Hay mucho y buen trabajo detrás .Sólo en una Arcadia feliz se gana siempre,en el mundo real,a veces se gana y otras se pierde y cuando esto sucede no hay que perder de vista lo alcanzado,analizar errores y volver “al tajo “, y eso el Madrid lo hace.
Aplaudirte Nowant
Un saludo y
HALA MADRID Y NADA MAS
32 años pasaron desde la sexta copa de Europa hasta la séptima. Y el madridismo sobrevivió. Ahora parece que por haber ganado 7 Champions League desde 1998 hasta 2017, cada año hay que vivirlo como "o Champions o nada", y es una actitud tóxica, insana y alejada de la realidad. Es imposible afrontar el seguimiento del día a día a un club desde esa perspectiva. Nada ni nadie puede garantizar la conquista cada año, ni en el deporte ni en muchos ámbitos de la vida.Nos hacemos daño a nosotros mismos si no disfrutamos de las pequeñas victorias cotidianas en pos de estar continuamente frustrados por las derrotas,que son menos habituales en nuestro club que en el 90 - 95 % del resto.
Es que buena parte de los seguidores del Real Madrid tienen una actitud tóxica para el equipo, aun sin saberlo muchos de ellos. En unos es toxicidad endógena y en otros es inyectada por los medios "madridistas". Eso les impide ser felices.
La realidad es que si el Madrid gana la Liga habrá sido una temporada notable. Si ganase la Champions sería sobresaliente e histórica.
El madrid va a ganar al PSG, debieron matar el partido y no lo hicieron, y no vamos a hacer otro partido igual de malo, en champions no, ya vereis.
Yo también sueño a veces despierto o más bien la realidad me hace dudar de los hechos. No puede ser posible que el Barcelona llene el campo y no se oiga un silbido . No puede ser posible que la tertulia de la radio deportiva antes del partido contra el Nápoles , ganado con justicia después , llegue al consenso de que la eliminación del Barcelona es percata minuta en el caso que se produzca. El argumento es preparar al aficionado barcelonista para asumir un nuevo funeral , según Xavi, en caso de producirse.
Mientras en Barcelona es un éxito quedar cuarto y Xavi tiene el puesto asegurado para el Real Madrid, según muchos madridistas , ganar la Liga hoy es poco menos que un anticipo de despido para el entrenador.Ruido de sables soportó Zidane y se marchó harto . Luego le llamaron para que ganase la Liga y porque el coloso estaba en llamas. Ser entrenador del Real Madrid es un oficio con mucho riesgo. Un empate es un aviso y si pierdes te pueden sacar la roja. Carletto ha perdido dos partidos de Liga, cuidadín.
Con treinta y cinco años hoy es difícil sopesar la perspectiva del boquete de décadas entre la Copa de Europa de Pirri y la de Raúl.
No todos han nacido en el lugar y el momento adecuado . Algunos madridistas abandonan el mundo sin ver ganar una sola y otros nacen para ver levantar balones de oro a doquier.
Ganar cuatro Copas de Europa casi seguidas , permanecer desde la llegada de Mouriño en semifinales , salvo un año, todavía no les parece a algunos suficiente mérito. Por cierto , el Real Madrid no es nunca favorito para ningún medio de comunicación español en Europa y la plantilla del Atlético dicen que es muy superior a la del Real Madrid. No sé si un futbolista del Atlético sería titular en el Real Madrid. Y mira que este año nos estamos luciendo con los laterales.
Tener a quince puntos al Barcelona , estar vivos en la Copa de Europa es motivo de melancolía.
Ya estamos acostumbrados, la teoría del derrotismo no puede fallar nunca.
Las cuatro últimas Copas de Europa llevan el soniquete acoplado del Barcelona . El Real Madrid de los atletas , de la pegada, del " Bicho" ( son generosos apodando). Guardiola es el genio de la lámpara y nos explica la historia del Real Madrid , pero sin Messi todavía no se ha estrenado. Dice que se va, no sea que se cansen de él como en Alemania. A dónde irá, si no le quedan más países . Qué pruebe en Francia con Messi.
Antes se despreciaban los títulos del Real Madrid después de ganarlos. La marea avanza , ahora ya se desprecian antes de que los consiga . Más que nada , para que no le sienten bien a los incautos que los celebren.
Algunos están ya preparados para el siguiente consejo ¿ Hacemos un Pochetino ?