Dice hoy Jabois que el problema del Madrid se llama Kylian Mbappé. Valdano sentenció ayer, en cambio, que Mbappé es el menor de los problemas del equipo. El partido en Anfield puede interpretarse como la culminación de una tendencia negativa por parte del jugador francés. Su ineficacia para aprovechar el apreciable juego del resto del equipo (hablo del primer tiempo) le puso inevitable cara de lastre. Su segundo tiempo no fue mucho mejor. Ahora mismo, es más fácil inclinarse hacia el lado de Jabois que hacia el de Valdano.
En realidad, ahora mismo es muy fácil inclinarse hacia los diagnósticos de los tradicionalmente avinagrados (utilizo el término con sincero afecto), los convertidos al vinagrismo y los que simplemente atraviesan una fase agria y astringente, que son las dos primeras cualidades que la definición de la RAE otorga a ese condimento. Yo leo a mis admirados Jabois, Hughes o Mesetas y coincido en muchas cosas con ellos, matizaría otras muchas de sus ideas y me rebelaría frontalmente contra una en concreto, común a ellos y a casi todos los demás: la irreversibilidad de todo esto, de lo que Jabois considera el principal problema (Kylian) y de las otras cosas que Valdano ve mal, sean cuales sean. No hay ni un gramo de gravedad adicional que quiera añadirse a la ecuación que convierta a esta en irresoluble. Comparto casi todo el diagnóstico, pero no el pronóstico reservado, y digo bien reservado porque estos admirados amigos no se pronuncian demasiado sobre la posible existencia de soluciones. Sin embargo, pesa sobre sus análisis un fatum desolador.
“De todos nuestros sentimientos, el único que no es verdaderamente nuestro es la esperanza. La esperanza le pertenece a la vida, es la vida misma defendiéndose”. Cortázar no sabía de fútbol. Cuenta su primer editor en España, ese extraordinario intelectual que es Andrés Amorós, quien le trató mucho, que no tenía especial consideración por el deporte rey. Bueno, pues Cortázar dio en el clavo. Si la esperanza le pertenece a la vida, yo llevo toda la mañana soportando una vida benditamente pesada que no cesa de recordarme lo que el Madrid ha sido e inexorablemente es. También me refresca la memoria respecto a lo que ha sido y es Kylian Mbappé.
Si la esperanza le pertenece a la vida, yo llevo toda la mañana soportando una vida benditamente pesada que no cesa de recordarme lo que el Madrid ha sido e inexorablemente es. También me refresca la memoria respecto a lo que ha sido y es Kylian Mbappé
Nadie sabe qué le pasa al francés, al mismo tiempo que todo el mundo puede hacerse una composición de lugar. La cosa parece más psicológica que otra cosa, con las secuelas de un mobbing de manual por parte de su anterior empleador, de aviesos y numerosos tentáculos, y de un presunto escándalo del que nada se sabe, y al que podría no ser ajeno dicho antiguo empleador. Ahora mismo es un hombre de papel, un juguete del viento, como cantaba Radio Futura. No tiene confianza alguna en sí mismo, y no hace falta ser psicólogo para interpretar en términos de desolación su lenguaje corporal. A mí, a un tío que está así, lo que me sale es apoyarle, sobre todo cuando sus objetivos coinciden con los míos, y parece que hasta sus sueños (que no es lo mismo) lo hacen. Motejarle “Hazard 2.0” es legítimo, pero solo una cosa resuena más que la mala fe del símil: su completa falta de fundamento. No sé si la paciencia pertenece también a la vida pero, al ser hermana siamesa de la esperanza, tiene todas las papeletas.
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Esta vez, D. Jesús, cuenta con todo mi apoyo en lo que ha escrito, que comparto en su TOTALIDAD. Mbappé ha podido comportarse como una rata en el pasado con el Madrid, pero... ES NUESTRA RATA. Hay que apoyarle y creo que puede recuperarse y darnos triunfos y gloria.
Lo de que Mbappé esté aún sufriendo por el "mobbing" que l hayan podido hacer los cataríes no se sostiene, lleva ya meses en el Madrid, tiene la vida resulta y parece que el pleito lo va q ganar así que más dinero para los butxaca, lo que le pasa es que necesitará una rase de acoplamiento con la que le contábamos o estará gafado... vamos, cosas que le pasan a cualquiera en la vida, incluso podría estar toda ésta temporada así y la que viene renacer de la mano de un nuevo técnico con otro esquema etc
Equiliquá.
Equilicuá. Perdón.
Pues ni uno ni otro.
Se dice "eccolo qua"
OVACION
Yo no dudo de Mbappe. Me parece un jugador espectacular y el club hizo bien en ficharlo, dada la oportunidad. En este caso me inclino más por la opinión de Jorge Valdano. El Madrid tiene muchos otros problemas, tan o más importantes que Mbappe. El primero es el desastre de la línea defensiva en el que no tenemos laterales de nivel y apenas un central titular. El segundo es la ausencia de Kroos, fundamental a todas luces y que ningún jugador de la plantilla actual puede sustituir. El tercero son las bajas. Ninguna plantilla por muy bien edificada que esté (no es el caso del actual Madrid) puede superar tantas y de tanta duración. Por último y. no por ello menos importante es el entrenador. Ancelotti construyó un equipo rocoso el año pasado, muy competitivo, defensivo pero que sabía atacar cuando era necesario. Era un conjunto versátil y solidario. Este año ninguno de esos valores parece existir. Es evidente que la confianza es fundamental y este grupo no la tiene. Los resultados no llegan y ahí es dónde vemos todas las costuras del juego que también, aunque en menor medida, ya estaban ahí el año pasado. Creo que hay tiempo para solucionarlo. El primer paso es siempre defender bien. Con lo que tenemos arriba debería bastar para ganar la mayoría de partidos. Luego hay que ir recuperando jugadores y encontrar de una vez solución al puzzle del mediocampo. Para mí, ya lo he dicho muchas veces, Jude debe estar más atrás, algo como lo que quiso hacer Modric ayer, ayudando a los centrales en la salida de balón. Da pena ver a un jugador como él tocando apenas 15 balones por partido.