De los Gasol a Takefusa Kubo

Buenos días. Los Raptors se llevaron el Anillo de la NBA tras superar en la gran final a los Warriors (2-4), lo cual nos sitúa ante un escenario nunca antes visto en la competición, ya que dos hermanos (Marc y Pau Gasol) han sido capaces de conquistar el ansiado título. Es la primera familia que puede decir algo así. Casi nada.

El sexto encuentro, que a la postre fue definitivo, se disputó en la madrugada del jueves al viernes, pero, por cuestiones lógicas de tiempo, las portadas de la prensa deportiva española no han podido hablar de ello hasta hoy. Eso es lo de menos. El hito es de tal magnitud que se seguirá recordando durante muchos años. Veremos si alguna otra pareja de hermanos es capaz de igualarlo. Desde aquí aprovechamos para felicitar a Marc Gasol, Ibaka y Scariolo por llevar a los Toronto Raptos a lo más alto. Como dijo Javi Martín (@georgebest_ en Twitter), el éxito lo celebró Torontontero. Nos hizo gracia y por eso lo soltamos aquí. Pedimos disculpas. O mejor no. Es sábado y hay que reír.

Y de Toronto a Japón, ya que el Real Madrid ha fichado a Takefusa Kubo, una jovencísima joya nipona (18 años) que dará sus primeros pasos en el Castilla. Kubo procede del FC Tokyo, aunque anteriormente probó suerte en el FC Barcelona. El nipón no guarda buen recuerdo del club blaugrana. Es raro, puesto que en La Masía y alrededores todos son felices y saben que el Barcelona jamás irá al mercado (Coutinho, Dembélé, De Jong, Boateng, Murillo, Semedo, Todibo, Lenglet, Arthur, Vidal y compañía son sueños internacionales de Resines) teniendo el repuesto en casa.

La reciente llegada de Kubo al Real Madrid no ha debido gustar demasiado en la Ciudad Condal. Emilio Pérez de Rozas, de hecho, se luce hoy con un texto que parece hecho desde el desamor, desde la rabia que te envuelve cuando algo bonito se acaba, desde el miedo a que la persona que se va sea más feliz con otra de lo que lo fue contigo.

Dice Emilio que la prensa madridista (risas enlatadas aquí, por favor) publica que el conjunto blanco ha fichado al Messi japonés. Y eso le hace gracia. Culpa indirectamente a Florentino Pérez, al que debe tener como un profesor de instituto que manda escribir dictados a unos cuantos. "Ya ocurrió, ya, con Marco Asensio. Ya se dijo, entonces, que el Real Madrid se lo había birlado al Barça (...) Y, miren, tal vez (no digo que fuese así, pero…) los técnicos culés vieron algo en el mallorquín que… le ha convertido (reiteran ahora los periódicos de la capital de España) en una estrella transferible", espeta en su columna.

Reconocemos, Emilio, que la temporada de Asensio ha sido mala, al igual que la del 90% de jugadores del Real Madrid. Pero, hombre, el puntazo que se marcó el trece veces campeón de Europa con ese fichaje fue importante. No obstante, y pese a su evidente bajón, Asensio ha sido decisivo en muchas grandes noches (que se lo pregunten al Bayern) e, incluso, marcó un gol en la final de Champions League en Cardiff. Sí, una final europea, de esas que no catan ustedes en Barcelona desde 2015.

Mientras Emilio dispara con balas de fogueo, Ernest Folch, en el mismo periódico, critica la gestión de la entidad blaugrana en este asunto. "Kubo no podía escaparse por muchas razones, no solo deportivas. Esta pérdida debería llevar a una profunda reflexión interna sobre quién, cómo y por qué se toman decisiones que pueden tener más tarde nefastas consecuencias", escribe. Más claro, agua.

Os dejamos, ya para terminar, la portada de 'Sport', que es un guiño más a La Masía.