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Nada gana en tranquilidad a una retransmisión del Real cuando solo se juega el prestigio, y lejos de concentrarse en el resultado de cada ataque, y cada movimiento defensivo, el espectador es invitado a observar -observar simplemente, sin la pimienta del logro o la decepción- cómo saca adelante su lote de partidos anodinos, cuyo único estímulo es superar al Atlético en la recta final, para ahorrarse la poco distinguida liguilla que lleva consigo quedar tercero y cuarto en cada país.
Con la paz de ánimo unida a la intrascendencia, seguimos lance a lance el desempeño de cada uno, que hacia el minuto 70, cuando Bale empezó a terminar el calentamiento, coincidía con una oferta implícita de armisticio por parte de los aguerridos pepineros, sin duda en función de que sus fuerzas empezaban a languidecer, minadas por enfrentarse a jugadores con mayor dotación técnica –para los cuales la misma jugada cuesta algo menos de energía bruta-, dispuestos a ganar aunque tampoco inflamados por el entusiasmo, salvo a mi juicio en el caso de Valverde, uno de los meritorios mejor adaptados a su condición. Esta noche volvió a demostrar que defiende y ataca, sin que le frenen los pulmones como a algunos otros, Isco por ejemplo y más eminentemente Marcelo, a quien las Musas decidieron retirar ese toque de pasador y rematador eximio exhibido durante una década.
No registré una sola jugada donde lograse mejorar y menos culminar con éxito alguna iniciativa, como si un mal de ojo le vedara reeditar sus merecidas glorias una temporada entera; y me temo que lo mismo puede decirse del Expreso de Cardiff, tras culminar la previa con una suntuosa chilena, grabada en los anales del fútbol y en la columna del Debe que explica la del Haber en los balances del Madrid. Tampoco tuvo un regreso feliz Carvajal, cuyos nervios llevan tiempo mermando virtudes evidentes, como si tener tiempo para levantar la cabeza y decidir perjudicara en vez de afinar sus dones. Nacho sigue tristón, Asensio sin la puntería de otrora, y Navas parece haber renunciado a sacar con precisión; pero el resto –con el mejor Benzema de todos los tiempos- sigue siendo un bloque prometedor como muy pocos.
Vinicius, Reguilón, Odriozola, Llorente y varios más completan lo que el equipo puede ofrecer cuando algunos diamantes nuevos sustituyan a los antiguos y, sobre todo, cuando la plantilla se recobre de la indigestión unida a un rosario de títulos. El míster de los milagros se fue, para volver como el míster de la paciencia y la experiencia, refractario a prisas, codazos y campañas mediáticas, y -si no me equivoco- que Zidane sea tan intocable como Florentino será lo más parecido a una póliza de seguro.
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La clase se tiene o no.
🎂Cumple 33 años el hombre que le enseñó a Bellingham lo que significaba «chilena», el hombre tranquilo que no flaqueará jamás ante un penalti decisivo, el gran @Lucasvazquez91
¡Felicidades!
Lamine Yamal es muy joven.
Enormemente joven.
¿Y?
#portanálisis
👉👉👉 https://www.lagalerna.com/lamine-yamal-es-muy-joven-y/
En el hecho de que @AthosDumasE llame a la que muchos llaman "Selección Nacional" la "selección de la @rfef" encontraréis pistas de por qué no la apoya.
La explicación completa, aquí
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Tal día como hoy, pero de 1962, Amancio rubricaba su contrato como jugador del Real Madrid.
@albertocosin no estaba allí, pero te va a hacer sentir que tú sí estabas.
Vinicius, Reguilón, Odriozola y Llorente, y varios mas ¿serán del gusto del divino calvo? o seguirá apostando por los tristes recuerdos de la gloria pasada que son hoy Isco, Marcelo, Carvajal, Casemiro y otros mas.
Aquellos cuatro jugadores jóvenes son lo único bueno que nos trajo esta temporada, Benzema aparte.
Es demasiado pronto para la impaciencia, pero las señales no son buenas.
Voto por la renovación, que debe iniciarse desde la plantilla actual.
A Carvajal, cuyas virtudes son evidentes, no es que le devoren los nervios, es que es la impaciencia hecha jugador. Le vendría bien un poco de terapia Zen del maestro ZZ. Así, al controlar la pelota, esta volvería mansa a sus pies, en vez de rebotar un metro y medio, con el consiguiente esfuerzo adicional para recuperarla, que suele terminar en choques con los contrarios.
En fin, me gustaría que estuviéramos ya en agosto y no tener que transitar por el camino de espinas en que se ha convertido cada partido de este final de temporada.
Saludos.
Es posible que me equivoque, pero si estoy en lo cierto la tercera plaza de la liga da acceso directo a la fase de grupos de la Champions sin tener que jugar ronda previa, como dice Escohotado.
Si hay alguien con más datos sobre el tema ruego nos saque del error (o confirme mi apreciación)
Salvo que no parecen gustarle al míster Reguilón y Llorente, don Antonio, a mí tampoco debo decir, si es lo mejor que se puede encontrar para el lateral izquierdo es que está el fútbol de capa muy caída, para el mediocentro prefiero a Valverde y a un titular que mejore a Casemiro. Y ayer bueno, si algún partido me pagó la entrada un regate del Buitre, ayer me la pagó Luka Modric con sus regates de cintura, culminando el recital con el movimiento que habilita el gol de Benzema. Es una de las conjunciones de detalles técnicos más bonitas que he visto jamás. Sólo hay que ver dónde va el defensa que viene por su izquierda por su movimiento de cadera, ¡se sale de la jugada!, deja todo el hueco por donde con un control de espaldas pone el balón de frente, el otro defensa se ha quedado también clavado y la mete al espacio donde aparece la mejor versión de Benzema que hayamos disfrutado. Es un golazo intrascendente pero qué golazo, que lleguen más que falta nos hace.
El gran retratado una vez más, Isco Alarcón, que sigue con su trote cansino, sus ruletas hacia atrás y sus taconcitos intrascendentes, y que conste que es uno de mis jugadores favoritos de la plantilla, pero este año da pena verle.
Da tristeza, pena, rabia y coraje ver a muchos de los jugadores que tanta gloria nos dieron hace poco, languidecer y jugar sin ánimo, sin agallas y sin dejarse a última gota de sudor por esta camiseta que tanto les ha dado también a ellos.
Por otra parte, creo que Zidane, se está lamentando de haber aterrizado esta temporada, en vez de la próxima.
Ojalá, pronto soplen aires frescos que nos devuelvan la ilusion y nos quiten está deprimente temporada.