"Si tienes suerte, el corazón no dejará de dolerte nunca”, le dijo una noche Hank Moody a su hija en una de esas conversaciones profundas que sólo se atrevía a tener con la pequeña de la familia.
A los madridistas no nos ha dejado de doler el corazón y por eso nos plantamos delante del televisor segundos antes de que sonase el himno de la Champions League para recordarnos por qué seguimos sintiendo lo que sentimos. Podemos estar enfadados y desencantados con el Real Madrid, pero suena esa música y sólo buscas una reconciliación fogosa, pasional.
Zidane le dio la titularidad a Gareth Bale para que este le demostrase que ha vuelto para quedarse y no para echar la partida y salir corriendo. El galés agradeció la confianza con un encuentro notable en el que acabó sin gasolina por hacer bien las cosas. Le faltó el premio del gol o de la asistencia previa, pero durante la caótica primera parte fue, junto a Modric, el que le dio sentido a lo que carecía del mismo. El desbocado galés jugando con traje y corbata sosteniendo una elegancia inesperada.
El Real Madrid le dio alas a la Roma con una lectura que nadie entendió. Convirtió el césped en un correcalles en el que Salah volaba y Casemiro corregía errores propios y ajenos. Los jugadores no recordaban que hubo un 0-2 en la ida. Se lanzaron a por el gol con líneas partidas como el divorcio que se ve venir desde el nacimiento del primer niño, y hasta Pepe pareció mediapunta en homenaje a Totti, que esperaba en el banquillo la ovación que luego recibió. Faltaba música de Benny Hill y risas enlatadas.
Los de Spalletti dieron algún susto que no acabó en amago de infarto porque Keylor Navas se ha empeñado en convertir su portería en un santuario inexpugnable durante la Champions League. No ha encajado ni un gol en más de 540 minutos. La cifra habla por sí sola y las espléndidas intervenciones de esta noche, también.
Cristiano Ronaldo se desperezó con el paso de los minutos y empezó a asumir el liderazgo que tanto le pide el Bernabéu. A veces hizo incluso de Benzema, con más acierto del esperado, aunque siendo menos vistoso que su compañero. Pero ahí estaba. Se notaba su presencia.
Al descanso se llegó con un peligroso 0-0 y la sensación de que el Real Madrid estaba dándole emoción a una eliminatoria que no la tenía. Sin embargo, el guión cambió en la reanudación. Los de Zidane se hicieron con un control lógico y Lucas Vázquez terminó de plasmarlo cuando el entrenador le dio entrada por un Bale fundido. El gallego descosió a la Roma en los últimos metros y terminó de activar a un Cristiano Ronaldo que firmó una última media hora portentosa.
El 1-0 nació como solía hacerlo hace una década. Balón al extremo diestro, que apura hasta línea de fondo, centro y gol. Cristiano Ronaldo fue el que le dio sentido a la sensacional acción de Lucas Vázquez con un certero remate a la red. El Bernabéu se alivió y al Real Madrid se le aparecieron de golpe los cuartos de final para indicarle que a la temporada le quedan todavía unas cuantas semanas de recorrido.
Lucas Vázquez siguió a lo suyo y el Bernabéu coreó su nombre en uno de esos pocos momentos de lucidez que suele tener el estadio merengue. Lucidez y justicia. Mientras Twitter se deshacía en elogios hacia el ex del Espanyol, James Rodríguez dibujaba el 2-0 a pase de un Cristiano Ronaldo ya en ese momento líder absoluto del partido. El colombiano batió por debajo de las piernas a Szczesny, dejándole claro que marcharse del Arsenal no quiere decir que vayas a empezar a superar los octavos de final de la Champions.
De ahí al final, minutos para Jesé y Kovacic, más paradas del infravalorado Keylor Navas y ovaciones para Modric, que se fue sustituido sin que el árbitro tuviera el valor de suspender justo después el encuentro, y Totti, que despertó la atronadora ovación de un estadio que trata mejor a las leyendas rivales que a las propias.
La Champions League sigue su curso y en ella estará el Real Madrid buscando una Undécima a la que sólo él puede aspirar. Que la temporada llegue a primavera es un éxito viendo cómo iba todo a principios de año. Que acabe con sonrisa o lamento ya es otra historia…
LAS NOTAS
Keylor Navas (9): Lo paró todo y alargó su impresionante registro en Champions League.
Danilo (7): Sigue acumulando buenas sensaciones. Gobernó su banda con facilidad.
Pepe (6): Empezó muy mal, pero fue corrigiendo con el paso de los minutos.
Sergio Ramos (6): Irregular, aunque más serio que en otras ocasiones.
Marcelo (6’5): Mejor en ataque que en defensa, aunque sufrió menos de lo esperado con Salah.
Casemiro (7): En la primera parte falló más de lo que parece, pero en la segunda estuvo imperial.
Kroos (7): Más cómodo que en otras ocasiones. Agradeció la titularidad de Casemiro.
Modric (9): ¿Hace falta que diga algo sobre él?
James (7): De menos a más, acabó marcando en un gol de tremenda ayuda psicológica.
Bale (7’5): Hizo una primera parte notable en la que sólo le faltó suerte de cara a gol.
Cristiano Ronaldo (9): Lideró el partido tras una primera media hora algo gris. La Champions le sienta bien.
Lucas Vázquez (8): Entró al campo, agitó al equipo y pidió a gritos la titularidad para próximas citas.
Jesé (5’5): Intenso en los minutos que estuvo, aunque algo fallón.
Kovacic (sc)
Excelente crónica, Jorge. leerla es revivir -de manera breve, pero fidedigna- el partido que nos ha dado el pase a los cuartos de final de la que, hoy por hoy, sigue siendo mágica para el Real Madrid. Y me gustan muchas esas acotaciones que vas dejando a lo largo de la crónica: muy buenas críticas en forma de puntualizaciones.
"de la *competición* que, hoy por hoy..."
Buenas tardes yo no creo en los milagros, pero si somos capaces de ganar 2 Copas de Europa, con
Marcelo de lateral izquierdo, habrá que empezar a creer en ellos, el partido del brasileño fue ayer un
agujero negro en defensa, no es que el egipcio le ganase todos,-ojo todos- los uno contra uno,
sino que nuestro lateral izquierdo( es un decir), en varias ocasiones se tomo la ligereza, por no decir
la caradura de no bajar, una vez perdida la posesión del balón, en un ejercicio de insolidaridad.
rayando el terrorismo deportivo. Espero equivocarme pero ganar la COPA DE EUROPA, con Marcelo
y Ramos de titulares se me antoja imposible
Desde luego con esta defensa no vamos a ningún lado. El esperpento hoy de Marcelo ha sido terrible. Es uno de los peores espectáculos que he presenciado en el Bernabéu, una auténtica vergüenza que ese chico haya hecho el partido que ha hecho.. Nunca había visto semejante despropósito, no bajaba, dejando sólo a Ramos (que para más inri está fatal) y cuando ha bajado haciendo el ridículo. Pero claro, no tiene quien le dispute la titularidad y así nos va.
Si hoy le pilla Robben, o Neymar, o Messi, o Hazard, se van a su casa con un triplete. Ha sido lamentable, no me puedo creer que apenas se hable de esto. No se puede ganar una Champions con este nivel defensivo.
Por no hablar del de Camas y sobre todo del jubilado de Pepe, que no están ni para ganar el Carranza
Del resto bien Casemiro, sosteniendo el equipo aunque debe jugar más partidos con Kroos y Luka para crear sinergias entre ellos y evitar pérdidas tontas de balón
James si juega que sea de interior, nunca más la broma de James en otra posición que no sea esa o la de 10. Por la derecha está absolutamente perdido
Por esta vez lo voy a dejar pasar, pero por el planteamiento contra La Roma de Zidane, me da que aquí no
hay entrenador, es mi primer comentario sobre la labor de nuestro entrenador, y después de lo de ayer
no pinta bien.
Saludos blancos, castellanos y comuneros
Siempre he dicho que Marcelo crea tanto peligro en nuestra área como en la del rival.
Bien está lo que bien acaba, pero pensar que defendiendo tan mal se pueda llegar a ganar algo, es como pensar que este año comeré de lo que gane jugando a la primitiva.
Está claro que todos tenemos nuestra opinión, pero cuando he visto la nota de Marcelo, me he quedado, digamos, que sorprendido. Mira que no es muy amigo de defender, pero lo de ayer fue vergonzoso.
Más que un problema de defensa creo que el equipo sigue sin estar conjuntado a la hora de defender. La mitad del equipo no baja (o lo hace caminando) a cerrar espacios y recuperar el balón, lo que hace que la defensa muchas veces esté en desventaja.
Ayer ante delanteros rápidos pero afortunadamente imprecisos no hubo goles pero hay que preguntarse que pasaría ante cracks como Ibra, Aguero, Messi, etc. Es de esperar que Zidane está trabajando la implicación de los jugadores a la hora de replegarse y defender y las tácticas para conseguirlo. Pero con tanto jugador de gran talento en el medio centro y en la delantera no debe de ser fácil conseguirlo.
A mí el primer tiempo del equipo me pareció un puro despropósito encabezado por Marcelo que se lanzó al ataque como un loco, sin pausa, como si tuviéramos que remontar. Me parece que Zidane tiene mucho trabajo que hacer con estos jugadores. Muchos no tienen la inteligencia suficiente para leer los partidos.
La banda de Marcelo y Ramos es un dolor, un pánico. Dos descerebrados, descentrados, al cual más loco. Tiemblo ante la idea de un rival serio con estos dos. Pedir que siente a estos dos supongo que es pedir mucho. Cuánto vamos a echar de menos a Coentrao en los partidos que nos puedan quedar, que ojalá sean 5.