Crónica del Deportivo 0 - Real Madrid 2

El Real Madrid recupera el ritmo ganador ante el Dépor

El Real Madrid femenino venció (0-2) al Deportivo de la Coruña en la jornada 24 de la Primera Iberdrola. Una genialidad de tacón de Marta Cardona puso de cara un partido gris que culminó Sofia Jakobsson en los compases finales.

¿Por qué vamos a los campos de fútbol o dedicamos innumerables horas a seguirlo por televisión? A cualquier aficionado le es familiar la sensación de frustración que generan los minutos de juego insulso, las tardes en las que todo son imprecisiones y errores. Al contrario de lo que sucede en otros deportes, nadie asegura un mínimo de acierto que justifique el tiempo y el dinero invertido. El riesgo de contemplar un 0-0 para olvidar siempre es elevado.

En Abegondo, la ciudad deportiva del Deportivo de la Coruña, tanto las gallegas como el Real Madrid femenino firmaron unos 45 minutos iniciales que nadie, empezando por las protagonistas, desearía haber presenciado. El Madrid repitió el once que ha funcionado durante los últimos partidos, con Olga Carmona y Kosovare Asllani partiendo desde el banquillo, pero pronto quedó patente que no era el día. Ni de las 22 futbolistas ni de la colegiada, que a menudo rompió el ritmo del partido.

El Real disfrutó del balón desde el comienzo, pero Maite Oroz estuvo más fallona de lo que acostumbra y los intercambios de posesión se sucedieron uno tras otro. Sin la chispa de Carmona y con el Dépor taponando con relativa comodidad los costados, las madridistas insistieron en jugar por el interior, donde la maraña de piernas y la confusión era total. En ese escenario, sólo en dos ocasiones inquietaron las visitantes a la guardameta Esther Sullastres: primero Jessica Martínez en un remate picado de cabeza, después Kaci tras una de las pocas combinaciones limpias de la primera mitad.

A esas alturas, la única buena noticia para el Madrid era el plácido partido de Misa Rodríguez bajo palos. Y es que tampoco era el día de las locales en cuanto a acierto, y ni a balón parado pudieron colgar balones de peligro sobre el área blanca. Todo lo demás lo resolvieron yendo al corte Ivana Andrés y Claudia Florentino, hasta el punto de desesperar a un Deportivo que echó de menos a Athenea del Castillo.

Tras la pausa, Olga Carmona saltó al césped, el Madrid modificó su dibujo hacia un 4-1-4-1 con Sofia Jakobsson en punta, y el Dépor vio penalizado su buen trabajo defensivo con un bajón físico. Es posible que los dioses del fútbol quisieran poner a prueba la paciencia de los aficionados para recompensarlos tras cincuenta minutos de tedio. De ser así, mereció la pena, pues la acción del 0-1 es de las que explica la fascinación que genera este deporte inexplicable.

Cardona es constante en sus intentos, aparece en momentos clave y tiene el don de la plasticidad: uno de los tesoros del fútbol. Su taconazo, ejecutado en apenas unas décimas de segundo, justifica el total de los 90 minutos

Corría el minuto 52 cuando Teresa Abelleira se abrió paso con el balón en conducción, cedió a la banda izquierda y allí pudo encarar por primera vez Carmona. La sevillana tomó el pulso a su par, centró raso hacia el interior del área y allí, de espaldas al arco, apareció Marta Cardona en busca del cuero. De primeras, y en un movimiento que hizo recordar a algunas de las más grandes leyendas blancas, tiró de genio para rematar de tacón con toda la intención en busca del segundo palo.

La atacante aragonesa, mejor jugadora de la plantilla en lo que va de temporada, parece empeñada en ganarse un hueco en los resúmenes que para la posterioridad dejará este primer Real Madrid femenino. Cardona es constante en sus intentos, aparece en momentos clave y, más difícil aún, tiene el don de la plasticidad: uno de los tesoros del fútbol. Su taconazo, ejecutado en apenas unas décimas de segundo, justifica el total de los 90 minutos, y cada uno de los partidos en los que uno espera al momento de inspiración que no siempre llega.

El gol, además, actuó como catalizador para desatascar lo que quedaba de partido. Se quitó la losa de la responsabilidad el Madrid, quedó obligado el Deportivo a buscar el empate para rescatar un punto, y aquí y allí brotaron los espacios sobre la pradera gallega. Fue el momento que estaba esperando Jakobsson, pues ya rebasado el 80 aprovechó otro balón de Olga Carmona para plantarse sola frente a la portería. Con la defensa a su espalda, la espigada atacante sueca puso con facilidad el 0-2 que cerró el partido.

Volvió a sumar de tres en tres el Real Madrid, olvidó el mal trago del Levante y, sobre todo, permitió recordar a los aficionados que su plantilla ya cuenta con futbolistas capaces de desentrañar los misterios del fútbol. Por ellos y por ellas merece la pena esperar con paciencia.

Fotografías: Imago.