Para la mayoría de aficionados valencianistas el Real Madrid es el gran enemigo y a su vez principal rival. Esta afirmación, que a primera vista no descubre nada nuevo, encierra lo que en realidad es un sentimiento artificial que lleva siendo alimentado desde hace tres décadas por la prensa local, con dos fechas “simbólicas” como referencia: el año 1989, con el advenimiento de la televisión autonómica valenciana; el conocido (ex) Canal 9, y 1996 con el traspaso de Mijatovic.
Aunque ya haya caído en el olvido, hubo un tiempo en el que las cosas fueron diferentes. Como consecuencia de los daños ocasionados por las fuertes lluvias que cayeron sobre la capital del Túria en octubre de 1957, Santiago Bernabéu escribió una efusiva carta a su amigo y presidente de la entidad ché Luis Casanova. En ella Don Santiago ofrecía la ayuda de su Madrid, además de contribuir con 100.000 pesetas a la suscripción abierta en favor de los damnificados por la riada, lo que supuso un agradecimiento muy emotivo por parte del Valencia en nombre de su presidente. El otro ejemplo que tan bien ilustra el buen clima que durante tanto tiempo imperó entre merengues y chés fue el fichaje de Juan Cruz Sol. Era el año 1975 y el traspaso se acordó de manera totalmente amistosa entre los presidentes de ambas entidades, Bernabéu y Casares, curiosamente durante una cacería en Almansa. Corrían otros tiempos y el traspaso se fraguó con absoluta cordialidad, como el propio jugador relató en una entrevista para el diario Levante, “Yo era feliz aquí y el público lo aceptó bien. El primer partido que volví contra el Valencia, la gente se portó fenomenal. Yo había cumplido una misión importante, muchos años jugando aquí. Todo se hizo bien”. Dos anécdotas, pero a su vez muy reveladoras de cómo eran las cosas en aquellos tiempos y lo que estaba por venir.
En el plano de la rivalidad son en cierta forma comprensibles esas ganas de equipararse al todopoderoso Real Madrid. El inicio del siglo XXI vio lo que hasta la fecha han sido los años más lustrosos del Valencia. Los dos títulos de Liga ganados a “Los Galácticos” más la guinda continental de la Copa de la UEFA llenaron las vitrinas del viejo Mestalla. Pero fueron las dos finales de Champions consecutivas las que verdaderamente elevaron el club al olimpo del fútbol europeo y por consiguiente le hicieron asumir el papel de rival directo del club más laureado, el Real Madrid. Así lo entendió la afición valencianista.
“Crónica de un desencuentro” es el libro que publicó en 2009 el reputado periodista local Paco Lloret (en su momento jefe de deportes de Canal 9). En él se desgranan los motivos de ese sentimiento de animadversión, centrados en el tema arbitral y con numerosos ejemplos de los agravios que entiende ha sufrido el Valencia a lo largo de la historia en los duelos directos. Curiosamente, olvida citar los errores en sentido contrario que también los ha habido… y los sigue habiendo. Y es precisamente el ya citado nacimiento de Canal 9 el punto de inflexión de la hasta entonces sana rivalidad deportiva. La llegada de las autonomías, con sus consiguientes televisiones locales supusieron una nueva dimensión mediática para los equipos punteros de cada comunidad, como fue el caso del Valencia. A partir de ahí, la información que empezó a calar siempre tuvo un punto de victimismo que reforzaba la imagen del Madrid como ogro y gran favorecido.
Superdeporte, el diario especialista en ver “chorizadas” en cada enfrentamiento ante los blancos fue otro elemento que contribuyó de manera notable a crear (y lo sigue haciendo) esa imagen de enemigo que no rival, mientras que los diferentes medios locales que fueron surgiendo a finales de los noventa y principio del dos mil acabaron por azuzar un fuego que llevaba tiempo cogiendo calor, lo que ha sido visible a todas luces con el estallido de las RRSS, donde prácticamente el grueso de periodistas locales han expuesto de una forma u otra ese sentimiento.
Con Mijatovic y París en el recuerdo, el viejo Mestalla recibirá esta noche al Real Madrid con el cuchillo entre los dientes, fruto de un viejo desencuentro… ¿buscado? Qué lejos quedan aquellos tiempos en los que el “Madrit” era rival y no enemigo…
Buen artículo, para recordarnos la degeneración que venimos arrastrando de un tiempo para aquí, veo similitudes con el Deportivo de la Coruña y algún club más. Al RM se le vende como el malo de la película, el culpable de todo mal y generador de odio por doquier, fines bastardos es lo que hay detrás de todo esto, y no tienen que ver SOLO con temas deportivos
Saludos
La envidia que es muy mala
La envidia no solo es muy mala, sino que es la clave de todo el anti-madridismo que en el mundo existe, sobre todo en España. Todos envidian al Real Madrid porque es el mejor. Y todos, corroídos por la envidia, quieren que el Real Madrid deje de serlo, sustituido por el Barcelona (equipo con mayor grado de envidia) y ayudado por todos los demás. Y para ese último fin no se escatiman medios: calumnias de todo tipo (supuestos robos y tejemanejes del palco), falseamiento y re-elaboración de la historia del club, minusvaloración de sus logros deportivos (sean los que sean, especialmente las Champions, antiguas y modernas, que son los más valiosos), cuestionamiento y hostigamiento constante por los medios, hostilidad exacerbada en los campos, etc. Llevan intentando la caída y el hundimiento del Real Madrid años y años. Es tan grande nuestro club que no lo han conseguido. ¡Hala Madrid y nada más!
Es cierto. Exactamente como comentas. Acabo de ver el partido entre el juvenil A y el Adarve . Donde este último se ha impuesto , marcando 2 goles en las postrimerías del partido, por 3-2. Ha sido impresionante. La hostilidad de los jovenzuelos del equipo local, añadida a la del público, del todo manifiesta. Sobremotivación que entiendo. Pero lo que, trascendiendo los cauces deportivos, me parece mal es esa falta de deportividad. Uno pensaba que se trataba de un equipo de Salamanca, Segovia o por ahí...Y, no, se trata de un equipo madrileño...
Ademas de estos ejemplos hay otro muy significativo. En la temporada 1976/1977 el R.Madrid jugó en Valencia un partido de la Copa de Europa, por estar sancionado el Bernabéu , y el trato al equipo fue fenomenal.
farça , malakito de menfis, violència y cerdilla son los 4 enemigos del madridismo, in that order.
!Qué bueno! Me voy a quedar con estos alias para usarlos.
Falta Paco Roig, que fue otro generador de odio sin venir a cuento. Antes incluso que el fichaje de Mijatovic
Lo que pasa en Valencia no es más que un reflejo (más) del proyecto de ingeniería social realizado en el resto de España.
Así, una región leal y española de sentimiento hasta la médula, está gobernada hoy por enemigos de España, que poco a poco, desde la educación, la universidad y los medios de comunicación que controlan (que son muchos) van adoctrinando a la población en el odio a la patria. Y el Real Madrid es (lo quieran sus aficionados o no) un símbolo visible (de los pocos que quedan) de lo que muchos entienden por España.
Pero esto no viene de hoy. Durante años, en un hecho insólito, en Valencia se podía ver la televisión de otra comunidad autónoma, la golpista lazi TV3%. Hay que reseñar que en su momento Canal Sur pidió que su señal se pudiese seguir en Cataluña y se le negó. Ya saben, la conocida ley del embudo. Dinero de la Cataluña del "pruses" ha entrado en las universidades valencianas y en otros medios "de opinión". En pocos años, la Comunidad Valenciana y Baleares serán "Cataluña II". Algo similar está ocurriendo en Navarra.
Futbolísticamente, el odio comenzó con un presidente que cuando hablaba parecía un borracho (Paco Roig) y que estaba obsesionado con el Real Madrid. Hoy es una de las peores visitas para los blancos.