Nota: El presente artículo es una revisión, extendida y modificada, de otro que escribí, hará un par de años, para la web Todo al Blanco. El que aquí les acompaño está ampliado, actualizado y modificado. Y, seguramente, no será la última versión. Desgraciadamente.
Clos Gómez, árbitro Fifa desde el año 2009. Once temporadas en primera división, incluyendo la actual. Ha arbitrado un total de 202 partidos en primera. Arbitrará el próximo clásico. No sabemos lo que pasará, pero las previsiones no son buenas si tenemos en cuenta los antecedentes arbitrales de esta y otras temporadas ¿Tenemos motivos para preocuparnos? A continuación, Clos en números y en estaciones de penitencia. Y alguna cosa más. Las conclusiones se las dejo a ustedes.
Primera estación: expulsados. Para que vayan abriendo boca: en sus once temporadas en primera división Clos ha expulsado a 7 jugadores madridistas en los 27 partidos que ha pitado a nuestro querido club. Al Barça le ha expulsado 3 jugadores en 20 partidos. La probabilidad de que el Madrid acabe con menos de once jugadores un partido que le es arbitrado por Clos es del 26%, la del Barça es del 15%. A pesar de lo llamativo del dato, echémosle buena voluntad. Pensemos que una expulsión es un hecho aislado y que la diferencia de porcentaje entre Madrid y Barça es fruto de la casualidad. Por cierto, hablando de hechos aislados, he visto que en algún sitio se recogen datos sobre penaltis a favor y en contra con no sé qué extrañas intenciones. Clos le ha pitado 13 penaltis a favor del Madrid en liga. Solo en dos ocasiones, tuvieron valor de puntos. El resto se los podría haber ahorrado. Sí, demasiado simplista. O no.
Segunda estación: la presentación. Demos por sentado que las expulsiones, en cuanto hechos aislados, no esconden comportamientos tendenciosos. Tal vez, lo mejor sería recurrir a otro criterio y observar el comportamiento de Clos en estas once temporadas. Veamos qué hace Clos con las cartulinas amarillas. Y veamos si se puede deducir cierta tendenciosidad en su actuación. En principio, estaremos todos de acuerdo en que la cartulina amarilla no es un hecho aislado. Al lado de los porcentajes de posesión, del número de faltas y de las sustituciones, siempre nos aparecen las cartulinas amarillas mostradas. Nos hemos acostumbrado a ellas y damos por descontado que en todos los partidos las habrá. Un árbitro con ganas de desenfundar, las mostrará sin recato y sin ataduras.
En los 202 partidos que Clos ha arbitrado en primera división ha mostrado 1178 tarjetas amarillas (incluyo las expulsiones por dobles amarillas). Así pues, con una simple división, obtendremos la media de amarillas que Clos muestra por partido: 5,83.
Tercera estación: el calvario. Al Madrid le ha pitado un total de 27 partidos (número sobre el que volveremos más tarde). Extrañamente, en los partidos en los que ha arbitrado al Madrid su media se eleva a 6.63 tarjetas por partido. Extrañamente (o no), en los 20 partidos que le ha pitado al Barcelona su media baja a 4.45 cartulina amarillas por partido. Les llamo la atención sobre el hecho de que estas medias son medias a repartir entre los dos equipos que compiten en cada partido. Así pues, en principio esas medias no nos dicen nada sobre la posible animosidad/favoritismo de Clos hacia el Madrid, pues podría ocurrir que las 6.63 amarillas que Clos muestra en los partidos del Madrid fueran a parar, en su mayoría, a los rivales del Real. A contrario sensu, podría ocurrir lo inverso con el Barcelona. Les adelanto que será que no.
Cuarta estación: latigazos. Salgamos de dudas y veamos cómo se distribuyen estas 6.63 amarillas por partido de Clos. D. Gómez le ha mostrado a los jugadores del Madrid (en los mencionados 27 partidos) un total de 90 amarillas (incluyo las dobles amarillas). Una simple división (90/27) nos enseña que Clos tarjetea al Madrid a razón de 3.33 amarillas por partido. El resto, hasta las 6.63, es lo que les corresponde a los rivales, es decir, 3.30. En román paladino, Clos tarjetea más al Madrid que a sus rivales, a pesar de ser el Madrid un equipo ultra ofensivo como veremos un poco más tarde.
Quinta estación: Barrabás. ¿Clos hace lo mismo con el Barcelona? Pues no. Siento desilusionarles, pero no. A los jugadores del Barcelona les ha enseñado, en 20 partidos, un total de 32 amarillas. Otra simple división (32/20) nos enseña que Clos tarjetea al Barcelona a razón de 1.60 amarillas por partido. El resto, hasta las 4.45, se lo llevan los rivales. El carácter ultra ofensivo del Barça sí aparece reflejado en los arbitrajes de D. Clos. Comparen (1.60 vs 3.33).
Sexta estación: el mal ladrón. Les advierto que, a pesar de los pesares, a nuestros efectos, todos estos simples números, tampoco nos dicen gran cosa. Bien pudiera ocurrir que todos los árbitros que se han encargado de impartir justicia en los 393 partidos que ha jugado el Real Madrid, en estas once temporadas de closarato, se comportasen de manera similar a como lo hace Clos. Cerciorémonos.
Si esto fuera así, poco le podríamos le podríamos reprochar a Clos pues se estaría comportando como uno más. Vayamos al dato. Tanto el Madrid como el Barcelona, en estos once años han jugado sus 393 partidos contra los mismos rivales y (más o menos, ejem) con los mismos arbitrajes. Echémosle (y ya es echar), otra vez, buena voluntad y supongamos que ambos equipos se han manejado en escenarios similares. En estos 393 partidos al Madrid le han mostrado (incluyo dobles amarillas) un total de 1021 amarillas. Otra simple división (1021/393) nos proporciona una media de 2.60 amarillas por partido. Repito, esta media está obtenida en base a todo tipo de partidos, rivales y arbitrajes. Observen la diferencia: con Clos, 3.33 y con el común de los árbitros, 2.60. Es decir, con los jugadores del Madrid, a Clos su celo tarjeteador se le excita un 30% más.
¿Y el Barcelona? Ojo al dato, que diría ése. Al Barcelona le han mostrado en estos 393 partidos un total de 787 amarillas. Otra simple división (787/393) nos enseña una media de 2.00 amarillas por partido. Con Clos 1.60. Un 20% más generoso con el Barcelona que el común de los árbitros. Justo al contrario de lo que hace con el Madrid; ¡qué cosas!, ¿verdad? No les daré los números para no aburrirles más, pero con el Atleti Clos se comporta también muy generosamente. ¿Motivos? Los desconozco.
Séptima estación: el apaleamiento. Hablemos ahora de la cuestión puramente deportiva. ¿Cómo le va al Madrid con Clos? Pues mal, para qué nos vamos a engañar. El Madrid, con Clos, gana el 66.67% de los partidos. El Barcelona gana, con Clos, el 85% de sus partidos. De hecho, con él a los mandos, Clos todavía no ha perdido ni un solo partido. Sus 20 partidos se reparten en 17 victorias y 3 empates. Pero esto ya lo saben.
Visto así, sin más, ambos porcentajes tampoco nos dicen gran cosa. Bien hubiera podido ocurrir que el Madrid también hubiese ganado el 66.67% de esos 393 partidos sin Clos. En este caso, a efectos puramente deportivos (que no disciplinarios) al Madrid le daría igual que le arbitrase Clos o cualquier otro.
Pero, pero, pero…hete aquí que el Madrid ha ganado 288 partidos de 393. Otra simple división (288/393) nos muestra un 73.28% de partidos ganados, y, repito, con todo tipo de árbitros, rivales y circunstancias. Sin embargo, con Clos solo gana el 66.67%. Hagan una proyección. Supongamos que Clos le hubiera arbitrado al Madrid todos y cada uno de esos 393 partidos. Eso supondría haber ganado 262 partidos. De sus tres ligas ganadas en las últimas diez temporadas completas, dos de ellas, muy posiblemente, se hubieran ido al limbo. El Barcelona ha ganado el 72.01% de sus 393 partidos (282). Pero al contrario de lo que ocurre con el Madrid, cuando Clos sale del túnel de vestuarios encabezando el desfile de jugadores y la mitad son del Barça, estos últimos se iluminan, se encienden, se inspiran y ganan el 85% de los partidos.
Resumiendo. El Madrid sin Clos gana el 73.28% de sus 393 partidos. El Barcelona sin Clos el 72.01% . Con Clos a los mandos, el Madrid gana el 66.67%. El Barcelona el 85%. ¿Por qué esa diferencia de rendimiento deportivo?, más aún, ¿por qué con Clos el Madrid obtiene resultados deportivos inferiores a la media y por qué el Barcelona los obtiene tan buenos y tan superiores? Lo desconozco.
Octava estación: corona de espinas. A primera vista, en relación con el Barcelona, Clos pareciese que tuviese algo con el Madrid. Y no bueno precisamente. Si ustedes le comentan estos números a algún amigo culé (una oración por su alma) éste le podría contra-argumentar que el Madrid es un equipo más sucio, marrullero y leñero que el Barcelona y que Clos lo único que hace es arbitrar en consecuencia. Como juego retórico no estaría mal, pero, qué quieren que les diga…que no sea que estoy harto de ver partidos del Madrid, del Barcelona, del Atleti y de unos cuantos equipos más, y que catalogar al Madrid de equipo marrullero choca contra la realidad tanto o más que los fichajes del Manolete.
Paralelos a mi percepción (y la de cualquiera que no sea un antimadridista descerebrado) están los datos que demuestran que el Madrid es el primer o segundo equipo más ofensivo de España y, en algunas ocasiones, de Europa. ¿Jugar a ganar marcando goles marrulleando? Agua y aceite.
En verano hace calor, Neymar ha costado más de 100 millones de euros, el Madrid tiene once Copas de Europa, Fredo odia a Florentino, Fidel ha muerto y los equipos ofensivos son menos sancionados que los defensivos a medio y largo plazo. Todas ellas, verdades y/o realidades palmarias. ¿Pruebas? En 393 partidos al Madrid le han mostrado 1021 cartulinas amarillas y a sus rivales 1228. Son más de 200 tarjetas de diferencia. Eso con los árbitros de Villar. Si el anterior razonamiento choca contra alguna lógica, por mí desconocida, ruego me informen.
Novena estación: el Cireneo. Algo huele a podrido más al sur de Dinamarca. ¿No quieren caldo? Pues les voy a dar dos tazas. Demos entrada a otros equipos, en esta comparativa, y veamos si Clos es igual de justiciero con otros equipos menos ofensivos que el Madrid.
Seleccionaré los cinco mejores equipos de la liga española en este período de closarato y analizaré cómo se comporta Clos con cada uno de estos cinco equipos.
Una rápida búsqueda por los mundos de internet les dirá que, en los 393 partidos tantas veces repetidos, los cinco mejores equipos en ese período son los siguientes: Barcelona (915 ptos), Real Madrid (914 ptos), Atlético de Madrid (708 ptos), Sevilla (644 ptos) y Valencia (628 ptos). No han bajado a segunda división, han ganado todos los títulos nacionales y una buena parte de los internacionales. ¿En qué se parecen estos cinco equipos? Matiz arriba, matiz abajo, son todos equipos ofensivos, como demuestran sus números.
Barcelona. Goles a favor: 1036. Goles en contra: 322. Saldo favorable: 714
Real Madrid. Goles a favor: 1029. Goles en contra: 391. Saldo favorable: 638
Atlético de Madrid. Goles a favor: 664. Goles en contra: 418. Saldo favorable: 246
Sevilla. Goles a favor: 641. Goles en contra: 499. Saldo favorable: 142
Valencia. Goles a favor: 606. Goles en contra: 497. Saldo favorable: 109
Si hay, dentro de este grupo de cinco, dos equipos que se parezcan deportivamente casi como dos gotas de agua, esos son el Madrid y el Barcelona. Si hay dos equipos, dentro de este grupo de cinco, que sean tratados de manera más dispar por D. Clos, esos son el Madrid y el Barça. Y se lo demuestro a continuación.
Décima estación: la caída. Enunciado el principio general (los equipos ofensivos son menos sancionados que los equipos defensivos) y admitido por puro empirismo, nos queda observar cómo se comporta Clos con estos cinco equipos y ver si sigue a pie juntillas nuestro enunciado o se separa de él. Estos son los datos justicieros de nuestro estimado amigo con cada uno de estos cinco equipos.
TA: tarjetas amarillas jugadores propios. TAR: tarjetas amarillas jugadores rivales.
Barcelona. Partidos pitados: 20. TA: 32. TAR: 59. Saldo (TR – TA): +27
Real Madrid. Partidos pitados: 27. TA: 90. TAR: 89. Saldo (TR – TA): -1
Atlético de Madrid. Partidos pitados: 25. TA: 71. TAR: 80 Saldo (TR – TA): +9
Sevilla. Partidos pitados: 22. TA: 74. TAR: 110. Saldo (TR – TA): +29
Valencia. Partidos pitados: 29. TA: 74. TAR: 91. Saldo (TR – TA): +17
Les he puesto en negrita y cursiva el único saldo negativo de los cinco elegidos, y su compararativa con el Barça. El equipo al que corresponde dicho saldo, ya saben cuál es. El caso de nuestro querido club es la excepción a nuestro enunciado y no confirma ninguna regla. ¿Motivos por los que Clos se comporta así? Los ignoro. ¿Por qué hay tanta diferencia entre dos equipos tan parecidos como el Barcelona y el Madrid? ¿Sospechas? Muchas y ninguna que sea racional y no querellable. Observen, además, que en todos los casos estamos hablando de series de 20 partidos o más. Así pues, casualidades, las justas. Eso, o que el Madrid, arrolla a sus rivales…literalmente, con puños de hierro, bates de béisbol o sierras mecánicas. Ni siquiera el Valencia (el peor de los cinco) con sus 74 cartulinas amarillas en 29 partidos se acerca remotamente a las 90 del Madrid. Un poco hediondo, ¿no?
Undécima estación: la crucifixión. Retomemos el número de partidos que Clos ha arbitrado al Madrid. En toda esta triste historia, ése es otro dato escamante: el número de partidos que este señor le ha pitado al Madrid, 27, que pronto serán 28. En sus diez temporadas completas (excluidos, por tanto, los partidos de la presente temporada) en primera división había pitado un total de 196 partidos. Es decir, arbitra por temporada una media de 19.6 partidos. Redondeemos a 20. Si la designación fuera aleatoria, no le debería haber pitado al Madrid más allá de 2 partidos por temporada. La cuenta final es fácil, 2 partidos por temporada a razón de diez temporadas, me salen 20 partidos. Agreguen un margen de error y pónganle 21 o 22 partidos. Todo ello suponiendo que el azar fuese azar y no trile. 20, 21 o 22 partidos no son 27 partidos. Es más, se alejan bastante.
Visto lo anterior, no cabe otra conclusión que afirmar que la designación de los álbitros se hace siguiendo un criterio en el que la aleatoriedad no está presente. Dado que la opacidad es la nota predominante en todo lo que rodea al señor del fúrbol y los álbitros, por mi cuenta y riesgo, aventuro que los tres tipos que designan a los álbitros, lo hacen siguiendo el científico método de la bragueta y yo diría que hasta con premeditación, alevosía y puede que con nocturnidad. (Nota al margen: les recuerdo que al frente del triunvirato de designadores está Arminio (y sus arminiadas). Sí, es ése que habló de problemas familiares de uno de sus álbitros para afear un error favorable al Madrid. Ése. El mismo que jamás ha hablado de problemas familiares ora afear un error de de uno de los muchos álbitros que han favorecido al Barça).
Los siete partidos de más que Clos le ha pitado al Madrid respecto al Barcelona, les pudiera parecer una nimiedad. No es mi opinión. Demos por bueno (siendo generosos) que cada árbitro pita un par de veces a cada equipo por temporada. Ser arbitrado por este individuo en 7 partidos más que tu máximo rival, viene significar que te ha pitado, como poco, tres temporadas más de lo que les ha arbitrado a ellos. 7 partidos de más, aplicando su peculiar criterio cuando se le cruza Madrid.
¿Han visto ustedes las diferencias de puntos en las clasificaciones finales de las últimas ligas? Un penalti no pitado, un empate, dos puntos menos, adiós liga, ¿les siguen pareciendo pocos esos 7 partidos de más? Si es buen árbitro y merece pitarle 27 partidos al Madrid, ¿por qué no al Barcelona? Otrosí, si es un árbitro del montón y no merece más de 20 partidos con el Barcelona, ¿por qué 27 partidos al Madrid? Supongo que no hará falta que les recuerde el asunto de los trece errores, los tres goles anulados al Madrid en aquel derbi, lo del Sadar de hace tres temporadas o el penalti a Danilo del año pasado frente al Atleti, entre diversos y desagradables episodios. O, tal vez, por episodios como estos es por lo que es asignado tantas veces al Madrid.
Duodécima estación: el escarnio. He decidido que les voy a seguir amargando el rato de lectura. Ahora pasemos a analizar qué tipo de partidos ha arbitrado D. Clos cuando se ha cruzado en el camino del Madrid y le ha caído en suerte al Barcelona. ¿Ustedes que dirían? ¿Partidos teóricamente fáciles para ambos?, ¿difíciles?, ¿fáciles para uno, difíciles para otro? Ustedes mismos.
Al Madrid le ha arbitrado con los siguientes rivales: contra el Valencia (4 veces); contra el Atlético (3 veces); contra el Villarreal, Celta, Osasuna, Athletic y Sevilla (2 veces); contra el Elche, Levante, Granada, Getafe, Hércules, Espanyol, Mallorca, Racing, Almería y Deportivo (1 vez).
Al Barcelona le ha arbitrado con los siguientes rivales: contra el Málaga (3 veces); contra el Sporting, Villarreal y Levante (2 veces); contra el Deportivo, Córdoba, Elche, Espanyol, Rayo, Betis, Valladolid, Real Sociedad, Almería, Recreativo y Murcia (1 vez).
En comparación con los rivales del Madrid, echo en falta al Valencia, al Atlético, al Sevilla y al Athletic. Después de diez temporadas completas e iniciando la undécima temporada en primera división, D. Clos no ha pitado ningún partido del Barcelona contra cualquiera de los otros cuatro equipos del top 5 de la liga española. Y es internacional. Si no da la talla para dirigir los partidos calientes del Barcelona, ¿por qué sí vale para dirigir los del Madrid? Viceversa, si es bueno para dirigir los partidos calientes del Madrid, ¿por qué no los del Barcelona? Internacional exento de pitarle partidos difíciles al Barcelona. ¿Por qué? Lo ignoro.
Decimotercera estación: Judas y Caifás. Y seguimos para bingo. Si ustedes pensaban que Clos es caso único y peculiar en esto del trato que el arbitraje le dispensa al Madrid, que se sepan que se equivocan de medio a medio. Entre los árbitros activos actualmente, hay otros dos casos tan llamativos como el de Clos en el en el asunto que nos incumbe. Elucubren y hagan sus apuestas. La banca perderá. Sí, yo también hubiera citado a esos dos.
Uno es D. Mallenco. De los más veteranos. 17 temporadas en primera división, pero para homogeneizar comparaciones, solo tomaremos los datos de las 11 temporadas en las que ha coincidido con Clos. Mallenco, durante el closarato, le ha pitado al Madrid 33 partidos y les ha mostrado a sus jugadores 112 amarillas y 111 a sus rivales. El Madrid gana con él un paupérrimo 57.58% de sus partidos. El otro es D. Izquierdo (catalán, para más señas. Les daré una pista: expulsó a Varane el año pasado en un partido contra el Athletic por dos amarillas a causa de dos no-faltas). Este es más novato. De la misma quinta que Clos. Este individuo ha pitado al Madrid en 14 ocasiones y ha enseñado a sus jugadores 50 amarillas por 42 a sus rivales. El Madrid ha ganado con este individuo 12 partidos y ha perdido 2, lo cual demostraría que nadie es imbatible si las cosas se hacen bien, ni siquiera el villarato.
Para que comparen: durante el closarato, Mallenco ha mostrado, en 31 partidos arbitrados al Barcelona, 76 amarillas a los jugadores culés y 114 a sus rivales. A jugadores del Madrid les muestra 3.39 tarjetas amarillas por partido y a los del Barcelona 2.54. Desconozco a qué se debe esta diferencia de trato. Hay que decir, en favor de Mallenco, que tanto al Barcelona como al Madrid les muestra una media de cartulinas amarillas superior a la media general de ambos. Hay que decir en contra de Mallenco que al Madrid le trata bastante peor que al Barcelona sin que sepamos exactamente por qué, dado que son dos equipos muy parecidos. Hay que decir, también en contra de Mallenco, que, al igual que le ocurre a Clos, parece enjuiciar con un criterio al Madrid y con otro algo más laxo a sus rivales. Nada nuevo bajo el sol. Por cierto, en estas once temporadas, el Barcelona, con Mallenco, gana el 74.19% de sus partidos…el Madrid el 57.58%. Por si entre tanto número, se les había olvidado, les recuerdo que el porcentaje de victorias generales del Madrid en los 393 partidos considerados es del 73.28% y el del Barcelona es del 72.01%. En fin. No les ahorro el disgusto de decirles que el Barcelona no tiene en su expediente ni un solo árbitro que presente una hoja de servicios parecida a la de cualquiera de estos tres con el Madrid, ni por aproximación. Lo he comprobado.
Estación decimocuarta: el averno de D. Clos. En esta estación, me he tomado la molestia de hacer una clasificación de afectados por Clos, incluyendo a todos los equipos que alguna vez fueron ajusticiados por él. Se lo voy a resumir. Clos ha arbitrado en su período de mandato a 35 equipos diferentes. A algunos les ha pitado muy pocos partidos y a otros muchos. Dado que el número de partidos arbitrados a cada equipo varía enormemente, he procedido a clasificar, en orden decreciente, a los afectados en función de la media de tarjetas amarillas por partido mostradas por D. Clos. El Madrid ocupa una honrosa novena posición en la clasificación de marrulleros. Pero si procedemos a quitar aquellos equipos con menos de cinco partidos arbitrados (datos poco significativos) y a los que ahora no están en la primera división, el Madrid aparecería clasificado en el quinto lugar de leñeros. Sólo estarían por delante del Madrid (3.33) el Osasuna (3.83), el Celta (3.57), el Espanyol (3.57) y el Sevilla (3.36).
Muy matizable el caso del Sevilla pues, si bien Clos le muestra 3.36 tarjetas amarillas por partido (3 centésimas más alta que la del Madrid), presenta un saldo favorable (+27), en el trato disciplinario con respecto a sus adversarios, que ya quisiera el Madrid que tuviera D. Clos con sus jugadores y adversarios. De hecho el Sevilla, en esa clasificación de marrulleros, es el único equipo con saldo de tarjetas favorable. Así pues, podríamos prescindir del equipo andaluz en esa clasificación por motivos obvios. Ascendamos pues al Real Madrid CF, campeón de Europa once veces y gloria nacional (en cualquier otro país), al cuarto lugar de los equipos más sucios y marrulleros de España, según juicio experto de D. Clos. Ascendamos al Madrid al cuarto puesto en dura pugna, de unas pocas centésimas, con otros equipos que pelean por no descender de categoría o, siendo muy magnánimos, por hacerse con una plaza de la Uefa Europe League, más conocida como la Champiñones Luis. Ése es el nivel de marrullería del Madrid, según D. Clos.
Estación decimoquinta: la propaganda. Juan Pablo II añadió una nueva estación a las 14 del antiguo Vía Crucis. Yo no podía quedarme atrás y ruego perdonen mi irreverencia.
Franco, Guruceta y Pepe Plaza…y Rigo. Guruceta pasó a la historia del fútbol español por ser un cuasi atracador a mano armada. Su atraco consistió en una equivocación en un solo partido de fútbol. Fue un error grosero. Hay videos en youtube, por si les interesa. Pitó como penalti una falta fuera del área. Muchos vocingleros hablan de ocho metros fuera del área. Palurdos malintencionados y desinformados. En realidad, la falta fue cometida en la corona del área y Velázquez cayó dentro. Fue error grosero, cierto. ¿Más o menos grosero que la embestida de Mascherano a Cristiano Ronaldo y que no vio Ojo de Aguila Mallenco? ¿Más o menos grosero que el comportamiento de Gracia Redondo y García de Loza en lo de Tenerife? ¿Ovrebo? ¿Ellis y Leafe? Y ninguno de estos, tuvo que padecer la persecución a la que fue sometido Guruceta.
El grosero error de Guruceta supuso el empate a uno y el Barcelona fue eliminado en las semifinales de la Copa del Generalísimo. Lo que nadie dice es que el Barcelona ya lo tenía en chino, pues traía, del partido de ida en el Bernabéu, un 2-0 en contra. Al error se le puede dar la trascendencia que se quiera, pero yo diría que les quitó poco o nada. Automáticamente, Guruceta fue señalado y estigmatizado. Por un solo error que, en realidad, suponía el empate en un partido de una eliminatoria de semifinales de Copa que, ya de por sí, estaba muy comprometida. No fue un error que arrebatase un título casi ganado en una final. No fue lo de Tenerife. Ni fue un error en una eliminatoria de Copa de Europa, pero dio igual. Victimismo y propaganda.
Guruceta fue recusado. La historia ya la conocen todos ustedes. Hasta el momento de la recusación Guruceta solo había pitado dos partidos al Barcelona, ése de Copa y otro de liga frente al Deportivo (0-0). Ya no le volvió a pitar nunca más. Repito: un solo error.
A quien sí volvió a pitar el bueno de Guruceta fue al Madrid. Ustedes pensarán, a la vista de los bulos expandidos por el culeríonacionalismo, que los partidos que Guruceta le pitó al Madrid debieron ser bacanales de expulsiones, penaltis y goles en fuera de juego, todo favorable al Madrid. Lamento desilusionarles. Guruceta le pitó al Madrid 22 partidos de liga. El Madrid ganó 13, perdió 6 y empató 3. Enseñó 8 amarillas a jugadores del Madrid y 15 a sus rivales. Pitó 5 penaltis favorables al Madrid y 3 en contra. El Madrid ganó, con el merengón Guruceta, el 59.09% de sus partidos. Les recuerdo que con Clos el Madrid gana el 66.67% de sus partidos y que con Mallenco, en el período del closarato, gana el 57.58% de sus partidos. Guruceta, el árbitro de cámara del madridismo. Ya saben aquello de las mentiras repetidas hasta la saciedad. Goebbels, un principiante.
Rigo era el alter ego de Guruceta, en su versión culé. Se hizo popular por la famosa final de las botellas. Rigo le hizo la trece-catorce al Madrid en el mismísimo estadio Bernabéu, con Franco en el palco y jugándose el título al que daba nombre el Generalísimo. No está nada mal para ser el equipo del régimen. Mientras Guruceta era crucificado y el bulo del equipo del régimen se expandía, el culeríonacionalimo y el dictador se intercambiaban recalificaciones e insignias de oro y brillantes. Rigo pitó la final después de haber pitado los dos partidos de las semifinales entre el Atlético de Madrid y el Barcelona. Cuentan las crónicas que los del Atleti salieron escamados de aquello. También pitó los dos partidos de cuartos de final entre el Barcelona y el Athletic, cuyos componentes, a su vez, parece que tampoco salieron muy satisfechos del asunto. En esa misma temporada Rigo le pitó al Barcelona once partidos de liga. Les recuerdo que, por aquel entonces, la liga la formaban 16 equipos, para un total de 30 partidos para cada equipo. Rigo le pitó al Barcelona el 36.37% de sus partidos. Esto me hace recordar el nombre de Pepe Plaza y no sé por qué. Eso sí es designar a dedo y no la tontería de ahora. Y yo quejándome porque Clos le ha pitado al Madrid 7 partidos de más en diez años.
Y acabo que ya es hora. Por si se lo estaban preguntado, Rigo también fue recusado por el Madrid. Antes de eso, le dio tiempo a liarla en la famosa final (¡¡no una eliminatoria, no!!) y para pitarle al Madrid 13 partidos de liga. El Madrid ganó 7 de esos 13 partidos. Un 53.84% de sus partidos. Comparando el 57.58% de Guruceta con el 53.84% de Rigo, no cabe más que afirmar que Guruceta era un 3.74% más madridista que Rigo. Intolerable. Y comparado con Clos, ya ni les cuento. Clos se sentará a la siniestra de D. Santiago, como poco. No se rían, el régimen culénacionalista así nos lo venderá y así quedará para la historia. A poquísimo que se equivoque a favor del Madrid (y no parece muy dispuesto), D. Clos pasará a ocupar un lugar de privilegio al lado de Pepe Plaza, Franco, Guruceta y Ortiz de Mendíbil. Las portadas de sus panfletos insistirán en ello con el mismo entusiasmo que se empeñan en preguntarles a sus lectores si tienen problemas de erección. Y colará…lo de Clos madridista, digo. Ya lo hicieron con Guruceta.
Muchas gracias por haber aguantado hasta el final y que Dios nos pille confesados el día del clásico.
Magistral.
Lo de clos es algo ya sabido pero lo peor es que se ha aceptado.El resto, Arminio que sin el menor recato lo pone en barcelona....y a seguir aguantando
El culpable de la situación tiene nombre y apellidos y se llama D. Florentino Pérez Rodríguez.
Simple llamadita y si el Comité sigue en sus trece, presentarse con los suplentes y algunos del Castilla (como contra la Cultural) y sin representación institucional. Total, son tres puntos que se van a perder de todas formas y la repercusión internacional puede ser enorme.
Si hasta el comprador de la Competición dice que no conviene que el Barcelona esté a nueve puntos pues hagamos que se quede a tres, pero a lo grande.
Sin embargo los dirigentes de este Club con Pérez y Butragüeño a la cabeza, son unos cobardes.
Lo peor de todo este lodazal es que continuará siendo así " In saecula saeculorum " y no pasará absolutamente nada. Y tengo que añadir; en baloncesto pasa absolutamente igual a nivel nacional e internacional. Saludos de un MADRISTA residente en La Ciudad Condal y que sus ídolos fueron D. Juan Gómez " Juanito " y D. Fernando Martín Espina. i Adelante " Milcopas "!
Buenas tardes D. José Luis, artículo largo y denso pero que se lee en un suspiro y con emoción
las palabras se las lleva el viento y las olvida la memoria, las estadísticas quedan para siempre
ánimo y a por los culandras, no se merecen menos. Muchas gracias por esta maravilla que leeré
las veces que hagan falta en esta misión de derribar el muro del anti madridismo, que intenta
ponernos en un gueto y convertirnos en irrelevantes
Saludos blancos, castellanos y comuneros
D. José Luis me ha metido usted tanto miedo en el cuerpo con este personaje y sus estadísticas que veré el partido con los ojos tapados como Sergio Busquets en aquella famosa simulación contra el Inter de Milan.
Excelente articulo, ânimos!.
Asombrosa comparativa-estadistica,que por supuesto su trabajo le ha costado y que si no lo veo,asi como lo ha expuesto,no me lo hubiera creido.
Por eso mismo,por el trabajo que le ha costado,me extraña,que el sr.Portega,haya encontrado a los culpables,tan rapido y sin salirse fuera del mismisimo Real Madrid,el enemigo Srs esta en casa y por lo que dice,estan escondidos y agazapados,pues les llama,cobardes,al presidente y a E.Butragueño.
Pues mire vd.,si hacemos lo que dice y regalamos los tres puntos al Barsa,¿el proximo partido que nos toque Clos,regalamos otra vez los tres puntos? Y asi ¿hasta cuando?
En cuanto a los graves insultos,a los dirigentes del Real Madrid y en particular a Florentino Perez y a Emilio Butragueño,no los entiendo,si yo tuviera ese concepto de cualquier dirigente de alguna empresa,a la que yo perteneciera,lo primero que haria es
"MANDARME A MUDAR", (frase muy usual en mi tierra)baybay.......desde Gran Canaria.
Sr. Don Alfredo,
Mira por donde, mi vida transcurre entre Gran Canaria (mi tierra) y Madrid, donde vivo por temporadas, a 10 minutos del Bernabéu andando. Lo digo porque parece ser que nos une algo, la tierra de nacimiento.
Y sí, los únicos culpables son ellos, porque con la fuerza que debería tener este Club, es inadmisible que sabiendo que uno de los contendientes no quiere a este árbitro, el Comité lo designe. Y además con muchísima antelación, para que vayas rumiando la rabia unas semanas antes. En la NBA, por ejemplo, esto sería impensable. Es más, por los datos que ha expresado el autor, Clos sería objeto de investigación y probablemente no arbitraría más. Allí, o eres equilibrado con los equipos o te echan.
Y mantengo el grave insulto (para Vd.), de llamar cobarde al Sr. Pérez y al Sr. Butragueño (como portavoz), por no defender, a mi entender, adecuadamente al Club.
Si a Vd. le parece que ambos dirigentes actúan bien, me parece perfecto, es su opinión.
Lo inteligente sería ir con los suplentes, no vaya a ser que acabemos con expulsados que se pierdan el próximo partido.
Para próximas temporadas, sería bueno limpiarse de tarjetas en el partido previo, para cumplir la sanción contra el Closato.
Impresionante, brillante. ¡Y vaya curro! Mis felicitaciones, José Luis, y esperemos que superemos este closarato con una victoria apabullante este sábado 😉
Muy divertido, el estribillo de "Desconozco los motivos...". La verdad es que el artículo es demoledor.
Sólo falta una referencia a las fuentes estadísticas que se han consultado para elaborarlo, para que cualquier lector, si quiere tomarse el trabajo necesario, pueda comprobar que los datos son exactos.
Por mucho menos que esto, D. Luis de Carlos aviso que sacaba al club de las competiciones. Y por entonces el Madrid no tenia los recursos de ahora ni el fútbol estaba tan internacionalizado.
Claro que al intentar irse a otra liga, mientras sean ligas federadas, la FIFA y UEFA amenazarían con dejar a nuestros jugadores fuera de las selecciones nacionales (serian ellos los que perderían); mas el hecho de que hay proponentes de ligas internacionales esperando, el efecto llamada si el Real Madrid se inscribiese en una y diera el adelante con este proyecto, seria enorme.
Aun el club esta pagando lo del Grupo G14, el truco esta vez... es no invitar a los dos clubs que en su día lo traicionaron, el farsa y el bayern. No se puede ir a nada así con enemigos declarados como compañeros.
Sr.Portega:me alegro por el paisanaje,ahora bien,digame vd.de todos los clubes de futbol,podriamos meter otros deportes profesionales,pero centremonos en el futbol,que vd.conoce digame uno solo,que haya actuado como vd.aconseja que haga el presidente del Real Madrid.Lo que vd.pretende,es imposible,pero suponiendo que tenga exito,esa postura¿vd.se imagina la que se formaria en cada asignacion de arbitros?
En cuanto al insulto,mi opinion es,que aun que este o no de acuerdo como se lleven,algunos aspectos de la marcha del club,lo de llamarle cobarde es muy fuerte y desproporcionado.Estos señores a los que vd. insulta,puede que tengan lo que hay que tener,para un enfrentamiento como el que vd.sugiere,pero anteponen el interes del Real Madrid y buscaran soluciones,menos traumaticas.Es mi opinion
Sencillamente genial.
Lástima que a tan poca gente les importen las estadísicas, porque con ellas acabas de demostrar (tan sólo) una pequeña parte de la enorme conjura del chapapote antimadridista. Ya que la TV no las usa (ni lo hará), deberíamos hacer entre todos que esto llegue a la mayor cantidad de gente posible. Basta de portadas como la de cantera vs cartera, basta de diferencias de penaltis o expulsiones tan bestias. estamos desamparados a nivel mediático mientras ellos tienen de cara tanto a sus fancines, como a la asquerosa prensa española que apoya sus continuas mentiras y tapa toda esta trama enorme desde hace años.
Gracias Jose Luis S.Ortiz. Mi enhorabuena.
Barcelona 1, Real Madrid 1.
Q.E.D.