Me han sorprendido algunas reacciones a las escandalosas palabras de Mark Clattenburg, el árbitro de la Final de Champions de 2016 entre Real Madrid y Atlético. Todo el mundo coincide en señalar que son declaraciones chocantes e inaceptables, pero no todo el mundo está de acuerdo al señalar la razón por la cual es gravísimo el que diga algo así el trencilla escocés.
Clattenburg echa la culpa a su linier (y/o a un problema técnico con el pinganillo, agravado por el ensordecedor ambiente del estadio) del error cometido al no pitar fuera de juego en el gol de Ramos. Ya está feo que descargue responsabilidad en su juez de línea de manera pública, pero más impresentable aún es que haga abstracción de que en la misma jugada Sergio Ramos es objeto de penalti, como también lo fue unos minutos antes, en un agarrón todavía más nítido e irrebatible del mismo jugador (Savic) sobre el propio Ramos.
Con todo, lo más grave no es eso. Lo más grave es lo que añade tras culpar a su linier. “Se produjo una jugada en el área entre Pepe y Torres. Era fifty/fifty, pero aproveché la oportunidad para compensar el error en el gol y pité penalti. Pepe me dijo: no era penalti. Y le respondí: pero tu gol tampoco”.
Esta admisión flagrante de la aplicación de la ley de compensación acaba con el tabú en relación a esta herramienta, y abre la caja de Pandora, como decía ayer Eric McKee en #TheMadSquad de GalernaTV. Es un árbitro admitiendo que pita no lo que ve, sino lo que le conviene pitar en relación a un error anterior (aunque omita como decimos otros dos errores, el penalti simultáneo a Savic y otro penalti anterior). Un árbitro que admite desvergozadamente haber pitado no lo que veía, sino lo que le interesaba haber visto, es un árbitro que está admitiendo una prevaricación, pura y simplemente.
Un árbitro que admite desvergozadamente haber pitado no lo que veía, sino lo que le interesaba haber visto, es un árbitro que está admitiendo una prevaricación, pura y simplemente
Digo que me llaman la atención las reacciones, porque algunos atléticos han creído cargarse de razón con el vídeo de Clattenburg, en el sentido de que refrenda que fue una Final robada al Atleti. Si algo demuestra el vídeo sería algo parecido a lo contrario: el colegiado intentó meter artificialmente al Atleti en el partido tomando a su favor una decisión que sabia injusta, y lo hizo deliberadamente al comprender haber cometido (involuntariamente) un error anterior. Lo que sucede, como recordaremos, es que Griezmann marró el penalti.
Si a alguien le conviene guardar un prudente silencio respecto a esto de Clattenburg, es a los atléticos.
Lo digo y lo e dicho muchas veces esta gentuza de trencillas no merecen ningún respeto por que son lo peor de lo peor y lo estamos viendo todos los días por que están manejados por las federaciones. Por que un árbitro se puede equivocar pero no de la manera que lo hacen. Por lo tantos estos trencillas están pagados y mandados ese es el problema y lo estamos viendo en nuestra liga todos los años los partidos que roban al Madrid con sus decisiones y eso no es casualidad y no es uno es todo el colectivo.
En el momento en que pitó el penalty ya se vio que era la ley de la compensación. Fue Torres el que le entró a Pepe y se dejó caer para que le pitaran el penalty. Es más, da la impresión que esta acción estaba pactada en el descanso entre el árbitro y el jugador del Atlético. La reacción de los atléticos siempre será la misma cuando pierden con el RM, culpar al árbitro. La típica reacción rastrera y enfermiza.
(aunque omita como decimos otros dos errores, el penalti simultáneo a Savic y otro penalti anterior) En esta frase hay un error. Será el penalty simultáneo de Savic.
“ Ley de compensación “ = prevaricación.
Los árbitros no están para compensar, sino para hacer cumplir la norma,eso se llama justicia .En un juicio se espera que el juez aplique la ley, que sea ecuánime ,no “lo que le rote” porque eso es arbitrariedad y la arbitrariedad está dictada por los sentimientos, los estados de ánimo,la pasión o el sentido común individual. Si tienes un error y tratas de “compensar” el resultado son dos errores.
Sólo se les pide que apliquen la norma,sin interpretaciones,algo tan sencillo y TAN DIFÍCIL.
Siempre estuvo muy claro que el penalti de Pepe no era sino un piscinazo de Torres.Para compensar? el árbitro sabrá pero el penalti que le hacen a Ramos en la misma jugada,èse no lo viò tampoco.Lo cierto es que el comentario del tal Clatemburg deja peor al Atlético que al Madrid.