El 6 de junio de 1998, tal día como hoy de hace 25 años, el Real Madrid terminaba la temporada 1997-98 con un encuentro amistoso disputado en La Rosaleda, Málaga, frente al Atlético de Madrid. El equipo blanco, dirigido en aquella ocasión por Toni Grande, se impuso 2-1 con tantos de Amavisca y Jaime. Ese día se despedía de los terrenos de juego como futbolista profesional Miguel Porlán Noguera, ‘Chendo’, el lateral derecho de la rodillera blanca. Cerraba una etapa de dieciséis temporadas y 497 partidos oficiales de blanco en los que hizo gala de una gran capacidad de trabajo y sacrificio.
Chendo colgaba las botas pero no dijo adiós al Real Madrid porque relevó a otro histórico, Ignacio Zoco, como delegado del primer equipo de fútbol. Y ahí sigue. Un cuarto de siglo después se mantiene en un puesto que le ha permitido superar los 45 años consecutivos al servicio de la institución deportiva más importante del mundo. Serán 46 a la vuelta del verano y sería muy bonito que se prolongara su vinculación con el Club hasta completar los cincuenta.
La despedida en Málaga de 1998, por lo tanto, no fue más que un punto y seguido a una carrera que se inició cuando llegó a la capital desde su Totana natal, sin haber cumplido todavía los dieciséis, para incorporarse a los juveniles del club blanco. Era septiembre de 1977. Para que nos hagamos una idea de lo que ha vivido Chendo en el Real Madrid es suficiente con echar un rápido vistazo a unos cuantos datos y apuntes que ponen en relieve la dimensión de su paso por la entidad, una trayectoria que sigue vigente. De hecho, muchos no habrán conocido un Real Madrid sin Chendo.
El 6 de junio de 1998, tal día como hoy de hace 25 años, el Real Madrid terminaba la temporada 1997-98 con un encuentro amistoso disputado en La Rosaleda, Málaga, frente al Atlético de Madrid
Cuando el novel Miguel Porlán llegó al Real Madrid el presidente era Don Santiago Bernabéu de Yeste. Acababa de celebrarse el homenaje a Manuel Velázquez y en la primera plantilla del conjunto blanco todavía jugaba uno de los ilustres del Madrid ‘yeyé’, José Martínez ‘Pirri’. Un joven Juan Gómez ‘Juanito’ acababa de incorporarse al equipo para triunfar con la elástica blanca. Las camisetas, por cierto, todavía no llevaban publicidad ni lucían logotipos de firmas comerciales. Y todavía no se jugaba con el inolvidable balón Tango de Adidas. Era otro fútbol.
Chendo progresó como futbolista en las categorías inferiores para dar el salto al filial. Jugó la Recopa de Europa con el Castilla, debutó en Primera División con motivo de una de las huelgas que vivió el fútbol español a comienzos de los ochenta, subió al primer equipo con Alfredo Di Stéfano de entrenador y vivió la eclosión de la Quinta del Buitre, con cuyos componentes había llegado a coincidir en Segunda División. Fue uno de los protagonistas de las históricas noches de remontadas europeas de aquella década y ganó las dos Copas de la UEFA. Llegó a ser Internacional con la Selección de España, con la que disputaría dos Mundiales. Como defensa marcó a los mejores rivales de la época, dejando para la historia un inolvidable duelo con Diego Armando Maradona. Formó parte del equipo que encadenó las cinco Ligas consecutivas entre 1986 y 1990. Portó el brazalete de capitán. Jugó a las órdenes de técnicos tan dispares como Jorge Valdano o Fabio Capello. Se retiró levantando La Séptima. La Copa de Europa, a todo esto, había cambiado ya de formato y de nombre denominándose Champions League.
Después, ya como delegado, ha estado a pie de campo en todos y cada uno de los partidos que ha jugado nuestro equipo durante los últimos veinticinco años, que se dice pronto. Ha visto cómo se ha incrementado el palmarés de un Club que, cuando él llegó, contaba con seis Copas de Europa en sus vitrinas y ahora expone catorce trofeos de la máxima competición continental en su museo. Vio cómo se ganaban Copas Intercontinentales, primero, y Mundiales de Clubes, después. Asistió a la llegada de los fichajes más mediáticos de principios de siglo y a los veranos con las giras internacionales. A la conquista de nuevos títulos que no se habían ganado antes, como las Supercopas de Europa, por parte de futbolistas que también se adjudicaban galardones individuales como los preciados Balones de Oro. En lo personal, también tuvo el privilegio de volver a jugar con el primer equipo a los 49 años en un amistoso disputado a favor de los afectados por el terremoto de Lorca.
A lo largo de las campañas y de las temporadas Chendo ha acompañado en el banquillo a todos los entrenadores y técnicos que han ido pasando por la escuadra blanca. Ha visto cómo ha cambiado la fisonomía del Estadio Santiago Bernabéu. Vivió la reforma con motivo del Mundial 82, las obras de 1992 o la actual remodelación que está cambiando el aspecto del templo madridista. Pasó de entrenar en la antigua Ciudad Deportiva a ver cómo el conjunto blanco trabaja ahora en Valdebebas. También vio cómo cambiaba la moda y la estética alrededor del fútbol. Las clásicas botas negras, por ejemplo, pasaron a ser de colores llamativos. El propio Chendo fue uno de los innovadores en ese ámbito, puesto que llegó a lucir en algún partido unas botas en las que predominaba el material de color blanco. De un fútbol cuyos aficionados se informaban a través del papel de los periódicos y revistas hemos pasado a otro en el que la información digital está a la orden del día. El Club incluso cuenta con su propio canal de televisión. Qué diferente es todo a lo que había en septiembre de 1977…
El de Totana se jubilará después de toda una vida en el Madrid. Y la etiqueta de ‘One Club Man’ se le queda muy corta
A lo largo de los últimos 45 años Miguel Porlán ‘Chendo’ ha contemplado de todo en el Bernabéu y ha sido testigo, en primera persona, de cómo ha crecido y se ha modernizado la entidad. Si alguien ha visto lo que ha cambiado el mundo del fútbol y el Real Madrid a lo largo del último medio siglo, ha sido él. Dudo mucho que algún otro empleado lleve tanto tiempo en nómina del Club. El de Totana se jubilará después de toda una vida en el Madrid. Y la etiqueta de ‘One Club Man’ se le queda muy corta.
Getty Images.
Más de 60 tacos y con ese pelazo. ¡ Qué envidia !
No podré decir lo mismo.
Chendo merece un acto de despedida institucional. Le queremos .
Grandísimo lateral derecho, uno de los mejores de la historia del club. Sobrio, estupendo marcador, muy rápido y contundente. Era un jugador tácticamente perfecto. A pesar de lo que pueda parecer era bastante ofensivo y ponía muy buenos pases desde la banda.
Grande Chendi!!!!!! Una auténtica leyenda!!!!!!
Si hoy soy madridista es por chendo... Me llamaban raro.. pero fue y es mi único ídolo.. nunca he vuelto a sentir admiración por otro jugador en toda mi vida. Lo pude ver jugar en directo y siempre me alegra verlo junto al banquillo. Creo que solo puedo añadir una cosa más.. GRACIAS
Entre jugador y en el cuerpo técnico
Cuántas copas de Europa tiene chendo