Caspa League

Buenos días. Si hay algo que diferencia a la Central Lechera del Mundo Sportivo no es precisamente su madridismo. Tampoco distingue a la Central Lechera ese pérfido centralismo mesetario de Madrit que reprochan por el país de Puigdemont. Como diría Matías Prats, permítame que insista: aquello que distingue a As y Marca de sus colegas catalanes no es ningún atribuido presunto madridismo. Pensar así es de guiri o el resultado de algo tan esquizofrénico como las pataletas de Dani Alves respecto de Los Manolos, un delirio paranoide que ilustra a la perfección su indumentaria pret a porter. Pero esa es otra historia y debe ser contada en otra ocasión.

Por Ende (Michael), llegamos a la conclusión siguiente. Así como la prensa del culerío abraza el forofismo blaugrana  sin complejos sin apenas salir de La Masía, la Central Lechera se pierde en los vericuetos de la universalidad hispana en aras de intentar colocar un periódico más en algún kiosco de Dos Hermanas, Castellón, Portugalete o Peñíscola. Una política mediática con la que Marca y As pretenden distinguirse de sus homólogos catalanes, frecuentemente acusados de elaborar sus primeras planas con un sombrero payés de paja a rosca. Ellos no. De Madrid al cielo y de la meseta al mundo. De la caverna a Platón ya sería pedir demasiado.

Un ejemplo ilustrativo de lo apuntado en líneas precedentes es el titular escogido hoy por Marca: España League. No comentaremos en exceso la excelsa e ingeniosa brillantez de su redacción, sino que lo observaremos como muestra inequívoca de que la presuntamente madridista prensa deportiva madrileña practica algo tan (tan) pipero como la defensa a ultranza del fútbol español. Lean si no el decálogo del buen aficionado a las Facundo. Qué quieren que les digamos: a escasas 48 horas del derbi contra el Atlético de Madrid -que de un tiempo a esta parte resulta en algo parecido a una visita al dentista- lo que haga el Valencia en Viena en una competición en la que siempre gana el Sevilla nos importa un pimiento, no de Padrón, dada la completa ausencia de picante de sus primeras planas.

Tal es el súbito fervor por la Europa League que hasta Mundo Deportivo se felicita por el pleno español  en la competición, cosa curiosa en el país de Puigdemont, donde no hace tanto tiempo daban palmas con las orejas porque Neymar estuviera a punto de ser un ciudadano más del malvado Estado opresor llamado Espanya. No es lo habitual, de acuerdo. Se nos antojan lamentablemente más cotidianas las salidas de tono –siendo generosos- de Gerard Piqué dándole a piar al pajarito azul de Twitter. Miedo nos da (terror) que ese muchacho especial llamado Gerardo cenara anoche con Zuckerberg, orgulloso papá de Facebook y protagonista de La red social. Que Dios nos coja confesados, aunque siempre nos quedará Guti poniendo ayer varios puntos sobre las íes. No verán rastro alguno en ninguna de las portadas de la Central Lechera.

Lo más frecuente no obstante en la prensa catalana es omitir todo aquello que es ajeno a la Filarmónica de Castelldefells, que inventó el fútbol, las filigranas tributarias y dio una vuelta de tuerca a los penaltis fraudulentos. Fíjense por ejemplo en la primera plana de Sport, una prueba más de lo que se estila entre los gatekeepers del culerío mediático. Just Neymar, only Neymar, Neymar seulement. Ese es el rollo: confeccionar una portada confidential con medio rostro del brasileiro a modo del cartel promocional de Face Off, el entretenido bodrio audiovisual protagonizado  por Nicolas Cage y John Travolta titulado en España Cara a cara.

De cara precisamente por allí andan sobrados, luciendo rostro de cemento armado al vender confidenciales de gallifante donde se desgrana cómo vive, cómo se cuida o cómo se aísla de la presión Patán, Lindo Pulgoso o el Pájaro Loco. Habrá que preguntar quién es quién entre Los Tres Sudamericanos del tridente blaugrana al genial Número 3 de los Faerna.

Casi nos resulta más reveladora la información del diario de Mascaró que apunta sí o sí a que la elástica blaugrana lucirá publicidad como cualquier equipo mortal ajeno a los caprichos de los Dioses. Estas cosas pasan por allí arriba. Se desliza Unicef a la zona de la camisola donde la espalda pierde su casto nombre en beneficio de Qatar Fundation, del mismo modo que el denostado contraataque se convierte de la noche a la mañana en un estilete más del mágico e inigualable tiki-taka que resulta que inventó Pep y no Zapatones.

Curiosamente aquel que nos ofrece más información sobre el derbi de mañana es As. Vale, tampoco es para grandes alharacas, ni vale para tirar cohetes de aquellos que al subir hacen pum y pam y a mí plin los demás, pero algo es algo. Lo malo es que su portada -una vez más- es difícilmente comprensible, toda vez que As lleva esta semana entrevistando en exclusiva a los candidatos a la presidencia de la FIFA que hoy se baten en duelo electoral. Al contrario, fiel a su estilo, As ha preferido para su primera plana un pull de declaraciones de Cristiano de la hora de comer de ayer. Que no están mal por cierto y que nos ofrecen cierta esperanza en el futuro, queridos galernautas.

Una promesa de ilusión que se empeñan en ofrecernos los chicos de Laso. Anoche, de nuevo, el equipo de baloncesto salvó un nuevo matchball europeo en la complicada cancha de Brose Basket alemán, donde palmaron hace dos telediarios Barcelona y Olympiakos.

“Yo soy el culpable de todo”, ironiza Xavi Pascual desde la portada del Sport.

Tranquilo, Xavi.

La culpa de todo la tiene Florentino.